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Revilo P. Oliver - Lo que le Debemos a Nuestros Parásitos

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     El siguiente texto (What We Owe Our Parasites) que hemos traducido al castellano apareció originalmente en forma impresa en dos ediciones de la revista mensual Free Speech (Octubre y Noviembre de 1995), publicada por National Vanguard Books en West Virginia, y es la transcripción de un discurso ante un auditorio. El estadounidense profesor Oliver (1908-1994) en esta presentación, citando diversos ejemplos de la Historia, realiza una evaluación de la difícil situación de los hombres Blancos en Estados Unidos y otras partes, amenazada por peligros que, tras casi 50 años de su diagnóstico, no sólo no han sido superados sino que han arreciado, siendo uno de los principales y más venenosos el adoctrinamiento que inculca el odio hacia sí mismo.


Lo que le Debemos a Nuestros Parásitos
por Revilo P. Oliver, 1968




NOTA INTRODUCTORIA

     El doctor Revilo P. Oliver ha sido debidamente considerado, por aquellos pocos afortunados de estar familiarizados con su obra, como uno de los más grandes estadounidenses de este siglo. Nacido en 1908, él rápidamente ascendió por las filas de la Academia para convertirse en su tiempo en uno de los principales filólogos y académicos en temas clásicos. Él fue profesor de estudios clásicos en la Universidad de Illinois, en el Campus Urbana, durante 32 años. Él pudo fácilmente haber pasado su vida enclaustrado en sus estudios, haciendo lo que más amaba: aplicando los lentes de la erudición, enfocados por su mente brillante, sobre los polvorientos tomos y manuscritos del pasado. Pero él escogió un camino diferente.

     Él vio claramente —y mucho antes que la mayoría de sus compatriotas— a dónde los elementos subversivos y foráneos estaban conduciendo a su pueblo, y él prefirió arriesgar su reputación y posición social para hablar claro. Desde 1954 hasta su muerte, en Agosto de 1994, él trabajó casi sin descanso en favor del despertar de los estadounidenses de ascendencia europea frente a su peligro y su probable gran destino.

     El doctor Oliver pronunció el siguiente discurso ante un grupo germano-estadounidense reunido en el Club Lorelei en Hamburg, Nueva York, cerca de Buffalo, el 9 de Junio de 1968. La transcripción mecanografiada se perdió en una inundación en 1990 en el hogar del doctor Oliver, pero ha sido restaurada en forma impresa en base al registro sonoro original hecho por el señor Everett Weibert. Éste es uno de los mejores discursos del doctor Oliver, y ciertamente es su obra breve más integral. Aparece aquí en forma impresa por primera vez.

     Kevin Alfred Strom, editor


* * * *


     Damas y caballeros: Antes que nada, permítanme agradecerles por el honor de su invitación y por el placer de estar con ustedes hoy. En los últimos doce años he hablado ante una gran cantidad de organizaciones conservadoras y patrióticas, pero ésta es la primera vez que aparezco ante una sociedad que es específicamente alemana, es decir, compuesta por los descendientes de la parte de nuestra raza que permaneció en casa en el siglo V, mientras sus parientes conquistaron y ocuparon todos los territorios del Oeste del largamente mestizado y moribundo Imperio Romano, que sus más remotos parientes habían fundado más de mil años antes.

     Según entiendo, estoy hablando en una reunión cerrada de miembros vuestros e invitados en quienes se tiene confianza. Creo que está estipulado que lo que se diga aquí hoy no quedará registrado y no es para ser publicado bajo ninguna forma, y que no hay reporteros presentes. En ese entendimiento, les daré a ustedes honestamente y sin rodeos la mejor evaluación de la actual difícil situación que he sido capaz de elaborar.
 
     Algunos de ustedes tal vez recuerden la vieja historia sobre una colegial que se fue a la cama una noche y finalmente cayó dormida, pero temprano en la madrugada escuchó el reloj marcar las dos y sintió que la puerta de su cuarto estaba siendo abierta lentamente. Aterrorizada, trató de pedir auxilio en la oscuridad, pero un pañuelo le fue puesto sobre su boca y sintió que unos fuertes brazos la levantaban de la cama. Ella fue cargada escaleras abajo y metida en el portamaletas de un largo y lujoso Rolls-Royce que arrancó a gran velocidad. Luego de un largo recorrido fue sacada y llevada a un gran vestíbulo de una inmensa y palaciega mansión, subida por las escaleras de mármol, y llevada a una habitación elegantemente amoblada, donde fue arrojada sobre la cama. Recién entonces ella pudo ver claramente a su captor. Él era un hombre fuerte y buen mozo impecablemente vestido con un traje formal. Él se paró junto a la cama, mirándola hacia abajo de manera inquisidora y silenciosa. Ella trató de hablar, y al final fue capaz de decir lloriqueando: «¿Qué, oh, qué es lo que me va a hacer?». El hombre encogió sus hombros. «¿Cómo podría saberlo?», dijo. «Éste es tu sueño».

     La historia es absurda, por supuesto, pero se refiere al rasgo de humor que posee su ambiguo juego en el misterio de nuestra propia conciencia. Un sueño es por definición una serie de sensaciones que ocurren en el cerebro cuando nuestros sentidos de la percepción y nuestras potencias de la voluntad y la razón están aletargadas, por lo que no tenemos control sobre el flujo de sensaciones. Pero es, por supuesto, un bien conocido fenómeno el que cuando soñamos que estamos soñando, el sueño termina y nos despertamos. Luego la mente consciente toma control y somos nuevamente responsables de nuestros pensamientos, y debemos enfrentar un día en que somos nuevamente responsables de nuestros actos, los cuales, por sus aciertos o errores, pueden determinar el resto de nuestras vidas. Nuestros sueños pueden darle expresión, placentera o dolorosa, a nuestros deseos o temores subconscientes. Pero en nuestras horas de vigilia, si somos racionales, debemos tomar nuestras decisiones sobre la base de las evaluaciones más objetivas y frías que podamos hacer: evaluaciones de las fuerzas y tendencias que hay en el mundo que nos rodea, evaluaciones de las realidades con las que debemos tratar, recordando siempre que nada es probable que suceda sólo porque pensemos que es bueno, o que es poco probable que ocurra sólo porque pensemos que es malo.

     Si alguna vez hemos necesitado evaluar cuidadosa y racionalmente nuestra posición y nuestras perspectivas, ese momento es ahora. En la plaza exterior de Brasenose en Oxford, si recuerdo correctamente, hay en medio del verde césped un solitario reloj de Sol, cuya placa de bronce lleva la escalofriante inscripción: «Es más tarde de lo que piensas». Yo les aseguro, compatriotas estadounidenses, que ahora es tarde —mucho más tarde— de lo que ustedes creen. Es posible, por supuesto, que ahora pueda ser demasiado tarde y que, como un antiguo observador y distinguido amigo mío recientemente me aseguró, nuestra causa es ahora tan desesperanzada como lo era la del Sur (estadounidense) después de la caída de Richmond y cerca de la trágica finalización de la segunda guerra de independencia que fue peleada en nuestra tierra. Honestamente creo, sin embargo, que aún tenemos alguna posibilidad de supervivencia. Si no creyera esto, yo ciertamente no estaría hablándoles hoy o pidiéndoles que consideren conmigo las probabilidades en contra nuestra.

     Yo podría estar equivocado. No tengo poderes de  adivinación ni de profecía. Y ciertamente no conozco los planes secretos de nuestros enemigos, ni tampoco la estructura interna de su organización. Sólo puedo conjeturar la probable extensión de su poderío y la probable eficacia de su estrategia mediante la extrapolación de lo que ellos ya han cumplido hasta ahora. Sólo puedo darles a ustedes mi mejor evaluación, hecha luego de largas y preocupadas consideraciones; pero no me presento como un experto en estas materias, y dado que he prometido ser honesto, les diré honestamente que mis estimaciones en el pasado resultaron ser extremadamente optimistas.

     Cuando dejé la mefítica atmósfera de Washington a fines de 1945, no tenía grandes expectativas acerca del futuro de nuestra nación. Sobre la base de los mejores cálculos que pude hacer entonces, tenía confianza en que nuestro futuro estaba asegurado por una reacción popular que yo estimaba inevitable dentro de los siguientes cinco años. Me pareció ciertamente que los secretos de Washington llegarían rápidamente a ser conocidos y que nuestra nación se vería llena de indignación y repugnancia, cuando los estadounidenses vieran expuesta a la luz del día incluso una pequeña parte del fétido registro de la enferma criatura que había ocupado ilegalmente la Casa Blanca durante tantos años [F. Roosevelt], rodeada de su repugnante pandilla de degenerados, traidores y subversivos extranjeros.

     Yo sabía que el secreto de Pearl Harbor sería rápidamente revelado, y que los estadounidenses sabrían pronto cómo los japoneses habían sido manipulados y engañados para destruír nuestra flota y matando a tantos de nuestros hombres. Yo estaba seguro de que el público pronto conocería la antigua conspiración entre Roosevelt y Churchill (quien era en ese entonces un ciudadano privado en lo que era todavía Gran Bretaña), y también de los persistentes esfuerzos de Roosevelt entre 1936 y 1939 para comenzar en Europa la guerra demencialmente fraticida que devastó a dicho continente, que destruyó tanto de lo que es el tesoro más preciado e irreemplazable de cualquier raza —la herencia genética de sus mejores hombres— y que impuso sobre nuestro propio país un gran despilfarro de vidas y riquezas en una guerra que fue deliberadamente emprendida para asegurar la derrota de Estados Unidos y Gran Bretaña, no menos que la de Francia y Alemania.

     Yo estaba seguro de que veríamos rápidamente, una vez llegada la paz, que habíamos luchado por el solo propósito de imponer sobre una tierra devastada a las bestias del bolchevismo. Yo estaba seguro de que rápidamente veríamos la naturaleza de la trampa de la gran traición llamada Naciones Unidas. Yo pensaba que el estómago de los hombres decentes se revolvería cuando ellos se enteraran de la estrategia oficialmente admitida del Gobierno británico, la cual, en violación deliberada de todas las convenciones de la guerra civilizada, había iniciado el cruel bombardeo de ciudades alemanas desprotegidas, con el propósito expreso de matar a tantos civiles alemanes indefensos, que el gobierno alemán se viera forzado a bombardear ciudades británicas desprotegidas y masacrar a suficientes indefensos civiles británicos para provocar en Gran Bretaña algún entusiasmo por la guerra suicida que el Gobierno británico estaba imponiendo sobre su renuente población, el primer ejemplo en la Historia, creo, de un gobierno en guerra que deliberadamente hace masacrar a sus ciudadanos con propósitos de propaganda. Yo creía que la verdad sobre tal ultraje doméstico, como el infame Juicio por Sedición en Washington, necesariamente llegaría a ser conocida, y excitaría los sentimientos que tales crímenes deben excitar en el pecho de los hombres decentes.

     Y yo estaba seguro de que otras mil infamias, no superadas y sólo raramente igualadas en la Historia registrada, serían reveladas, con el resultado de que todos los barcos que salieran de nuestras costas, dentro de unos pocos años, estarían abarrotados con hordas de sabandijas huyendo de la ira de una excitada y furiosa nación.

     En 1945 yo creía realmente que hacia el año 1952 ningún estadounidense podría escuchar el nombre de Roosevelt sin estremecerse o pronunciarlo sin maldecir. Ustedes ven: yo estaba equivocado. Yo tenía razón en cuanto a la inevitabilidad de la denuncia. Tal como los cuerpos de los oficiales polacos que fueron masacrados en el bosque Katyn por los bolcheviques (como supimos entonces), muchos de los crímenes secretos del régimen de Roosevelt fueron expuestos a la luz del día. La denuncia no fue ni tan rápida ni tan completa como yo había anticipado, pero su cantidad es mucho más de lo que se hubiera necesitado para la reacción prevista. Solamente alrededor del 80% del secreto de Pearl Harbor ha sido conocido hasta ahora, pero ese 80% debería por sí sólo ser suficiente para asquear a un hombre sano.

     Por supuesto no conozco, y ni siquiera puedo sospechar, el alcance total de la traición de esa increíble administración. Pero debería suponer que al menos la mitad de ella ha sido revelada en la prensa en algún lado, no necesariamente en fuentes bien conocidas, sino en libros y artículos en varios idiomas, incluyendo publicaciones que la conspiración internacional trata de esconder del público, y no necesariamente en la forma de testimonios directos sino al menos en la forma de evidencia a partir de la cual cualquier ser pensante puede sacar las apropiadas e inevitables deducciones. La información está allí para aquellos que la busquen, y mucho de ella es justamente bien conocida, justamente ampliamente conocida, especialmente la historia de Pearl Harbor, como para sugerirle a cualquiera seriamente interesado en la preservación de su país, que debería aprender más. Pero la reacción nunca ocurrió. E incluso hoy la comúnmente usada estampilla postal de seis centavos muestra el inflado y despectivo rostro del Gran Criminal de Guerra, y uno escucha poca protesta por parte del público. ¿Por qué?.

     Es cierto que hubo algunos pálidos y débiles principios de reacción, especialmente cuando el senador Joseph McCarthy comenzó su famosa serie de audiencias ante el Subcomité del Senado sobre Seguridad Interior. Todo lo que aquellas audiencias produjeron no fue sino un pequeño goteo filtrándose por el vasto dique del secreto oficial, que retenía el océano de evidencias de que Estados Unidos había sido capturado sigilosamente por extranjeros y por traidores trabajando para ellos. Pero cuando los diques comienzan a filtrarse ellos pronto se rompen. Y cuando comenzaron las audiencias de McCarthy, sólo un poco después de lo que yo había predicho, me dije a mí mismo: ¡Por fin! Éste es el comienzo. Y pronto comenzará ese gran éxodo de ratas llenas de pánico escapando de su justo castigo.

     Pero yo estaba equivocado nuevamente. A su vez, un amigo mío tenía razón. Él era en ese entonces miembro de la CIA, la que en ese entonces incluía a algunos estadounidenses. Y resultó que él estaba en Wheeling, West Virginia, el 9 de Febrero de 1950, cuando el senador McCarthy dio su famoso discurso en el cual afirmó que había 57 miembros del Partido Comunista o del aparato de espionaje soviético en el Departamento de Estado en cargos de responsabilidad y que el Departamento de Estado sabía que ellos estaban allí. Luego del discurso, mi amigo encontró una oportunidad para hablar con McCarthy a solas. Él le dijo: «Senador, usted dijo que había 57 conocidos comunistas en el Departamento de Estado. Si usted tuviera acceso a los archivos de mi agencia, usted sabría que hay pruebas absolutas de que hay diez veces esa cantidad. Pero senador, usted no comprende la magnitud y el poder de la conspiración que usted está atacando. Ellos lo destruirán a usted; ellos lo destruirán completamente».

     Pero el senador McCarthy simplemente movió su cabeza y dijo: «No, el pueblo estadounidense nunca permitirá que yo caiga». Él estaba equivocado también, ustedes ven.

     No es necesario que aquí repasemos los pasos a través de los cuales McCarthy fue destruído. Él fue por supuesto saboteado desde dentro de su propio equipo. Los extranjeros que controlan nuestra prensa, radio y televisión salpicaron su barro por el país. Hordas de los ignorantes y neuróticos pequeños leguleyos que llamamos «intelectuales» salieron desde las puertas de las universidades chillando y escupiendo, como es su costumbre. Y todo eso tuvo su efecto. Pero la conspiración fue capaz de silenciar a McCarthy sólo mediante una maniobra de algún modo no tan rutinaria.

     Ellos encontraron a un oficial del Ejército que había sido un fracaso militar hasta que Bernard Baruch lo promovió a general, y quien en 1945 no había sido capaz de esperar nada mejor que poder librarse de una corte marcial y así evitar ser dado de baja, si podía probar que todas las atrocidades y todo el sabotaje contra los intereses estadounidenses de los que él había sido culpable en Europa, habían sido llevados a cabo a pesar de su protesta y bajo ordenes categóricas del Presidente. Los conspiradores tomaron a esa persona, y con la ayuda de la prensa hicieron un rápido trabajo de enmascaramiento y lo disfrazaron como un conservador. Ellos escribieron discursos que él fue capaz de repetir sin trastabillar demasiado. Ellos desplegaron la sonrisa de él en todos los televisores. Y lo eligieron Presidente. Y, por supuesto, "Ike" (Eisenhower) fue elegido con un mandato de sus amos de apuñalar al senador McCarthy por la espalda. Y él lo hizo. Y así la conspiración obstruyó aquella pequeña filtración en el dique.

     ¿Pero cómo fue posible hacer eso? Oh sí, podríamos rastrear toda la operación paso a paso. Sabemos que nuestros enemigos son sub-repticios y astutos. Sabemos que dominan la riqueza del mundo, incluyendo todo lo que hay en la Tesorería de Estados Unidos y, mediante el impuesto a la renta, lo que haya en vuestro bolsillo y en el mío. Ellos pueden contratar a estadounidenses estúpidos o inmorales para que hagan cualquier cosa por ellos y para que actúen como testaferros. Pero la verdadera cuestión que está frente a nosotros no es su astucia y su maldad innata.

     La pregunta más profunda, más importante y lejos la más desagradable es: ¿Qué estuvo y sigue estando mal con el pueblo estadounidense que los hizo y los sigue haciendo víctimas voluntarias de sus enemigos?.

     Hace algunos años era corriente para hombres persuasivos y seguros de sí mismos encontrar a algún tonto con 5.000 ó 10.000 dólares en efectivo y venderle el puente de Brooklyn o el túnel Holland. Y escuché que cuando la empresa ferroviaria Pennsylvaniacomenzó a demoler su estación en la ciudad de Nueva York, alguien la compró por 25.000 dólares en dinero en efectivo. Ahora bien, los estafadores en todos esos casos son indudablemente hombres malvados. Merecen castigos ejemplarizadores. Pero, ustedes saben, debe haber algo malo también con los compradores. Por más que simpaticemos con ellos, debemos estar de acuerdo, me parece, en que ellos no eran excesivamente brillantes.

     Nosotros los estadounidenses, ustedes saben, somos considerados con un desprecio supremo por nuestros enemigos, quienes nos describen en privado y a veces en público en los términos más insolentes. Ustedes recordarán que hace algunos años un hombre llamado Jrushev era el empleado encargado de administrar los bienes de los conspiradores en Rusia. Él fue invitado a este país por su compañero Eisenhower, y se paseó por nuestra tierra, honrado y aplaudido por la prensa e incluso por algunos estadounidenses. Poco después de que él retornó, le dijo a los reporteros periodísticos en Viena: «¿Los estadounidenses? Bueno, usted escupe en sus caras y ellos creen que es rocío».

     Esa delicada fraseología me recordó lo que me había dicho un conocido en Washington durante la Segunda Guerra Mundial. Ese hombre, un periodista veterano, ocupaba un cargo de importancia en una de las fábricas de mentiras manejadas por el régimen de Roosevelt para mantener a los necios entusiastamente interesados en mandar a sus hijos o a sus maridos a una matanza sin sentido. En una conferencia política, este hombre objetó una mentira propuesta, sobre la base de que era tan absurda que destruiría la confianza pública, con el resultado de que los estadounidenses pronto dejarían de creer cualquier cosa que la agencia fabricara.

    Hubo un gran debate sobre ese asunto en aquella conferencia política hasta que fue dado por terminado por el gran experto de la agencia en dichas materias. Él era un hombre quien, entre paréntesis, por alguna razón u otra, había dejado Alemania unos pocos años antes y vino a bendecir a Estados Unidos con su presencia. Ese experto, estando un poco irritado por el debate, finalmente sacó su elegante pequeño cigarro de su boca y dijo de manera concluyente: «¡Nosotros escupimos en la cara de los cerdos estadounidenses!». Y aquello lo decidió todo. El maestro había hablado.

     ¿Por qué recibimos y merecemos tal menosprecio? A menos que simplemente hayamos degenerado hasta convertirnos en una raza de imbéciles, no aptos para sobrevivir en el mundo, debe haber algún bloqueo mental determinable que nos hace tan ingenuos. Y, de ser así, debemos muy urgentemente determinarlo. Ésa es la verdadera razón de por qué he planteado el asunto del senador McCarthy, que pudo haber parecido una historia ya añeja y ociosa. Ese episodio fue obviamente el antecedente de nuestra actual difícil situación. Y cuando tratamos de mirar hacia atrás a los factores obvios, tales como el control de nuestros canales de información y de nuestras finanzas por parte de extranjeros, sabemos que debe haber algo detrás de eso. Y luego vemos un factor obvio, del que muchos estuvieron conscientes sólo recientemente por la chocante conducta de supuestos estudiantes en supuestas universidades y por la mucho más chocante conducta de los funcionarios administrativos y las facultades de esas fábricas de diplomas.

     Ahora vemos que la pandilla de turbios estafadores encabezada por John Dewey [1859-1952] ha conseguido su objetivo. Nos damos cuenta de que las escuelas públicas han sido durante muchos años una enorme máquina de lavado y contaminación de cerebros que ha funcionado, en su totalidad, con gran eficacia. Es una máquina a la cual mandamos a nuestros hijos para que les llenen sus mentes con supersticiones grotescas y degradantes; para que les remuevan de sus almas sus instintos de integridad y honor; para ser incitados a una depravación y un libertinaje prematuros; para ser imbuídos con una irreflexiva irresponsabilidad, y para ser preparados para la adicción a drogas destructoras de la mente y para una existencia por debajo del nivel animal. Las escuelas públicas en realidad han sido el más poderoso motor de subversión que nuestros enemigos han utilizado sobre nosotros. El resto de esta hora no sería suficiente siquiera para enumerar los modos en los cuales los auto-designados «educadores» han llevado a cabo su mortal tarea.

     Cuando volvemos al asunto del senador McCarthy y buscamos una causa más profunda, podemos por supuesto culpar a las escuelas, que estaban haciendo entonces, un poco menos abiertamente, el trabajo que están haciendo ahora. Pero eso nos deja con la pregunta: ¿Por qué el pueblo estadounidense cayó víctima de ese fraude?; ¿por qué fueron ellos lo suficientemente ingenuos como para ser fácilmente capturados por el engaño de John Dewey?.

     Bien, volvamos a 1917, cuando el fraude de Dewey había conseguido el control de sólo un área relativamente pequeña, y cuando el mundo ciertamente era un lugar más brillante y más agradable. Eso nos lleva, por supuesto, a la época de Woodrow Wilson, otra figura siniestra de nuestra historia. Yo no soy uno de aquellos que consideran a Wilson como un completo villano. Creo que él fue principalmente un hombre que podía intoxicarse a sí mismo con sus propias palabras. Y creo que él pasó la mayor parte de su vida confundiendo sus alucinaciones con la realidad, como seguramente lo hizo aquel día de 1919 cuando él fue conducido temprano por la mañana por las desérticas calles de Washington, levantando mecánicamente su sombrero e inclinándose ante los aplausos de las multitudes que existían sólo en su febril cerebro.

     Por lo tanto, estoy dispuesto a creer que él creía mucho de lo que decía. Y aunque en su vida política él era solamente una marioneta que bailaba y saltaba en el escenario mientras sus hilos eran movidos por Jacob Schiff, Bernard Baruch, los Warburg, y su agente Edward "Coronel" House, el hecho es que Wilson declamó ante el pueblo estadounidense acerca de «hacer el mundo seguro para la democracia» y de «una guerra para finalizar todas las guerras», y ellos le creyeron. En vez de llamar a un médico cuando él comenzó a balbucear aquellos evidentes absurdos, ellos le permitieron que los zambullera en una guerra en la que no tenían ningún interés concebible y que utilizara el poder de Estados Unidos para hacer que el resultado de esa guerra fuera tan desastroso a largo plazo tanto para Gran Bretaña como para Alemania.

     Ahora bien, admito que la noción de un mundo sin guerras es una idea placentera y atractiva. Pero a la gente que cree que puede haber tal cosa debería preguntársele por Santa Claus, en quien ellos indudablemente también creen.

     Volvamos a 1909, cuando al pueblo estadounidense le fue ofrecido un plan para destruír naciones que había sido formulado nuevamente por un sucio degenerado apellidado Mordechai, alias Karl Marx. Ahora, es cierto que los promotores contrataron a unos cuantos periodistas, profesores liberales y otras prostitutas intelectuales, para que demostraran de manera concluyente que el propuesto impuesto a la renta no podría bajo ninguna circunstancia exceder el 4% de los ingresos de los millonarios y nunca podría afectar a nadie más, por la obvia razón de que ningún gobierno federal podría gastar tanto dinero. Pero el punto es que una mayoría del pueblo estadounidense —los herederos de un gobierno libre que se basaba en la premisa de que el gobierno debe ser limitado a lo esencial y debe ser atado por las cadenas de una estricta Constitución que refrene el ejercicio de todos los poderes excepto aquellos considerados absolutamente necesarios para la defensa nacional—, aquellos estadounidenses creyeron esas necedades. En efecto, lo que los promotores les estaban diciendo con tonos zalameros era: «Vengan, pequeños tontos, pongan sus cuellos en el lazo y nosotros les haremos mucho bien». Y los necios pequeños tontos pusieron sus cuellos en el lazo, y así el país está ahora bajo el régimen de la gran «White Slave Act» [Ley del Esclavo Blanco], y por eso estamos donde estamos hoy.

     Podríamos ir mucho más atrás, y si tuviéramos el tiempo, ciertamente deberíamos remontarnos al menos hasta el siglo XVIII, cuando la extraña mitología de lo que ahora es llamado «liberalismo», y todas las mentiras básicas que son grabadas en las cabezas de nuestros hijos en las escuelas, fueron manufacturadas por una heterogénea y estrafalaria pandilla compuesta por agentes de la gran conspiración de (Adam) Weishaupt, muchos estafadores y charlatanes ordinarios, y una curiosa manada de «idealistas» con cerebros confusos y lenguas agitadas. Pero pienso que hemos dicho lo bastante para ver que nosotros los estadounidenses estamos sufriendo de una enfermedad crónica o una propensión que invariablemente nos ha puesto a merced de nuestros enemigos, haciéndonos incapaces de pensar por nosotros mismos. Existe en nosotros una debilidad, quizá una debilidad fatal, que nos hace no sólo escuchar el balbuceo de auto-proclamados hacedores del bien, sino hacer lo que sea que ellos nos digan que hagamos, y que lo hagamos tan irreflexivamente como si estuviéramos en un trance hipnótico y hubiéramos entregado nuestra voluntad a la del hipnotizador.

     Ahora creo que esta extraña debilidad, a diferencia de tantas de nuestras peculiaridades, no es una simple idiotez congénita y hereditaria. Si aquello fuese verdad, no estaríamos aquí: nuestros remotos ancestros hubieran sido comidos mucho antes del alba de la Historia. Dicha debilidad está compuesta, me parece, de una perversión de siete cualidades diferentes; una perversión causada y fomentada por ciertos malentendidos en las peculiares circunstancias que resultaron de la prosperidad, el poder y la dominación del mundo que nosotros los occidentales conseguimos por nosotros mismos y disfrutamos en siglos recientes. Todos los siete elementos de nuestra mentalidad que voy a enumerar son buenas cualidades, al menos en el sentido de que son innatas en nosotros, que no podríamos eliminarlas de nuestra herencia genética si lo quisiéramos, y que tenemos que aceptarlas necesariamente. Podríamos comentar mucho sobre cada una de ellas, y sería particularmente interesante compararnos con otras razas en cada punto, pero debo enumerarlas tan brevemente como sea posible, con sólo una palabra o dos de explicación para hacer claro mi significado.

• La primera es la imaginación, que está altamente desarrollada en nosotros, y que es vívida; una imaginación que significa, entre otras cosas, que tenemos una necesidad espiritual de una gran literatura: tanto de una literatura de experiencias sustitutas como de una literatura de lo fantástico y maravilloso que trasciende el mundo de la realidad. Pero este don trae consigo, por supuesto, el peligro de que podamos no distinguir claramente entre una imaginación vívida y algo que podamos ver realmente en el mundo.

• Segunda, el sentido del honor personalque es tan fuerte en nosotros, y que parece tan fatuo y tonto a otras razas. Es éste, entre otras cosas, el que nos da la concepción de un combate honorable cuando hombres de nuestra raza se encuentran como oponentes en la guerra. Él nos da la ética caballeresca que ustedes ven cuando Diómedes y Glauco se encuentran en las planicies de Troya y en toda la historia subsecuente de nuestra raza. Él también nos expone al peligro de comportarnos de modo caballeresco con aquellos para quienes estos estándares son una locura.

• La tercera es la capacidad para elpensamiento objetivo y filosófico, que virtualmente está limitada a nuestra raza y que nos permite ponernos a nosotros mismos mentalmente en la posición de otros, pero que simultáneamente nos expone al riesgo de imaginar que sus pensamientos y sentimientos son los que serían los nuestros.

• La cuarta es nuestra capacidad de compasión. Tenemos una renuencia racial a causar dolor innecesario, y nosotros mismos nos angustiamos ante la vista del sufrimiento. Ésta es, por supuesto, una peculiaridad que atrae sobre nosotros la burla y el desprecio de la mayoría numérica de la población del mundo, que son seres constituídos diferentemente. Los salvajes de África, quienes son ahora vuestros amos, en el sentido de que ustedes tienen que trabajar para ellos cada día, encuentran el espectáculo de un ser humano bajo tortura simplemente hilarante. Y cuando ellos ven a un cautivo cegado, retorciéndose con sus miembros rotos mientras lo aguijonean con hierros al rojo vivo, se ríen con alegría, con júbilo, un verdadero júbilo, que es mayor que el que la farsa más divertida en algún escenario haya provocado en ustedes. Ustedes pueden buscar en vano en la vasta y respetable literatura de China algún rastro de compasión por el sufrimiento per se.

• Quinta, nuestra generosidad, tanto como individuos y como nación, lo que naturalmente atrae sobre nosotros el menosprecio de aquellos a quienes la brindamos en el extranjero.

• La capacidad de auto-sacrificio es la sexta; y ella está, por supuesto, altamente desarrollada en nosotros, pero es una base necesaria para la existencia de cualquier sociedad civilizada. Ningún pueblo que esté por sobre el nivel del salvajismo irreflexivo puede sobrevivir en este mundo sin algún instinto o alguna creencia que haga que sus hombres jóvenes den sus vidas por la preservación de la sociedad en la que nacieron.

• Y la séptima y última es el sentimiento de religión, el cual por supuesto es común a toda la Humanidad, aunque aquí nuevamente toma una forma distintiva en nosotros. Durante quince siglos la religión del mundo occidental ha sido el cristianismo, el cristianismo occidental, y no hay otra religión ahora conocida o incluso imaginable que pudiera tomar su lugar. Pero es simplemente un hecho histórico, que debemos deplorar pero que no podemos cambiar, el que sólo una pequeña parte de nuestra población actual, el 12 ó el 15%, realmente cree que Cristo era el hijo de Dios, que el alma es inmortal, y que nuestros pecados serán castigados en una vida futura. Esto significa que el instinto religioso, que es parte de nuestra naturaleza, no encuentra satisfacción en una fe incondicional en la mayoría de nuestra gente, de modo que aquellos instintos frustrados están disponibles para su explotación por cualquier sinvergüenza semi-astuto, como bien lo saben los leguleyos y rufianes que ahora ocupan la mayoría de los púlpitos. Cuando en un pueblo se pierde la fe, lo que Pareto llama el residuo religioso se vuelve su punto más vulnerable, su talón de Aquiles. Se trata de la necesidad insatisfecha de una fe incondicional en un poder superior.

    Ahora, se produjo en nosotros una perversión de todas estas cualidades durante los siglos de nuestra dominación, dándonos una concepción completamente falsa de los otros pueblos. Nosotros hemos imaginado que por alguna magia podríamos transmitirle a ellos no sólo nuestras posesiones materiales sino también las cualidades de nuestra mente y alma.

     Y siempre hemos sucumbido al halago de la imitación. La capacidad para una conducta imitativa es común no sólo a todos los seres humanos, sino también a todos los antropoides, como todos sabemos por la proverbial expresión «Monkey see, monkey do» (El mono ve, y el mono imita). La capacidad del mono para imitar es, por supuesto, limitada. Pero, con la excepción de los australoides, otras razas tienen la capacidad de imitarnos convincentemente en lo externo. Si ellos se visten con nuestras ropas, observan nuestras convenciones sociales y hablan nuestro idioma, utilizando las frases que, como pueden aprender por la observación, nos complacen, y utilizando aquellas frases incluso si no las entienden o si las consideran como charlas ridículas y absurdas, los miembros de otras razas podrían imitarnos tan verosímilmente que los creeríamos convertidos a nuestra mentalidad y a nuestra concepción de la vida. Y cualquier deficiencia que pudiésemos notar en la actuación del imitador, generosamente la pasaríamos por alto o la consideraríamos como una encantadora ingenuidad.

     Esta capacidad de imitación es poseída por los salvajes, al menos por los más inteligentes, y ella nos ha engañado una y otra vez. Los británicos son tan crédulos como nosotros. Cientos y cientos de veces, al menos, ellos les dieron becas de estudio a negros de Basutolandia o Kenia o Nigeria o de alguna de sus otras posesiones, y el resultado fue casi siempre el mismo. Con el dinero recibido, el salvaje se compraba un buen guardarropa, asistía a una escuela inglesa, aprendía a jugar fútbol, asistía a Oxford, escribía un encantador ensayo sobre (William) Wordsworth o sobre leyes antiguas, copulaba con mujeres inglesas estúpidas quienes lo consideraban a él «romántico» y a ellas mismas de «mente amplia», y cuando él se cansaba de vivir de la generosidad inglesa, se iba a casa con su tribu donde se le servía un bebé bien asado como una delicadeza que le había sido negada durante mucho tiempo por los estúpidos prejuicios de los estúpidos británicos.

     Con algunos de los altamente inteligentes pueblos orientales, la capacidad de aparentar va mucho más allá que ésta y se aproxima a la genialidad.

     Aquel extraño y único pueblo internacional, los judíos, quienes, durante todo el tiempo en el cual ellos han sido conocidos en la Historia, han vivido y florecido plantando sus colonias en los países de otros pueblos, le han debido mucho de su éxito a su habilidad tipo camaleón para adquirir, cuando así lo prefieren, las costumbres y actitudes de cualquier país que escojan para residir. Ellos son un pueblo altamente inteligente, muy probablemente mucho más inteligentes que nosotros. Pero todos los observadores, principalmente Douglas Reed y Roderick Stohlheim, han comentado acerca de la asombrosa habilidad de los judíos para parecer un alemán en Berlín, un checo en Praga, un italiano en Roma, y un inglés en Londres, cambiando de un rol a otro con la facilidad con la que un hombre podría cambiarse sus vestimentas. Los judíos tienen, por supuesto, la gran ventaja de que su piel es blanca, y de que muchos de ellos parecen, en sus características, miembros de nuestra raza, incluso hasta el punto de ser indistinguibles, al menos para un ojo no entrenado, e incluyendo personas con características no-orientales tales como el cabello rubio o pelirrojo.

     No estoy seguro, por lo tanto, de que el mayor talento para la disimulación no pertenezca a un pueblo que no tiene aquella misma gran ventaja física: el japonés. Su habilidad para ganar nuestra confianza y apropiarse de nuestra tecnología y ciencia es simplemente fenomenal, como resulta obvio a partir de lo que ellos han conseguido, viviendo hacinados en una pocas islas pobres. Pero su talento para aparentar es igualmente grande.

     Siempre recuerdo la experiencia de un amigo mío, quien era a finales de los años '30 profesor de química en una gran universidad, en la que puede ser llamada un área estratégica de nuestro país. Los alumnos sobresalientes de sus cursos para graduados eran cuatro jóvenes japoneses. Y en parte porque eran tan aptos para aprender las más abstrusas formas de química, y en parte porque eran extranjeros y por ello despertaban en él la generosidad que es normal en nosotros, él los invitó a su hogar; y en el transcurso de tres años llegó, pensaba él, a conocerlos muy bien personalmente. Sus modales y su inglés eran excelentes. Ellos profesaban la mayor admiración por Estados Unidos y sus instituciones. Ellos hablaban, por supuesto, de la «democracia» en términos de gran admiración. Ellos deploraban el «militarismo», y anhelaban fervientemente la «paz mundial» y «el entendimiento entre todos los pueblos». Mi amigo estaba convencido de que si sólo pudiéramos traer más jóvenes como ellos a Estados Unidos, la política de Japón finalmente cambiaría, y las dos naciones vivirían de allí en adelante en perpetua amistad.

     Entonces, un día él se encontraba solo en un cruce de caminos a campo abierto, a unos 30 kilómetros de la universidad, esperando que algunos amigos lo recogieran en automóvil. Ellos estaban retrasados, y ya que el día era caluroso, él fue a un huerto cercano a reposar bajo la sombra de los árboles mientras esperaba. Él vio a sus cuatro alumnos japoneses venir paseando por uno de los caminos, evidentemente en una caminata sin prisas. En el cruce de caminos, ellos se detuvieron, miraron todos los caminos alrededor y no vieron a nadie. Entonces ellos se pusieron espalda con espalda, cada uno mirando a una dirección, sacaron una cámara Leica, y fotografiaron cada camino y luego los alrededores en cada diagonal e hicieron anotaciones en un mapa. Ellos, por supuesto, habían venido a nuestro país no sólo a aprender nuestra ciencia química para su eventual uso en contra nuestra, sino también incidentalmente a señalar en los mapas el territorio alrededor de la universidad para una futura referencia, si su ejército tuviera la oportunidad de invadirnos o si tuvieran la ocasión de desembarcar una fuerza secreta en nuestras costas. Y ellos hicieron su trabajo con la paciente minuciosidad de su raza, indudablemente riéndose interiormente de la ingenuidad de los grandes estúpidos Blancos quienes libremente entregaban a sus enemigos naturales todo su conocimiento duramente ganado.

     Nuestras mentes han sido nubladas por un aún más peligroso concepto erróneo largamente anexado a nuestra religión. Durante siglos hemos trabajado bajo la ilusión de que el cristianismo occidental era algo que podría ser exportado, y sólo los acontecimientos recientes finalmente han hecho obvio para nosotros cuán vano y fútil ha sido el trabajo y el celo de devotos misioneros durante cinco siglos. Cuando Cortés y su pequeña pero valiente banda de hombres de hierro conquistaron el Imperio de los aztecas, él fue inmediatamente seguido por una serie de resueltos y devotos misioneros, principalmente franciscanos, quienes comenzaron a predicar el evangelio cristiano a los nativos. Y ellos pronto enviaron a España, con inocente entusiasmo, brillantes relatos de las conversiones que habían efectuado. Ustedes pueden sentir su sinceridad, su piedad, su ardor y su regocijo en las páginas de Bernardino de Sahagún, Juan de Torquemada y muchos otros. Y por el bien de ellos me alegro de que los pobres franciscanos nunca sospecharan cuán pequeña parte ellos habían jugado realmente en las conversiones religiosas que les dieron tanta alegría. Mucho más efectivos que sus palabras y sus libros habían sido los cañones españoles que habían roto las defensas aztecas y los despiadados soldados españoles que habían asesinado a los sacerdotes aztecas en sus altares y que habían derribado sus ídolos de las pirámides sacrificiales. Los aztecas aceptaron el cristianismo como un culto, no porque sus corazones hubieran sido tocados por doctrinas de amor y misericordia, sino porque el cristianismo era la religión de los hombres Blancos cuyos cañones de bronce y sus guerreros con armaduras los hacían invencibles.

     Eso fue a principios del siglo XVI, y nosotros los de Occidente hemos seguido repitiendo ese entrañable error desde entonces, mientras los misioneros a quienes enviamos a todas las partes del mundo escribieron de vuelta con inocente satisfacción brillantes informes sobre el número de corazones que ellos habían «ganado para Cristo». Y fue sólo después de que las campañas «anti-colonialismo» por parte de la conspiración internacional se pusieron realmente en marcha, que la mayoría de nosotros comprendió que lo que había ganado todos esos corazones había sido principalmente la disciplina de los regimientos británicos y el poder del hombre Blanco.

     En muchas costas de África, por ejemplo, misioneros ansiosos por ganar almas se aventuraban solos en tierra; y los nativos, luego de divertirse mucho torturándolos hasta morir, se los comían, cocinados o crudos, de acuerdo a la costumbre local. Lo que ocurría comúnmente, era que pocos meses más tarde un crucero británico llegaba a la costa y disparaba media docena de proyectiles de alto explosivo de 4,5 pulgadas sobre la aldea nativa, y, si bien no inmediatamente, tal vez desembarcaba media compañía de soldados navales para registrar el área y sacar a la fuerza a alrededor de una docena de salvajes para colgarlos en árboles convenientes. A menos que la tribu fuera excesivamente estúpida, ellos entendían el mensaje. El siguiente grupo de misioneros era respetado, como si de algún modo representaran al dios del trueno y el relámpago. Y si esos hombres de Dios distribuían suficiente arroz y medicamentos gratis junto con sus sermones, ellos eran capaces de hacer muchos conversos. Ellos podían enseñar un ritual, y podían quizás inculcar una superstición que tuviera algún parecido superficial con la religión de los negros; pero en cuanto a enseñar la substancia espiritual del cristianismo, ellos podían también haber seguido el ejemplo de San Francisco y haber dado sermones a los pájaros. Si bien es verdad que en algunos lugares de las antiguas posesiones coloniales los misioneros son aún tolerados, si ellos pagan muy bien, al final hemos aprendido que el evangelio sigue a los regimientos británicos en la ignominiosa y absurda retirada del hombre Blanco del mundo que fuera de él.

     Todos estos factores han contribuído, me parece, a nuestra extraña tolerancia hacia los «hacedores de bien» y a nuestra increíble estupidez al nunca preguntar contra quién ellos están «haciendo el bien». Porque es desafortunadamente cierto que un completo 80% de todos aquellos altisonantes proyectos de «mejoramiento» y «justicia social» están motivados nopor una preocupación por los supuestos beneficiarios, sino por avaricia o maldad. Pero nosotros nunca preguntamos.

     Por eso tenemos a tantos «intelectuales» engordando sobre nosotros. Ellos han descubierto el más seguro y más lucrativo de todos los fraudes. Un «intelectual» se distingue por dos talentos: una elocuente habilidad con las palabras, y fosas nasales muy sensitivas. Él puede oler un billete de veinte dólares en vuestros bolsillos a una cuadra de distancia, y dos minutos después de que ese delicioso aroma llega a sus fosas nasales, los «ideales» empiezan a ser secretados por su mandíbula. Ustedes conocen la jerga: «los desfavorecidos», «igualdad de oportunidades», «los culturalmente despojados», «países subdesarrollados», «pueblos emergentes», y similares, ad infinitum y ad nauseam. Y mientras ustedes escuchan sus monótonos versos, es muy probable que ni siquiera noten la mano de él entrando en vuestros bolsillos.

     Ahora bien, podemos ser lo suficientemente ricos como para ser tontos, pero no podemos facilitar las más elaboradas formas de «hacer el bien» que están inspiradas por la malicia y el odio. Pero sin embargo las toleramos con un masoquismo colectivo que es simplemente suicida. Hemos aceptado una increíble inversión de los valores hasta el punto de que nos hemos declarado a nosotros mismos como una especie inferior, apta sólo para ser esclavizada, golpeada y masacrada al grito de nuestros superiores. A esto es a lo que equivale la propuesta, aunque, por supuesto, está embadurnada con la viscosa baba de las estupideces humanitarias ideadas por nuestros enemigos y multiplicada inconscientemente por nuestros propios llorones sentimentalistas.

     Esto no es nada nuevo. Si tuviera tiempo, dirigiría vuestra atención con algún detalle hacia la vasta e irreparable calamidad traída sobre nuestra nación en el último siglo por un pequeño grupo de vociferantes y enloquecidos fanáticos, los abolicionistas, que le impusieron al Sur (estadounidense) su trágica guerra de independencia. No estoy defendiendo la esclavitud, la esclavitud de los negros, como una institución. Creo que Jefferson y Lincoln estaban en lo correcto al considerarla como un sistema que era pernicioso, por motivos muy racionales, de los cuales los más importantes eran: primero, que ella mantenía en nuestro suelo a millones de personas de una raza radicalmente diferente a la nuestra y, según nuestros estándares, inferior; y segundo, que ello provocaba una cierta producción de mestizos, lastimosas criaturas desgarradas por los instintos incompatibles que habían heredado.

     Como ustedes saben, era el firme propósito de Abraham Lincoln hacer que todos los negros o bien retornasen a África, o, por el bien de la economía, a América Central. Pero los abolicionistas no eran racionales. Ellos eran, lamento decirlo, en su mayoría estadounidenses, incluyendo a personas tales como Wendell Phillips, el profesor Elizur Wright, y, por supuesto, a mujeres histéricas tales como Lydia Child y Harriet Beecher Stowe. Su líder era William Lloyd Garrison, quien era un estadounidense también, aunque estaba financiado por Isaac Mack y otros judíos. Ellos eran un grupo diminuto, despreciados por los estadounidenses cuerdos, tanto del Norte como del Sur. Pero ellos despotricaron y reclamaron hasta que se salieron con la suya. Ellos comenzaron a agitar en 1840 a favor de la disolución de la Unión estadounidense, y a favor de la división de Estados Unidos, mediante la secesión, en dos países. Y después de veinte años de discursos violentos, finalmente persuadieron a los Estados del Sur a tomar en serio su propuesta.

     Es muy instructivo leer a los abolicionistas. Ellos declamaban citas de la Biblia, y balbuceaban acerca de «derechos humanos» e «igualdad». Pero no podían esconder completamente su ánimo real y su inspiración. Su veneno está dirigido contra los propietarios de las plantaciones del Sur, la mayoría de los cuales, aunque no todos, eran damas y caballeros. Los abolicionistas tenían en sus mentes una imagen, parcialmente correcta, del terrateniente sureño como un hombre muy superior a ellos mismos en educación, cultura y humanidad. Y por eso ellos lo odiaban, implacablemente. Ellos también tenían en sus afiebradas mentes una imagen, totalmente falsa, de los dueños de plantaciones como un hombre de riqueza y ocio ilimitados que se pasaba la vida recostado en un amplia terraza bebiendo licores de menta. Y lo envidiaban apasionadamente. Ellos tenían una imagen, igualmente falsa, de la dama sureña como alguien que pasaba sus días con una holgura parecida a la de un hada, asistida en todas las maneras posibles por serviciales esclavos. Ellos tenían una imagen, en gran parte correcta, de aquellas mujeres siendo tratadas por los hombres con un caballeroso respeto que era casi desconocido en el Norte. Y por eso ellos ansiaban humillar y destruír a esas damas sureñas. Ésa era la verdadera inspiración de su maniático «hacer el bien».

     Ustedes pueden apreciar la verdadera medida de lo que le ha sucedido a nuestra mentalidad nacional simplemente recordando el nombre de aquel distinguido ladrón de caballos y maniático homicida, John Brown, quien, financiado por un grupo conspirador que se llamaban a sí mismos los Secretos Seis, fue enviado al Sur para iniciar una revuelta de esclavos. Como todos admiten, su propósito era conseguir que todas las mujeres Blancas del Sur fueran violadas y masacradas, y que todos los hombres Blancos de Sur fueran bárbaramente mutilados y masacrados. Aquello ¿en qué lo convierte de acuerdo a la opinión contemporánea? Claro, él fue un «paladín de los derechos humanos», «un mártir de la libertad», y todo eso. Él quería masacrar, es verdad, pero hacer una carnicería de hombres y mujeres Blancos. Es decir, fango Blanco, como nosotros mismos, mientras nos deleitamos en unos éxtasis de auto-envilecimiento y auto-odio. Y aquello basta para hacer de él alguien admirable, alguien noble. Y de ese modo su alma sigue su marcha... sobre las brasas calientes, espero.

     Yo les recuerdo que aquel pequeño grupo de santones aullantes trajo sobre nosotros una guerra terriblemente fratricida, provocándonos una pérdida irreparable y empobreciendo nuestra nación y raza para siempre al destruír la herencia genética de nuestros mejores hombres. Y también nos embruteció moralmente, quizá también irreparablemente, ya que después del asesinato de Lincoln, el cual ellos ciertamente tramaron, nuestros «hacedores de bien» enloquecidos por el odio consiguieron lo que deseaban. Si existe algún estadounidense que pueda leer la historia de todo el sufrimiento injustificadamente infligido sobre las personas Blancas del Sur durante lo que se llama la «Reconstrucción», sin bajar su cabeza de vergüenza y sentir a través de todo su ser un remordimiento angustiante, sólo puedo decir que él es despiadado y sádico más allá de mi comprensión.

     Con aquel comienzo, ¿es alguna sorpresa que hayamos llegado hoy al punto en que el odio frenético hacia nosotros mismos es la forma cierta de conseguir que seamos respetados y reverenciados? ¡Cómo han sido enseñados los estadounidenses a odiarse a sí mismos!.

     Los chinos comunistas atacaron y capturaron uno de nuestros barcos, el cual nosotros, tal vez por un acuerdo entre ellos y nuestros enemigos en Washington, no quisimos defender aunque teníamos una amplia advertencia del ataque. ¿Pero a quién le importa? Ellos son sólo fango Blanco como nosotros, nacidos para trabajar y morir para el placer de sus amos. Ahora por supuesto, si ellos hubieran sido algo realmente selecto y noble, tal como un mestizo sifilítico piojoso homosexual comunista y caníbal, por cierto todos nuestros rufianes liberales hubieran estado gritando y aullando en nuestras calles desde el alba al crepúsculo y durante toda la noche.

     Cada día, más y más de nuestros hombres jóvenes son embarcados hacia Vietnam y forzados a pelear bajo condiciones cuidadosamente concebidas para asegurar la máxima pérdida de vidas estadounidenses y para asegurar una eventual derrota. Pero pasemos por alto eso. Supongamos que realmente es una guerra y que está siendo honestamente peleada. ¿Cuál es su objetivo declarado?: ¿asegurar una base naval o una base aérea para Estados Unidos?, ¿conquistar una colonia para Estados Unidos?, ¿proteger a nuestros hermanos de sangre en Australia? Aquéllos serían propósitos racionales, aunque uno podría cuestionar la necesidad estratégica de aquella localización particular. No. El propósito aparente, el propósito declarado, es salvar a los prolíficos orientales de Vietnam del Sur de los horrores del comunismo. Qué importa que ese propósito sea una transparente hipocresía. Supongamos que es sincero. ¿Y luego qué?.

     Nosotros somos estadounidenses, hombres Blancos de Occidente. Y si fuésemos cuerdos, ninguna verdad sería más obvia e incuestionable para nosotros que el hecho de que, en lo que nos atañe, toda la abundante población de Vietnam no vale la vida de un solo soldado estadounidense. Pero si alguien sugiere eso, por cierto todo el mundo se horroriza: ¿Acaso no somos los esclavos del mundo para ser usados para hacer el bien? A nadie le importa vuestro hijo y el mío: ellos son prescindibles.

     Ahora, por instigación de los promotores de esa carnicería en Vietnam de propósitos políticos, hordas de jóvenes vándalos salen gritando desde las puertas de nuestros criaderos de matones (los que por alguna razón aún son llamados universidades), y ellos protestan por la espantosa guerra de Vietnam. ¿Pero por qué están protestando?: ¿por la muerte inútil de un hermano o de un ex-compañero de clases, un hombre Blanco? No, ellos aúllan y se quejan porque algunos de los dulces orientales de Vietnam del Norte resultan heridos a veces. Si sólo pudiéramos encontrar una manera razonable de matar muchachos estadounidenses sin incomodar a los orientales, esos rabiosos manifestantes estarían perfectamente felices.

     Los judíos, quienes, como ya he dicho, son un pueblo altamente inteligente, y quienes con tal vez un 5% de nuestros recursos militares supieron cómo terminar en seis días una guerra contra oponentes mucho más numerosos y formidables que los vietnamitas, y que fueron lo suficientemente inteligentes como para saber que la única justificación para una guerra agresiva es el territorio que se conquista producto de ella, decidieron que sería divertido matar a algunos despreciables goyim en nuestro barco Liberty, y ellos hicieron eso, con el resultado de que el poder legislativo de al menos un Estado estadounidense les envió rápidamente un mensaje oficial de felicitaciones. Nuestros hombres fueron asesinados en el lugar donde los mandamos, aparentemente al servicio de nuestro país, asesinados mientras usaban nuestros uniformes y ondeando nuestra bandera. Ellos eran los símbolos de nuestra nación. Ellos hubiesen sido la encarnación visible de nuestro auto-respeto, si tuviéramos alguno. ¿Pero a quién le importa? Ellos son sólo fango Blanco como nosotros.

     En Memphis, alguien le dispara a un Negro ladrón de autos, un conocido agente comunista y un sanguinario incitador de disturbios y revolución en contra nuestra. ¿Y qué sucede? La mitad de los estúpidos Blancos de este país lloriquean y sollozan y se lamentan, diciendo llorosamente: «Qué maravilloso hombre era él. Él quería matar al fango Blanco como nosotros. ¿No era eso dulce, no era eso noble, no era eso santo, no era él algo así como Jesús?».

     Uno podría seguir durante horas enumerando más ejemplos. Pero ya he dicho bastante, seguramente, para mostrarles cuál es realmente el mayor obstáculo que enfrentamos: el pervertido masoquismo colectivo que ha sido incitado en tanta de nuestra gente.

     Lo que he estado diciendo ahora no es lo que originalmente pretendía decirles. Yo medité, y preparé un discurso que estaba destinado a mostrarles que habíamos pasado el punto de no retorno, y que ahora enfrentamos un futuro de violencia que sólo puede resultar en nuestro sometimiento total al status de ganado, o nuestra supervivencia al costo de grandes penurias, sacrificios y pérdida de vidas. Tenía la intención de hablar con algún detenimiento sobre Francis Parker Yockey y su gran libro «Imperium». Ése es un libro que evidentemente tiene el poder de darle a los jóvenes estadounidenses cuerdos y sanos una inspiración y un propósito. Y pretendía comentar sobre dicho libro como representando, probablemente, nuestra única fuerza que nos ayudará a emerger de nuestra actual difícil situación.

     Pero después de eso, recibí dos llamadas telefónicas de hombres cuyos nombres ustedes probablemente reconozcan. Los movimientos patrióticos de este país incluyen a algunos impostores y a una buena cantidad de agentes dobles, cuya misión es la de asegurarse de que todos los esfuerzos patrióticos sean dirigidos hacia callejones sin salida, donde deben terminar en frustración y desánimo. Pero tengo la seguridad de que ninguno de los hombres que me llamaron pertenecía a ninguno de estos dos grupos. Tengo la convicción de que fueron sinceros y serios. Uno de ellos me habló muy solemnemente acerca de nuestro deber de proteger y defender al pueblo de Vietnam de los horrores del comunismo. El otro, en el transcurso de la conversación, habló muy enfáticamente acerca de nuestro deber de darle al resto del mundo un ejemplo inspirador de las bendiciones de la libre empresa... al resto del mundo, ¿lo ven?. Estamos obligados a darles un modelo que puedan seguir. De manera que descarté el discurso que había preparado y lo reemplacé con esta conferencia, que ya ha sido muy larga y no exhaustiva.

     Porque estoy convencido de que nunca seremos capaces de pensar racionalmente acerca de nuestra propia supervivencia hasta que tengamos el coraje de decir, en nuestras propias mentes: «Somos estadounidenses, hombres Blancos de Occidente. Éste es nuestro país porque lo tomamos de los indios. Y tenemos un derecho incuestionable a este país mientras tengamos el poder y la voluntad de defenderlo».

     ¿Qué les debemos a las naciones de Europa occidental y a naciones tales como Australia y Sudáfrica? Les debemos reconocimiento por nuestra relación de sangre con los hombres de nuestra raza que permanecieron en las tierras de las cuales provenimos, y con quienes tenemos, en la medida en que ellos lo reconozcan, un interés común, puesto que nosotros y ellos juntos formamos una raza que es numéricamente una minoría en el globo, el resto de cuyos habitantes nos odian.

     ¿Qué le debemos al resto del mundo? Nada, absolutamente nada.

     ¿Cuáles son los «derechos civiles» que les debemos a nuestros Negros si ellos insisten en tenerlos? Un boleto gratuito a África.

     ¿Qué le debemos al Pueblo auto-Elegido? Cortesía común y corriente y un trato considerado siempre que nosotros estemos convencidos de que es para nuestra conveniencia el tener un cuerpo cohesivo de 12 a 15 millones de extranjeros residiendo en nuestro país y que poseen una gran parte de él.

     ¿Qué le debemos a la abominable pandilla que ahora nos gobierna en Washington? Un juicio justo.

     Ahora todo esto, por supuesto, es algo que podemos decir sólo en nuestras propias mentes y en reuniones cerradas. Es probablemente imprudente decirlo incluso en asambleas tales como ésta, dado el extraño apasionamiento de la mayoría de nuestra gente sobre el cual he llamado vuestra atención al ser el mayor obstáculo que está ante nosotros. Tales afirmaciones obviamente no son posibles como propaganda o proclamas. En realidad, me temo mucho que para la mayoría de nuestro pueblo esas implantadas alucinaciones «humanitarias» sean tan profundas e inveteradas que sólo puedan ser rotas, de ser posible, por medio de la terrible conmoción del sufrimiento físico. Y aquello, ellos seguramente lo recibirán.

     Mientras tanto, será responsabilidad de ustedes, si ustedes no pretenden rendirse, proporcionar tal liderazgo en vuestros propios círculos y comunidades y hacer tales preparativos y emprender tales acciones como para que avance nuestra causa con la debida consideración a la prudencia y la estrategia. Les he dicho esto a ustedes porque estoy firmemente convencido de que nuestro futuro es desesperanzador en realidad si no vemos claramente en nuestras propias mentes nuestros propios propósitos. Y estoy cierto de que nunca podemos lograr aquello a menos que podamos liberar nuestras propias mentes de las constrictivas trampas de la superstición «humanitaria» y de las falsificadas inhibiciones morales que han reemplazado a la verdadera moralidad.

     Confío en no haber conmocionado a ninguno de ustedes. Pero sé que es muy probable que algunos de ustedes puedan sentir que lo que he dicho es despiadado y que está en violación de nuestro deber cristiano de amar a todos. Si es así, sólo puedo decir que lo siento y observar que ustedes son demasiado buenos para este mundo. Sé que la perspectiva que he sugerido es sombría y puede perfectamente desalentar a un hombre. Sólo puedo recordarles la más incontrovertible y verdadera declaración en la gran y profética obra de Oswald Spengler: «Glücklich wird niemand sein der heute irgendwo in der Welt lebt» (Nadie que viva en el mundo hoy en ningún lugar puede esperar conseguir la felicidad). De ese destino no hay retirada, no hay escape. No hay lugar para esconderse de las consecuencias de lo que nosotros los del Occidente hemos atraído sobre nosotros mismos por nuestra generosa estupidez.

     Las únicas alternativas ahora son luchar o lloriquear. Pero si ustedes creen que pueden escapar, adiós y buena suerte. Al resto de ustedes les sugiero que veamos claramente nuestro problema cuando nos digamos a nosotros mismos:

     «Nosotros somos estadounidenses. Éste es nuestro país. El que quiera arrebatárnoslo, por la fuerza o sigilosamente, es nuestro enemigo. Y es nuestro propósito —y no sólo eso: es nuestro deber hacia nuestros hijos y los hijos de ellos y hacia nuestra posteridad aún no nacida—, es nuestro deber utilizar todos los medios posibles para destruír a aquél».






El Monte del Templo y la Fortaleza Antonia

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     Del teólogo e historiador estadounidense Ernest L. Martin (1932-2002), algunos de cuyos argumentos presentamos en la entrada anterior, autor de una decena de libros, siendo el más famoso e influyente "The Temples that Jerusalem Forgot" (1999), ofrecemos ahora en castellano un artículo (askelm.com) que trata acerca del fraude de identificar la que fue la romana Fortaleza Antonia en Jerusalén (la actual Explanada de las Mezquitas) con el sitio donde estuvo el templo judío. Aquí el señor Martin da importancia al testimonio de Flavio Josefo, testigo de la destrucción de dicha ciudad, al testimonio del Nuevo Testamento, y a hallazgos arqueológicos, en un razonamiento sólido y coherente que sitúa dicho templo al Sur de dicha Fortaleza, único monumento sobreviviente de la guerra romano-judía.


El "Monte del Templo" y la Fortaleza Antonia
por Ernest L. Martin, Ph. D.
Abril de 1998



     Todos recordamos el dicho de que una imagen vale por mil palabras. Es muy verdadero. Cuando somos capaces de ver un sitio acerca del cual hemos estado leyendo o escuchando, la información histórica y arquitectónica asociada con el área se hace mucho más significativa y el asunto es mejor entendido.

      Ése es ciertamente el caso con el Templo construído por Herodes el Grande que existió en el tiempo del Cristo Jesús junto con la fortaleza adyacente que dominaba el paisaje, conocida como la Fortaleza Antonia. La verdad es que nadie en la Historia moderna (ni en los últimos 1.900 años) realmente ha presenciado el complejo de edificios que albergaba el santo Santuario y la fortaleza que fue construída para protegerlo. Ésta es una de las razones de por qué he querido presentar la primera visión general del aspecto que el Templo y la Fortaleza Antonia tenían para los habitantes de Jerusalén durante la época de Jesús. Una vez que reconozcamos la situación real de las dos estructuras, y una vez que usted comprenda sus dimensiones, muchos puntos de la enseñanza de aquello que observamos en el Nuevo Testamento tendrá mucho más sentido para nosotros.

      En pocas palabras, una verdadera perspectiva de aquellos dos edificios que ocuparon la mayor parte de Jerusalén Noreste (al Oeste del Monte de los Olivos y el Monte de la Ofensa [1]) proporcionará un panorama que mostrará la completa belleza y majestad de la Ciudad Madre de los judíos en la primera parte del siglo I. Sin duda, era una demostración espléndida e imponente de grandeza arquitectónica. (...)

[1] Al Este de Jerusalén hay una serie de colinas, separadas por el valle de Josafat (donde corre el arroyo Kidron), donde se destacan tres cimas: al Norte el monte Scopus, al centro el Monte de los Olivos, y al Sur el Monte de la Ofensa, de la Ruina, del Escándalo o de la Corrupción (Mount of Offense), llamado así porque allí Salomón habría erigido santuarios a otros dioses.


      Mi primera visita a Jerusalén fue en el año 1961. Desde entonces he retornado a la ciudad más de treinta veces. Aunque yo sea un estadounidense, he enseñado profesionalmente en universidades en Inglaterra, donde viví durante catorce años (desde 1958 hasta 1972). En Jerusalén trabajé personalmente cada día con el profesor Benjamin Mazar en las excavaciones arqueológicas en las murallas occidental y Sur del Haram esh-Sharif. Mi asociación de trabajo con el profesor Mazar en aquel sitio duró dos meses cada verano entre los años 1969 y 1973. Durante aquel período de cinco veranos fui el supervisor académico de 450 estudiantes universitarios de todo el mundo que participaron en aquella excavación arqueológica dirigida por el profesor Mazar. Además de esta asociación profesional particular en la excavación, he guiado personalmente a más de 800 personas alrededor de todas las áreas de Israel explicando su historia bíblica y secular.

     Aunque yo no sea un arqueólogo de profesión (mi magíster es en Teología y mi doctorado es en Educación), he escrito varios libros y otros estudios principales sobre la historia y geografía de Jerusalén, sobre todo en los períodos de Jesús, el Imperio romano y Bizancio. Menciono estos breves puntos biográficos para mostrar que he tenido una considerable oportunidad de estudiar y conocer la historia de la Jerusalén antigua.


Observando Jerusalén desde el Monte de los Olivos

      La vista es espectacular. No hay ninguna escena de otras áreas de Jerusalén que pueda replicar la grandeza de los antiguos restos arqueológicos de la ciudad. Lo que domina la escena, cuando uno mira al Oeste, es un cuerpo rectangular de murallas con piedras gigantescas perfectamente alineadas unas con otras en sus cursos inferiores. Esos cuatro muros presentan al observador un sentimiento de majestad y temor por lo que los Antiguos fueron capaces de realizar mediante sus logros arquitectónicos. Esos muros rodean el área actualmente conocida como el Haram esh-Sharif (el Noble Recinto). Las piedras de las hileras inferiores en aquellas murallas están en sus posiciones originales. Ellas todavía están colocadas con precisión unas encima de otras sin ningún desplazamiento importante de sus alineaciones originales. Esas piedras inferiores son claramente Herodianas en su origen, y en algunos sitios en la parte Este de la muralla ellas son pre-Herodianas. Hay seguramente más de 10.000 de esas piedras todavía en el lugar en que ellas estaban en el tiempo de Herodes y de Jesús.

     Ninguna autoridad arqueológica ha sido capaz de contar todas las piedras de las cuatro murallas que rodean al Haram esh-Sharif porque muchas de las piedras todavía están escondidas a la vista. Pero en el sitio sagrado en la Muralla Occidental (a menudo llamada "El Muro de los Lamentos") hay siete hileras actualmente visibles dentro de aquella longitud de 60 metros de la pared en dirección Norte/Sur. Aquella sección contiene aproximadamente 450 piedras Herodianas. Hay, sin embargo, ocho hileras más de piedras Herodianas debajo del suelo hasta el nivel de la tierra que existió en el tiempo de Herodes y Jesús. Incluso debajo de aquel antiguo nivel de tierra, hay unas nueve hileras adicionales de piedras basales.

     Si aquella sección entera del "Muro de los Lamentos" pudiera ser expuesta, uno sin duda podría contar alrededor de 1.250 piedras Herodianas (probablemente más) de diversos tamaños. La mayor parte de las piedras son aproximadamente de 1 metro de alto y entre 1 y 3,5 metros de largo, pero hay longitudes variables de hasta 12 metros (pesando las piedras más grandes aproximadamente 70 toneladas). Se ha encontrado una piedra en el Muro Occidental que tiene el prodigioso peso de 400 toneladas (Meir Ben-Dov, Mordechai Naor y Zeev Aner, "The Western Wall", pp. 61 y 215). Si uno pudiera extenderse extrapolando el número de piedras que componen las cuatro paredes que rodean al Haram, tendría que haber más de 10.000 piedras Herodianas y pre-Herodianas todavía en el lugar como las había hace aproximadamente 2.000 años. Todas esas piedras en aquellas cuatro murallas sobrevivieron a la guerra romano-judía de 70-73 d.C.

     La magnífica pieza central dentro del recinto entero es el lugar sagrado musulmán llamado la Cúpula de la Roca. Está centralmente localizada en una dimensión Norte/Sur dentro del área rectangular del Haram. Al sur de la Cúpula y lindando con la muralla Sur hay otro edificio grande llamado la mezquita de Al-Aqsa con su cúpula más pequeña. Y aunque desde el Monte de los Olivos la Jerusalén moderna pueda ser vista en el fondo (y su horizonte contemporáneo de edificios es interesante), el área entera es eclipsada y dominada por el Haram esh-Sharif con aquellas antiguas murallas que destacan de manera impresionante la escena.

     Ésta es la vista que los espectadores modernos están acostumbrados a ver. Pero retrocedamos más de 1.900 años e imaginemos ver Jerusalén desde este mismo punto. Es desde este lugar estratégico que Tito (el general romano) contempló las ruinas de Jerusalén después de la guerra romano-judía en 70 d.C. La descripción de lo que Tito vio es muy instructiva. Deberíamos leer su apreciación en los relatos conservados por Flavio Josefo, porque éste y Tito ambos fueron testigos oculares. Note no sólo lo que Tito observó, sino también lo que él dejó fuera de la narrativa (Josefo, Las Guerras de los Judíos VII 1, 1). Esta omisión será de importancia primordial en nuestra investigación en cuanto a la verdadera localización del Templo. Tito ordenó que sólo una parte de una muralla y tres fortalezas deberían permanecer de lo que fue una vez la gloriosa Ciudad de Jerusalén. Note lo que es declarado en Las Guerras de los Judíos VII 1, 1:

     "Ahora, tan pronto como el ejército no tenía más gente para matar o saquear, porque no quedaba ninguno de los objetos de su furia (ya que ellos no habrían exceptuado a nadie, si hubiese quedado algún otro trabajo para ser hecho), César dio órdenes de que ellos deberían demoler entonces la ciudad entera y el Templo, pero deberían dejar en pie las torres que fueran de la mayor eminencia; es decir Phasaelus, e Hippicus y la torre Mariamne; y mucho de la muralla que encerraba la ciudad en el lado Oeste. Esa pared fue conservada, a fin de permitirse un campamento para aquellos que debían estar en la guarnición [en la Ciudad Superior], así como las torres [las tres fortalezas] también fueron conservadas, a fin de manifestar a la posteridad qué tipo de ciudad era, y cuán bien fortificada, aquella que el valor romano había sometido; pero para todo el resto de la muralla [que rodeaba a Jerusalén], fue tan completamente nivelada con el suelo por aquellos que la excavaron hasta sus fundamentos, que no quedó nada para hacer creer a aquellos que llegaban allí [a Jerusalén] que había estado habitada alguna vez. Ése fue el final al cual llegó Jerusalén por la locura de aquellos que eran partidarios de las innovaciones; una ciudad por otra parte de gran magnificencia, y de gran fama entre toda la Humanidad".

     Este relato de un testigo ocular acerca de la ruina total de Jerusalén ha planteado a los visitantes de Jerusalén un importante problema en relación a lo que presenciamos hoy de la antigua Jerusalén. El hecho es que Tito dio órdenes de que el Templo debía ser demolido. Las únicas estructuras que debían quedar en Jerusalén eran una parte de la muralla occidental y las tres fortalezas localizadas en la Ciudad Superior. Ésa era la intención de Tito al principio. Pero dentro de un breve tiempo, incluso aquella parte de la muralla occidental y las tres fortalezas en el Oeste fueron tan completamente destruídas que no quedó ni un un rastro de ellas (a menos que la llamada "Torre de David" cerca de la actual Puerta de Jaffa, como conjeturan los eruditos, sea una parte de los fundamentos de las torres Hippicus o Phasaelus).

     Al finalizar la guerra, la Décima Legión dejó Jerusalén como una masa de ruinas. Las piedras de aquellas ruinas fueron finalmente usadas en el siglo siguiente para construír una nueva ciudad llamada Aelia [Aelia Capitolina]. Pero hacia finales de 70 d.C. no quedaba nada en pie del Templo o de los edificios de Jerusalén. Josefo declaró:

     "Y realmente, la vista misma de ella era una cosa triste, puesto que aquellos sitios que estaban adornados por árboles y agradables jardines, ahora habían quedado convertidos en un país desolado en todo sentido, y sus árboles fueron todos cortados. Ni tampoco algún extranjero que hubiera visto antes Judea y los barrios residenciales más hermosos de la ciudad, y ahora la veía como un desierto, no podía sino lamentarse y afligirse tristemente por un trastorno tan grande, ya que la guerra había dejado todos los signos de la belleza completamente arruinados.Ni tampoco alguien que hubiera conocido el lugar antes, y que hubiese venido de improviso ahora, lo hubiera reconocido. Pero aunque él [un extranjero] estuviera en la ciudad misma, todavía él hubiese tenido tenido que preguntar por ella" (Guerras VI 1, 1).


Lo que el Visitante Moderno Observa

      Estas descripciones de Josefo son lo que él y Tito vieron desde el Monte de los Olivos. Pero esto no es lo que observamos hoy. Vemos algo que permanece del período de Herodes y de Jesús que es completamente diferente. Directamente hacia el Oeste, vemos una impresionante reliquia arquitectónica del pasado que está espléndidamente colocada directamente delante de nosotros. Ella domina toda la perspectiva occidental de este panorama. Aquella antigua estructura es el Haram esh-Sharif. Sus muros rectangulares son tan grandes en sus dimensiones que el Haram efectivamente dificulta la mayor parte de la vista de la actual ciudad antigua de Jerusalén. Y ciertamente, sin la menor duda, el Haram (en sus hileras inferiores de piedras que conforman sus murallas) es un edificio que sobrevivió a la guerra romano-judía. En efecto, es un ejemplo excepcional de la grandeza arquitectónica temprana que alguna vez adornó a la Jerusalén de Herodes y de Jesús, que ha resistido dos mil años de intemperie, terremotos, guerras y deterioro natural.


     Lo que es extraño, y casi inexplicable al principio, es el hecho de que Josefo mencionó la ruina completa del Templo y de toda la Ciudad de Jerusalén, pero él no dio ninguna referencia en absoluto del Haram esh-Sharif o de que Tito había ordenado que aquellas paredes deberían permanecer intactas. Y durante los siglos, hasta nuestro período moderno, hay más de 10.000 piedras todavía en sus posiciones originales dándole forma a las cuatro murallas del Haram. De hecho, en el tiempo de Tito había probablemente otras 5.000 piedras que quedaron en las hileras superiores de las cuatro murallas, que fueron removidas de su sitio y que cayeron a tierra desde el siglo I en adelante. Lo que debe ser reconocido es el hecho de que Tito deliberadamente dejó el rectangularmente formado Haram esh-Sharif prácticamente en el estado en que él lo encontró cuando él primero fue a Jerusalén con sus legiones. Extrañamente, Tito debe haber ordenado que aquellos cuatro muros fueran conservados para que los vieran las épocas venideras.

     Sin duda, el Haram esh-Sharif con sus murallas gigantescas fue un sobreviviente de la guerra. ¿Pero cómo podía Josefo haber dejado de explicar la conservación de un edificio tan espacioso y magnífico que era claramente existente en la Jerusalén de antes de la guerra? La existencia continuada de aquellos enormes restos del Haram esh-Sharif parecen (a primera vista) anular la valoración de Josefo y Tito. Recuerde: ellos dijeron que nada de Jerusalén fue dejado. Jerusalén "fue tan completamente nivelada con el suelo por aquellos que la excavaron hasta sus fundamentos, que no quedó nada para hacer creer a aquellos que llegaban allí [a Jerusalén] que había estado habitada alguna vez".

      Lo que es aún más extraño es la creencia moderna de que el Haram esh-Sharif debe ser considerado como el sitio del Monte del Templo. Si la opinión académica actual es correcta, esto significa que Tito y las legiones romanas no destruyeron las murallas externas del Templo en sus hileras medias y bajas. Los romanos dejaron más de 10.000 piedras en su lugar alrededor del Haram. Esta creencia moderna de estudiosos y autoridades religiosas (sean judíos, musulmanes o cristianos) de que aquellas 10.000 piedras alrededor del Haram representan los remanentes de los muros del Templo, hace de las ya referidas descripciones de su demolición relatadas por Josefo y Tito unas extravagantes exageraciones. Y bastante ciertamente, así es cómo los más modernos estudiosos, teólogos, líderes religiosos y arqueólogos ven el asunto.

     El profesor Williamson, que tradujo a Josefo, dijo que ése era el caso. Él comentó que la desolación completa que Tito se supone que había visto delante de él era "Una exageración. Mucho de la parte Sur del recinto del Templo fue conservada. Toda la pared del Sur de su sucesora, la actual muralla alrededor del Haram esh-Sharif, la sección del Sur de la muralla Oeste (el Muro de los Lamentos, donde la caída de Jerusalén todavía es lamentada) y una corta extensión de la pared del Este que corre desde la esquina del Sudeste, son Herodianas hasta una altura considerable" (The Jewish War, p. 454, nota 2). Veremos abundantes pruebas en mi nuevo libro de que Josefo no estaba exagerando. Esto es porque aquel recinto conocido como el Haram esh-Sharif NO era el Monte del Templo, ni tampoco la estructura fue oficialmente reconocida entonces como una parte de la municipalidad de Jerusalén.

     Nuestros modernos investigadores y autoridades religiosas sistemáticamente declaran que no podemos creer literalmente en las narraciones de Josefo acerca de las importantes descripciones que él proporciona. Descubriremos, sin embargo, que son los eruditos modernos y los líderes religiosos los que se equivocan y no Josefo. Flavio Josefo, el historiador-sacerdote, sabía de lo que él estaba hablando. Jerusalén y el Templo fueron totalmente destruídos y no quedó ni una sola piedra de ellos en el lugar. La verdad es que el Haram esh-Sharif NO era el Monte del Templo.


Josefo No Estaba Exagerando

     Ya es tiempo de que comprendamos que son los eruditos modernos los que se equivocan, y no los relatos de testigos oculares como Josefo y Tito. Jerusalén y el Templo en efecto fueron destruídos hasta sus fundamentos, como ha sido relatado. En cuanto a esto, hay otras secciones del relato de Josefo que muestran que él no estaba exagerando. Josefo fue agudo al decirle a sus lectores que todas las murallas alrededor de Jerusalén fueron derribadas hasta el nivel del suelo. Note su observación: "Ahora los romanos prenden fuego a las partes extremas de la ciudad [los suburbios] y las incendiaron, y demolieron completamente sus murallas [de Jerusalén]"(GuerrasVI 9, 4).

     Esta referencia muestra que todos los muros, incluso aquellos que encerraban las zonas periféricas de Jerusalén, fueron finalmente arrasados hasta el suelo. Para reforzar el asunto, Josefo dijo en otra parte: "Cuando él[Tito] demolió completamente el resto de la ciudad, y derribó sus murallas, él dejó esas torres [las tres torres ya mencionadas] como un monumento de su buena fortuna [de él], que había demostrado [el poder destructivo de] sus auxiliares, y que le permitió a él tomar lo que no podía haber sido tomado de otro modo"(Guerras VI 9, 1).

     Estos dos relatos de Josefo, junto con las observaciones anteriores ya referidas, confirman que hubo una destrucción literal de todas las murallas que rodeaban Jerusalén (excepto la pequeña sección de la muralla en la parte occidental de la Ciudad Superior que fue destruída después, porque ni un rastro de ella ha sido mencionado de su conservación por testigos oculares posteriores o encontrado por los arqueólogos modernos). En efecto, después de 70 d.C. no hay una palabra en ningún registro histórico que siquiera hable de aquellas tres fortalezas en la Ciudad Superior que tuviesen una pervivencia, las cuales Tito al principio pensó dejar como monumentos permanentes que mostrasen el poder de Roma sobre los judíos.

     Pero, una vez más, estas descripciones de Josefo y Tito de la ruina total parecen estar en desacuerdo con lo que presenciamos hoy. Abordemos eso. Desde el Monte de los Olivos contemplamos las cuatro murallas del Haram todavía en pie en toda su gloria, y ellas están notoriamente desplegadas con una majestad que domina el todo de la Jerusalén actual. Las hileras inferiores de aquellas murallas claramente tienen más de 10.000 piedras Herodianas y pre-Herodianas unas encima de otras. De hecho, aquellos muros rectangulares son aún murallones que funcionan en la Jerusalén de hoy. Ellos han estado en constante uso a lo largo de los siglos intermedios para proteger los edificios que fueron construídos en el interior de aquel recinto llamado el Haram esh-Sharif.

     Otra vez digo que si aquellos muros rectangulares son aquellos que anteriormente rodearon al Monte del Templo (como somos con seguridad informados por todas las autoridades hoy), ¿por qué Josefo y Tito excluyeron de sus relatos de testigos oculares toda mención sobre la conservación de esta magnífica estructura del Haram? Ellos hablaron de la ruina completa y la desolación de Jerusalén y del Templo, no de la supervivencia de ningún edificio que las autoridades judías una vez controlaron. Sea como fuere, Josefo y Tito estaban ciertamente conscientes de que los muros del Haram sobrevivieron a la guerra. ¿Por qué no se refirieron Josefo y Tito a aquellas murallas del Haram que permanecieron de pie en su tiempo?.


Un Dilema para los Cristianos Modernos

      Estos hechos plantean un importante problema para los cristianos. Si aquellas murallas rectangulares del Haramson en efecto las mismas murallas (en sus hileras inferiores) que antiguamente circunscribían el Monte del Templo, ¿por qué esas piedras (más de 10.000 en número) están aún tan firmemente unas encima de otras? La existencia continuada de aquellos muros gigantescos y majestuosos mostraría que Tito no destruyó las paredes del Templo, si aquellas murallas rodeaban realmente el Templo. ¿Por qué esto es una dificultad para la creencia cristiana? La razón es clara.

     Los cristianos están conscientes de cuatro profecías dadas por Jesús en el Nuevo Testamento de que no quedaría piedra sobre piedra del Templo y sus muros o incluso de la Ciudad de Jerusalén y sus murallas (Mateo 24:1-2; Marcos 13:1-2; Lucas 19:43-44; 21:5,6.). Pero extraño como pueda parecer, los muros que rodean al Haram esh-Sharif todavía permanecen en su gloria con sus más de 10.000 piedras Herodianas y pre-Herodianas firmemente en el lugar en sus hileras inferiores. Si aquellas piedras son las del Templo, de las profecías de Jesús se puede dudar seriamente como carentes de cualquier valor o mérito histórico en cualquier análisis de observadores inteligentes e imparciales.

     En efecto, la mayoría de los visitantes cristianos de Jerusalén que primero ven aquellas enormes piedras que rodean el área rectangular del Haram (y quienes conocen las profecías de Jesús) normalmente quedan perplejos y a menudo sobresaltados por lo que ellos ven. Y ellos debieran quedar así. La sorpresa en lo que ellos observan ha sido el caso con la numerosa gente que he guiado alrededor de Jerusalén e Israel. Ellos han pedido una explicación acerca de este aparente fracaso de las profecías de Jesús. ¿Por qué todavía existen aquellas murallas gigantescas? Si aquellos muros representan las piedras de alrededor del Templo, entonces las profecías de Cristo quedan invalidadas.

     La explicación habitual, sin embargo, para justificar la credibilidad de las profecías de Jesús consiste en decir que Jesús sólo podría haber estado hablando sobre el Templo interior y sus edificios, NO del Templo externo y sus murallas que lo rodeaban. Ésta es la respuesta acostumbrada y conciliatoria que la mayoría de los eruditos proporcionan (y es la explicación que yo mismo antes di a mis alumnos o socios). La verdad, sin embargo, es que esta explicación no resiste la crítica cuando uno mira lo que Jesús predijo. Habría que observar cuidadosamente las profecías de Jesús en los Evangelios Sinópticos. Ellos claramente declaran que no quedaría piedra sobre piedra del Templo y sus edificios, y sus profecías también incluían sus muros exteriores. La palabra griega que Jesús usó en su contexto profético para describir el Templo y sus edificios era "hieron"(esto significa el Templo entero e incluídos sus edificios y muros exteriores). Note lo que Vincent dice acerca del significado de "hieron".

     «La palabra "templo" (hieron, literalmente "lugar sagrado") significa el área entera del recinto sagrado, con su pórticos, patios y otros edificios subordinados; y debería ser cuidadosamente distinguido de la otra palabra,"naos", que también significa templo, pero el templo en sí mismo o el "Lugar Santo" y el "Santo de los Santos". Cuando leemos, por ejemplo, acerca de Cristo enseñando en el templo (hieron), debemos referirlo a uno de los pórticos del templo [columnatas externas]. Entonces es desde el hieron, el patio de los Gentiles, que Cristo expulsa a los cambistas de dinero y comerciantes de ganado» (Vincent, Word Studies in the New Testament, vol. I, p. 50).

     Los edificios exteriores del Templo incluyendo sus muros siempre fueron considerados dentro del sentido de la palabra "hieron" que Jesús usó en sus profecías acerca de la destrucción total del Templo. Había varias divisiones externas del Templo que eran distinguidas del Templo Interior, y aquellos sectores externos eran considerados como características cardinales del Santuario. Como ejemplo, note el relato del Nuevo Testamento que declara que Satán llevó a Jesús al "pináculo del Templo" (Mateo 4:5). La sección del pináculo era la esquina Sudeste de la muralla externa que rodeaba todo el complejo del Templo. La expresión en el Nuevo Testamento muestra que ese ángulo Sudeste que pertenecía al Templo era un pináculo (un ala) "del Templo". Aquella área era una gran parte del edificio sagrado al cual Jesús se refirió cuando él predijo que no quedaría piedra sobre piedra.

     Hay un importante factor geográfico que demuestra este punto. Cuando Jesús hizo su profecía de que no quedaría piedra sobre piedra, Mateo dijo que Jesús y sus discípulos acababan de marcharse de los alrededores externos del Templo. Esto significa que todos ellos estaban en ese momento viendo las secciones exteriores del Templo (el hieron) cuando él dio su profecía (Mateo 24:1). El Evangelio de Marcos va incluso más adelante y deja claro que las murallas exteriores del Templo estaban muchísimo en la mente de Jesús cuando él dijo que ellas serían desarraigadas desde sus mismas fundaciones. «Y como él [Jesús] salió del Templo [note que Jesús y los discípulos estaban fuera de las murallas del Templo y miraban hacia atrás hacia el recinto del Templo], uno de sus discípulos le dijo: "Maestro, ¡mira qué edificios hay aquí!". Y Jesús le respondió: ¿Ves tú estos grandes edificios? No quedará piedra sobre piedra que no sea derribada» (Mateo 24:1). Sin la más leve duda, cuando Jesús en su profecía habló de la destrucción del Templo, él ciertamente estaba incluyendo en su profecía las piedras de las murallas externas que encerraban el Templo así como los edificios del Templo interior.


La Ciudad Entera de Jerusalén También Debía Ser Destruída

     Jesús fue incluso más adelante que simplemente profetizar acerca de la destrucción del Templo y sus murallas. Él también incluyó dentro de sus predicciones proféticas las piedras que componían la ciudad entera de Jerusalén (con cada edificio y casa que comprendía la metrópoli o incluso las murallas que contenían su área urbana). Según Jesús en Lucas 19:43-44, cada estructura de la Jerusalén judía sería arrasada hasta sus cimientos. "Porque vendrán días sobre ti [Jerusalén], que tus enemigos te cercarán con baluarte, y te pondrán cerco, y de todas partes te pondrán en estrecho, y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti; y no dejarán sobre ti piedra sobre piedra".

      De este modo, en las profecías de Jesús no sólo las piedras que componían el Templo y sus muros debían ser derribadas, sino que él también incluyó dentro de aquel alcance de la destrucción a las piedras que comprendían la totalidad de la ciudad de Jerusalén. No nos queda ninguna ambigüedad acerca de este asunto. Las profecías sobre el Templo y la ciudad de Jerusalén o sucedieron exactamente como Jesús predijo, o aquellas profecías deben ser consideradas como falsas y no fiables. No puede haber ningún punto medio sobre la cuestión. Si uno es honesto con el significado llano de los textos de los Evangelios, Jesús enseñó que nada quedaría del Templo ni de la ciudad entera de Jerusalén, y que no quedaría nada de las paredes del Templo y de la ciudad.


Josefo y Tito Concuerdan con Jesús

     ¿Jesús estaba en lo correcto en sus profecías?. ¿Fue Jerusalén junto con su Templo y sus murallas nivelados hasta el suelo? Lo que es notable es el hecho de que los relatos de testigos oculares dados por Josefo y Tito concuerdan precisamente con lo que Jesús predijo. Note lo que estos dos hombres observaron. "Ella [Jerusalén con sus murallas] fue tan completamente derribada a tierra por aquellos que la cavaron hasta sus fundamentos, que allí no quedó nada para hacer creer a aquellos que llegaran allí  [a Jerusalén] que había estado habitada alguna vez" (Guerras VII 1, 1).

     Toda la tierra que rodea la ciudad de Jerusalén era una tierra baldía solitaria. Note el relato de Josefo ya citado:

      "Ellos habían cortado todos los árboles, que estaban en el campo que colindaba con la ciudad, y aquello por 90 estadios alrededor [casi 16 kms.], como ya lo he referido. Y realmente, la vista misma de ella era una cosa triste, puesto que aquellos sitios que estaban adornados por árboles y agradables jardines, ahora habían quedado convertidos en país desolado en todo sentido, y sus árboles fueron todos cortados... la guerra había dejado todos los signos de la belleza completamente arruinados. Ni tampoco alguien que hubiera conocido el lugar antes lo hubiera reconocido" (Guerras VI 1, 1).

     Después del año 70 d.C. la gente hubiera visto una desolación completa en todas las direcciones. Cada piedra de cada edificio y muro en Jerusalén fue removido de su posición original y arrojado al suelo. Josefo proporciona descripciones razonables de los acontecimientos posteriores después de que la guerra se había acabado, para mostrar cómo esta destrucción completa fue llevada a cabo. Gran parte de la destrucción vino después de que la guerra había cesado.

     Durante seis meses después de la guerra, Josefo nos dice que la Décima Legión "desenterró" las ruinas de las casas, edificios y murallas buscando qué saquear. Ellos sistemáticamente excavaron bajo las fundaciones de los edificios y casas arruinados (ellos hicieron que muchos de los cautivos judíos hicieran el trabajo por ellos). Ellos también pusieron de arriba abajo el área entera buscando oro y otros metales preciosos que se fundieron cuando los incendios arreciaban. Esto hizo que los metales preciosos se derritieran y fluyeran por las grietas inferiores de las piedras. Incluso las piedras basales contenían oro derretido por los grandes incendios que devoraron Jerusalén. Este saqueo de cada antiguo edificio o muralla en la municipalidad de Jerusalén provocó que las tropas dieran vuelta cada piedra dentro de la ciudad (o que ordenaran que los cautivos judíos restantes lo hicieran por ellos). Veremos pronto que esta actividad resultó en que cada piedra de la Jerusalén judía fuese desplazada.

     Este desenterrar continuo de la ciudad ocurrió durante un período de varios meses después de la guerra. En efecto, después de una ausencia de aproximadamente cuatro meses, Tito regresó a Jerusalén desde Antioquía y una vez más vio la ciudad arruinada. Josefo registra lo que Tito vio:

     "Cuando él vino a Jerusalén en su progreso [al retornar desde Antioquía a Egipto], y comparó la melancólica condición que él vio en que estaba entonces, con la gloria antigua de la ciudad, con la grandeza de sus ruinas presentes (así como su esplendor antiguo), él no pudo sino compadecerse de la destrucción de la ciudad. Sin embargo, había no poca cantidad de riquezas que habían estado en aquella ciudad que todavía se encontraban entre las ruinas, mucho de lo cual los romanos desenterraron; pero la mayor parte fue descubierta por aquellos que estaban cautivos [los cautivos judíos fueron obligados por las tropas romanas a desenterrar las piedras de su propia ciudad en busca de oro], y entonces ellos [los romanos] se lo llevaron; quiero decir el oro y la plata, y el resto de aquel mobiliario más precioso que los judíos tenían, y que los dueños habían atesorado bajo tierra en vista de las incertidumbres de la guerra".


Tres Años Después de la Guerra

     Ahora venimos a la valoración final de la desolación completa de Jerusalén. Note lo que Eleazar, el comandante judío final en Masada, relató tres años después de que la guerra había terminado en Jerusalén. Él da un relato de testigo ocular de cómo los romanos conservaron la Fortaleza Antonia (el Haram) entre las ruinas. Lo que Eleazar dijo a las 960 personas judías (quienes iban a suicidarse más bien que caer en las manos del general Silva que estuvo a punto de capturar la Fortaleza de Masada) es muy importante en cuanto a nuestra investigación presente. Este comandante final judío se lamentó por la triste situación que cada uno podía presenciar en ese período crepuscular del conflicto después de que la guerra principal con los romanos había terminado.

     Jerusalén era para Eleazar un espectáculo desastroso de ruina completa. Había sólo una cosa que permanecía de la antigua Jerusalén que Eleazar podría señalar como todavía en pie. Aquélla era el campamento de los romanos que Tito permitió que permaneciera como un monumento de humillación sobre la Ciudad Madre de los judíos. Eleazar reconoció que ese campamento militar había estado en Jerusalén antes de la guerra, y que Tito dejó que continuara existiendo después de la guerra. La retención de este único campamento de los romanos, según Eleazar, era un símbolo de la victoria que Roma había conseguido sobre el pueblo judío. Sus palabras están registradas en las Guerras de los Judíos VII 28, 7. Varias palabras y frases necesitan ser enfatizadas:

      "¿Y dónde está ahora aquella gran ciudad, la metrópoli de la nación judía, que estaba fortificada por tantas murallas a su alrededor, que tenía tantas fortalezas y grandes torres para defenderla, que difícilmente podía contener los instrumentos preparados para la guerra, y que tenía tantas decenas de miles de hombres para luchar por ella?. ¿Dónde está esta ciudad que se creía que tenía a Dios mismo habitando allí? Está ahora demolida hasta los mismos fundamentos, y no le queda nada sino AQUEL MONUMENTO que de ella se conserva, quiero decir el CAMPAMENTO DE AQUELLOS [los romanos] que la han destruído, QUE TODAVÍA EXISTE ENTRE SUS RUINAS; algunos desafortunados ancianos también yacen entre las cenizas del Templo [el Templo estaba entonces en ruina total o todo había sido quemado hasta ser reducido a cenizas], y unas cuantas mujeres son allí conservadas vivas por el enemigo, para nuestra amarga vergüenza y reproche".

     Lo que Eleazar dijo debe ser considerado como el relato de un testigo ocular del estado de Jerusalén en el año 73 d.C. Esta narrativa tiene importancia suma para nuestra investigación. Esto, porque Eleazar admitió que la ciudad de Jerusalén y todas sus fortalezas judías en efecto habían sido demolidas "hasta sus mismos fundamentos". No quedaba nada de la ciudad o el Templo. Esto es exactamente lo que Jesús predijo que sucedería.

      Eleazar incluso reforzó esto. Él mencionó la "destrucción en gran escala"de la ciudad. Él dijo que Dios había "abandonado su más santa ciudad para ser quemada y arrasada hasta el suelo"(GuerrasVII 8, 6). Y luego, poco tiempo más tarde, Eleazar concluyó su relato de testigo ocular declarando: "No puedo sino desear que hubiéramos muerto todos antes de que hubiéramos visto aquella santa ciudad demolida a manos de nuestros enemigos, o las fundaciones de nuestro santo Templo desenterradas de una manera tan profana" (Guerras VII 8, 7).

      Sí, hasta las mismas piedras de base que comprendían el complejo del Templo (incluídas sus murallas) habían sido desarraigadas y demolidas. Ellas fueron "desenterradas" entonces y ni siquiera las hileras inferiores de las piedras de base fueron dejadas en su lugar. Según Eleazar, lo único que quedó en el área de Jerusalén era un solo campamento romano que todavía se cernía triunfalmente sobre las ruinas de la ciudad y el Templo. Él dijo que de la Jerusalén judía "no había quedado nada". La única cosa que seguía existiendo era el "monumento" (un solo monumento) conservado por Tito. ¿Y cuál era aquel "monumento"? Eleazar dijo que era "el campamento de aquellos que la destruyeron [a Jerusalén], que todavía está entre sus ruinas".

     ¿Qué podría haber sido ese campamento de los romanos? Esto es muy fácil de descubrir cuando uno lee los relatos de la guerra como fueron registrados por Josefo. El principal establecimiento militar en Jerusalén antes de la guerra era la Fortaleza Antonia, localizada al Norte del Templo (que es ahora el Haram esh-Sharif). En mi nuevo libro "Los Templos que Jerusalén Olvidó" daré abundante información para mostrar que el Haram fue considerado propiedad romana incluso antes de la guerra. Como la fortaleza Antonia era propiedad de Roma, ellos no tenían ninguna razón para destruír aquellos edificios que ya pertenecían a los romanos. Por eso Tito dejó la Fortaleza Antonia (el Haram esh-Sharif) y sus paredes intactas (como las vemos hoy).–





Ashraf Ezzat - Nada Santo en Jerusalén

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     Una continuación natural de las últimas tres entradas es el siguiente texto que presentamos en castellano que publicó (veteranstoday.com) hace cuatro meses el médico e investigador de la Historia antigua el egipcio Ashraf Ezzat, de quien ya hemos ofrecido algunos interesantes textos. Aquí presenta en forma resumida diversas tesis con respecto a la detectada manipulación que hay en las historias bíblicas antiguas, entre ellas las ideas de Kamal Salibi y de Ernest Martin recientemente presentadas aquí, falsificación que se remontaría a la redacción del Viejo Testamento en griego en Alejandría, cuya contaminación habría alcanzado a los posteriores musulmanes. Recalca el señor Ezzat el origen árabe o yemení de los antiguos israelitas, y plantea su inquietud con respecto a si la actual guerra en Yemen tendría algo que ver con ello.


Jerusalén: Nada Santo en la Ciudad Santa
por Ashraf Ezzat
25 de Agosto de 2015



     "Es en el núcleo de la historia de Jerusalén que realmente encontramos el secreto más oscuro del sionismo: el engaño".


     El domingo 26 de Julio [de 2015] la ciudad de Jerusalén presenció otro choque mortal entre palestinos y judíos israelíes. Esta vez los disturbios ocurrieron dentro de la mezquita de Al-Aqsa.

     Todo el asunto comenzó porque los palestinos se enfurecieron por el acceso de los judíos al recinto durante un día anual de luto judío. Los palestinos lanzaron piedras y fuegos artificiales mientras la policía disparó granadas aturdidoras [stun grenades, que detonan luz y ruido]. Esto sucedió después de que las fuerzas de seguridad habían forzado su camino en el recinto de Al-Aqsa antes de entrar brevemente en la mezquita misma.

     Las protestas estallaron en los pasajes y callejuelas de la Ciudad Vieja alrededor de la mezquita, con los manifestantes enfrentando a la policía y cantando "Allahu Akbar"(Alá es el más grande). Algunos fundamentalistas judíos lucharon por entrar en el recinto mientras la policía respondió disparando más granadas aturdidoras y bloqueando la entrada al sitio.

     El recinto de Al-Aqsa en la Ciudad Vieja de Jerusalén, uno de los mayores puntos críticos en el Oriente Medio, es (se ha dicho) el sitio más sagrado en el judaísmo y el tercero más sagrado del Islam, después de La Meca y Medina. Los musulmanes se refieren al sitio como Al Haram al-Sharif (El Noble Santuario) [1] y a la mezquita como "La Mezquita más Lejana"(Al Masjid al-Aqsa), también conocida como Al-Aqsa y "Bait al-Muqaddas" (Casa de la Santidad) en árabe, mientras que los judíos se refieren al sitio como el "Monte del Templo" o Har ha-Moriya / Monte Moria.

[1] http://www.noblesanctuary.com/

     Hay dos motivos principales de por qué el recinto de Al-Aqsa es considerado santo por los musulmanes: en primer lugar, porque a los musulmanes se les dice que dicha mezquita fue la primera Qibla (la dirección hacia la que los musulmanes se orientan durante el rezo) en la historia del Islam; y en segundo lugar, se cree que es el lugar desde el cual el profeta Mahoma hizo su milagroso viaje nocturno (Isra y Miraj) al cielo.

     Las narraciones dicen que Mahoma viajó en un corcel alado a "la Mezquita más Apartada" donde él condujo a otros profetas como Moisés, Abraham y Jesús, en un rezo de estilo musulmán (una clara indicación islámica de la prominencia de Mahoma sobre todos los profetas abrahámicos). Luego Mahoma subió al cielo donde él tendría un raro y breve encuentro con el dios todopoderoso quien le dio instrucciones para que las transmitiese a los musulmanes fieles.

     En cuanto a los judíos, sus narraciones y también la Biblia hebrea (AT) dicen que el recinto de Al-Aqsa es identificado con tres montañas bíblicas de localización incierta pero de suma importancia:

—1) El monte Moria, donde se supone que tuvo lugar la historia del cuasi-sacrificio de Isaac;
—2) el monte Sión, donde estuvo la fortaleza jebusita original y el pueblo / ciudad de David una vez, y
—3) el "monte" del Templo, donde el tercer Templo debe ser restablecido en la misma localización donde Salomón construyó el primero.

     Sin embargo, las tres interpretaciones son polémicas y discutidas, si es que no completamente falsas.

     Antes que nada y antes de que comencemos a atravesar la fangosa disputa acerca de la santidad y la historicidad de las tres montañas bíblicas, no cometamos el pecado perpetuo de tomar la narración hebrea literalmente. En otras palabras, empleemos un poco de pensamiento crítico aquí, y durante un momento dejemos de dar por supuestas tanto la narración musulmana como la judía. Deberíamos investigar todo lo que hizo santa a esta ciudad para judíos y musulmanes, incluso los detalles más aceptados, tales como por qué Jerusalén es llamada Yerushaláyim en hebreo y "Qods / Qadas"en árabe.


Aliyah

     La ideología sionista entera está basada en una simple palabra hebrea que tiene una antigua connotación histórica: Aliyah. La palabra significa "ir" (o mejor todavía, "moverse / emigrar") hacia arriba, donde la nueva tierra de Israel está supuestamente situada. El Aliyah era y todavía es uno de los principios esenciales del sionismo, que le pide a los judíos de la diáspora que emigren (retornen) a la Tierra de Israel (Eretz Yisrael).

    La pregunta aquí no es si los judíos de la Diáspora deberían o no emigrar a Israel (por supuesto, ellos no deberían), sino que en cambio deberíamos preguntar por qué la palabra hebrea Aliyahinequívocamente establece que la dirección de la migración debería ser hacia arriba.

     Después de un poco de reflexión podríamos llegar fácilmente a la conclusión de que los judíos originales antes de emigrar a la moderna Jerusalén deben haber venido desde una tierra localizada al Sur de Palestina.

     Y puesto que el libro hebreo y su idioma son muy antiguos, entonces Aliyah (como una palabra antigua del mundo antiguo) significaba que los migrantes judíos deben haber vivido (antes de que ellos emigraran) no en Europa o EE.UU. sino al Sur del Levante donde están la antigua Arabia y Yemen. En ese sentido, ellos tuvieron que ir hacia arriba (o Aliyah) hacia Palestina (comenzando a partir del siglo IV a.C. según nuestra investigación).


     Como declaré antes en mi libro "Egipto No Conoció Faraones Ni Israelitas"(Egypt Knew No Pharaohs Nor Israelites), el libro israelita entero (con sus historias patriarcales) es un caso de geografía perdida. Una Bibliahebrea falsificada ha estado alimentando al mundo con una historia manipulada y una falsa geografía durante más de 2.300 años hasta ahora. Lamentablemente, este engaño masivo está todavía en efecto hasta este mismo momento.

     Mi investigación de tres años de la historia del antiguo Egipto y los israelitas, combinada con la investigación de una comunidad seria de académicos de alto perfil (incluyendo la investigación pionera realizada por el profesor Kamal Salibi, "La Biblia Vino de Arabia"), ha llegado a la misma conclusión basada en pruebas: la Bibliahebrea y sus historias ocurrieron en el Sur de la antigua Arabia y en Yemen del Norte. La geografía de la antigua Arabia y Yemen, como ha sido meticulosamente descrita por renombrados historiadores árabes clásicos, ofrece coherentemente el teatro real de las historias israelitas, sus montañas, valles y tribus (como está escrito y descrito en la Biblia).

    La actual localización tanto del Monte del Templo como de todo el Estado de Israel está basada en una Ideología, derechamente falsa y engañosa. La cuestión entera de la así llamada Tierra Santa es tan profana y falsa que incluso la opinión de los musulmanes de Al-Aqsa y Qods/Qadas está basada también en narraciones distorsionadas y falsas.

     Qades, según se menciona en la Bibliahebrea, es una montaña yemenita (Qadas) que está a 80 KILÓMETROS al Sur de la moderna ciudad de Taa'iz, y no tiene nada que ver con Jerusalén. Según el Hadithislámico (tradiciones), la primera Qibla (dirección durante los rezos) era hacia Bayt al-Muqaddas (supuestamente el Templo de Salomón), sólo que realmente había sido construído en Yemen del Norte y no en Palestina como todo el mundo cree.

     En el siglo III a.C. la Bibliahebrea fue traducida al griego en la legendaria Biblioteca de Alejandría. Setenta escribas judíos fueron asignados a esa tarea por el rey Ptolomeo II (el monarca griego de Egipto en ese entonces). En la traducción griega los escribas judíos habían relocalizado fraudulentamente el teatro de las historias bíblicas desde Yemen del Norte y Arabia del Sur a Egipto y Palestina.

     En la distorsionada versión griega que llegó a ser conocida como la Biblia Septuaginta (o de los Setenta), Egipto había sido falsamente convertido en la tierra de la esclavitud de los israelitas, y su rey, en el faraón de Moisés. Nada en la Biblia hebrea realmente había funcionado del modo que usted piensa que lo hizo; nada en absoluto. Las creencias de las masas crédulas durante veintitrés largos siglos hasta este punto presente en nuestro tiempo moderno están completamente basadas en el engaño y la falsificación de los judíos.

     De este modo, las historias originales (completamente humildes y tribales) de los israelitas realmente habían tenido lugar en la Arabia y el Yemen antiguos. Los cuentos hebreos enteros no tenían absolutamente nada que ver con la cultura occidental ni tampoco estaban destinados a ella. El libro entero es muy local y refleja una cultura (árabe) tribal extremadamente intolerante y violenta. El problema no estaba sólo en la distorsionada traducción de la Biblia hebrea al griego, sino en la oportunidad de oro que esa traducción ofrecía para el dogma y los cuentos tribales de los israelitas para diseminarse entre la cultura occidental.

     Volvamos a la Tierra Santa y al recinto de Al-Aqsa en Palestina, la cual durante los tiempos antiguos y medievales fue considerada parte del Levante por los romanos y los bizantinos. En cuanto a los árabes, ellos siempre habían considerado a Palestina como parte de Bilad al-Sham (la tierra de Sham, el país de Siria).

    Sólo Jerusalén (Aelia) [2] fue nombrada por los árabes. Esto fue verificado por los términos de la rendición de la ciudad al califa musulmán Umar bin al-Khattab en 637 d.C., en los cuales el califa Umar se refirió a la gente de Jerusalén como la gente de Aelia (ninguna mención de Jerusalén o Qades/Qods).

[2] https://es.wikipedia.org/wiki/Gens_Aelia

     Las narraciones mencionan que el califa Umar en su reunión con el patriarca Ortodoxo Sofronio (el patriarca de Jerusalén en ese entonces) [3] aceptó la rendición de su gente y se dirigió a ellos como la gente de Aelia. Contrariamente a la historia manipulada por los judíos, Jerusalén, así como el resto del Levante, era predominantemente cristiana en el momento de la conquista islámica. De esta manera, hablar de una rebelión judía y una breve autonomía judía en Palestina en el año 614 después de una efímera invasión persa el año anterior, es algo históricamente invalidado.

[3] https://es.wikipedia.org/wiki/Sofronio_I_de_Jerusal%C3%A9n

     No quiero decir que el cristianismo fuera más tolerante que el judaísmo en ese tiempo; al contrario, la nueva fe estaba profundamente empapada en el extremismo y se hallaba dividida por argumentos cristológicos completamente insignificantes. Tal vez eso hizo más fácil para el Islam extenderse, aunque por la espada, en el Levante alguna vez controlado por los bizantinos y en África del Norte.

     Para capitalizar su arrolladora victoria por todas partes del Levante, el califa Umar decidió construír la primera mezquita islámica en Aelia (la supuesta Jerusalén de los libros de Historia). Umar, siendo un completo extranjero para la ciudad recién conquistada y su paisaje, le pidió a su consejero superior que lo ayudara a escoger el punto correcto para la nueva mezquita. Adivine quién fue al rescate del califa... correcto: otro rabino (escriba) judío. Como debía esperarse, ese rabino de Umar siguió los pasos de los 70 rabinos en su engañosa tarea más temprana conocida como la Biblia Septuaginta.

     El consejero superior de Umar era Ka’ab al-Ahbar [4], un rabino judío de ¿adivina dónde?... correcto otra vez: de Yemen. A Ka'ab se le acredita ser la principal fuente de infiltración en la literatura islámica de interminables y distorsionadas historias y narraciones israelitas, de acuerdo a las cuales el lugar (Aelia) comenzó a ser designado como "Al-Aqsa"y "Bayt al-Muqaddas" a partir de entonces.

[4] https://en.wikipedia.org/wiki/Ka%27ab_al-Ahbar

     El rabino de Umar venía de la patria de los primeros israelitas, Yemen, donde ocurrieron todas las historias y guerras israelitas. Sí, las historias de José, David, Salomón y Moisés, todas ellas habían ocurrido en Yemen. Los dramáticos cuentos de la esclavitud y servidumbre que comenzó con José y que duró hasta el éxodo de Moisés y sus seguidores, tuvieron lugar no en Egipto sino en una oscura y tribal ciudad / pueblo (yemenita) que tenía el nombre de "Mizraim" [5], falsamente traducido y largamente vendido —incluso en Internet— por escribas judíos como "Egipto".

[5] https://ashraf62.wordpress.com/2015/05/02/hijacking-history-in-jews-unholy-books-3/

     La historia de Abraham y el cuasi-sacrificio de Isaac (Ismael, en la versión musulmana) es la excepción, ya que esa historia particular (según muchos registros árabes antiguos, para no mencionar las narraciones islámicas) ocurrió en Hijaz, alrededor de La Meca de hoy en día en Arabia Saudí. Aunque ellas necesiten un mayor trabajo arqueológico, las narraciones musulmanas nos dicen que el padre de los israelitas había salido de Hijaz (cerca de La Meca) y había atravesado la línea de montañas de Asir hacia Yemen del Norte.

    En la antigua tradición árabe y su idioma, el que emprende el acto de atravesar una barrera natural es llamado "Aber", y así es lingüísticamente cómo "Abraham" y los judíos llegaron a ser llamados Aberos / Hebreos. (La historia de la Ur mesopotámica como la patria de Abraham y de Hebrón en Palestina como su lugar de descanso, es simplemente un mito y un evidente engaño de los orientalistas).

     Realmente la inusual historia de sacrificar al hijo de Abraham (un ritual pagano de la antigua Arabia, dicho sea de paso) se supone (según narraciones orales islámicas y árabes) que sucedió en la montaña Moria, ¿le suena? Actualmente la montaña todavía está en La Meca, donde millones de peregrinos musulmanes visitan Moria / Marwah cada año como parte de su Hajj (peregrinación) ritual. Así, si debemos mantenernos fiel a la definición de la Biblia hebrea del Monte Moria, entonces tenemos que considerar la (probable) veracidad de la narrativa islámica de la historia de Abraham.

     Una vez más, somos llevados de vuelta a Al-Aqsa y al así llamado Monte del Templo, o monte Moria (en hebreo). En mi libro dejo en claro que las lenguas hebrea y árabe son dos dialectos cercanos de la misma lengua árabe antigua. Muchas de las palabras-nombres suenan fonéticamente muy similares tanto en hebreo como en árabe, como en el caso de los nombres de los patriarcas: Abraham / Ibrahim, Josef / Yousef, Moshe / Mussa, etc.

     Ahora sabemos que el "monte" Moria es donde tuvo lugar la historia de Isaac / Ismael, pero cuando intentamos buscar tal montaña en la ciudad santa de Jerusalén no encontramos ninguna, no importa cuán esforzadamente busquemos. No hay ningún monte Moria no sólo en Jerusalén sino en ninguna parte de Palestina.


El Monte del Templo es Realmente una Fortaleza Romana

     Incómodos por tal discrepancia, los sionistas en su narrativa trataron de encontrar una salida afirmando que tanto el Monte del Templo como Moria son la cosa misma, aunque irónicamente el sitio nunca hubiera sido llamado así antes de la ocupación israelí. Ni siquiera antes de la conquista musulmana el lugar de Al-Aqsa fue llamado el Monte del Templo, ni tampoco Al-Aqsa en realidad.


    De hecho, el lugar mismo donde cada uno piensa que el Templo había estado alguna vez es la localización menos probable. Es en el núcleo de la historia de Jerusalén que realmente encontramos el secreto más oscuro del sionismo: el engaño.

     En los tiempos del Nuevo Testamentoese lugar (ahora ocupado por Al-Aqsa y el Monte del Templo) era una fortaleza romana y un campamento militar llamado la Fortaleza Antonia [6] (el Templo de Herodes estaba localizado unos pocos metros al Sur). Después del sitio de Jerusalén en 70 d.C., el Emperador Tito había demolido totalmente la ciudad y sus murallas, sobre todo el templo de Herodes y sus paredes. De esta manera, los fieles judíos que lloran en el muro occidental del así llamado Monte del Templo realmente están ofreciendo rezos a la muralla de un pagano Emperador romano.


     Se dice que la elevada roca central había sido usada como una plataforma para funciones públicas por los gobernadores y los prefectos romanos como Poncio Pilatos, quien la usó durante su juicio a Jesús. Por eso los cristianos construyeron una iglesia sobre ella en el tiempo de Constantino.

     El hecho de que las murallas de esa fortaleza tengan todavía aproximadamente 10.000 piedras en su construcción demuestra que aquéllas no eran las murallas alrededor del Templo. Como lo atestigua el historiador judío-romano del siglo I d.C. Titus Flavius Josephus, los romanos destrozaron cada pared y removieron cada piedra, no sólo del Templo sino también de sus muros. Esto no es una hipótesis sino un hecho histórico contundente, verificado por excavaciones arqueológicas y hallazgos (tres inscripciones honrando a los líderes romanos Vespasiano y Tito han sido encontradas bajo la muralla de la Fortaleza). Muchos eruditos bíblicos y arqueólogos [7] están completamente conscientes de este hecho, como la arqueóloga británica Kathleen Kenyon y el historiador israelí Benjamin Mazar.

[7] "Malentendidos acerca del Monte del Templo de Jerusalén" en http://editorial-streicher.blogspot.cl/2015/12/sobre-la-ubicacion-del-templo-judio.html

     Volvamos a nuestro rabino judío yemenita, Ka’ab al-Ahbaar. Contestando a la pregunta del califa Umar sobre el mejor punto en Palestina (Aelia) para construír una nueva mezquita, el astuto rabino señaló su dedo hacia una gran roca (ahora venerada en el santuario de la dorada Cúpula de la Roca dentro del recinto de Al-Aqsa).


     "Honorable Califa: esta roca, entre las ruinas de nuestro templo, es el lugar correcto para la nueva mezquita, ya que aquí es donde Mahoma salió en su viaje milagroso al cielo", contestó el rabino Ka’ab.

     Ahora bien: así es cómo todos los musulmanes en el mundo desde 637 d.C. llegaron a conocer y a honrar esa roca como una reliquia islámica, por medio del testimonio único y no verificado de un rabino judío yemenita (convertido en musulmán más tarde). Muchos teólogos musulmanes cuestionan el testimonio de Ka'ab, y la secta chiíta entera lo denuncia totalmente.

     El testimonio del astuto rabino realmente había conseguido dos cosas: 1) mantener vivo el engaño de la Septuaginta mediante la solidificación del concepto de Palestina como la tierra prometida y sagrada judía; y 2) conseguir que los musulmanes honraran el lugar como tal (los musulmanes estaban en aumento en ese entonces).


Visite la Verdadera Jerusalén

     Si realmente queremos encontrar la verdadera localización de Jerusalén entonces examinemos de nuevo lo que la Bibliahebrea dice sobre la conquista de David de la ciudad:

    «El rey y sus hombres marcharon hacia Jerusalén para atacar a los jebusitas, quienes vivían allí. Los jebusitas le dijeron a David: "No entrarás aquí; incluso los ciegos y los cojos pueden rechazarte". Ellos pensaron: "David no puede entrar aquí". Sin embargo, David capturó la fortaleza de Sión, que es la Ciudad de David» (2 Samuel 5:6-7).


     En estos versículos, el escriba judío dejó claro que para capturar "Jerusalén" David primero tenía que apoderarse de una fortaleza montañosa llamada "Sión" que estaba habitada por "jebusitas". En otras palabras, la verdadera Jerusalén (israelita) estaba muy cerca de una montaña llamada "Sión", donde una comunidad pagana local que tenía el nombre de "jebusitas" había morado allí en una fortaleza montañosa durante siglos.

     Pero, una vez más, el paisaje entero de Palestina nunca supo de ningún jebusita (a pesar de lo que se ha escrito en los distorsionados libros de Historia) ni ninguna Montaña / Monte Sión, que los arqueólogos sionistas han identificado hasta ahora en tres localizaciones diferentes [8] (típico de una narrativa fabricada). De hecho, todo el paisaje topográfico de la Jerusalén de hoy en día no tiene ninguna montaña en absoluto.

[8] https://en.wikipedia.org/wiki/Mount_Zion#The_three_different_locations

     Así es; la ciudad de Jerusalén, donde se supone que el TEMPLO será erigido por tercera vez, no tiene ningún MONTE sobre el cual construír. Se sabe que Jerusalén está establecida sobre dos colinas, pero no sobre alguna montaña. Lo que ha sido llamado como "monte" por la gente autóctona (palestinos), como el Jabel ez-Zeitoun [Monte de los Olivos, frente a Jerusalén], es simplemente lenguaje figurativo. Vea una imagen de Jerusalén y compruébelo usted mismo.

     Volvamos a Yemen, y específicamente a siete kilómetros al Sur de su capital, Sanaa. Fácilmente debemos encontrar la histórica ciudad de "David" donde habitaban los antiguos jebusitas / Jebus (yabositas / Yebus, en árabe) durante siglos en su segura fortaleza montañosa, conocida hoy como la fortaleza de Bait Baws (o Bait Bous, Casa de Yabus). También no muy lejos nos enfrentamos con la montaña Sión (parte de la línea de montañas Sarawat que se extiende a lo largo de la costa occidental de la Península Arábiga).


     Jerusalén (Deir Salem, en árabe) significa una ciudad de paz, o ciudad pacífica. Ya que los jebusitas / yabositas estaban bien protegidos contra incursiones tribales árabes (en virtud de su elevada y aislada fortaleza montañosa), ellos disfrutaron viviendo en una ciudad pacífica o Dar Salem / Jerusalén. Otra narrativa le atribuye su designación a Salem / Shalom, uno de los patriarcas judíos. De cualquier modo, espero que Bait Baws (la Jerusalén yemenita) logre sobrevivir al actual bombardeo de Yemen. Golpear sitios arqueológicos antiguos parece ser uno de los objetivos (secretos) de las guerras en curso en el Oriente Medio.

     Hay un refrán yemenita muy común que dice: "Cada yabosí / yabosita es un judío, y cada judío es un yabosí". Bait Bous siempre ha sido el foco para los judíos en Yemen durante cientos de años (si no miles). Las ruinas de la fortaleza yabosí / yabosita, ahora un sitio arqueológico yemenita, solían ser ricas en inscripciones antiguas yemeníes que documentaban la conquista davídica (en gran parte destruídas o robadas por quienquiera que tuviera interés en ocultar el verdadero origen de los israelitas y sus historias bíblicas).

     La fortaleza yabosita de Bait Baws había estado prosperando con una comunidad judía activa, así como muchas otras ciudades en Yemen, hasta 1949 cuando más de 49.000 judíos fueron (secretamente) transferidos a Israel por una flota de aviones estadounidenses y británicos en una de las más grandes operaciones de su clase conocida como "Magic Carpet" (Alfombra Voladora) [9].

[9] https://www.jewishvirtuallibrary.org/jsource/Immigration/carpet.html

     Más de 250.000 judíos de todo el mundo fueron transferidos a Israel en aquel mismo año. Todas aquellas masivas operaciones de transferencia eran parte del plan sionista internacional para inventar una nueva tierra judía con una historia alternativa y falsa (la que nos enseñan en nuestras escuelas). Huelga decir que para que funcionara el nuevo plan sionista, también una nueva y falsa Jerusalén (de la que seguimos sus noticias por televisión) tenía que haber sido dispuesta.

     El más espantoso de todos los engaños es el que que ha estado filtrándose, no detectado, en nuestra cultura y creencias durante más de dos mil años. Para comprender la escala completa del engaño judío que ha sido incrustado en la historia antigua de la Humanidad revise el libro del doctor Ashraf Ezzat "Egypt Knew No Pharaohs Nor Israelites"(Egipto No Conoció Faraones Ni Israelitas) [10].–

[10] https://ashraf62.wordpress.com/2015/03/11/4938/
http://www.veteranstoday.com/2015/05/30/egypt-knew-no-pharaoh-nor-moses-response/ y
http://www.veteranstoday.com/2015/04/17/the-real-exodus-end-of-israel/



Ashraf Ezzat - El Mesías Árabe

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     El divulgador de temas de la Historia antigua, particularmente del Cercano Oriente, señor Ashraf Ezzat, ofrece ahora en este artículo publicado hace dos meses y que presentamos traducido (ashraf62.wordpress.com), una serie de planteamientos que pertenecen al campo del revisionismo bíblico. Varias de sus hipótesis han sido planteadas por Kamal Salibi y otros investigadores similares: que las historias de los Patriarcas y el Éxodo transcurrieron en Arabia, que los israelitas tienen su origen en Yemen, que el Isa (Jesús) del Corán es distinto del que aparece en el Nuevo Testamento, que Pablo fue a instruírse a Arabia para componer su evangelio, y la profunda identidad de los israelitas antiguos con la cultura árabe ancestral. Agregamos este texto del señor Ezzat, junto con la entrada anterior, a los otros interesantes que de él hemos presentado.


EL MESÍAS ÁRABE
por Ashraf Ezzat
19 de Octubre de 2015



"En el núcleo de toda esta cultura Mesiánica está la antigua tradición árabe-tribal íntimamente entretejida con mitos paganos".


     ¿Se ha preguntado usted alguna vez usted por qué el así llamado "Oriente Medio" es el punto más volátil del mundo? Además, ¿por qué el mundo árabe es el semillero del mundo para el extremismo y la violencia?.

     ¿Por qué el Oriente Medio, con sus comunidades musulmanas, cristianas y judías, siempre ha estado sumergido en un estado de "conflicto perpetuo" que es obstinadamente irresoluble? Y no me refiero sólo a los últimos 50 ó 70 años (desde que el Estado judío de Israel fue astutamente establecido) sino a una Era que se remonta más atrás en el tiempo.

     Mi examen de este malestar perpetuo se remonta al tiempo de las Cruzadas, al surgimiento del Islam con el subsecuente conflicto entre chiítas y sunitas seguido de décadas de incursiones despiadadas al Este y al Oeste de Arabia, a la aparición (y politización) de la historia de Jesucristo con el consiguiente martirio y división entre la Iglesia del Este y la occidental, y aún atrás al supuesto Cautiverio babilónico y al célebre cuento antiguo del Éxodo.

     ¿Por qué dicha área está (y siempre ha estado) en tal desastre?.

     Realmente el mundo árabe, identificado en el mapa mundial moderno como el Oriente Medio y en los libros de Historia como el antiguo Cercano Oriente, siempre ha estado en tal caos debido al síndrome del "Mesías".

     Y no se equivoque acerca de su origen, ya que se trata simplemente de un producto judío y árabe. Lo que primero comenzó como una tradición tribal árabe, durante los siglos evolucionó hacia una religión talmúdica, la ideología de la cual (basada en el concepto de Mesías) ha logrado infiltrarse en y difamar a la mayor parte de los sistemas de creencias y culturas del mundo con su extremismo tribal.

    Algunos podrían sostener que la confusión y el malestar en el mundo árabe son tal como en cualquier otra parte del mundo, donde la violencia y los repetidos conflictos y guerras son sólo una parte integral de la vida misma. Pero yo argumentaría de manera diferente porque en cualquier otra parte los diferentes conflictos por lo general surgen debido a motivos diferentes, pero en nuestro Oriente Medio (mundo árabe) el repetido malestar y conflicto son siempre debidos a la misma razón: el "síndrome del Mesías". Tal vez por eso se espera que el escenario del final del mundo se despliegue en este miserable pedazo de tierra, como lo ha pronosticado la negra literatura mesiánica (apocalíptica).

     Incluso cuando algunos períodos de relativa paz y prosperidad interrumpan el ciclo del malestar del Medio Oriente, la ideología tribal responsable de la perturbación y la violencia se mantiene prosperando y ebullendo (bajo la superficie) hasta que las cosas se calientan y alcanzan otra erupción de aquel volcán invisible del Mesías.

     Incluso cuando las cosas parecen una conquista completamente imperialista y una explotación (política) internacional del área, a menudo son llevadas a cabo explícitamente (como en las Cruzadas medievales) o implícitamente (como en el caso de la última invasión estadounidense de Iraq) debido a la mórbida ideología del Mesías.

     Mientras la máquina militar de George W. Bush estaba literalmente demoliendo a la nación iraquí y su herencia histórica, el ex-Presidente estadounidense estaba completamente eufórico (usted puede notarlo por la constante sonrisa idiota en la cara del sujeto) y su conciencia parecía aliviada ya que él simplemente creía que la destrucción que siguió y sumergió al Oriente Medio entero (hasta este actual momento) era el preludio necesario (inevitable) para la segunda venida de su Mesías [1]. Bien; así de peligrosa, caótica y aniquiladora ha llegado a ser esta cultura del Mesías [2].

[1] http://www.christianpost.com/news/george-w-bush-administration-was-trying-to-cause-end-of-the-world-with-apocalyptic-christians-claims-msnbc-host-rachel-maddow-108556/
[2] http://mondoweiss.net/2013/11/george-christian-conversion


El Mesías: La Verdadera Natividad

     Contrariamente a lo que los orientalistas e investigadores occidentales han creído durante tanto tiempo, el Mesías no tiene absolutamente nada que ver con Jesucristo, o con la espiritualidad occidental en realidad. No tiene nada que ver ni con el principio ni con el final de nuestros tiempos.

     En el núcleo de esta cultura mesiánica entera está la antigua tradición árabe tribal íntimamente entretejida con mitos paganos. Durante los siglos anteriores al nacimiento del cristianismo diversos cultos conocidos como las "Religiones de Misterios" [3] se habían extendido por todas partes del mundo pagano.

[3] http://www.earlychristianwritings.com/jesus/timothyfrekeandpetergandy.html

     En el centro de esos cultos de Misterios estaba una historia acerca de un hombre-dios que moría y resucitaba, que era conocido por muchos nombres diferentes en muchas culturas diferentes.

     En Egipto, donde se originaron los Misterios, él era conocido como Osiris; en Grecia, como Dionisio, en Siria como Adonis [4], en Italia como Baco y en Persia como Mitra. Esos mitos paganos fueron reescritos y entretejidos con el tema del Mesías árabe para dar origen al Evangelio de Jesucristo. Sin aquella mezcla sutil la cultura mesiánica árabe no podía haber logrado infiltrarse y echar raíces en la psique y la espiritualidad occidental. Pero de todos modos el tema principal era árabe.

[4] http://phoenicia.org/adonis.html

     ¿Por qué cree usted que el apóstol Pablo realmente se dirigió a Arabia y permaneció allí durante tres largos años antes de que él se atreviera a embarcarse en sus viajes misioneros (en el mundo romano-occidental)?.

     "Pero cuando a Dios, quien me apartó desde el vientre de mi madre y me llamó por su gracia, le complació revelar a su hijo en mí, de modo que yo pudiera ser su heraldo entre los Gentiles, inmediatamente no consulté con ningún hombre, ni tampoco me acerqué a Jerusalén a aquellos que eran apóstoles antes que yo, sino que me dirigí a Arabia, y luego retorné de nuevo a Damasco" (Gálatas1:15-17).

     Pablo no viajó a Arabia en una expedición de caza ni para meditar. El tipo culto y multilingüe sabía que Arabia era la tierra (nativa) cultural y geográfica de no sólo el judaísmo sino (por extraño que pueda parecer) de la doctrina entera de los "nazarenos" o de "Yeshua Natzri", o "Eissa al-Nasrani" en árabe (más tarde romanizado como Jesucristo).

     Según su propia investigación, Pablo sabía demasiado bien que el hombre que cruzó el río Jordán (desde el lado Este) y luego afirmó ser el rey de los judíos en Jerusalén (antes de que él fuera muerto), había venido de Arabia (y no de Palestina).

    Pablo sabía que la verdad acerca del verdadero Jesús / Eissa (en árabe) debía ser averiguada en Arabia y no consultando con pescadores analfabetos que se llamaban a sí mismos "apóstoles".

     En efecto, fue en la antigua Arabia donde Pablo recolectó los fragmentos y piezas de su evangelio. Los historiadores árabes clásicos mencionaban un antiguo y único Evangelio de los Nazarenos mucho antes de la aparición de la historia de Cristo en la provincia romana de Palestina, un tema que también es reiterado en el Corán.

     La palabra "Mesías" es de hecho una transcripción de la palabra judía/árabe "Mashiach / Mashaiakh / sheik"que se remonta a los tiempos remotos de la antigua Arabia.

     Realmente, la palabra "Mesías / Mashiach" (sea ungido o no y con o sin un templo construído) tiene más que ver con el judaísmo y el Islam (como dos religiones de la Arabia antigua y medieval y de Yemen) que con el cristianismo (como una religión compuesta e híbrida que fue adaptada a partir del viejo tema judío del Mashiach, pero con una interpretación pagana greco-romana)


Historia Bíblica: Premisa Defectuosa

     En mi reciente libro "Egipto No Conoció Faraones Ni Israelitas"he dado detalles de las bases culturales y geográficas comunes que comparten tanto el Islam como el judaísmo.

     Rastreando las raíces comunes (árabes) del judaísmo y del Islam, hemos llegado a la conclusión segura (apoyada por conclusiones basadas en evidencias) de que las lenguas hebrea y árabe son dos dialectos de la misma lengua árabe antigua, y de que el judaísmo y el Islam son el producto de una y la misma cultura y geografía árabe (pero en tiempos diferentes).

     Ésta es una premisa muy crucial (casi revolucionaria para cualquier estudioso occidental de la historia bíblica) que nos ayudará a desenmarañar la complejidad de este síndrome del Mesías. Éste es un punto clave porque arroja luz sobre una pregunta largamente descuidada: ¿dónde se originó primeramente el judaísmo?.

     En otras palabras, ¿cuál es la cultura que produjo esta famosa fe de Moisés y sus tablas de piedra?. ¿Dónde terminaríamos si remontáramos las raíces de la fe judeo-cristiana? La mayoría, si no todos, de los seguidores así como los eruditos y el clero de la supuesta fe judeo-cristiana responderían al instante y dirían sin la menor duda: Palestina.

     Pero adivine qué: todos ellos están terriblemente equivocados, si no completamente engañados. Ellos no sólo se equivocan sobre Palestina como la patria del judaísmo sino que también sobre la vinculación del judaísmo con el cristianismo como un paquete religioso.

     El judaísmo no está ni debería estar relacionado con el cristianismo (occidental), temática y filosóficamente hablando. El largo vínculo entre las dos religiones es sólo política en su naturaleza, gracias a los romanos y su inteligente tentativa de mitigar la militarización y violencia de los árabes y judíos tribales, muchos de los cuales ya habían emigrado desde Yemen a Palestina un par de siglos antes del cuento de Cristo.

     La única manera en que parecía posible controlar aquella antigua marea del judaísmo militante (algo como la actual militancia islámica, que comparte con el judaísmo la misma cultura tribal árabe) era disolverlo en una fe totalmente nueva (pacífica y tolerante) haciendo uso de y actualizando el "síndrome del Mesías"árabe-judío. ¿Por qué piensa usted que realmente los Evangelios fueron escritos en griego y no en arameo, la lengua usada por Jesús y sus discípulos? Y tenga en cuenta que el arameo [5] no es sino otro dialecto de la lengua árabe (no sea engañado por la clasificación sionista de aquellas lenguas como semíticas).

[5] https://en.wikipedia.org/wiki/Language_of_Jesus

     De esa manera, los judíos vieron cumplida su profecía, pero esta vez su nuevo Mashiach / Mesías fue romanizado (por eso los judíos tienen problemas para creer en Jesucristo). El nuevo Mesías, al contrario de un legado largo y antiguo de militancia (tribal) e intolerancia judía, era inesperadamente pacífico y aceptador de todos sus hijos (no sólo los elegidos) en su reino. Pero había una dificultad aquí: este cambio de paradigma no ocurrió por sí mismo.


La BibliaÁrabe

     Si usted reflexionara sobre las semejanzas fonéticas entre las dos lenguas usted estaría asombrado (quizá por primera vez) de cómo el hebreo es la lengua más cercana al idioma árabe. En la pronunciación árabe, "hebreo" se dice "Abri",mientras que "árabe" es pronunciado "Arabi", del mismo modo que "Eloh"y "Alá"son hebreo y árabe para "Dios".

     Así, dentro de esta pequeña escala y diferencia (fonética) casi insignificante entre "Abri" y "Arabi"y entre "Eloh"y "Alá", el trasfondo cultural ÁRABE común y compartido tanto del judaísmo como del Islam podría y realmente deber ser nuestra guía al examinar la historicidad de las historias bíblicas/israelitas (incluyendo la de Jesucristo), ya que en esencia aquí es donde la escuela occidental de historia bíblica se ha equivocado.

     Esto es principalmente por qué los orientalistas e historiadores occidentales han dejado hasta ahora de corroborar arqueológicamente las historias bíblicas sucedidas donde su distorsionada Bibliadijo que ellas sucedieron: en Palestina. Su completo fracaso es debido a su defectuosa premisa, y de allí se siguió su equivocada búsqueda.

     La ideología cristiana está basada en la distorsionada narrativa de que el Faraón era el rey del antiguo Egipto, que Moisés fue criado en una corte egipcia, y que el épico Éxodo salió desde el reino (pagano) de Egipto hacia la nueva Tierra Prometida (el reino) del pueblo justo y elegido por Dios en Palestina/Canaán. Está basada en el error de que Moisés recibió sus tablillas en el egipcio monte Sinaí. Pero en la época en que la historia de Cristo se estaba desarrollando pareció que el apóstol Pablo era el único que realmente conocía la verdad (después de que él se había zambullido en la antigua Arabia).

     "Abraham tuvo dos hijos [Ismael e Isaac], uno de la mujer esclava [Agar], otro de la libre [Sara]. Pero el hijo de la mujer esclava nació según la carne; el de la mujer libre, por medio de la promesa, lo cual es una alegoría, ya que estas dos mujeres son dos pactos. Agar es el pacto del monte Sinaí, nacido para esclavitud, porque Agar es Sinaí, una montaña que está en Arabia y que corresponde a la actual Jerusalén, la cual está en la esclavitud con sus hijos. Pero la Jerusalén de arriba, que es la madre de todos nosotros, es libre" (Gálatas 4:22-26).

     La verdad (como está revelada en nuestro libro) es que Moisés era un pastor de ovejas árabe, y él y un par de cientos de su tribu (y no los miles que usted miraría en una película sionista de Hollywood) trabajaron como esclavos en un pequeño pueblo en el Sur de la antigua Arabia llamado "Mizraím". El hombre que gobernaba sobre ese pequeño pueblo de Mizraím era llamado o designado como "Faraón".

     Cuando Moisés mató a uno de las guardias de Faraón, él y su gente huyeron de Mizraím y se dirigieron de vuelta a su tierra tribal en Yemen del Norte, una extensión de tierra estéril conocida como Asir. Por eso esta tribu de esclavos árabes fue llamada Asir-elitas, o mejor conocida como los Israelitas. Otra vez deberíamos detenernos aquí para señalar un par de nuevas conclusiones (cambiadoras de paradigma).

     En primer lugar está el hecho de que el judaísmo es un culto tribal genuinamente árabe que se originó primeramente en Yemen del Norte, y de aquí que la creencia central del cristianismo esté construída sobre una antigua cultura tribal árabe, la misma que produjo al Islam y también sobre la misma literatura/tradición que ayudó a formar grupos radicales como Al-Qaeda y, por extraño que pueda parecer, el Estado Islámico en Iraq y el Levante (ISIL).

     En segundo lugar, la historia bíblica y la arqueología están literalmente en el limbo porque todas las historias bíblicas están ambientadas en una falsa geografía. La manipulación de los nombres de lugares de las historias bíblicas originales fue parte de un engaño a gran escala llevado a cabo por 70 escribas judíos en el siglo III a.C. en la legendaria Biblioteca de Alejandría en lo que llegó a ser conocido como la "Biblia Septuaginta" (AT). Y si tenemos en cuenta que la griega Biblia Septuaginta es la "única fuente" para todas las traducciones de la actual Biblia en todo el mundo, podríamos llegar a comprender la escala completa del engaño (judío) que aquellos 70 escribas realizaron sobre el mundo.

     Si debiésemos visitar de nuevo el antiguo Cercano Oriente y reexaminar sus historias a través de un lente no-judío, sorprendentemente descubriríamos (como lo hicimos en nuestra investigación) que Egipto nunca fue la tierra del Éxodo de los israelitas, ni Palestina su Tierra Prometida.

     Palestina fue ocupada por la evidente inmoralidad política occidental, que no hubiera sido posible sin la distorsión judía de la historia del antiguo Cercano Oriente.

     Lo que hace de este conflicto entero algo irresoluble (como ya mencionamos) es que generación tras generación (no sólo de judíos sino también de musulmanes y cristianos) ha estado comprando la falsa historia de Palestina como la Tierra Prometida judía durante los pasados dos mil años. Podríamos tener una tercera Intifada (como la que actualmente se está gestando), y podríamos tener incluso treinta más. Tendremos otro Acuerdo de Oslo, o incluso cien negociaciones de paz, pero no nos equivoquemos: la grave situación palestina no será resuelta a menos que expongamos el engaño y corrijamos la historia antigua de la región.

     La verdadera historia antigua es que Egipto no conoció ni a Faraón ni a Moisés. Y para corregir la narrativa histórica antigua tenemos que impresionarlo a usted con otra revelación, la de que la Palestina antigua nunca presenció ninguna de las historias bíblicas. Todas las historias israelitas (sean ficticias o no) ocurrieron en la antigua Arabia y en el Norte de Yemen, todas ellas, desde el diluvio de Noé y la venta de José como un esclavo hasta el Éxodo de Moisés y el supuesto reino de David y Salomón.

     Aquellos cuentos que Occidente ha conocido hace tanto tiempo como "las historias de los Patriarcas" son sólo los cuentos populares de la antigua Arabia.

    Otro asombroso hallazgo es que el área a la cual todos los eruditos bíblicos e historiadores se refieren como Canaán nunca existió realmente. Palestina nunca fue llamada Canaán en ningún punto en la Historia antigua; dicha designación es una mera parodia/distorsión bíblica de la geografía real del Levante, y específicamente de la Palestina antigua. El Canaán que es continuamente reiterado en la Biblia hebrea es realmente la tierra de la tribu árabe de los Banu Canaan y Banu Kinanah [6] (como lo muestro en mi libro con mapas).

[6] https://en.wikipedia.org/wiki/Banu_Kinanah


El Mesías: La Raíz Cultural

     De acuerdo a la antigua tradición tribal árabe, Moisés era un Mashiach [Mesías]. Pero la definición árabe del Mashiaches tan diferente de la romana, que ha llegado a determinar cómo nosotros (principalmente los occidentales) vemos y definimos la palabra "Mesías" hoy.

     El título árabe/judío "Mashiach"no significa nada más que un líder tribal (de guerra). Punto.Ninguna connotación espiritual anexa al término, ningún ungimiento, ninguna divinidad, ningún templo y ninguna salvación. La agregación de aquellas exigencias sólo ocurrió después de la helenización del antiguo culto judío árabe.

     Dado que la comunidad árabe antigua era predominantemente tribal (y todavía lo es hasta este mismo momento), por lo tanto la cultura tribal de conquista e incursiones (como las realizadas hoy por ISIL) era la estrategia principal para conseguir el dominio político. Esto explica por qué la Biblia hebrea está cargada de cuentos de guerras e incursiones tribales, y aquello también de alguna manera explica la herencia histórica y cultural que impulsa a un grupo militante como ISIL.

     Entonces, siempre que alguna tribu árabe (no sólo los Asir-elitas) era sojuzgada por otra tribu (más poderosa), la gente de la tribu soñaba con un nuevo líder tribal, un Mashiach que los libraría de su miseria y sometimiento.

     En ese sentido, David fue un Mashiach, un líder tribal, un hombre que conduciría a sus guerreros tribales en una de las despiadadas incursiones de la antigua Arabia durante las cuales no regía ninguna conducta moral excepto la supervivencia y el dominio de la tribu a cualquier costo, incluso si eso significaba la exterminación de la otra tribu y la esclavización de sus mujeres y niños (a lo que el mundo civilizado ahora se refiere como genocidio).

     Si bien la sensibilidad del (avanzado) mundo occidental entero se ve ofendida ahora por las salvajes incursiones emprendidas por ISIL y su nuevo Califa/Mashiach/sheikh, por otra parte la sensibilidad cristiana de Occidente está totalmente de acuerdo con muchas de las incursiones tribales genocidas (judías) de las que su Biblia está atestada. Todas aquellas sangrientas incursiones fueron conducidas por los Mashiachs/Mesías judíos.

     ¿Puede usted ver la contradicción aquí? Pero más importante aún, ¿podría usted comprender cómo y cuándo comenzó esta paradoja que enajenó al mundo occidental de sus propios valores culturales inherentes?.

     Todo este asunto sucedió cuando nosotros (Occidente y Oriente) renunciamos a nuestra propia antigua sabiduría y conocimiento y en vez de ello nos suscribimos a la cultura del Mashiach/Mesías, un producto de la Arabia antigua. Y puesto que la cultura árabe antigua siempre ha sido tribal, el intolerante y extremadamente violento Pablo el apóstol terminó su larga estadía allí después de que él aparentemente había alcanzado dos conclusiones decisivas. Y ésta es la dificultad que mencionamos antes.

     Primero, Pablo le dio la espalda (eternamente) a la antigua Arabia, ya que él sabía que si no lo hacía, él se convertiría otra vez en el (violento e intolerante) fanático judío que había sido una vez antes de que él fuera cautivado/hipnotizado por la historia del hijo de Dios. Segundo, Pablo no podía ver a su Mashiach/Mesías a través del lente tribal y hermético de Arabia; en vez de eso, él conservó la historia y el tema árabe original del Mashiach/Mesías, pero lo nutrió y lo moldeó con la cultura romana de diversidad y tolerancia (que no duró mucho tiempo después).

     Al hacer eso, Pablo logró convertir lo que parecía un culto árabe/judío irremediablemente violento e inmoderado, en una fe/mensaje universal que podía apelar a todos los hijos de Dios y no sólo a los circuncidados.

     Pero a pesar de todo el mensaje de Pablo se basaba principalmente en el concepto árabe del Mashiach/Mesías.

     El lado peligroso de esta doctrina del Meshiach/Mesías es que está basada en el sentido tribal árabe de inseguridad y vulnerabilidad (debido a una cultura de militancia y constantes invasiones). Esta inseguridad ha llevado siempre a los judíos árabes siempre que ellos eran sojuzgados (mediante incursiones tribales árabes internas o incluso por parte de potencias externas como los egipcios o los babilónicos) a racionalizar su subyugación como un castigo divino por su fe y sus prácticas imperfectas (como en el caso del Cautiverio babilónico).

     De este modo, los seguidores (de la fe mesiánica) siempre se encuentran en un estado perpetuo de incertidumbre con respecto a su fe, ya que simplemente cada mala pasada en sus asuntos mundanos es traducida o racionalizada como una fe imperfecta (corrupta) que los había apartado de los verdaderos caminos de Dios, un sentido de pecado profundamente atrincherado y manifestado frecuentemente en el método fundamentalista y dogmático de los sionistas cristianos [7], los cristianos evangélicos, los musulmanes salafistas, la secta de la Hermandad Musulmana, la secta islamista takfiri [8], los judíos haredíes [9] y por supuesto la secta islámica chiíta y la secta wahabita.

[7] http://zionism-israel.com/dic/Christian_Zionism.htm
[8] https: // en.wikipedia.org/wiki/Takfiri
[9] https://es.wikipedia.org/wiki/Jared%C3%AD

     Ahí es cuando el concepto de Mashiach/Mesías/Sheikhsiempre entra en juego. En tiempos de desafío y controversia, los creyentes (mesiánicos), especialmente los ortodoxos, empapados de la incertidumbre de la rectitud de su fe y su conducta actuales, comienzan a soñar con otro Mashiach/Mesías/Jeque que podría conducirlos de vuelta al camino justo (o más a menudo al propio camino de él).

     Y en el proceso de retornar al supuesto justo camino de Dios, surgen más Mashiachs/Sheikhs(llámense Joseph Smith de los mormones o el califa Abu Bakr al-Baghdadi de ISIL), y el ciclo de dogmatismo, violencia y extremismo se prolonga indefinidamente.–






Sobre Noticias de las Tribus Perdidas

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     Especializado en contar historias, en su mayoría falsas, el funesto personaje que se llamó Simón Wiesenthal (1908-2005), mitómano patológico que cobró notoriedad mundial después de la Segunda Guerra como "cazador" de gente que colaboró con el régimen del héroe Adolf Hitler, extrañamente publicó en 1972 un libro de temática histórica titulado Segel der Hoffnung. Die geheime Mission des Christoph Columbus (Velas de Esperanza), que fue publicado en castellano el año siguiente como Operación Nuevo Mundo. La Misión Secreta de Cristóbal Colón, del cual presentamos ahora su capítulo segundo. Lo hacemos porque aquí da diversas noticias que se manejaban desde la Edad Media en adelante acerca de la existencia de judíos dispersos por el mundo, entre ellas la del reino de los jázaros y del reino del famoso Preste Juan, además de las que mencionó Marco Polo. Toda esa información era manejada por Colón, de quien Wiesenthal asegura en su libro que pertenecía a la tribu judía. Se trata entonces este capítulo de un resumen pedagógico de ciertos relatos e informes que hicieron soñar a muchos en tiempos anteriores, durante la intoxicación por el judaísmo bíblico.




II. LA ESPERANZA


     En las últimas décadas del siglo XV, las de los grandes viajes de descubrimiento, entró en contacto con los judíos españoles un aventurero, Cristóbal Colón, que conocía muy bien sus nostalgias y sus creencias: un hombre que afirmaba poder llegar a las Indias por el camino de Occidente, surcando la mar, y que buscaba apoyo para tal empresa. Las Indias... Este nombre tenía entonces una resonancia mágica, y no sólo para los mercaderes hebreos. Evocaba la posibilidad de trabar relación con los habitantes de aquel remoto país. Mas ¿quiénes eran ésos para los judíos, y aun para algunos círculos no judíos?.

     El patriarca Jacob tuvo doce hijos: Rubén, Simeón, Leví, Judá, Isacar, Zabulón, Dan, Neftalí, Gad, Aser, José y Benjamín. Sus respectivos descendientes constituyeron las tribus de Israel, asentadas en territorios de Palestina claramente delimitados unos de otros. Las vicisitudes de la historia hebrea llevaron a la formación de dos reinos: el de Judá, al Sur, compuesto tan sólo de las tribus de Judá y de Benjamín, y el de Israel, al Norte, mucho mayor e integrado por las restantes diez tribus.

     Unos setecientos años antes del inicio de la Era cristiana, los reyes asirios Teglatfalasar III y Salmanasar V desencadenaron contra el reino de Israel una asoladora campaña de conquista. Tras ocuparlo por entero, a excepción de la capital, Samaria, deportaron a sus habitantes a Babilonia. A la muerte de Salmanasar, su sucesor Sargón II puso sitio a Samaria, que le resistió por espacio de tres años. Los supervivientes fueron también deportados. En el Libro de los Reyes se refiere que Sargón los «llevó cautivos a Asiria, obligándolos a vivir en Galac y Jabor, junto al río Gozán, y en las ciudades de la Media». Se trata de lejanas provincias orientales del Imperio asirio. Las inscripciones cuneiformes conservadas en monumentos del reinado de Sargón II nos dan cifras parciales. Solamente de la ciudad de Samaría cayeron en cautiverio 27.290 personas. El número total de los deportados del reino de las diez tribus no se conoce, pero, a juzgar por datos como el anterior, debió ser considerablemente crecido.

     El territorio del ex-reino de Israel fue repoblado con asirios, babilónicos y arameos, que no tardaron en mezclarse con los escasos restos de la población autóctona, tomando muchos de sus ritos y costumbres. De ahí nació un nuevo pueblo, el de los samaritanos, que aún hoy viven, en número muy reducido, en la misma región.

     Por obra de los reyes asirios, pues, vinieron a regresar los más de los israelitas a su tierra de origen, Caldea, de donde, en parte, irían corriéndose aún más hacia el Este. Unos acabaron asimilándose a los pobladores locales, otros se mantuvieron fieles a la ley de Moisés.

     También el reino de Judá tuvo un final trágico. Conquistado por Nabucodonosor, sus habitantes fueron asimismo deportados a la región comprendida entre el Tigris y el Éufrates. Pero 150 años más tarde, en 537 a.C., pudieron volver a Palestina. Con ellos se repatriaron los pocos israelitas que habían perseverado en su fe.

     Todos los judíos que se hallan hoy diseminados por el mundo —y también los de España en la Edad Media— proceden de las dos tribus del Sur. Las otras diez tribus parecen haberse esfumado en el aire. Se han perdido para el judaísmo.

     Los judíos nunca han vivido sin patria. La llevan consigo dondequiera que estén, por miles de kilómetros y años que los separen de Palestina. Los preceptos y preces del judaísmo se la recuerdan día tras día y alimentan su esperanza de regresar a la Tierra de Promisión. Tampoco han olvidado jamás a sus hermanos de las otras diez tribus, recuerdo que fue particularmente vivo a fines del siglo XV, cuando las persecuciones de la Inquisición. En aquellos años de prueba se aferraban a cualquier rumor, a cualquier habladuría, a cualquier leyenda, por inverosímil que fuese. No tenían ningún interés en discernir lo verdadero de lo falso, lo real de lo quimérico. Necesitaban ilusiones, aunque las supieran tales, para que no pereciesen sus almas. De ahí que se dieran entonces como nunca a pensar en las diez tribus perdidas. Quizá llegara pronto la hora en que, emergiendo de las sombras de la Historia, se darían a conocer a sus hermanos perseguidos para acogerlos a su lado, para abrirles la puerta de países donde ya no serían huéspedes de paso sino condueños. Un pueblo amenazado y sin patria como era el de los judíos mira anheloso a lo lejos, a tierras de las que apenas sabe nada, pero que precisamente por ello mismo les despiertan las más vivas esperanzas. Tal vez habitaran allá los israelitas deportados tras la destrucción del primer templo.

     Las partes remotas del incompleto mundo medieval no se conocían sino por mapas imprecisos y por los relatos de marineros y mercaderes en los puertos, quienes contaban que en Oriente vivían hebreos que no sólo eran libres, sino que incluso pertenecían a las clases privilegiadas o regían territorios. La noticia de la existencia de principados hebreos caló tanto en los ánimos, que ha seguido dando pie a especulaciones hasta tiempos recientes.

    Quien se ve abocado a la emigración hace memoria de qué parientes tiene en el extranjero que puedan ayudarlo. Es un reflejo no específico de los judíos sino común a los emigrantes de todas las naciones y de todos los tiempos. Pero los judíos, que desde hace dos mil años, o están para huír de alguna parte, o acaban de llegar fugitivos a otra, lo poseen en grado sumo. Todo hombre perseguido necesita forjarse ilusiones, y cuanto más desesperada sea su situación actual, tanto más ciegamente esperará que un día llegarán a convertirse en realidad.

     Advirtamos, por otra parte, que las cábalas sobre los habitantes de países lejanos no siempre eran pura invención. A menudo se trataba de leyendas difundidas por prestigiosos sabios y rabinos, atentos a mantener viva la llama de la esperanza en sus comunidades. La de los reinos fundados en tal o cual lugar del vasto mundo por las diez tribus perdidas fue quizá la que caló más hondo. Dónde terminaron asentándose verdaderamente las tribus israelitas errantes —si en los desiertos de Arabia, si en la India, si en la China o más allá aún— sigue siendo todavía hoy un enigma histórico, pese a los esfuerzos seculares de un sinfín de investigadores por esclarecerlo, reflejados en los consiguientes escritos.

     Recientemente, cuando Israel existía ya como Estado, han ido al mismo judíos de Cochin, región de la India, los Bnei Israel («hijos de Israel»), y se han obtenido informaciones sobre los judíos amarillos de la China, minúsculas comunidades que algunos han considerado como los últimos restos de las diez tribus israelitas. Otros investigadores han sostenido que de Asia, cruzando el mar de Bering, pasaron en parte a Alaska, y a partir de allí se diseminaron por América del Norte, de modo que se habrían aposentado ya en América mucho antes de que Colón la descubriera. Volveremos sobre esta cuestión más adelante.

     Por desgracia, no se conservan suficientes documentos para poder demostrar, sin lagunas, la añoranza de las dos tribus de Judá por las diez desaparecidas. Los primeros testimonios que poseemos se remontan al siglo IX. Pocas dudas caben, sin embargo, acerca del interés que existía por los hermanos perdidos y de ciertas tentativas hechas para encontrarlos —que podemos documentar a partir del siglo IX—, y que descansaban ya entonces en una tradición plurisecular.

     Detengámonos un poco en esa cuestión; por una parte, porque los detalles de la búsqueda de las tribus israelitas son hoy algo poco menos que desconocido, y, sobre todo, porque tuvo que ver, a mi juicio, con las circunstancias que rodearon el descubrimiento del Nuevo Mundo. Para probarlo, he de exponer ante todo qué sabían y pensaban en el siglo XV los judíos y marranos acerca de las diez tribus de Israel, y qué significaba para ellos su descubrimiento.

     Desde la expulsión de Palestina hasta el siglo IX, se tienen muy pocos datos sobre la vida de los judíos. En contraste con los tiempos de Cristo y precedentes, no nos ha llegado de aquel período ninguna crónica del judaísmo. Podemos estar ciertos, sin embargo, de que la idea de la existencia de territorios israelitas estuvo constantemente en el ánimo de los judíos desde la misma Diáspora, y así mismo de que ya antes del siglo IX hubo viajeros judíos que informaron oralmente y por escrito de sus aventuras, alimentando así la fe y la esperanza y las ilusiones de sus correligionarios.

     Pero vayamos a nuestro tema: las creencias de los judíos españoles del siglo XV. No interesa aquí someterlas a crítica para averiguar en qué medida se fundaban en hechos comprobables. Tampoco se trata de establecer hasta qué punto merecen crédito los testimonios y escritos que les dieron pábulo. Importa tan sólo subrayar que, para el espacio de tiempo comprendido entre los siglos IX y XV, las especulaciones sobre las tribus de Israel están sólidamente documentadas. Menudearon tanto —incluso entre la población cristiana—, que se acabó por creer a pies juntillas en la realidad de dichos territorios hebreos.

     La sensacióndel siglo IX, para decirlo a la manera actual, fue la llegada a España de un hombre que afirmaba llamarse Eldad had-Dani y pertenecer a la tribu de Dan, o sea, a una de las diez tribus perdidas. En las obras históricas se le conoce por Eldad el Danita. Los judíos españoles vieron en él un enviado de lejanas tierras que venía a informarse sobre las tribus de Judá. Al parecer, había estado antes en Egipto, en África del Norte y en Marruecos, y probablemente también en Francia y en Italia. Las noticias que trajo consigo ocuparon el primer plano de la actualidad por espacio de décadas. Eldad es uno de los hebreos más enigmáticos de toda la Edad Media. Fue él, sin duda alguna, quien dio nuevo impulso a las cabalas y fantasías de los judíos del área mediterránea. Lo que contaba parecía verosímil. Las preguntas de los sabios, por arduas que fuesen, nunca lo ponían en dificultades. Eso sí, sus informaciones geográficas son tan escasas como las de los mapas de entonces.

     Según las mismas, las tribus de Dan, Neftalí, Gad y Aser habrían fundado un reino llamado Hawila más allá de los grandes ríos de Abisinia. Las otras seis habrían permanecido en Asia: la de Isacar, dijo, paraba cerca de Persia, y la de Zabulón en las sierras de Paran, desde donde iba y venía, a lo nómada, por las llanuras del Éufrates; la de Rubén, dada al bandidaje, hacía inseguro el camino de La Meca a Bagdad; la de Efraín habitaba en las montañas de Nejd, no lejos de La Meca; la de Simeón y la mitad de la de Manases, en el país de Kardim. El Danita mencionó aún el reino de los jázaros, e indicó algunas distancias; el viaje de Jerusalén a Kardim, por ejemplo, duraba seis meses.

     Tuvo que satisfacer además la curiosidad de los rabinos y escribas acerca de otro extremo: qué ritos y hábitos religiosos mantenían las tribus dadas por perdidas. De cuestiones raciales, en cambio, no se habló en absoluto. Lo único que interesaba a los judíos de aquel tiempo era la perseverancia en la ley de Moisés.

     Las revelaciones de Eldad el Danita ocupaban todavía a los eruditos judíos en la segunda mitad del siglo XIX. Claro está, éstos pudieron considerarlas de un modo más crítico que los de la Edad Media, pues disponían de muchas más fuentes documentales con que confrontarlas. Pero a nosotros no nos importa el juicio de los modernos sino el de aquellos siglos oscuros. Si al principio pocos consignaron su opinión —así Abraham ibn-Esra—, después fue apareciendo sobre el tema una abundante literatura. Con el relato de sus experiencias, el Danita había tocado las fibras más sensibles de los judíos. De ahí que los estudiosos tuvieran tanto afán por aquilatarlas. Pues bien, ni los más escépticos lo catalogaron como un vulgar charlatán. Y no es de extrañar: los propios investigadores científicos del siglo pasado llegaron a la conclusión de que el Danita había estado de veras en contacto con sectas hebreas existentes aún a la sazón en la Arabia meridional, en Abisinia y en otras partes de Asia y de África.

     Los ritos por él descritos han persistido hasta hoy en el seno de una secta hebrea de Etiopía, la de los falachás. Cuando estuvo allí el Danita, los falachás eran la tribu dirigente del reino de Gondar. La hasta hace poco dinastía etíope tiene su origen en el enlace del rey Salomón y la reina de Saba, y el negus Negesti, el Emperador, lleva el título de «León de Judá». Inmigrantes hebreos y árabes llegaron en tiempos antiguos a la meseta de Etiopía a través del mar Rojo y se establecieron en ella. Los colonos hebreos perdieron luego el contacto con el judaísmo, de modo que no participaron en absoluto en el desarrollo de sus corrientes. Poco a poco fueron formándose sectas cristiano-judaicas con elementos comunes a ambas religiones, pese a que menudeaban, por otro lado, las luchas entre uno y otro grupo por el poder.

     Para nuestro estudio tiene también interés la descripción que hace el Danita de los países donde habitaban las tribus de Israel. Según él, abundaban en oro y en riquezas naturales, especialmente Porainoth y Parwaim, que califica de «dorados». Siglos después hallamos las mismas expresiones en las propuestas de Colón a los reyes de Portugal y España. Los incentivos con que trató de moverlos no chocaron nada ni a los judíos ni a los cristianos. Entre éstos venían circulando las cartas apócrifas del Preste Juan, legendario Emperador de un reino cristiano en África. Que también Colón las conocía está fuera de dudas, pues al margen de un libro que le perteneció, Ymago Mundi, hay anotado de su puño y letra: «Preste Juan».

     Las cartas apócrifas del Preste Juan al Emperador Federico II y al Papa datan del siglo XIII, y eran conocidas de los intelectuales. Han de entenderse como una especie de anti-propaganda contra los relatos del Danita para poner en claro que, por doquier, los judíos estaban sometidos a la autoridad cristiana y no eran soberanos en parte alguna. Los investigadores de los siglos XIX y XX, confrontando los textos, han podido demostrar de un modo concluyente que los principales pasajes de las cartas del Preste Juan guardan relación con las noticias aportadas por el Danita. Sus descripciones geográficas se corresponden punto por punto con las de los relatos de este último. De ahí que las cartas del Preste Juan, publicadas dos siglos después de dichos relatos, redundaran paradójicamente en darles nueva actualidad entre los judíos. Confirmaron que el Danita tenía razón.

     Actualidad que, en rigor, nunca les faltó, simplemente porque los judíos se hallaban siempre en medio de o ante un período de persecución o acababan de dejarlo atrás. Nunca se sabía cuánto iba a durar el favor del soberano. La tolerancia prometida podía cesar de la noche a la mañana. Las noticias de discriminaciones en otros países hacían temer que se extendieran al propio. Tal estado de inseguridad alimentó de continuo el anhelo por entrar en contacto con las tribus perdidas. Los judíos españoles de la Edad Media hablaron de ese tema día tras día, año tras año. Las gentes de mar cuidaron de que no se agotara con sus noticias sobre lejanas tierras donde había grupos de origen hebreo.

     Buena prueba del interés de los judíos españoles por las tribus de Israel es la embajada de Hasday ben-Saprut a José, rey de los jázaros. Hasday ben-Saprut fue, de hecho, el ministro de asuntos exteriores del primer califa cordobés, Abderramán III, no oficialmente, pues por la segunda mitad del siglo X los pasajes anti-hebreos del Corán pesaban aún mucho en la Península Ibérica, lo cual no impedía, con todo, que musulmanes y judíos convivieran en paz. Aunque nunca le concediese el título de visir, Abderramán lo tenía en gran estima, hasta el punto de que, además de las relaciones diplomáticas con los principados y reinos extranjeros, puso también en sus manos el comercio y las finanzas.

     Hasday ben-Saprut procedía de una distinguida familia hebrea de la ciudad de Córdoba, sede del califato, y dominaba varios idiomas extranjeros, entre ellos el latín, la lengua diplomática de entonces. De ahí que formase parte de su cometido recibir a los embajadores extranjeros y presentarlos al califa, tras las conversaciones preliminares de rigor. Tal circunstancia le permitió estar al corriente de la situación de los judíos no sólo en la Península Ibérica, sino asimismo en los numerosos Estados con que el califato tenía relaciones diplomáticas, en su mayor parte cristianos. Sabía, pues, que incluso allí donde se les toleraba, eran objeto de un trato discriminatorio, por muchos y buenos servicios que hubiesen prestado a los gobernantes.

     Con quien más a menudo se entrevistó fue con los representantes de las dos grandes potencias de la cristiandad: Bizancio y el Sacro Imperio Romano-Germánico. El Emperador bizantino Constantino VIII hizo lo posible por estar en buenas relaciones con el poderoso califato de Córdoba, ya que se sentía amenazado por los del Próximo y Medio Oriente. También las tuvo por deseables el Emperador germánico Otón I. Hasday aprovechó los coloquios con los diplomáticos de aquellos Imperios para interceder por los judíos que vivían en los mismos. Pero el afán por ayudar a sus correligionarios lo empujó a ir más allá de tal mediación. Comprendiendo que si se los menospreciaba y humillaba tanto por todas partes era porque pertenecían a un pueblo sin patria, intentó dársela. Conocía muy bien los relatos del Danita, venido a España pocas décadas antes. Los bizantinos le confirmaron que el reino de los jázaros existía realmente, a orillas del mar Negro, y que tenía al judaísmo por religión oficial. He ahí la posibilidad de una patria para los judíos. Ben Saprut, hombre de acción, trató de asirla.

     El origen de los jázaros es aún hoy objeto de debate. Para unos, se trata de una tribu ugro-finesa, emparentada con los búlgaros, los avaros y los magiares; para otros, de un pueblo turco. Tras la ruina del Imperio de los hunos, se establecieron en los confines entre Asia y Europa, en las riberas del Volga y del mar Caspio. Guerreaban sin cesar con sus vecinos. Los persas intentaron protegerse de ellos cerrando los pasos del Cáucaso. Pero, al hundirse el Imperio persa, los jázaros los atravesaron, devastaron Armenia y conquistaron la península de Crimea, conocida después durante largo tiempo como Jazaria. Los bizantinos los temían tanto, que, para mantenerlos lejos de Constantinopla, les pagaban tributo. También los príncipes de Kiev. Estaban en permanente estado de guerra con los pueblos árabes de aquella zona.

     La orden dada en el año 723 por el Emperador bizantino León III Isaurio de que todos los judíos se convirtieran al cristianismo impulsó a muchos a buscar refugio en el reino de los jázaros. Entre los que así lo hicieron, predominaban los médicos, los comerciantes y los artesanos. Otra gran oleada migratoria se produjo en la segunda mitad del siglo IX, a consecuencia de las crueles persecuciones que desencadenó Basilio I el Macedonio al grito de «¡Bautismo o muerte!». Los fugitivos de ese período hallaron ya constituídas en el reino de los jázaros numerosas colonias hebreas, sobre todo en Tiflis, en Kertch y en la comarca de la actual Sebastopol. En el extenso territorio dominado a la sazón por los reyes jázaros —iba del mar Caspio hasta el Dniéper—, convivían pacíficamente cristianos, musulmanes y judíos. Estos últimos desempeñaban un importante papel, así en la economía como en la política.

A mediados del siglo XIII, el rey —el Sah-kanBulan— y la capa superior de los jázaros abrazaron la religión judaica. No poseemos datos precisos al respecto, pero el historiador árabe Massudi escribe que la nación jázara se adhirió al judaísmo en tiempo del califa Harún al-Raschid. Justamente por entonces se inició la expansión de los jázaros desde el mar Caspio hacia Europa. En el curso de un avance ininterrumpido, sus huestes fueron engrosándose más y más con elementos de las tribus y poblaciones que se sometían, para mayor espanto de los pueblos vecinos.

     Anteriormente, el califa de Bagdad y el Emperador de Bizancio habían intentado convertir a los jázaros a sus respectivas religiones. Entre los jázaros existió la tradición de que Bulan, tras informarse sobre el islamismo, el cristianismo y el judaísmo, se había dedicido por esta última fe al advertir que era la raíz de las otras dos. El sucesor de Bulan, Abdías, estableció una ley por la que todos los futuros sah-kanes debían profesar el judaísmo. Buscó contactos con los judíos de los países árabes, pero a la vez se propuso dar ejemplo de tolerancia en el trato a sus súbditos no hebreos. Entre los jázaros había muchos musulmanes: el ejército estaba compuesto en su mayor parte de mercenarios fieles al Islam. No se ejerció sobre ellos ninguna presión para que se convirtieran al judaísmo. Ni tampoco sobre los otros disidentes. De los siete jueces que formaban el tribunal supremo, dos eran hebreos, dos musulmanes, dos cristianos y uno pagano —para entender en las causas de rusos y búlgaros.

     Tras la conversión de Bulan al judaísmo, el mando militar fue ejercido por hebreos. En vista del ímpetu bélico de los jázaros, los eslavos del Sur de Rusia y el Imperio bizantino se aliaron para contenerlos. Estalló una guerra, que terminó con la victoria de los jázaros, acaudillados por el general hebreo Pessach: los eslavos y los bizantinos, los vencidos, tuvieron que comprometerse a pagar en adelante tributo al sah-kan; los eslavos, particularmente, quedaron sujetos a duras condiciones de vasallaje.

     Cuando, a mediados del siglo X, el Emperador de Constantinopla inició nuevas persecuciones contra los judíos de Bizancio, el sah-kan José le envió una embajada amenazándolo con tomar represalias contra los griegos cristianos residentes en su reino en caso de que prosiguieran. Tal ultimátum no dejó de surtir efecto.

     En esa coyuntura fue cuando se produjo la conocida tentativa de Hasday ben-Saprut de entrar en contacto con los jázaros.

     El hombre llevaba ya varios años recogiendo información sobre ellos. Por fin, persuadido del interés de la cuestión, puso al corriente a la comunidad hebrea de Córdoba. El prestigio de que gozaba en la misma —era uno de sus jueces— determinó que se le diera pleno crédito. Las referencias de Hasday causaron enorme impresión entre los judíos, no sólo de Córdoba, sino de toda España. Claro está, la confirmada realidad del reino de los jázaros reavivó la fe en todos los otros de que había hablado el Danita. De aquél se divulgaron muchos detalles: que estaba a quince jornadas de Constantinopla; que su rey llevaba el título de sah-kan y se llamaba José; que tenía relaciones diplomáticas, e incluso comerciales, con Bizancio...

     Por fin, a mediados del siglo X, Hasday ben-Saprut se decidió a establecer lazos con los jázaros mandando un mensaje a su sah-kan. Dada la situación de entonces, ello le pareció particularmente aconsejable por haber venido en conocimiento de que José intentaba ayudar con medidas políticas a sus correligionarios de allende el Cáucaso. Creía, por otra parte, que el establecer contacto con el reino de los jázaros serviría para demostrar la existencia de países donde los judíos no tan sólo eran huéspedes, sino dueños, cosa que sin duda habría acrecido sobremanera el prestigio de los judíos, también en el Occidente cristiano.

Así pues, Hasday redactó un mensaje para el sah-kanJosé y confió la misión de llevarlo a un amigo íntimo, Isaac ben-Nathan, no sin antes proveerle de abundantes medios. Habiendo de partir entonces para Constantinopla un emisario del califa, Abderramán lo autorizó a viajar con él hasta aquella ciudad, e incluso escribió una carta al Emperador de Bizancio rogándole que facilitara al mensajero de su favorito la continuación del viaje hacia el país de los jázaros.

     Sin embargo, por motivos que aún hoy no se conocen a ciencia cierta, Isaac ben-Nathan fue retenido medio año en Constantinopla y devuelto luego a España con una carta en la que los bizantinos informaban a Hasday ben-Saprut que no podían permitir a su enviado el viaje a la otra orilla del mar Negro por ser demasiado peligroso. Probablemente el auténtico motivo fue otro: en Bizancio no debía tenerse por conveniente una relación entre el califato de Córdoba y el reino vecino; tampoco interesaba que los judíos entraran en contacto con sus correligionarios.

     Como ya sabemos, la existencia del reino de los jázaros había sido revelada a los judíos españoles por Eldad had-Dani algunas décadas antes. Había hablado de una escabrosa cordillera donde vivían dos tribus y media israelitas, descendientes de Abraham por Simeón y Manasés, de un reino tan poderoso, que muchos pueblos extranjeros debían pagarle tributo. El testimonio del Danita era bien conocido por el «ministro de asuntos exteriores» del califa cordobés, Hasday ben-Saprut. Lo evidencia su mensaje al sah-kan José, en el que se lee: «En tiempo de nuestros padres vino a España un hombre de la tribu de Dan que hablaba hebreo». No cabe duda de que aludía a Eldad had-Dani.

     Pocos años después del fracaso de aquella tentativa en que había puesto tantas esperanzas, en 953, llegó a Córdoba una embajada del rey eslavonio Hunu. Formaban parte de la misma dos judíos, Mar Saúl y Mar José, indicio del buen trato dispensado al pueblo hebreo en aquel país del Danubio. Mar Saúl y Mar José afirmaron estar en relación con el reino de los jázaros: no hacía mucho que uno de los suyos, Mar Amram, lo había visitado, siendo recibido con grandes honores. Se ofrecieron para hacer llegar al sah-kan José el mensaje de Hasday ben-Saprut a través de los judíos residentes en Hungría, Bulgaria y Rusia.

     Hasday les entregó una carta redactada en hebreo clásico, cuya copia se conserva aún. Constituye un documento histórico de inapreciable valor. El político cordobés habla en ella de los hermanos que vivían en el exilio español. Tenía, pues, a los jázaros por miembros de alguna de las diez tribus de Israel. Tras describirles España, las características de la dinastía de los omeyas y las condiciones de vida de los judíos en su reino, subrayaba que su carta no obedecía a la curiosidad sino a la necesidad de averiguar si existía en el mundo algún país donde Israel fuera libre. «De ser así, despreciaría todos los honores, renunciaría a mi posición, abandonaría a mi familia, atravesaría montañas y valles, tierras y mares, hasta poder postrarme a los pies de mi rey de la tribu de Israel y alegrarme de su grandeza y admirar su poderío». Preguntaba a continuación de cuál de las diez tribus procedían, si guerreaban en sábado, si tenían por lengua el hebreo, y cuándo se consumaría, a su juicio, la liberación de Israel. No olvidó referirse, con doloridas palabras, a cómo se humillaba día tras día a los judíos diciéndoseles: «Todos los pueblos forman un reino unido; vosotros, en cambio, estáis privados de independencia».

     El historiador hebreo Heinrich Graetz ha escrito acerca de ese documento: «Así dirigió el representante de los judíos en el Extremo Occidente de Europa su salutación fraternal a los judíos en el trono».

     A través de muchos intermediarios, la carta de Hasday ben-Saprut terminaría llegando, en efecto, a manos de José, duodécimo sah-kan judeo-kázaro desde Bulan, el monarca que había abrazado la religión judaica. Y se conserva el escrito con que respondió aquel rey que tenía su residencia en una isla del Volga. Si bien su autenticidad es aún objeto de controversias entre los estudiosos, los más se inclinan por admitirla. También en hebreo, parece que José lo hizo redactar por un doctor de la ley. El sah-kanempezaba por comunicar a Hasday ben-Saprut que los jázaros no descendían de ninguna de las diez tribus de Israel, sino que se habían convertido al judaísmo: sus tribus afines eran los avaros, los usos, los tarnios, los búlgaros, los sabires y otros pueblos originarios de la Escitia que habían venido a establecerse en Hungría y a lo largo del Danubio inferior. Relacionaba luego los sah-kanes posteriores a Abdías, todos los cuales habían llevado nombres hebraicos: Chiskia, Manases I, Chanukka, Isaac, Zabulón, Manases II, Nissi, Menachem, Benjamín y Aarón, su padre. Más adelante decía estar en relación con los judíos de Jerusalén y con las escuelas superiores de Babilonia. Finalizaba la carta invitando a Hasday ben-Saprut a visitar su reino.

     El misticismo había echado hondas raíces entre los sefarditas. No era pura evasión, un intento de eludir la triste realidad transportándose a un plano más alto, sino que respondía también a la pervivencia de corrientes mesiánicas.

     La carta de Hasday ben-Saprut al sah-kan José lo pone de manifiesto. Todos los historiadores coinciden en interpretar en tal sentido el interés que demuestra por la existencia de un reino israelita. Y las esperanzas que despertó aquel episodio están henchidas también de mesianismo. Del mensaje del político cordobés y la respuesta del sah-kanse hicieron en los siglos siguientes, sobre todo en el XIII, gran número de copias, cuyos redactores interpolaban en el texto original glosas místicas adecuadas a la situación del momento. Tales escritos mantuvieron siempre actual el tema y configuraron las ideas de los judíos sobre presuntos Estados hebreos enclavados en el corazón de Asia con el que el reino de los jázaros habría tenido contactos.

     Cuando el sah-kan José procedió a responder a Hasday ben-Saprut florecía aún la paz en sus territorios. Pero, pocos años después, una serie de conflictos bélicos con el gran príncipe Svjatoslav de Kiev, hasta entonces vasallo de los sah-kanes, y otras guerras fueron debilitando más y más al reino jázaro y acabaron por destruírlo totalmente. Los jázaros huyeron a través del mar Caspio y del Cáucaso, o cayeron en cautividad. Andando el tiempo se disolverían en los pueblos que los habían vencido.

     Algunos miembros de la estirpe dominante, sin embargo, se trasladaron a España y se incorporaron a distintas comunidades hebreas. Un historiador y cronista judío del siglo XII, Abraham ibn-Daud, refiere que habló en Toledo con descendientes de los mismos. Fácil es imaginar con qué avidez escuchaban o leían los judíos españoles noticias sobre los jázaros, y cómo intensificaron su fe en la pervivencia de las tribus de Israel y su esperanza de reanudar el trato con ellas.

     A principios del siglo XII circularon también por España las copias de una carta escrita en el siglo X por un judío de Constantinopla y referente a las guerras entre los Emperadores de Bizancio y los reyes jázaros. El rabino de Barcelona, Yehuda al-Barzeloni, sostuvo al respecto con otros sabios discusiones científicas. En el año 1140 Yehuda ha-Levi describió la historia de los jázaros en una obra titulada Kusari, objeto asimismo de numerosas copias —siglos más tarde, en 1506, se imprimiría en Constantinopla—. El reino de los jázaros, ya desaparecido, siguió de ese modo dando pábulo a las ilusiones de los sefarditas.

     Consta documentalmente que, ya en el siglo IX, los judíos de Barcelona habían tenido contactos con algunas comunidades hebreas de Asia. Se conservan cartas dirigidas al rabino Amram Gaon de Babilonia, en que, además de plantearse varias cuestiones religiosas, se pregunta por la pervivencia en Asia de las tribus de Israel. Dado el afán de los sefarditas por ponerse en relación con las mismas, cabe suponer que se escribieron otras muchas, hoy perdidas. De todos modos, los escasos documentos de que se dispone bastan para concluír que el interés por los hermanos de lejanas tierras fue siempre muy vivo.

     Tal interés subió aún de punto al propagarse las doctrinas cabalísticas. Se forjaron entonces leyendas según las cuales, allende el Sambation, río cuyo curso impetuoso separaba Europa de Asia, las diez tribus de Israel gobernaban prósperos reinos. Ese mito echó con el tiempo profundas raíces, dando alas a la fantasía popular. De él arrancan todas las esperanzas puestas en una reagrupación con los hermanos perdidos.

     Retengamos el caso de Hasday ben-Saprut, particularmente significativo para el tema de esta obra: un rico dignatario judío que goza del favor del califa reinante quiere renunciar a todas las ventajas para vivir en una tierra hebrea. Claro está, tal anhelo animaba también a otros judíos que no se hallaban en sus privilegiadas condiciones.

     ¿Cómo iba a ser distinto siglos después, cuando las persecuciones de los judíos se sucedían ininterrumpidamente, y la amenaza era la fiel compañera de sus vidas? Aunque se hubieran desgajado por completo del judaísmo y desearan asimilarse a su nuevo medio, los conversos tenían interés en el descubrimiento de algún país hebraico. Sabían que ello aumentaría su prestigio a los ojos de los cristianos viejos. Ni querían ni debían emigrar, pero hubieran bendecido la existencia de tal país, cuanto más que los cristianos nuevos que mantenían aún vínculos de parentesco con los judíos estaban amenazados de expulsión. Deseaban con toda el alma que hubiera algún lugar donde sus familiares —y acaso un día u otro ellos mismos, o sus descendientes— pudieran hallar asilo.

     Una de las más importantes relaciones de viajes del siglo XII es el diario de Benjamín de Tudela, hijo de Jonás. Habiendo partido en 1159, y tras haber recorrido distintas partes de Europa, Asia y África, regresó a España en 1173, para establecerse en Toledo. Allí puso por escrito sus experiencias, y allí murió. Su relación, que venía a ensanchar el campo visual de los geógrafos, confirmando en algunos puntos las noticias de Eldad had-Dani, despertó gran interés, y no sólo entre los judíos. A poco de aparecer, fue traducida a varias lenguas. Benjamín de Tudela empieza por contar su tránsito por una serie de ciudades españolas hasta llegar a Barcelona. De ahí se dirige a Constantinopla, a través de Francia, Italia, Corfú y Grecia. Va luego a Armenia y Antioquía. El sefardita indica siempre el número de hebreos residentes en las ciudades que visita. Describe cómo se los trata y a qué actividades se dedican. Nombra a sabios y artesanos hebreos. Al recorrer el Líbano y Siria, da con tribus drusas, y observa su manera de vivir y sus relaciones con los judíos. Visita Jerusalén, Nablus y otras muchas ciudades de Palestina; trata en la región del monte Garizim con los samaritanos. Se dirige a Damasco, con una colonia hebrea de 3.000 personas.

     Remonta el curso del Tigris hasta el pie del Ararat. Va enumerando ciudades donde vivían judíos: 4.000, por ejemplo, en Gezir ibn Ornar, 7.000 en Gran Azur, 2.000 en Rahaba. Pasa luego a las riberas del Éufrates, a la ciudad de Gargesia, con 500 judíos y, a dos jornadas, Aljuba y Pumpedita, con 2.000 y una gran escuela talmúdica. De ahí, en cinco jornadas, se planta en Harda, ciudad donde vivían 15.000 judíos. Tras detenerse en Ogbera, con 10.000 judíos, llega a Bagdad. El califa es un gran amigo de los judíos, habla y escribe hebreo. Viven en la misma en un régimen de plena libertad 10.000 judíos, entre ellos famosos doctores de la ley, que presiden diez escuelas o sanedrines. Hay, además, veintiocho sinagogas, adornadas con columnas policromadas y con tapices recamados de oro y plata donde se leen versículos de los Salmos. De Bagdad pasa a Babilonia, con 20.000 judíos.

     Tras veintiún jornadas, pasa los umbrales del país de Tema, habitado por hebreos que se llaman rehaviti. Menciona dos grandes ciudades. Tema y Telimas, donde viven 100.000 judíos bajo dos príncipes de la familia de David: Salomón y Anás. Llevan luto cuarenta días al año por la destrucción de Jerusalén y la expulsión de los judíos de Palestina. Alude aún a la capital, Tanai. A tres jornadas de los confines de Tema, se hallaba Haibar, donde se habían establecido, dice, las tribus de Rubén y de Gad y parte de la de Manases. «La ciudad misma de Haibar es grande y está habitada por 50.000 hebreos, entre los cuales hay muchos estudiosos, pero aún más guerreros que contienden de continuo con los habitantes de Babilonia, de las tierras del Norte y del Yemen. Aquí empieza la India. Del territorio de los hebreos hasta el río Mira, que atraviesa la tierra del Yemen, hay veinticinco jornadas. Se encuentran en ella 3.000 hebreos, y de ahí llegué yo en siete jornadas a Wassed, con 22.000 hebreos, y luego a Basora, con 2.000 hebreos».

     Del «territorio de los hebreos» pasó Benjamín de Tudela a Susa, con 7.000 hebreos y catorce sinagogas, así como la tumba del profeta Daniel. Sigue una descripción de Persia y de su sultán, cuyos dominios se extendían hasta la ciudad de Samarcanda, el río Gosán y la provincia de Kaswin. Se encamina luego a Rudbar, con 20.000 hebreos, y se adentra en las montañas próximas, donde los hebreos conviven con otras tribus y no son vasallos del sultán de Persia.

     El viajero llega a Amaria, con 20.000 hebreos, de donde pasa al país de los medas, y de éste a Dabahristán, a orillas del río Gosán, con 4.000 hebreos, y a Schiras, con 10.000. A sólo una jornada de esa última ciudad, Samarcanda, la gran urbe situada en los confines del reino, que alberga a más de 50.000 hebreos. De ahí, en cuatro jornadas, alcanza el Tíbet, rodeado de bosques donde crece el almizclero, y, en otras veintiocho, las montañas de Kazwin, junto al río Gosán. Las habitan hebreos, quienes le explican que cuatro tribus de Israel han sido deportadas a las ciudades del país de Nisapur. Su territorio se extiende veinte jornadas a lo largo de aquella cordillera, y no dependen de ningún soberano extranjero, sino del rabino José, un levita. Cuentan con numerosos doctores de la ley y practican la agricultura. En guerra con el país de Kush, se llevan bien, en cambio, con los turcos, que «adoran al viento, habitan el desierto y no comen pan ni beben vino, antes se alimentan tan sólo de carne cruda». El rabino Benjamín informa de guerras sostenidas conjuntamente con los turcos, contra los persas, y pondera sus aptitudes bélicas.

     Más adelante habla de la isla de Kisch, emporio importantísimo para el comercio con la India. Dice: «Aquí concurren mercaderes de la India y de las islas vecinas; aquí traían también los habitantes de Mesopotamia, Yemen y Persia toda suerte de tejidos de seda y púrpura, de lino y cáñamo, tapices, trigo, cebada, mijo, avena, toda suerte de comestibles y legumbres, para traficar con todo ello, mientras que los habitantes de la India llevan toda suerte de especias. Los insulanos hacen de intermediarios y viven de las ganancias. Viven también aquí 500 hebreos. En diez jornadas, por mar, llegué a Katipa, con 5.000 hebreos».

     Explica después su viaje a las islas Khandy, «cuyos habitantes son adoradores del fuego y se llaman dugbius, con 23.000 hebreos. Los habitantes paganos de esas islas tienen en sus templos sacerdotes que son los más grandes magos del mundo». El mar que las baña se extiende, según le dicen, hasta la China, pero él, en vez de navegar hacia la India, vuelve atrás para dirigirse a Aden, donde encuentra también hebreos. Escribe: «Desde allí llegué en diez jornadas por el desierto de Sheba a Asuán, junto al río Nilo, que desciende de Etiopía». Desde Egipto (país del que describe asimismo numerosas ciudades con densas colonias hebreas) se traslada a Mesina, la ciudad de Sicilia, y luego, a través de Italia, Alemania y Francia, regresa finalmente a España.

     Sus sensacionales descripciones de tantas comunidades hebreas de Asia hasta entonces desconocidas intensificaron el deseo de entrar en contacto con las mismas. El ejemplo de Benjamín de Tudela espoleó a otros sabios a investigar la suerte de los hebreos a lo largo y ancho del mundo. Entre ellos destaca el rabino Petachia, de Ratisbona, que inició su viaje entre 1175 y 1180, o sea, dentro de la misma década en que retornó Benjamín de Tudela, y visitó a grupos hebreos de Polonia, Rusia meridional, Crimea, Persia, Georgia, Armenia, Siria, Mesopotamia y Palestina. Narró después sus aventuras en el libro Sibbub Olam(Viaje Alrededor del Mundo).

     Las relaciones de viajes, popularizadas por los judíos, fueron traducidas a muchas lenguas y leídas también por los cristianos. Según la opinión general, en el interior de Asia vivían tribus hebreas que, a diferencia de los judíos europeos, eran en extremo belicosas y se atrevían incluso a atacar a los pueblos vecinos.

     Cuando, en la primera mitad del siglo XIII, gran parte de Europa fue invadida por los tártaros, la cristiandad, y sobre todo Alemania, sintiéndose amenazada, reaccionó persiguiendo a los judíos. Se difundió la opinión, o fue intencionadamente difundida por los instigadores de los pogroms, de que los tártaros descendían de las tribus israelitas y eran el instrumento del judaísmo para destruír al Occidente cristiano: los judíos querían exterminar a los cristianos tal y como, trece siglos antes, habían crucificado a Jesús.

     No es preciso analizar tal rumor para demostrar su absurdidad. Lo menciono solamente porque indica que, por entonces, se habían propagado ya también entre la población cristiana leyendas sobre las diez tribus de Israel, y no como cuentos sino como hechos reales.

     La importancia de las relaciones de viajes escritas por judíos no debe hacernos olvidar el influjo que ejerció en el siglo XIV y siguientes el libro de Marco Polo. El veneciano emprendió su viaje en 1271 —casi cien años después del regreso a España del rabino Benjamín de Tudela— movido por el afán de ensanchar el área de comercio. Como se sabe, llegó hasta la China y sirvió diecisiete años al gran kan Kubilay. En su relación, que Colón también poseyó, figuran observaciones sobre hebreos con los que se había encontrado en sus andanzas por la India y la China. Traducida al castellano por el converso de Sevilla Rodrigo de Santaela, dio pie a que los judíos españoles especularan sobre la existencia de vínculos entre las diez tribus y los chinos, e incluso los japoneses, cosa no tan descabellada como puede parecer a primera vista.

     Más tarde, en tiempos modernos, se analizarían ciertas conformidades entre los ritos judaicos y sintoístas; se llevarían a cabo estudios fisionómicos para comprobar ciertas semejanzas raciales; se confrontarían nombres. Se ha caído así en la cuenta de que el primer rey conocido del Japón se llamó Osei y reinaba en el año 730 antes de Jesucristo, ocho años después de la muerte del último rey de Israel, Oseas. De ese corto período de tiempo, además de la homonimia, hay quien ha sacado ciertas conclusiones. Ha salido también a la luz que tanto el templo sintoísta como el judaico estaban divididos en una parte sagrada (el «sancta») y en la más sagrada de las sagradas (el «sancta sanctórum»), que la vestidura de lino y la prenda para cubrir la cabeza del sacerdote sintoísta se correspondían con las del sacerdote del antiguo Israel. Por otra parte, ciertos grabados japoneses primitivos representan, a juicio de algunos, la entrada de los israelitas en el Japón. Hay quien se ha atrevido, incluso, a señalar la ruta por la que los israelitas habrían llegado al Japón, a saber, desde el continente asiático y a través de las islas Sajalín.

     El tema sigue interesando todavía hoy. En 1970, mientras trabajaba en este libro, vine en conocimiento de que acababa de aparecer en Japón un estudio de carácter étnico titulado Japoneses y Hebreos. Lo firma Jeseia ben-Dassan, pero se trata de un pseudónimo. Según el editor, se esconde detrás del mismo un judío norteamericano nacido en la ciudad japonesa de Kobe (1918). La obra, que ha tenido gran éxito, analiza las semejanzas y diferencias entre el pueblo japonés y el hebreo.

     Japoneses y hebreos no es, por lo demás, ninguna rareza. Hace ya largo tiempo que estudiosos japoneses vienen investigando dichas afinidades. Procedentes en su mayor parte de las castas sacerdotales sintoístas, algunos —como, hace pocos años, Temamitso Fuinomeya y otros— han acabado por convertirse al judaísmo y adoptar nombres hebraicos.

     Después de 1945, cuando Japón fue ocupado por Estados Unidos, formaban parte de las tropas extranjeras un número considerable de judíos y, por tanto, un rabino militar. Habiendo éste trabado amistad con el hermano del Emperador Hirohito, el príncipe Mikassa, obtuvo permiso para ver cierto «espejo sagrado»: según parece, tiene grabada detrás una inscripción en hebreo antiguo de la época del primer templo.

     Esa actualidad de la cuestión denota cómo debió apasionar a los hombres medievales, menos críticos que nosotros.

     Las mencionadas tentativas de los judíos para entrar en contacto con sus hermanos de las tribus de Israel no fueron, a buen seguro, las únicas. El que no se conserven testimonios escritos sobre otras se debe a las condiciones en que vivían los judíos y, de una manera particular, a las dificultades de los viajes. Tengamos en cuenta la ausencia o escasez de medios de transporte, el mal estado de las vías terrestres, la perfidia de no pocos guías, la abundancia de ladrones y salteadores de caminos y, en la mar, de piratas, la falta de planos, el sinfín de pequeñas áreas de soberanía con las consiguientes fronteras, los problemas de lenguaje... Un hombre tan poderoso como Hasday ben-Saprut tardó muchísimo tiempo en hacer llegar una carta a la península de Crimea, a corta distancia de España en comparación con la India. El viaje hasta sus umbrales y feliz regreso de Benjamín de Tudela parece un milagro.

     El libro de Marco Polo da una idea de los peligros que acechaban al viajero, constantemente expuesto a ser asesinado, asaltado o vendido como esclavo. Para un judío, las dificultades eran aún mayores a causa de las reglas de alimentación prescritas por la ley hebraica, que los judíos de la Edad Media cumplían rigurosamente.

     Las noticias de los numerosos judíos que, sin duda alguna, siguieron los pasos del Danita y de Benjamín de Tudela desaparecieron con sus protagonistas, víctimas de uno u otro azar. No nos queda de ellos sino una gran variedad de amuletos de plata contra enfermedades, piratas y bandidos, que fueron vendidos por quienes se los arrancaron. Se hallan hoy en museos o colecciones particulares.

     Cabe suponer que los hebreos de Asia intentaron también, a su vez, viajar hasta sus hermanos de Europa, y que sufrieron la misma suerte. Quizá, incluso, alguna de tales empresas tuviera buen éxito, porque el que no tengamos conocimiento de ninguna nada quiere decir: la dramática historia del pueblo judío a lo largo de la Edad Media —las quemas de personas y libros, los bautismos forzosos, las expulsiones, los saqueos— no fue precisamente favorable a la constitución de archivos.

     La mayor parte de las noticias que llegaban en aquellos siglos a los judíos procedían de fuentes cristianas. Basadas en relatos de marineros que las habían recogido a su vez en contactos superficiales con mercaderes árabes, nos parecen hoy a menudo salir de las páginas de Las Mil y Una Noches. En las tabernas portuarias, como es fama, se tenía sumo arte para exagerar e inventar, cuanto más que por entonces no era posible comprobar los hechos. El propio Colón acudió no pocas veces a las mismas para informarse de experiencias náuticas y aventuras en tierras remotas. Allí oyó hablar de los países «dorados» y sus habitantes. Posteriormente aprovecharía esos elementos en los escritos en que propuso el viaje a las Indias.

     El crédito dado en la Edad Media a toda suerte de noticias, por fabulosas que fueran, se explica por el escaso desarrollo del saber científico y las nulas posibilidades de verificación. Un viaje que hoy puede hacerse sin correr ningún riesgo —piratería aérea aparte— en cuatro horas, duraba entonces como mínimo un año, y había una probabilidad entre cien de llegar a la meta y regresar sano y salvo.

     Los relatos de los marineros no dejaban de tener, con todo, un fundamento real. Sabemos hoy que, ya en tiempo de Cristo, mercaderes hebreos de Persia y de la India habían establecido factorías en Ceilán, e incluso en la China, a lo largo del río Amarillo y en el delta del Yang-tsé. Que, en la India anterior, entre otros muchos pequeños Estados, existió uno, Anjuvanán, con un alto porcentaje de población hebrea y regido probablemente por judíos. La costa occidental de la India, en toda su extensión, atrajo a numerosos judíos fugitivos del área árabe-persa, hasta el punto de que vinieron a formarse en distintos lugares de la misma auténticas colonias hebreas. En la costa del Malabar los judíos desarrollaron entre la población autóctona una actividad misionera. Las ulteriores misiones cristianas de los nestorianos encontrarían el terreno preparado. Si la Iglesia sirio-caldea pudo arraigar en la India, fue gracias al trabajo previo de los judíos. En las costas del Malabar y del Konkán subsistieron grandes colonias hebreas hasta el siglo XIV. Benjamín de Tudela las menciona en su relación, pese a que, como hemos visto, no llegó hasta la India.

     La presencia de una comunidad hebrea en Kaifeng, capital de la provincia de Honan y una de las ciudades más antiguas de la China, se remonta al siglo VIII. Algunos documentos locales atestiguan la construcción en 1183 de una sinagoga, restaurada en 1488. Por aquellos siglos, habitaban asimismo en Kaifeng musulmanes que tenían frecuentes contactos con Occidente. Casi seguro que, a través de ellos o de los mercaderes judíos de los países árabes, los hubo también entre la colonia hebrea de la ciudad y los judíos de Europa. Ya hemos visto cómo se interesaban estos últimos por los hermanos de Asia. Cuando menos, debían estar enterados, por conducto de los mercaderes árabes, de que aquélla existía. Para las gentes del siglo XV, tales datos demostraban, sin lugar a dudas, todas las demás noticias y tradiciones. Judíos y cristianos estaban convencidos de que las diez tribus de Israel habían podido subsistir en partes recónditas de Asia.

     Noticias que hoy nos parecen puras fábulas se tomaban entonces muy en serio. Tanto, que indujeron no pocas veces a reyes y gobernantes a organizar expediciones. El 7 de Mayo de 1847, Pero da Corvilha y Alfonso de Paiva iniciaron un viaje por encargo del rey Juan II de Portugal para descubrir el reino del Preste Juan. También los judíos fundaban esperanzas en la existencia de ese territorio, al opinar que el nombre de su Emperador denotaba un origen hebraico, y por ciertas relaciones de viajes sobre una región del África oriental donde hebreos y cristianos convivían amigablemente. Los exploradores portugueses creyeron haber hallado el «reino del Preste Juan de las Indias» en Abisinia.

     Los cristianos de la Península Ibérica tenían, como los judíos, hermanos perdidos, y se afanaban asimismo en buscarlos. Ello obedecía a tradiciones que, para un hombre del siglo XX, resultan totalmente fabulosas. Según una leyenda antiquísima, los pocos visigodos supervivientes de la batalla de Guadalete —año 711— habían huído de los sarracenos hacia el Oeste en siete barcos. Los conducían el arzobispo de Oporto y otros seis obispos. Tras superar terribles tormentas, habían tomado tierra en una isla situada en medio del océano y quemado allí los barcos para hacer imposible el regreso. Fundaron luego en la misma siete maravillosas ciudades. La isla de las siete ciudades era conocida entre los españoles por el nombre de Antilla.

     Tal leyenda caló tan hondo en los ánimos que, siete siglos después del desastre de Guadalete, pasaba aún por realidad. Incluso la aceptó el mundialmente famoso cosmógrafo alemán Martin Beheim: la «Antilla» figura en su globo terráqueo, muy a occidente de España, en medio del océano, tal y como era tradición. En una licencia para viajes de descubrimiento concedida en 1489 por el rey portugués Juan II, especifica el soberano que se debe buscar el reino de las siete ciudades. El rey de Inglaterra, Enrique VII, al promover en 1497 una expedición para hallar una ruta hacia el Brasil, ordenó a su jefe, el veneciano Giovanni Caboto (John Cabot), residente en Bristol, que procurara dar también con la Antilla.

     Se divulgaron asimismo otras leyendas más verosímiles. En tiempos de Colón existían ya frecuentes comunicaciones con Islandia, cuyos habitantes explicaban que, hacia el año 1000, los normandos habían navegado en dirección Oeste y descubierto diversas islas. Las sagas islandesas —en particular la de Erik el Rojo, normando proscrito descubridor de una «tierra verde», Groenlandia— empezaron también a circular de boca en boca en el continente, a partir de los puertos.

     A lo largo de los siglos XIII y XIV aparecieron en España numerosos libros cabalísticos. Por escritos polémicos de los rabinos en el siglo XVI, sabemos que dieron lugar a cálculos según los cuales la redención mesiánica del pueblo hebreo se consumaría alrededor del año 1490, tras una ola de persecuciones. Aunque impugnados por las autoridades religiosas, hallaron gran resonancia entre las masas, pues satisfacían su necesidad de creer en tiempos mejores. Claro está, uno de los frutos de la venida del Mesías iba a ser la reagrupación de todos los hijos de Abraham. No se conservan documentos que prueben la vigencia de las interpretaciones cabalísticas entre los judíos y marranos que vivían en España por el año 1490. Pero los tiempos de persecución son propicios a los sueños y esperanzas, a la concepción de planes ideales donde poder moverse libremente. Por otra parte, el hecho de que algunos rabinos del siglo XVI polemizaran contra esas cábalas indica que no se habían extinguido.

     De todo lo expuesto en este capítulo podemos concluír que, a fines del siglo XV, los judíos y marranos de la Península Ibérica estaban convencidos de la existencia en Asia de territorios gobernados por hebreos. Esa convicción se fundaba en un haz de noticias orales, relaciones de viajes y tradiciones. Los cristianos las compartían, y daban crédito además a leyendas propias. Mientras los cristianos podían mandar barcos en busca del reino del Preste Juan o la isla de las siete ciudades, los judíos debían limitarse a esperar que la apertura de nuevas vías marítimas llevara al descubrimiento de dichas tierras hebreas. Estaban convencidos de que así sería, tarde o temprano, y lo deseaban con toda el alma, tanto porque ello les permitiría disponer de lugares de refugio como por el prestigio que les conferiría ante el resto de la población. En ese último aspecto, se hubieran beneficiado también de ello los cristianos nuevos procedentes del judaísmo. Además, los regidores de los Estados hebreos, con los que la cristiandad no tardaría en tener relaciones comerciales, intervendrían sin duda a favor de los judíos en los países donde se los siguiese discriminando o persiguiendo.

     Tal demostraba ser el caso de los mudéjares. Los judíos sabían que los soberanos musulmanes se habían dirigido una y otra vez a los Papas amenazando con tomar represalias en las personas de los cristianos residentes en sus territorios en caso de que los malos tratos a sus correligionarios persistieran, y que los sumos pontífices habían transmitido siempre esas advertencias a los reyes españoles.

     En 1490, justamente cuando estaban ultimándose los preparativos para atacar al reino de Granada, último reducto musulmán en la Península Ibérica, se presentó ante la reina Isabel una delegación del sultán de Egipto integrada por religiosos católicos de los monasterios de Jerusalén. Le comunicaron que, de continuar los vejámenes infligidos a los moros, el sultán adoptaría medidas contra los cristianos de Palestina y Siria. Isabel, profundamente conmovida, rogó a los religiosos que procuraran apaciguar al soberano islámico informándole del trato «tolerante» que recibían los moros en España. Les prometió además mil ducados anuales para el mantenimiento del Santo Sepulcro, y les dio un velo tejido de sus propias manos a fin de que lo depositaran en aquel Santo Lugar.

     La noticia de la embajada Palestina causó enorme impresión entre los judíos. En sus sueños más audaces, esperaban contar también ellos con semejantes valedores una vez establecido contacto con las tierras de las tribus de Israel.–






Gilad Atzmon - ¿El Errante Quién?

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     Del conocido crítico político israelí renegado Gilad Atzmon (1963), que reside en Inglaterra y que es un instrumentista músico de jazz, presentamos en castellano el siguiente texto (The Wandering Who?) que publicó en su sitio (gilad.co.uk) en Octubre de 2009 (aunque ya había aparecido en Febrero de 2008). Este texto, anterior a la publicación de su libro homónimo de 2011, es un comentario al libro del historiador universitario israelí Shlomo Sand (1946) "Cuándo y Cómo Fue Inventado el Pueblo Judío" (2008), traducido al inglés como "The Invention of the Jewish People", que cuestiona en base a hechos históricos la verdadera identidad y esencia del pueblo judío, a la vez que echa por tierra sus mitos más publicitados, afirmando al mismo tiempo que los palestinos son auténticos descendientes de los bíblicos israelitas, como puede verse en los capítulos que de él presentamos a fines de Agosto de este año. El señor Atzmon actualmente participa como testigo experto de la defensa en el bullado juicio que la policía del pensamiento en Canadá, por presión de los poderosos grupos sionistas, está llevando contra el editor canadiense Arthur Topham (RadicalPress.com).


¿El Errante Quién?
por Gilad Atzmon
5 de Octubre de 2009



     El historiador universitario profesor Shlomo Sand abre su notable estudio acerca del nacionalismo judío citando a Karl W. Deutsch: "Una nación es un grupo de gente unida por un error común en cuanto a su origen y una hostilidad colectiva hacia sus vecinos" (When and How the Jewish People Was Invented?, Shlomo Sand, Resling, 2008, p. 11).

     Tan simple o incluso simplista como pueda sonar, esta cita resume elocuentemente la ficción de realidad que está entretejida con el nacionalismo judío moderno y especialmente dentro del concepto de la identidad judía. Esto obviamente señala con el dedo al error colectivo que los judíos tienden a cometer siempre que se refieren a su "ilusorio pasado colectivo" y a su "origen colectivo". Sin embargo, al mismo tiempo, la lectura de Deutsch del nacionalismo arroja luz sobre la hostilidad que está desafortunadamente conectada con casi cada grupo judío hacia su realidad circundante, ya sea humana o que tome la forma de una tierra. Mientras la brutalidad de los israelíes hacia los palestinos se ha hecho ya de conocimiento bastante común, el rudo tratamiento que los israelíes reservan para su "tierra prometida" y su paisaje está recién comenzando a a revelarse. El desastre ecológico que los israelíes van a dejar detrás de ellos será la causa del sufrimiento para muchas generaciones venideras. Dejando aparte la muralla megalomaníaca que fragmenta la Tierra Santa en enclaves de depravación y hambre, Israel ha logrado contaminar sus principales ríos [1] y corrientes con desechos nucleares y químicos.

[1] http://www.nytimes.com/1997/07/28/sports/death-tied-to-pollution.html

     "Cuándo y Cómo Fue Inventado el Pueblo Judío" es un estudio muy serio escrito por el profesor Shlomo Sand, un historiador israelí. Es el estudio más serio acerca del nacionalismo judío y, por lejos, la elaboración más valiente acerca de la narrativa histórica judía.

     En su libro, Sand logra demostrar más allá de cualquier duda razonable que el pueblo judío nunca existió como una "nación-raza", y que ellos nunca compartieron un origen común. En vez de eso, ellos son una mezcla abigarrada de grupos que en varias etapas en la Historia adoptaron la religión judía.

     En caso de que usted siga la línea de pensamiento de Sand y resulte preguntarse "¿cuándo fue inventado el pueblo judío?", la respuesta de Sand es bastante simple: «En una cierta etapa en el siglo XIX, intelectuales de origen judío en Alemania, influídos por el carácter popular del nacionalismo alemán, asumieron la tarea de inventar a un pueblo "retrospectivamente", a partir de una necesidad de crear a un moderno pueblo judío» [2]

[2] http://www.haaretz.com/hasen/spages/966952.html

     En consecuencia, el "pueblo judío" es una noción fabricada que consiste en un pasado ficticio e imaginario con muy poco para respaldarlo de manera científica, histórica o textual. Además, Sand —quien detalló la fuentes tempranas de la Antigüedad— llega a la conclusión de que el Exilio judío es también un mito, y que es mucho más probable que los descendientes de la antigua gente semítica de Judea/Canaán sean los palestinos y no la horda ashkenazi de origen jázaro actualmente predominante a la cual él mismo reconocidamente pertenece.

     Bastante sorprendentemente, a pesar de que Sand logra desmantelar la noción de "pueblo judío", aplastar la noción de "pasado colectivo judío" y ridiculizar el ímpetu nacional chovinista judío, su libro es un éxito de ventas en Israel. Este solo hecho puede sugerir que aquellos que se llaman a sí mismos "la gente del libro" están comenzando ahora a aprender sobre el engaño y las devastadoras filosofías e ideologías que los convirtieron en lo que muchos consideran que son los malvados de nuestro tiempo.


Hitler Después de Todo Ganó

     Muy a menudo cuando se le pregunta a un judío "cosmopolita" y "secular" qué es lo que hace de él un judío, una respuesta superflua y extremadamente meditada le llega a usted: "Es Hitler quien me convirtió en un judío". Aunque el judío "cosmopolita", siendo un internacionalista, proscribiría las inclinaciones nacionales de otros pueblos, él insiste en mantener su propio derecho a la "auto-determinación". Sin embargo, no es realmente él mismo quien está en el núcleo de esta demanda única de orientación nacional, sino que es realmente el diablo, el archi-monstruo anti-judío, a saber, Hitler. Aparentemente, el judío cosmopolita celebra su derecho nacionalista mientras que Hitler debe ser culpado.

     En lo que se refiere al judío cosmopolita secular, Hitler ganó después de todo. Sand logra acentuar esta paradoja. Agudamente él sugiere que «mientras en el siglo XIX referirse a los judíos como una "identidad racial ajena" lo marcaría a uno como un anti-judío, en el Estado judío esta misma filosofía está incrustada mental e intelectualmente» (op. cit., p. 31). En Israel los judíos celebran su diferenciación y sus condiciones únicas. Además, dice Sand, "Hubo épocas en Europa en que uno sería etiquetado como un anti-judío por afirmar que todos los judíos pertenecen a una nación de un tipo foránea. Hoy en día, afirmar que los judíos nunca han sido y aún no son un pueblo o una nación, lo etiquetaría a uno como un odiador de los judíos"(Ibid.).

     Es en efecto bastante desconcertante que el único pueblo que logró mantener y sostener una identidad nacional racialmente orientada, expansionista y genocida, que no es diferente en absoluto de la ideología étnica nacionalsocialista, son los judíos, que fueron, entre otros, las principales víctimas apuntadas por la ideología y la práctica nacionalsocilista.


Nacionalismo en General y Nacionalismo Judío en Particular

     Louis-Ferdinand Céline mencionó que en la época de la Edad Media, en los momentos entre importantes guerras, los Caballeros cobrarían un precio muy alto por su preparación a morir en nombre de sus reinos. En el siglo XX los jóvenes se han precipitado a morir en masa sin exigir nada a cambio. A fin de entender este cambio en la conciencia de las masas necesitamos un modelo metódico y elocuente que nos permita entender de qué se trata el nacionalismo.

     Como Karl Deutsch, Sand considera la nacionalidad como una narrativa fantasmal. Es un hecho establecido que los estudios antropológicos e históricos de los orígenes de los diferentes así llamados "pueblos" y "naciones" conducen hacia el bochornoso desmoronamiento de cada etnicidad e identidad étnica. De aquí que sea bastante interesante averiguar que los judíos tienden a tomar muy en serio su propio mito étnico. La explicación puede ser simple, como Benjamin Beit Halachmi descubrió hace años. El sionismo iba a transformar la Bibliadesde ser un texto espiritual hasta un "registro de la tierra". En cuanto a eso, la verdad de la Biblia o de cualquier otro elemento de la narrativa histórica judía tienen muy poca importancia mientras no interfieran con la causa o la práctica política nacional judía.

     Uno también podría conjeturar que la carencia de un origen étnico claro no impide a la gente sentir una pertenencia étnica o nacional. El hecho de que los judíos estén lejos de ser lo que uno podría etiquetar como un Pueblo, y que la Biblia tenga muy poca verdad histórica en ella, realmente no impide a generaciones de israelíes y judíos identificarse con el rey David o con "Terminator"Sansón. Evidentemente, la carencia de un origen étnico inequívoco no impide que la gente se vea a sí misma como parte de un pueblo. Del mismo modo, ello no impediría al judío nacionalista sentir que él pertenece a algún colectivo abstracto mayor.

     En los años '70, Shlomo Artzi, en ese entonces un joven cantante israelí que estaba destinado a convertirse en la mayor estrella de rock de Israel de todos los tiempos, publicó una canción que se había convertido en un éxito clamoroso en cuestión de horas. Éstos son los primeros versos:

«De repenteun hombre se despiertapor la mañana.
Él siente que él es la gentey comienza a caminar.
Y a cada uno con quien se topaél le dice: Shalom».

     Hasta cierto punto Artzi inocentemente expresa en su letra lo repentino y casi imprevisto involucrado en la transformación de los judíos en un Pueblo. Sin embargo, casi simultáneamente, Artzi contribuye al ilusorio mito nacional de la nación que busca la paz. Artzi debería haber sabido en ese entonces que el nacionalismo judío era un acto colonialista a costa de la gente palestina autóctona.

     Aparentemente, el nacionalismo, la pertenencia nacional y el nacionalismo judío en particular, crean una importante tarea intelectual. Curiosamente, los primeros en tratar teórica y metódicamente con cuestiones que tienen que ver con el nacionalismo, fueron los ideólogos marxistas. Aunque Marx mismo dejó de abordar el tema suficientemente, a principios del siglo XX los levantamientos y demandas nacionalistas en Europa central y del Este sorprendieron a Lenin y a Stalin no preparados.

     "La contribución de los marxistas al estudio del nacionalismo puede ser vista como el foco en la profunda correlación que existe entre el surgimiento de la economía libre y el desarrollo del Estado nacional"(Ibid., p. 42). De hecho, Stalin iba a resumir la postura marxista sobre el asunto. "La nación", dice Stalin, "es una colaboración sólida entre seres que fueron creados históricamente y que formaron los siguientes cuatro significativos fenómenos: la comunidad de lengua, la comunidad de territorio, la comunidad de economía y la comunidad de significado psíquico..."(Ibid.).

     Como uno esperaría, la tentativa materialista marxista de entender el nacionalismo carece de una visión histórica de conjunto adecuada. En vez de ello se basaría sobre una lucha de clases. Por algunas obvias razones, tal visión era popular entre aquellos que creen en el "socialismo de una nación". Entre ellos podemos considerar a los defensores de una rama izquierdista del sionismo.

     Para Sand, el nacionalismo evolucionó debido al "enajenamiento creado por la modernidad que separa a la gente de su pasado inmediato"(Ibid., p. 62). La movilidad creada por la urbanización y la industrialización aplastó al sistema social jerárquico así como al continuumentre pasado, presente y futuro. Sand señala que antes de la industrialización, el campesino feudal no necesariamente sentía la necesidad de una narrativa histórica de Imperios y reinos. El súbdito feudal no necesitaba una extensa narrativa histórica abstracta de grandes colectivos, que tenía muy poca importancia para la necesidad existencial concreta e inmediata. «Sin una percepción de progreso social, ellos se las arreglaron bien con un cuento religioso imaginario que contenía un mosaico de memoria que carecía de una dimensión real de un tiempo que se movía hacia adelante. El "final" era el comienzo, y la eternidad, un puente tendido entre la vida y la muerte» (Ibid.).

     En el mundo secular y urbano moderno, el "tiempo" se había convertido en el principal receptáculo de la vida que ilustraba un significado simbólico imaginario. El tiempo histórico colectivo se había convertido en el ingrediente elemental de lo personal e íntimo. La narrativa colectiva le da forma al significado personal y a lo que parece ser "real". En tanto algunas mentes banales todavía insisten en que "lo personal es político", sería mucho más inteligible sostener que, en la práctica, es realmente al contrario. Dentro de la condición post-moderna, lo político es personal y el sujeto es lo hablado más bien que el hablante mismo. La autenticidad, con respecto a esto, es un mito que se reproduce en la forma de un identificador simbólico.

     La lectura que hace Sand del nacionalismo como un producto de la industrialización, la urbanización y el secularismo, tiene mucho sentido cuando tenemos en cuenta la sugerencia de Uri Slezkin de que los judíos son los "apóstoles de la modernidad", el secularismo y la urbanización. Si los judíos resultaran encontrarse en el centro de la urbanización y la secularización, no debería ser una sorpresa para nosotros que los sionistas fueran tan creativos como otros en la invención de su propio cuento imaginario colectivo fantasmal. Sin embargo, a la vez que insistían en su derecho a ser "como cualquier pueblo", los sionistas han logrado transformar su pasado colectivo imaginario en una agenda global, expansionista y despiadada, así como la amenaza más grande para la paz mundial.


No Existe una Historia Judía

     Es un hecho establecido que ni un solo texto de historia judía había sido escrito entre el siglo I y principios del siglo XIX. El hecho de que el judaísmo esté basado en un mito histórico religioso puede tener algo que ver con ello. Un adecuado y cuidadoso examen del pasado judío nunca fue una preocupación primaria dentro de la tradición rabínica. Uno de los motivos es probablemente la carencia de una necesidad de un esfuerzo metódico tal. Para el judío que vivió durante la Antigüedad y la Edad Media, había suficiente en la Biblia para responder a la mayoría de las preguntas relevantes que tienen que ver con la vida cotidiana y con el sentido y el destino judío. Como dijo Shlomo Sand, «un tiempo cronológico secular era extraño al "tiempo de la Diáspora", que fue formado por la expectativa de la venida del Mesías».

     Sin embargo, a la luz de la secularización, urbanización y emancipación alemanas, y debido a la decreciente autoridad de los líderes rabínicos, una necesidad emergente de una causa alternativa surgió entre los intelectuales judíos que despertaban. El judío emancipado se preguntó quién era él y de dónde venía. Él también comenzó a especular sobre cuál podría ser su rol dentro de la sociedad europea que se abría rápidamente.

     En 1820 el historiador judío alemán Isaak Markus Jost (1793-1860) publicó el primer trabajo histórico serio sobre los judíos, a saber, "La Historia de los Israelitas". Jost evitó el período bíblico y prefirió comenzar su viaje con el reino de Judea. Él también compiló una narrativa histórica de diferentes comunidades judías de todo el mundo. Jost comprendió que los judíos de su tiempo no formaban una continuumétnico. Él comprendió que los israelitas de un lugar a otro eran bastante diferentes. De ahí que él pensara que no había nada en el mundo que debiese impedir a los judíos la asimilación total. Jost creía que dentro del espíritu de la Ilustración, tanto los alemanes como los judíos volverían la espalda a la institución religiosa opresiva y formarían una nación sana basada en un creciente sentido de pertenencia geográficamente orientado.

     Aunque Jost estuviera consciente del desarrollo del nacionalismo europeo, sus seguidores judíos estaban más bien descontentos con su optimista lectura liberal del futuro judío. «Desde el historiador Heinrich Graetz en adelante, los historiadores judíos comenzaron a dibujar la historia del judaísmo como la historia de una nación que había sido un "reino", expulsada al "exilio", convertida en un pueblo errante y que finalmente se devolvió y regresó a su lugar de nacimiento».

     Para Moisés Hess sería una lucha racial más bien que una lucha de clases la que definiría la forma de Europa. En consecuencia, sugiere Hess, los judíos mejor debían retornar y reflexionar sobre su herencia cultural y origen étnico. Para Hess, el conflicto entre judíos y Gentiles era el producto de la diferenciación racial, y de ahí, inevitable.

     El camino ideológico que va desde la orientación racista pseudo-científica de Hess hasta el historicismo sionista es bastante obvio. Si los judíos son en efecto una entidad racial foránea (como creían Hess, Jabotinsky y otros), ellos mejor habrían de buscar su patria natural, y esa patria no es ninguna otra que el Eretz Yizrael. Claramente, la suposición de Hess en cuanto a un continuum racial no fue científicamente aprobada. A fin de mantener la fantasmal narrativa emergente, tuvo que ser erigido un orquestado mecanismo de negación sólo para asegurarse de que algunos hechos embarazosos no interferirían con la creación nacional emergente.

     Sand sugiere que el mecanismo de negación fue en gran parte orquestado y muy bien meditado. La decisión de la Universidad Hebrea en los años '30 de dividir Historia Judía e Historia General en dos departamentos distintos era mucho más que sólo un asunto de conveniencia. El logosdetrás de dicha división es un indicio de la auto-comprensión judía. A los ojos de los académicos judíos, la condición judía y la psique judía eran únicas y deberían ser estudiadas por separado. Aparentemente, incluso dentro de la academia judía, un status supremo está reservado para los judíos, su historia y su auto-percepción. Como Sand agudamente descubre, dentro de los departamentos de Estudios Judíos el investigador se dispersa entre lo mitológico y lo científico mientras el mito mantiene su primacía. Y, sin embargo, esto a menudo entra en un dilema atascante debido a los "pequeños hechos engañosos".


El Nuevo Israelita, la Biblia y la Arqueología

     En Palestina, los nuevos judíos y más tarde los israelíes estaban determinados a reclutar el Antiguo Testamentoy a transformarlo en el código amalgamador del judío futuro. La "nacionalización" de la Biblia iba a plantar en los judíos jóvenes la idea de que ellos son los seguidores directos de sus grandes antepasados antiguos. Teniendo en cuenta el hecho de que la nacionalización fue en gran parte un movimiento secular, la Biblia fue despojada de su significado espiritual y religioso, y fue vista, en cambio, como un texto histórico que describe una cadena real de acontecimientos del pasado. Los judíos que habían logrado ahora matar a su dios aprendieron a creer en ellos. Masada, Sansón y Bar-Kochba se convirtieron en narrativas suicidas maestras.

     A la luz de sus antepasados heroicos, los judíos aprendieron a amarse a sí mismos tanto como ellos odian a otros, salvo que esta vez ellos poseían el poder militar para provocar un dolor real a sus vecinos. Más preocupante era el hecho de que en vez de una entidad sobrenatural —a saber, Yahvé— que les ordena que ellos invadan la tierra y lleven a cabo un genocidio y roben su "tierra prometida" a sus habitantes autóctonos, dentro de su proyecto de renacimiento nacional fueron ellos por sí mismos, Herzl, Jabotinsky, Weitzman, Ben-Gurión, Sharon, Peres, Barak, quienes decidieron expulsar, destruír y matar. En vez de Yahvé, se trataba entonces de los judíos que mataban en nombre del pueblo judío. Ellos lo hicieron mientras los símbolos judíos decoran sus aviones y tanques. Ellos siguieron órdenes que fueron dadas en el lenguaje recién restaurado de sus antepasados.

     Bastante sorprendentemente, Sand, quien es sin duda un académico sobresaliente, deja de mencionar que el secuestro sionista de la Biblia fue de hecho una desesperada respuesta judía al Romanticismo Temprano alemán. Sin embargo, a la vez que los filósofos, los poetas, los arquitectos y los artistas alemanes estaban ideológica y estéticamente excitados con respecto a la Grecia pre-socrática, sabían muy bien que ellos no eran exactamente hijos e hijas del Helenismo. El judío nacionalista fue un paso más adelante: él se incluyó a sí mismo en una fantasmal cadena de sangre que se remontaba a sus míticos antepasados, no mucho después de que él restaurara el antiguo idioma de aquéllos. Más bien que una lengua sagrada, el hebreo se había convertido en un lenguaje hablado. El Romanticismo Temprano alemán nunca fue tan lejos.

     Los intelectuales alemanes durante el siglo XIX estaban también totalmente conscientes de la diferencia entre Atenas y Jerusalén. Para ellos, Atenas significaba el capítulo universal y épico de la Humanidad y el humanismo. Jerusalén era, por el contrario, el gran capítulo de la barbarie tribal. Jerusalén era una representación del despiadado dios banal, anti-universal y monoteísta, el que asesina a los ancianos y los niños. La temprana Era Romántica germánica nos dejó a Hegel, Nietzsche, Fichte y Heidegger y sólo a unos pocos judíos odiadores de sí mismos, entre ellos principalmente a Otto Weininger. El habitante de Jerusalén no nos dejó un solo maestro pensador ideológico. Algunos eruditos judíos alemanes de segunda categoría trataron de predicar Jerusalén en los foros germánicos, entre los cuales estaban Herman Cohen, Franz Rosenzveig y Ernst Bloch. Ellos obviamente no se dieron cuenta de que eran los rastros de Jerusalén en el cristianismo lo que los tempranos Románticos alemanes despreciaban.

     En su esfuerzo por resucitar a "Jerusalén", la Arqueología fue reclutada para proporcionar a la épica sionista sus fundamentos "científicos" necesarios. La Arqueología debía unificar el tiempo bíblico con el momento del renacimiento. Probablemente el momento más asombroso de esta extraña tendencia fue la "ceremonia de entierro militar" de Mayo de 1982 de los huesos de Shimon bar-Kochba, un rebelde judío que murió 2.000 años antes [3]. Llevada a cabo la ceremonia por el principal rabino castrense, a algunos huesos esporádicos encontrados en una cueva cerca del Mar Muerto se les dio un entierro militar televisado. En la práctica, unos dudosos restos de un rebelde judío del siglo I fueron tratados como si fuese una baja del ejército israelí (IDF). Claramente, la arqueología tenía un papel nacional que jugar, y fue reclutada para cohesionar el pasado y el presente, a la vez que excluía el Galut(Exilio o Diáspora).

[3] http://www.jewishpress.com/sections/features/features-on-jewish-world/the-burial-of-the-bar-kochba-bones/2015/02/12/ y https://highered.nbclearn.com/portal/site/HigherEd/flatview?cuecard=6107

     Bastante asombrosamente, no pasó mucho tiempo antes de que las cosas tomaran un giro opuesto. Puesto que la investigación arqueológica se hace cada vez más independiente del dogma sionista, la incómoda verdad se filtró. Sería imposible basar la veracidad del cuento bíblico en hechos forenses. Si es que algo, la arqueología refuta la historicidad de la historia bíblica. Las excavaciones revelaron el hecho embarazoso: la Biblia es una innovadora colección de literatura ficticia.

     Como señala Sand, la historia bíblica temprana está empapada con filisteos, arameos y camellos. De manera bastante desconcertante, en cuanto las excavaciones nos ilustran, los filisteos no aparecieron en la región antes del siglo XII a.C., los arameos aparecen un siglo más tarde y los camellos no mostraron sus caras alegres antes del siglo VIII. Estos hechos científicos llevan a los investigadores sionistas a una confusión severa. Sin embargo, para investigadores no-judíos como Thomas Thompson, quedó bastante claro que la naración bíblica es "una colección tardía de literatura innovadora escrita por un talentoso teólogo" (Sand, op. cit., p. 117). La Biblia parece ser un texto ideológico que debía servir para una causa social y política. De manera bastante bochornosa, no se encontró mucho en Sinaí para demostrar la historia del legendario Éxodo egipcio, donde aparentemente 3 millones de hombres, mujeres y niños hebreos marcharon por el desierto durante 40 años sin dejar un solo rastro detrás, ni siquiera un solo pan sin levadura.

     La historia del reasentamiento bíblico y el genocidio de los cananeos que los israelíes contemporáneos imitan con tanto éxito son otros mitos. Jericó, la protegida ciudad que fue derribada por los sonidos de cuernos y una todopoderosa intervención sobrenatural, era sólo un pueblo diminuto durante el siglo XIII a.C.

     Mientras Israel se considera a sí mismo como la resurrección del monumental reino de David y Salomón, la excavación que se llevó a cabo en la Ciudad Vieja de Jerusalén en los años '70 reveló que el reino de David no era más que un diminuto asentamiento tribal. La evidencia que (el arqueólogo) Yigal Yadin relacionó con el rey Salomón había sido refutada más tarde por pruebas forenses hechas con el carbono 14. El hecho inquietante ha sido científicamente establecido: la Biblia es un cuento ficticio, y no mucho allí puede dar base ni glorificar la existencia del pueblo hebreo en Palestina en ninguna etapa.


¿Quién Inventó a los Judíos?

     En las primeras páginas de su texto, Sand plantea las preguntas cruciales y probablemente las más relevantes: ¿Quiénes son los judíos?; ¿de dónde vinieron ellos?; ¿cómo es que en diferentes períodos históricos ellos aparecen en algunos sitios muy diferentes y remotos?.

     Aunque la mayoría de los judíos contemporáneos estén completamente convencidos de que sus antepasados son los israelitas bíblicos que resultaron ser brutalmente desterrados por los romanos, la verdad debe ser dicha. Los judíos contemporáneos no tienen nada que ver con los antiguos israelitas, quienes nunca fueron enviados al exilio porque tal expulsión nunca tuvo lugar. El Exilio causado por los romanos es sólo otro mito judío.

     "Comencé a mirar los estudios de investigación sobre el exilio desde aquella tierra", dice Sand en una entrevista con el periódico Haaretz [4], "pero para mi asombro descubrí que no hay ninguna literatura al respecto. La razón es que nadie desterró a la gente del país. Los romanos no exiliaban pueblos y ellos no podían haber hecho eso incluso si lo hubiesen querido. Ellos no tenían trenes ni camiones para deportar a poblaciones enteras. Aquella clase de logística no existió sino hasta el siglo XX. A partir de esto, en efecto, nació el libro entero: de la comprensión de que la sociedad judaica no fue dispersada ni fue desterrada".


     En efecto, a la luz de la simple percepción de Sand, la idea del exilio judío es risible. Pensar que la marina imperial romana trabajaba todo el día todos los días arrastrando a la fuerza a judíos hacia Córdoba y Toledo puede ayudar a los judíos a sentirse importantes así como dignos de ser exiliados, pero el sentido común sugeriría que la armada romana tenía cosas mucho más importantes que hacer.

     Sin embargo, mucho más interesante es el resultado lógico: si la gente de Israel no fue expulsada, entonces los verdaderos descendientes de los habitantes del reino de Judá deben ser los palestinos...

     «Ninguna población permanece pura por un período de miles de años», dice Sand. «Pero las probabilidades de que los palestinos sean descendientes del antiguo pueblo judaico son mucho mayores que las probabilidades de que usted o yo seamos sus descendientes. Los primeros sionistas, hasta la Rebelión árabe [1936-1939], sabían que no había habido ningún exilio, y que los palestinos descendían de los habitantes de la tierra. Ellos sabían que los agricultores no se marchan sino hasta que ellos son expulsados. Incluso Yitzhak ben-Zvi, el segundo Presidente del Estado de Israel, escribió en 1929 que "la gran mayoría de los campesinos agricultores no tiene sus orígenes en los conquistadores árabes, sino más bien antes de entonces, en los agricultores judíos que eran numerosos y la mayoría en la constitución de la tierra"».

     En su libro Sand va más adelante aún y sugiere que hasta el Primer Levantamiento árabe (1929) los presuntos líderes sionistas izquierdistas tendieron a creer que los campesinos palestinos, quienes son realmente "judíos por su origen", se asimilarían dentro de la cultura hebrea emergente y finalmente se integrarían al movimiento sionista. Ber Borochov creía que "un falach (campesino palestino), vestido como un judío, y comportándose como un judío de clase obrera, no será en absoluto diferente del judío". Esta misma idea reapareció en el texto de Ben-Gurión y Ben-Zvi en 1918. Ambos líderes sionistas comprendieron que la cultura palestina estaba empapada con rastros bíblicos, tanto lingüística como geográficamente (nombres de villas, pueblos, ríos y montañas). Tanto Ben-Gurión como Ben-Zvi consideraron, al menos en aquella temprana etapa, a los palestinos autóctonos como parientes étnicos que tenían derecho a la tierra y como potenciales hermanos. Ellos también consideraban al Islam como una amistosa "religión democrática". Claramente, después de 1936 tanto Ben-Zvi como Ben-Gurión atenuaron su entusiasmo "multicultural". Por lo que se refiere a Ben-Gurión, la limpieza étnica de los palestinos pareció ser mucho más atractiva.

     Uno puede preguntarse: si los palestinos son los verdaderos judíos, ¿quiénes son aquellos que insisten en llamarse a sí mismos "judíos"?.

     La respuesta de Sand es bastante simple, y sin embargo tiene mucho sentido: "La gente no fue dispersada, pero la religión judía sí se difundió. El judaísmo era una religión proselitista. Contrariamente a la opinión popular, en el judaísmo temprano había una gran sed de convertir a otros".

     Claramente, las religiones monoteístas, siendo menos tolerantes que las politeístas, tienen dentro de ellas un ímpetu creciente. El expansionismo judaico en sus primeros días era no sólo similar al cristianismo sino que fue dicho expansionismo el que plantó las semillas difusoras en el pensamiento y la práctica del cristianismo temprano.

     "Los hasmoneos", dice Sand, "fueron los primeros en comenzar a producir grandes cantidades de judíos mediante la conversión de masas, bajo la influencia del helenismo. Fue esta tradición de conversiones la que preparó el terreno para la posterior amplia diseminación del cristianismo. Después de la victoria del cristianismo en el siglo IV, el ímpetu de las conversiones se detuvo en el mundo cristiano, y hubo un rápido descenso en el número de judíos. Presumiblemente muchos de los judíos que aparecieron alrededor del Mediterráneo se hicieron cristianos. Pero entonces el judaísmo comenzó a difundirse por otras regiones, regiones paganas, como por ejemplo Yemen y África del Norte. Si el judaísmo no hubiera continuado avanzando en aquella etapa y si no hubiera seguido convirtiendo gente en el mundo pagano, hubiéramos permanecido como una religión completamente marginal, si hubiésemos sobrevivido en absoluto".

     Los judíos de España, de quienes creíamos que tenían lazos de sangre con los antiguos israelitas, parecen ser bereberes convertidos.

     "Me pregunté", dice Sand, "cómo tales grandes comunidades judías aparecieron en España. Y luego vi que Tariq ibn-Ziyad, el comandante supremo de los musulmanes que conquistaron España, era un bereber, y que la mayor parte de sus soldados eran bereberes. El reino bereber judío de Dahia al-Kahina había sido derrotado sólo 15 años antes. Y la verdad es que hay varias fuentes cristianas que dicen que muchos de los conquistadores de España eran judíos conversos. La fuente profundamente arraigada de la gran comunidad judía en España fueron aquellos soldados bereberes que se convirtieron al judaísmo".

     Como uno esperaría, Sand aprueba la presunción generalmente aceptada de que jázaros judaizados constituyeron los principales orígenes de las comunidades judías en Europa del Este, a las que él llama la Nación Yíddish. Cuando se le pregunta cómo es que ellos resultaron hablar yíddish, que en gran parte es considerado como un dialecto medieval alemán, él contesta: "Los judíos eran una clase de gente dependiente de la burguesía alemana en el Este, y por eso ellos adoptaron palabras alemanas".

     En su libro Sand logra producir un detallado relato de la saga jázara en la historia judía. Él explica lo que condujo al reino jázaro hacia la conversión. Teniendo en cuenta que el nacionalismo judío, en su mayor parte, es conducido por una élite jázara, deberíamos ampliar nuestro conocimiento íntimo de este muy único e influyente grupo político. La traducción de la obra de Sand a idiomas extranjeros es un deber inmediato.


¿Y Después Qué?

      El profesor Sand nos deja con la conclusión inevitable: los judíos contemporáneos no tienen un origen común, y su origen semítico es un mito. Los judíos no tienen su origen en Palestina en absoluto y, por lo tanto, su acción de un supuesto "retorno" a su "tierra prometida" debe ser comprendida como una invasión llevada a cabo por un clan tribal e ideológico.

     Sin embargo, aunque los judíos no constituyan ningún continuumracial, ellos por alguna razón resultan estar racialmente orientados. Como podemos notar, muchos judíos todavía ven el matrimonio mixto como la amenaza última. Además, a pesar de la modernización y la secularización, la gran mayoría de aquellos que se identifican como judíos seculares todavía sucumbe al ritual de sangre (circuncisión), un procedimiento religioso único que implica nada menos que la succión de sangre por un mohel [el rabino especializado en dicho ritual].

     Por lo que se refiere a Sand, Israel debería llegar a convertirse en "un Estado de sus ciudadanos". Tal como Sand, yo mismo creo en la misma visión utópica futurista. Sin embargo, a diferencia de Sand, comprendo que el Estado judío y sus lobbies que lo apoyan deben ser primero ideológicamente derrotados. La hermandad y la reconciliación son extrañas a la cosmovisión tribal judía y no tienen ningún espacio dentro del concepto del renacimiento nacional judío. Tan dramático como pueda sonar, un proceso de des-judificación debe ocurrir antes de que los israelíes puedan adoptar cualquier noción moderna universal de vida civil.

     Sand es sin duda un importante intelectual, probablemente el pensador israelí izquierdista más avanzado. Él representa la forma más alta de pensamiento que un israelí secular puede conseguir antes de cambiar o incluso desertar al lado palestino (algo que le sucedió sólo a unos pocos, incluído yo mismo). El entrevistador de HaaretzOfri Ilani dijo acerca de Sand que, a diferencia de otros "nuevos historiadores" que han tratado de debilitar las presunciones de la historiografía sionista, "Sand no se contenta con volver hasta 1948 o a los comienzos del Sionismo, sino que remonta miles de años".Éste es en efecto el caso. A diferencia de los "nuevos historiadores" que "descubren" una verdad que es conocida por cada niño palestino, es decir, la verdad de ser étnicamente limpiado, Sand erige un cuerpo de trabajo y pensamiento que apunta a la comprensión del sentido del nacionalismo judío y de la identidad judía. Ésta es en efecto la verdadera esencia de la erudición.

     Más bien que coleccionar algunos fragmentos históricos esporádicos, Sand busca el sentido de la Historia. Más bien que un "nuevo historiador" que busca un nuevo fragmento, él es un verdadero historiador motivado por una tarea humanista. De manera más fundamental, a diferencia de algunos de los historiadores judíos que contribuyen al así llamado discurso de Izquierda, la credibilidad y el éxito de Sand están basados en su argumento más bien que en sus antecedentes familiares. Él evita sazonar su argumento con sus parientes sobrevivientes del "Holocausto". Leyendo el feroz argumento de Sand, uno debería admitir que el sionismo con todas sus faltas ha logrado erigir dentro de sí un discurso disidente orgulloso y autónomo que es mucho más elocuente y brutal que el movimiento anti-sionista entero de todo el mundo.

     Si Sand está en lo correcto, y yo mismo estoy convencido por la fuerza de su argumento, entonces los judíos no son una raza sino más bien un colectivo de muchas personas que están en gran parte secuestradas por un movimiento nacional fantasmal tardío. Si los judíos no son una raza, realmente no forman uncontinuum racial y no tienen nada que ver con el semitismo, de manera que la acusación de "anti-semitismo" es, categóricamente, un significante vacío. Esto obviamente se refiere a un significante que no existe. En otras palabras, nuestra crítica del nacionalismo judío, del lobbismo judío y del poder judío sólo puede ser comprendida como una crítica legítima de su ideología y su práctica.

     Una vez más puedo decir que no estamos y nunca hemos estado contra los judíos (la gente) ni contra el judaísmo (la religión). Sin embargo, estamos en contra de una filosofía colectiva que tiene algunos claros intereses globales. A algunos les gustaría llamarlo Sionismo pero yo prefiero no hacer eso. El sionismo es un significante vago que es lejos demasiado estrecho para capturar la complejidad del nacionalismo judío, su brutalidad, su ideología y su práctica. El nacionalismo judío es un espíritu, y el espíritu no tiene límites claros. De hecho, ninguno de nosotros sabe exactamente dónde acaba la judeidad y dónde comienza el sionismo, así como no sabemos dónde acaban los intereses israelíes y dónde comienzan los intereses neoconservadores.

     Por lo que se refiere a la causa palestina, el mensaje es más bien devastador. Nuestros hermanos y hermanas palestinos están en la vanguardia de una lucha contra una filosofía muy devastadora. Sin embargo, claramente no son sólo los israelíes a quienes ellos combaten, junto con una filosofía pragmática más bien feroz que inicia conflictos globales a una escala gigantesca. Se trata más bien de una práctica tribal que busca tener influencia dentro de los pasillos del poder y de las súper-potencias en particular. El American Jewish Committeeinsiste en una guerra contra Irán. Sólo para estar en el lado seguro, David Abrahams, un "Amigo Laborista de Israel" dona dinero al Partido Laborista mediante intermediarios. Más o menos al mismo tiempo dos millones de iraquíes mueren en una guerra ilegal diseñada por un tal Wolfowitz. Mientras todo lo dicho está ocurriendo, millones de palestinos son privados de comida en campos de concentración, y Gaza está al borde de una crisis humanitaria. Mientras todo esto sucede, judíos "anti-sionistas" y judíos de Izquierda (incluído Chomsky) insisten en desmantelar la elocuente crítica contra el AIPAC, el lobby judío y el poder judío planteada por Mearsheimer y Walt en "The Israel Lobby and U.S. Foreign Policy" [5].

[5] http://www.lrb.co.uk/v28/n06/john-mearsheimer/the-israel-lobby

     ¿Es sólo Israel?, ¿es realmente el sionismo?, ¿o admitiremos que es algo mucho mayor que lo que tenemos derecho incluso a contemplar dentro de los límites intelectuales que impusimos sobre nosotros mismos? Como están las cosas, carecemos del coraje intelectual para encarar el proyecto nacional judío y sus muchos mensajeros alrededor del mundo. Sin embargo, ya que todo se trata de un asunto de cambio de conciencia, las cosas van a cambiar pronto. De hecho, este mismo texto debe demostrar que ellas ya están cambiando.

     Apoyar a los palestinos es salvar el mundo, pero a fin de hacer aquello tenemos que ser lo bastante valerosos para levantarnos y admitir que ésta no es simplemente una batalla política. No es sólo Israel, su ejército o su dirigencia, y ni siquiera es Dershowitz, Foxman y sus grupos silenciadores. Se trata realmente de una guerra contra un espíritu canceroso que secuestró a Occidente y, al menos momentáneamente, lo desvió de su inclinación humanista y sus aspiraciones atenienses. Luchar contra un espíritu es mucho más difícil que combatir a gente, precisamente porque uno debería luchar primero contra sus huellas dentro de uno mismo. Si queremos luchar contra Jerusalén, deberíamos encarar primero a la Jerusalén interior. Nosotros deberíamos estar delante del espejo, y mirar alrededor de nosotros. Deberíamos descubrir la empatía en nosotros mismos, en caso de que quede algo de ella.–




Sobre la Incorrecta Localización del Templo

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     Ofrecemos en castellano aquí otros dos artículos referidos a la equivocada determinación del lugar en que estuvo el templo judío de Jerusalén, que no sería la actual Explanada de las Mezquitas (Haram al-Sharif), ya que ésta estaría en el sitio donde estaba la Fortaleza Antonia que los romanos habían construído al Norte del lugar real de dicho templo, y a una mayor altura. Ambos textos son deudores del ya presentado Ernest L. Martin, quien popularizó dicha tesis. El primero (wnd.com), de Febrero de este año, se refiere a las ideas que difunde el arqueólogo aficionado y ex-investigador policiaco estadounidense Robert Cornuke (1951), conocido, entre otros, por su libro de 2014 "Temple. Amazing New Discoveries that Change Everything about the Location of Solomon's Temple", donde aporta algunos datos más a lo postulado por Martin. Y al final va un breve pero concentrado texto (popular-archaeology.com), de hace poco más de un mes, acerca de otra seguidora estadounidense del doctor Martin, la profesora universitaria retirada Marilyn Sams, autora del libro de 2015 "The Jerusalem Temple Mount Myth", que añade más pruebas a la tesis en cuestión.




¿PLEGARIAS A DIOS EN EL LUGAR EQUIVOCADO?
El Monte del Templo, "Traspapelado"
por Leo Hohmann
22 de Febrero de 2015



     Ha sido llamado el trozo de tierra más disputado en el mundo, la fisura en la cual tres importantes credos se reúnen, y se apartan. Ha habido guerras santas luchadas por razón de él y escrituras sagradas que han predicho batallas aún por venir. Se trata del Monte del Templo de Jerusalén.

     Pero ¿y si la historia estuviese equivocada?. ¿Y si el punto donde Salomón construyó el primer templo judío, y Herodes construyó el segundo, estuviera realmente aproximadamente 180 mts. al Sur, en un lugar conocido como la antigua Ciudad de David?.

     Robert Cornuke viaja por el mundo resolviendo los misterios de la Biblia: el Arca de Noé, el Arca de la Alianza (y el monte Sinaí en Arabia, entre otros) él los ha estudiado en profundidad. Ahora, él está obsesionado con el Templo judío.

     Su modesto sentido del humor y su estilo tranquilo lo han ayudado a conseguir acceso a algunos de los sitios arqueológicos del mundo más sensibles. Pero no se engañe. Él emprende cada misión con la obstinación de un policía callejero experto en investigaciones. Eso es porque él fue un policia callejero durante casi una década en California antes de que una batalla con armas de tres horas con un hombre atrincherado con 700 rondas de municiones hace algunos años hizo que él repensara sus opciones profesionales.

     Su nuevo libro, "Templo: Asombrosos Nuevos Descubrimientos que Cambian Todo acerca de la Localización del Templo de Salomón" (Temple, 2014), está llamando la atención en círculos académicos por su audacia pura. Sugerir que el tradicional Monte del Templo, donde los judíos han rezado en el Muro de los Lamentos y donde los musulmanes rezan en la Cúpula de la Roca, no es realmente el terreno santo que ellos creen que es, es un sacrilegio para muchos historiadores y arqueólogos, para no mencionar a los clérigos.

     Sin embargo, su caso está tan bien investigado que es difícil ignorarlo. Muchos están leyendo y releyendo, quizá esperando encontrar alguna obvia equivocación que permitiría que ellos descartaran su conclusión.Porque, si es verdadera, aquello significa lo impensable para los musulmanes, y abre nuevas posibilidades para los judíos.

     Él fue cuidadoso en señalar que ésta no era una idea suya. Él simplemente continuó y expandió el trabajo de Ernest L. Martin, un arqueólogo que escribió el libro de 1999 "Los Templos que Jerusalén Olvidó"(The Temples that Jerusalem Forgot).

     «Ésta no es mi creación», dijo él a WND. «Soy el beneficiario del doctor Martin, que fue el que realmente apareció con esta investigación, pero su libro no consiguió mucha atención porque contenía muchos detalles entre los cuales la gente avanzaba con dificultad. Yo traté de escribir un libro que fuera fácilmente leíble».

     «El sitio ha sido mal diagnosticado, y ha sido aceptado durante tanto tiempo que nadie se ha atrevido nunca a cuestionarlo», continuó Cornuke. «Lo investigué de acuerdo a mis mejores capacidades, desde el punto de vista de un investigador policial, y llegué a una razonable conclusión».

     Como él se ha atrevido a cuestionar lo que ha llegado a ser históricamente sacrosanto —la localización del primer y del segundo templo judío—, ha recibido muchas llamadas telefónicas.

     «He tenido a muchos académicos, tipos con doctorados y trabajando en doctorados, revisando esto conmigo, y dos están haciendo ahora sus tesis acerca de dónde estuvo localizado el templo, porque esto ha abierto una nueva veta entera», dijo Cornuke.

     «La arqueología de la Biblia es considerada como el tema más polémico dentro de la Arqueología, y el Monte del Templo es la parte más polémica de la arqueología de la Biblia, según el Discovery Channel», dijo Cornuke. «Literalmente, lo que estoy haciendo es tomar el asunto más polémico de la Arqueología. Entonces estoy sorprendido de que no haya recibido un correo electrónico personal o de que alguien no me haya llamado o me haya encarado y dicho: "Usted se equivoca con esta premisa, por esta razón..."».

     Entonces, exactamente ¿cuál es la prueba detrás de su premisa? Y si la Muralla Occidental no es parte de las ruinas del templo antiguo, entonces ¿qué es? Las respuestas que Cornuke da a estas preguntas, de ser probadas verdaderas, podrían remecer el mundo profético y sacudir el Oriente Medio en su núcleo.


"No quedará piedra sobre piedra"

     Él comienza su historia con la estratégica colocación de la Cúpula de la Roca y sigue con las enseñanzas de Jesús y el relato de testigo ocular del historiador judío Flavio Josefo.

     El califa árabe Adb al-Malik construyó la Cúpula de la Roca en 691 d.C. en un sitio elegido en gran parte porque eclipsaba a la iglesia del Santo Sepulcro, el lugar donde se cree que Jesús resucitó de los muertos. Los musulmanes ven su propia religión como la perfección del judaísmo y del cristianismo, y esa mentalidad de sustitución influye en su arquitectura a través de todo el Oriente Medio. Construír la Cúpula de la Roca más grande y encima de la iglesia que conmemora la resurrección de Cristo se entendía como un mensaje a los cristianos, que eran la religión dominante en el área antes de que llegaran los invasores musulmanes.

     Luego está la profecía de Jesús. En Mateo24, él y sus discípulos salieron del Templo, y Jesús les dijo: "¿Ven ustedes todas estas cosas? De cierto les digo que ninguna piedra será dejada aquí sobre otra que no sea derribada".

     Pero la Muralla Occidental donde los judíos todavía rezan tiene miles de piedras que permanecen intactas. Ellos creen que se trata de la muralla occidental de su templo y, por lo tanto, un lugar santo, a menudo referido como el Muro de los Lamentos. Pero los relatos históricos dicen que los romanos destruyeron tan totalmente el Templo judío en 70 d.C., que se convirtió solamente en un campo de malezas. Muchos judíos fueron llevados al cautiverio, y aquellos que quedaron con un recuerdo de la verdadera localización finalmente murieron, argumenta Cornuke.


La descripción de Josefo de la fortaleza romana

     Pero hay un relato escrito por Josefo, el autor del siglo I de "Las Guerras Judías",cuyos trabajos son considerados muy creíbles en otros temas, pero que por alguna razón su descripción de la localización del templo es denigrada y descartada por los historiadores modernos.

     Josefo escribió que el sitio que hoy es considerado el Monte del Templo era realmente una fortaleza romana llamada la Fortaleza Antonia. La fortaleza era lo bastante grande para mantener a la Décima Legión romana, aproximadamente 6.000 soldados más el personal de apoyo para un personal total de aproximadamente 10.000 hombres.

     «La fortaleza romana necesitaría al menos el área del actual Monte del Templo[36 acres, 14,5 hectáreas] para sustentarse», escribe Cornuke. «Josefo escribió que la fortaleza se decía que era mucho más grande que el templo, pero los eruditos dicen que el área del templo era mucho más grande que la fortaleza. Nuevamente, ¿quién tiene razón? Según muchos académicos, Josefo exageró y es el culpable».

     En 1973 el historiador Michael Avi-Yonah hizo un modelo de la Jerusalén del siglo I que mostraba a la fortaleza romana como un pequeño anexo al templo en la esquina Noroeste.


     Esto calza lindamente con la tradición a la vez que ignora los relatos de testigos oculares, dice Cornuke. «Todo esto ha resultado en que tenemos hoy casi cada documental de televisión sobre el asunto del templo mostrando la maqueta de Avi-Yonah como una propuesta ilustrativa "exacta en todo sentido"».

    Sólo que hay un problema: el tamaño asignado por la maqueta es lejos demasiado pequeño para acomodar a la legión romana descrita por Josefo.

     Y hay otra advertencia que considerar. Aparentemente un traductor de la obra de Josefo tradujo mal una palabra, tagma, o legión, como una "cohorte", que es un contingente mucho más pequeño de aproximadamente 480 hombres. En todas las otras ocasiones en que Josefo usa la palabra tagma, él la usa para describir números mucho más grandes de soldados, como las legiones 5ª, 10ª, 12ª y 15ª.

     "Una pequeña cohorte romana ciertamente armonizaría con una pequeña fortaleza romana como la que tenemos en el modelo de Avi-Yonah", escribe Cornuke. Pero 480 hombres ¿hubieran sido suficientes para mantener el orden en una provincia poblada por judíos propensos a los disturbios? Durante los festivales religiosos, la población de Jerusalén aumentaba desde aproximadamente 175.000 personas, durante el tiempo de Cristo, hasta más de 300.000.

     Eso, para no mencionar el Libro de los Hechos, que dice que Pablo fue detenido y escoltado por 470 hombres desde la Fortaleza Antonia hasta Cesarea. "De este modo, ¿debemos creer que una guarnición de sólo aproximadamente 480 hombres enviaría a 470 de ellos a Cesarea para proteger a un solo preso atado en cadenas, y luego quedaría la guarnición entera prácticamente vacia con un puñado de soldados para defender y controlar a no menos de un cuarto de millón de personas, dependiendo de la cantidad de asistentes?", pregunta Cornuke.


Otro testigo ocular y pistas de la Biblia

     Otro testigo ocular fue Eleazar bin-Jari, el comandante de los rebeldes judíos en Masada. Él describió Jerusalén como estando completamente en ruinas: "(Jerusalén) está demolida ahora hasta sus mismos cimientos, y no ha quedado nada sino aquel monumento de ella que se conserva, quiero decir el campamento de aquellos (los romanos) que la han destruído, que todavía está entre sus ruinas".

     En otras palabras, nada quedó en pie en Jerusalén además de la romana Fortaleza Antonia, con sus altas murallas de piedra todavía intactas. Eleazar dijo que el templo desapareció completamente, desarraigado hasta sus mismos fundamentos, cumpliéndose la profecía de Jesús.

     Este relato también cumple la profecía de Miqueas3:12: Ella dice "Sión (que es la Ciudad de David) será arada como un campo. Jerusalén se convertirá en montones de ruinas. Y las montañas del Templo, como las colinas desnudas del bosque". De este modo, si Jerusalén fue dejada con la muralla occidental del templo aún de pie, eso obliga a pensar pensar en Miqueas como un falso profeta.

     Cornuke cita un montón de otros versículos de la Biblia que apoyan su teoría sobre el sitio de templo como siendo "la fortaleza de Sión" en la Ciudad de David.

     Una poderosa pista puede ser encontrada en 2º Crónicas 3:1, que describe la localización donde Salomón construyó el templo "en el Monte Moria, donde el Señor se había aparecido a su padre David, en el lugar que David había preparado en el suelo para trillar de Ornán el jebusita". Este suelo para trillar, donde el trigo era separado de la paja, había sido comprado por David después de que él conquistó una fortaleza de 12 acres (4,8 hectáreas) en una colina al Sur de la actual sección de la Ciudad Vieja de Jerusalén. Aquella colina está localizada hoy dentro del parque nacional Murallas de la Ciudad de David en Jerusalén.

     Otra pista, el factor decisivo para Cornuke, llegó cuando él leyó el Libro de los Hechos 21:27-32. Allí se describe una escena de disturbios en la cual Pablo fue arrestado en el templo por el comandante de la guarnición romana. El comandante "inmediatamente tomó soldados y centuriones, y bajó corriendo a ellos (hacia el templo)".

     «El momento iluminador para mí vino cuando leí Hechos cap. 21», dijo Cornuke, «donde dice que ellos bajaron las escalinatas para tomar a Pablo. Bueno, no hay ninguna escalinata que baje desde el complejo del Monte del Templo tradicional. Desde el punto de vista de un policía, no hay ningún otro camino».

     O, como él escribe en su libro, «Si el Monte del Templo fue el lugar de la escena del alboroto en que estaba Pablo, entonces la gran pregunta es ¿desde dónde bajaría alguien para alcanzar a Pablo?». Por supuesto la respuesta es: usted no podría. A menos que el Monte del Templo tradicional fuera realmente la Fortaleza romana y el verdadero sitio del templo estuviera abajo, en la Ciudad de David.


Pistas de los Rollos y en el agua

     Cornuke también encontró pistas en los Rollos del Mar Muerto, que contenían esta críptica instrucción:"Harás un canal en todo el rededor del recipiente dentro del edificio. El canal va desde el recipiente hasta un pasaje vertical, baja y desaparece en medio de la tierra, de modo que el agua fluye y corre y se pierde en medio de la tierra".

     Esta descripción es la de una fuente natural de agua debajo del templo judío.

     Tácito, el historiador romano, igualmente registró que el templo en Jerusalén tenía una fuente natural de agua que surgía desde su interior.

     Hay sólo una fuente a la que esto podría referirse, la Fuente Gihón [o Siloé], en la vieja Ciudad de David, también llamada la Fortaleza de Sión en la Escritura. «No hay ningún otro tal manantial en ninguna parte en Jerusalén», escribe Cornuke. «La conexión con el manantial, especialmente un manantial poderoso y profuso, es como un indicador láser apuntado a la Ciudad de David y no al Monte del Templo como el sitio del templo».

     Cornuke cita a Joel 3:18, que dice: «Una fuente fluirá desde la casa del Señor», y el Salmo 87:5-7, que dice: «Y de Sión será dicho... Tanto los cantantes como los instrumentistas dicen: "Todas mis fuentes están dentro de ti"».

     Y otra pepita se encuentra en Ezequiel 47:1-2: "Entonces él me llevó de vuelta a la puerta del templo; y había agua, fluyendo desde debajo del umbral del templo hacia el Este, ya que el frente del templo daba la cara al Este; el agua fluía desde debajo del lado derecho del templo, al Sur del altar".

     Los muchos animales muertos para los sacrificios del templo habrían requerido que una poderosa fuente de agua removiera la enorme cantidad de sangre que habría ido quedando. El sitio de la Ciudad de David tiene esa fuente de agua, y el supuesto Monte del Templo habría estado a casi 400 metros de distancia de la Fuente Gihón.


     Hacia este punto, la narrativa mantenida durante mucho tiempo por los escritores de la historia comienza a desenredarse. Como un ex-policía, Cornuke no está tan sorprendido.

     «Usted sabe cuánta gente está en la cárcel ahora mismo que ha sido falsamente acusada, porque usted siempre puede tomar a alguien y convertirlo en el tipo malo, pero no todo calza», dijo Cornuke a WND. «Es como un cubo de Rubik que comienza a ensamblarse, pero usted es sólo una pequeña pieza desconectada. O piense en la rueda de un automóvil. Si usted no tiene la rueda del tamaño correcto, los agujeros no van a alinearse con las pequeñas tuercas, y entonces usted tiene que encontrar las partes que calcen. Y nada realmente calza en el complejo del Monte del Templo; simplemente no logran alinearse».


Implicaciones sorprendentes para judíos y musulmanes

     El investigador de la Biblia Chuck Missler, cuando se encontró con la evidencia de Cornuke, dijo que las implicaciones para el futuro son asombrosas. "Como Chuck Missler me dijo, si esto es verdadero, lo cambia todo", dijo Cornuke. "Esto pone a la arqueología del Oriente Medio de cabeza".

     Esto cambia toda la situación, porque libera a la gente judía para comenzar a reconstruír en un sitio que ya está bajo su control.

     «Lo que esto significa es que los judíos ahora tienen un lugar donde ellos pueden reconstruír su templo pronosticado hace mucho tiempo, y para los musulmanes, ellos perderían el control, el cual aman tener sobre los judíos», dijo Cornuke. «Ellos pueden decir: "Usted puede rezar aquí" o "Usted no puede rezar allí", y los judíos están realmente frustrados por todo esto. Pero si ellos pueden reconstruír allí, en la Ciudad de David, y pueden hacerlo mañana, ¿qué tiene que ver eso con la profecía del fin de los tiempos, que dice que el Anticristo irá allí y se sentará en el templo y que eso conducirá a la venida de Cristo? La gente ha estado luchando por aquella área de bienes inmuebles durante miles de años, y esto ahora cambia el juego entero en el Oriente Medio».

     Cornuke la llama "la equivocación más grande en la historia arqueológica que nadie realmente ha cuestionado".

     «Cada libro que leí decía que éste es el lugar indiscutible en el que realmente podemos confiar, pero la Arqueología no es una ciencia. Es un arte. Usted tiene que recoger muchas cosas para desarrollar una conclusión, y luego ésa es su mejor conjetura. No es una evidencia empírica. Yo no soy un arqueólogo. Tengo un doctorado en Biblia y teología, y una trayectoria como investigador de la policía, de modo que lo que realmente tengo es una experiencia muy bien establecida en investigaciones. Y yo sólo usé aquellas habilidades».

     Cornuke dijo que él carece de las restricciones profesionales de los arqueólogos, lo que lo deja en libertad para asumir mayores riesgos.

     «Los académicos quieren ser publicados. Ellos quieren prestigio, o quieren ser promovidos», dijo él. «Ése es el sistema universitario bajo el cual ellos trabajan».

     «Los investigadores policiacos tienen un método completamente diferente: estamos interesados en algo: ¿cuáles son los problemas y cuales son las posibilidades?».

     «Josefo dijo que la fortaleza miraba desde lo alto el templo. Nada calza en el Monte del Templo, pero los guías turísticos han dicho eso durante tantos años, la misma cosa año tras año. Después de tanto tiempo, nadie nunca lo cuestiona. Así son las cosas».

     Por su misma naturaleza, la erudición universitaria está poco dispuesta a "probar las aguas", dijo Cornuke.

     «Ellos quieren permanecer en el puerto seguro porque poner a prueba las cosas los expondría al escrutinio, y usted va a ser criticado ferozmente, tenga usted razón o esté equivocado, y la mayor parte de los académicos no quiere tener eso, entonces ellos esperan a otros».

     «Yo no quiero atentar contra la erudición», siguió él. «Yo quiero decir: oye, ésta es la evidencia, y es muy provocativa, por decir lo menos».


La respuesta judía

     En una reciente visita al Monte del Templo en Jerusalén, Cornuke dijo que él hizo una encuesta informal de opinión a la gente judía en el Muro de los Lamentos.

     «Cada uno de más de 40 años dijo: "No me importa lo que usted diga, o qué evidencia tenga usted, eso no va a cambiar el modo en que pienso. Mi padre me trajo aquí, mi abuelo me trajo aquí, y todos han estado en el Muro Occidental"».

     Aquellos menores de 40 años estaban menos casados con la tradición.

     «Ellos dijeron: "Bien, ahora podemos reconstruír nuestro templo". Ellos estaban excitados. Ellos querían saber más. Entonces sus padres vendrían y dirían: "No hables más con este gentil"».

     «Tuve incluso a un hombre que representaba a un gabinete oficial israelí que quería conseguir mi libro para el Primer Ministro Benjamin Netanyahu, de modo que lo firmé y él estaba entregándoselo ese día a Netanyahu».

     Eso fue sólo hace dos semanas.

     «Y he tenido a varios rabinos que se han puesto en contacto conmigo», dijo Cornuke. «Di una charla en New Hampshire donde a la comunidad judía se le pidió asistir y oír mi presentación. Antes de que yo siquiera comenzara, un padre, la madre, la hija y el hijo se levantaron y salieron. Ellos obviamente querían mostrar su desacuerdo. Pero después de mi presentación, la comunidad judía, que estaba allí en una gran cantidad, se levantó con lágrimas en sus ojos y dijeron: "Lamentamos que hayamos perdido esto en la historia, y gracias". Quedé asombrado con aquella respuesta».

     Cornuke dice que él puede entender que la renuencia de los líderes judíos de Jerusalén a aceptar su teoría, porque aceptarla requiere que ellos se enfrenten con el hecho de que ellos han estado rezando en la pared de una fortaleza romana todos estos años. Pero si se la evalúa objetivamente, él ve la evidencia como algo abrumador.

     «Ésta no es una conjetura mía. Como un investigador de la policía, siento que este libro persuadiría a un jurado», dijo él. «No lo escribí para tener razón; lo escribí como un regalo a la gente judía, de modo que ellos puedan reconstruír su templo».

     Pero la respuesta de los judíos más viejos en el Muro de los Lamentos no fue positiva.

     «Ellos levantaron sus manos y señalaron a las piedras de base, y dijeron: "Mire, hay miles de enormes piedras, piedras fundacionales, aquí, y su Jesús está equivocado, porque nuestro Templo está aquí"».

     Así, Cornuke, o quizá otros que siguen sus indicaciones, tienen más trabajo en convencer a la gente judía de que ellos tienen un sitio libre y despejado para reconstruír su templo.

     «Viene un tiempo en que usted tiene que alimentar a la fuerza su mente más allá de la razón y la lógica para aceptar algunas de estas cosas que la tradición enseña», dijo él. «Jesús dijo: "cada piedra será derribada", y cada palabra de su profecía ha sido cumplida».

     Si algunos no están preparados para aceptar sus conclusiones, está bien, dice Cornuke. "Nunca descubriremos nada. Dios lo revela a su tiempo y a su manera, pero él siempre puede usar a un estúpido policía de California para hacer eso".



¿Llorando ante el Muro Equivocado?
15 de Noviembre de 2015


     Desafiando la tradición aceptada, algunos investigadores han propuesto una polémica nueva perspectiva acerca  del antiguo Monte del Templo de Jerusalén y la localización del templo que era central para la adoración de israelitas y judaítas en tiempos bíblicos.


     Durante cientos de años, la tradicional localización aceptada durante mucho tiempo del templo de Salomón y el posterior Segundo Templo ampliado por Herodes el Grande en Jerusalén los ha colocado dentro del recinto que ahora contiene al famoso Haram al-Sharif(la Cúpula de la Roca y la mezquita Al-Aqsa), por otra parte conocido como el "Noble Santuario". Aquél ha sido un espacio sagrado para tres importantes religiones mundiales durante siglos.

     En años recientes, sin embargo, algunos investigadores han cuestionado la visión tradicional. No sin controversia, ellos han esgrimido sus argumentos alrededor de lo que ellos consideran que es una lectura incorrecta o una denegación de la literatura de Flavio Josefo y otros en cuanto al tamaño y localización de la Fortaleza Antonia, el enclave romano en la Jerusalén del siglo I ocupada por los romanos que representaba la fuerza de Roma en la, por otra parte, conflictiva (para los romanos) provincia de Judea. 

     Más recientemente, la investigadora Marilyn Sams ha propuesto el argumento de que la Fortaleza Antonia, representada por la tradición como una estructura monumental o parecida a un castillo localizada durante la época herodiana justo al Norte del Segundo Templo, en la periferia del gran recinto rectangular del templo, era realmente un complejo mucho más grande, más parecido a la disposición estándar de las fortalezas romanas que existieron durante la época de la Jerusalén del siglo I, el tiempo de Jesús.

     El tamaño real y la naturaleza de este modelo alternativo para la Fortaleza Antonia, argumenta ella, habría abarcado el área que la mayor parte de los académicos y los historiadores han identificado con el recinto del templo. Ella basa su argumento al menos en parte en las descripciones registradas por Josefo y otros.

     «Josefo describió la fortaleza como "erigida sobre una roca de 50 codos [23 mts.] de altura" sobre un "gran precipicio". Tenía "toda clase de cuartos y otras comodidades, como patios y sitios para el baño, y amplios espacios para campamentos, de manera que tenía todas las comodidades de las ciudades y parecía como que estuviera compuesta de varias ciudades". Con murallas de 60 pies [18 mts.], cuatro torres (siendo la del Sudeste de 105 pies [32 mts.] de alto), y piedras lisas cubriendo la ladera en su lado Este, dominaba el templo al Sur de ella, lista para impedir los ataques más formidables».

     Considerando esta descripción, según Sams, suponer la Fortaleza Antonia al Norte de la (presunta) localización del templo en el área del Monte del Templo suscrita por la mayor parte de los eruditos, habría sido imposible. Simplemente no cabría.

     Además, Sams cita la insuficiencia o escasez de evidencias arqueológicas para el concepto tradicional de la Fortaleza Antonia cerca del área, en la posición periférica del Norte del Monte del Templo, y señala las pruebas más abundantes desenterradas en otros puntos más cercanos a la actual y tradicionalmente aceptada localización del templo, sugiriendo que esto apoya el concepto de un campamento romano mucho más grande, coherente con el modelo de fortaleza romana estándar del siglo I.

     «Las estructuras militares y los artefactos romanos son sobre todo encontrados cerca y bajo el "Monte del Templo"», escribe ella. «Las excavaciones realizadas por Benjamin y Eilat Mazar en la esquina Sudoeste han revelado una panadería romana, y más al Norte, una casa de baños romana... Las excavaciones al Sur y a lo largo de las murallas occidental y del Este, así como el proyecto de criba arqueológica, han dado a luz fragmentos capitales: fragmentos de estatuas de mármol romanas, piedras inscritas... cerámica y vasijas de piedra; bullas(amuletos romanos); sellos de piedra, varios miles de monedas, y más».

     Los argumentos de Sams han sido construídos sobre los fundamentos investigativos de eruditos anteriores, más notablemente de los del doctor Ernest L. Martin, cuya investigación y libro posteriormente publicado, "Los Templos que Jerusalén Olvidó", también sostenían que la Fortaleza Antonia realmente abarcaba el área tradicionalmente asignada al Monte del Templo y que el templo estaba más exactamente localizado en el montículo Ofel sobre el área de la Fuente Gihón, en la antigua Ciudad de David al Sudeste inmediato del tradicional recinto del Monte del Templo.

     «Cuando Aristeas (el escritor griego) afirma que había un manantial natural bajo el templo, esto puede ser comparado con la inexistencia de una fuente conocida bajo el tradicional "Monte del Templo"», declara Sams de acuerdo con Martin. «Y cuando Eusebio dice que el sitio del templo se convirtió en un vertedero de basura, esto puede ser comparado con la carencia de tales descubrimientos bajo el "Monte del Templo", mientras muchos sitios de basura han sido descubiertos en la colina del Sudeste [cerca de Ofel]», continúa Sams.

     Y «cuando Josefo describe las fundaciones del Templo como comenzando en el valle Kidrón y terminando como un cuadrado de 200 metros por lado y 137 metros de alto, esto puede ser comparado con los 280 x 486 x 317 x 474 metros del tradicionalmente aceptado "trapezoide" del Monte del Templo, cuya altura máxima es de 48 metros, ladera arriba del valle Kidrón».

     En resumen, argumenta Sams, la Fortaleza Antonia era mucho más grande que lo que la mayoría de los eruditos ha pensado antes, y el Primer y Segundo Templo, el centro de la adoración israelita y judaíta en tiempos bíblicos, fueron construídos en la Ciudad de David sobre el montículo Ofel encima de la Fuente Gihón, el área donde Jerusalén bajo el rey David y la Monarquía Unida del relato bíblico tuvieron sus comienzos.

     Desde luego, Sams y los planteamientos de Martin han atraído la crítica de otros académicos, particularmente de aquellos que se suscriben al punto de vista predominante. Pero Sams permanece esperanzada de que su teoría prevalecerá. "Sólo el tiempo dirá si la evidencia existente y en aumento será suficiente para desbancar la tradición predominante", dice Sams.–




Jesús Combatió la Hipocresía Judía

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     El autor Phillip Marlowe (Incogman), de quien hemos presentado ya un par de textos, a cuyo sitio (incogman.net) actualmente resulta difícil de acceder por causa de bloqueos electrónicos motivados por su incorrección política, publicó en 2014 el texto que a continuación ofrecemos en castellano, donde pone en relación algunas advertencias de Jesús con gente que sigue manteniendo las mismas prácticas de entonces, llevadas a cabo cada vez de manera más intolerable especialmente en EE.UU., país del autor.


Jesús Combatió la Hipocresía del Judío
por Phillip Marlowe (Incogman)
20 de Abril de 2014



     La gente pobre y humilde se congregaba desde todas partes del campo, ansiosa por lograr ver al galileo llamado Yeshua. Como la bulliciosa muchedumbre empujaba hacia adelante, ellos a veces tropezaban unos con otros. Cada uno agitadamente esperaba poder acercarse lo suficiente para presenciar otro milagro, o simplemente para oír al hombre hablar sus resonantes palabras acerca de la Verdad, palabras que esa gente entendía y sentía muy profundamente.

     La muchedumbre podía verlo ahora en una ladera rocosa, estando como un faro entre un pequeño grupo de hombres y mujeres. Parecía que miles se habían juntado ya abajo. "¿Cómo lo escucharemos desde aquí?", gritó lastimosamente una mujer. Alguien contestó cerca: "Tú lo oirás, no te preocupes; todo lo que él dice llegará lejos a aquellos con oídos para oír".

     El hombre llamado Yeshua vio a toda la gente tratando de acercarse. Él sabía que debía hablar fuerte pronto para tranquilizarlos, o alguien podría resultar herido. En aquellas distantes épocas, la herida más leve podría significar más tarde una muerte dolorosa por una infección no controlada.

     Yeshua miró hacia atrás a sus discípulos y dijo: "Antes de que la multitud comience a pisotearse unos a otros, déjenme decirles lo más importante primero:

     "...Tengan cuidado con la levadura de los Fariseos, que es la hipocresía"(Lucas 12:1).

     Esa misma hipocresía lo está mirando fijamente a la cara a usted hasta este mismo día. Siga leyendo si le quedan agallas y entienda realmente lo que es correcto y lo que está mal.

     Esa declaración de Jesús a sus discípulos fue redactada por Lucas, alrededor del año 60 d.C. (aproximadamente 27 años después de la crucifixión). Lucas era un compañero cercano de Pablo y muy probablemente habló con gente real que tuvo un contacto real cara a cara con Jesús. Lucas nació como un Gentil"pagano" que hablaba arameo y podía escribir en griego y latín; sus largas cartas, que no llevan título, a un funcionario romano llamado Teófilo, componen dos de los libros más hermosos de la Biblia: el Evangelio de Lucas y los Hechos de los Apóstoles.

     Casi ciertamente Lucas había tenido acceso a un documento realmente escrito durante el tiempo de Jesús, muchas partes del cual aparecen en los otros Evangelios y que es llamado la "Fuente Q", una abreviatura de la palabra alemana "quelle", que significa "fuente". Sería como si alguien hoy tuviera un libro escrito por un testigo real de un gran acontecimiento ocurrido en los años '80, y luego parafraseara aquel libro en una carta a un amigo. En aquel tiempo no existía algo como Amazon.com donde la gente pudiera conseguir libros rápidamente, ni había en existencia libros impresos como los conocemos hoy.

     Algunas personas hacen la ridícula afirmación de que Jesús nunca siquiera existió. Pero tenemos pruebas arqueológicas concretas sobre algunos de aquellos de los que se habla en los Evangelios. En 1961 fue descubierta una placa en Cesarea, en la costa del Mediterráneo, con el nombre de Poncio Pilatos (véase la imagen). En 1990 se encontraron los osarios funerarios de la familia de Caifás, el odioso fariseo que entregó a Jesús a Pilatos y a los romanos para una ejecución brutal. Ese hombre miró los ojos de Jesús el día en que ellos lo clavaron en la cruz.


     Sería extremadamente difícil creer que los seguidores de Jesús lo hubieran inventado, mientras al mismo tiempo eran cazados y violentamente perseguidos por la matriz de poder de los Fariseos judaítas, desesperados por silenciar a esa nueva fe rupturista. Pablo era originalmente un judío llamado Saúl, contratado por el Sanedrín para descubrir cristianos para su castigo mortal, hasta que él tuvo una epifanía (una con enormes implicaciones históricas) cuando el espíritu de Jesús le habló y lo cegó temporalmente fuera de la Puerta de Damasco.

     La gente quizá sabe un poco sobre los judíos que crucificaron a Jesús, pero pocos también comprenden que los judíos persiguieron despiadadamente a los primeros cristianos. Santiago el Justo, el hermano de Jesús, fue arrojado desde un edificio y muerto a pedradas por una muchedumbre de judíos de Jerusalén, incitada por los fariseos en 62 d.C.

     De este modo, podemos estar seguros de que esos escritores estaban hablando sobre gente real y acontecimientos reales. Ahora, también podemos estar razonablemente seguros de que no todo ha llegado hasta nosotros completamente al pie de la letra, pero podemos suponer con seguridad que los conceptos cruciales y al menos algunas de las palabras sí lo han hecho. La declaración con respecto a la hipocresía, pronunciada por Jesús a sus discípulos antes de que él se dirigiera a la multitud, es un candidato excelente, ya que es breve, poderosa y memorable.

     Cuando Jesús habló acerca de la levadura él le dio a la hipocresía una inequívoca metáfora casi tan verdadera ahora como lo era entonces. Considere la siguiente explicación de la levadura en vista de los asuntos hoy:

     «La hipocresía es como la levadura porque:

1. Puede existir sin ser inmediatamente descubierta. La levadura mezclada en la harina no es conocida hasta que produce sus efectos.

2. Se introduce de una manera sutil. La levadura penetrará pronto la masa entera. Del mismo modo la hipocresía, si permanece no detectada y no es removida, pronto penetrará todas nuestras actividades y sentimientos.

3. Es expansiva. Nos hincha y nos llena de orgullo y vanidad. Ningún hombre es más orgulloso que el hipócrita, y ninguno es más detestable para Dios. Cuando Jesús les advierte que tengan cuidado con "la levadura de los Fariseos", él quiere decir que ellos deberían ser cautelosos para no absorber el espíritu de ellos y no llegar a ser como ellos. La religión de Jesús es de sinceridad, de humildad, de una completa pobreza en el disfraz. El hombre más humilde es el mejor cristiano, y el que tiene el menor disfraz más se parece a su Maestro».

Barnes' Notes on the Bible
http://biblehub.com/commentaries/luke/12-1.htm

     La mayoría de la gente decente sabe todo esto muy profundamente. El orgullo es justamente considerado como el pecado de base de la Humanidad, fácilmente la fuente de todo lo otro malo en la condición humana, como la avaricia y la envidia. Pocas personas, si es que alguna, son inmunes a estos insidiosos errores humanos.

     Ahora esta gente orgullosamente dice que ellos consiguen su sistema de creencias a partir del Talmud, que fue directamente transmitido desde los Fariseos a Babilonia después de las insurrecciones contra Roma en los años 70 y 130 d.C. Este mismo sistema de creencias talmúdico se abrió camino hasta los jázaros en el Norte y hasta Alejandría, en Egipto, y en los países occidentales.

     Y no importa un comino quién es realmente esta gente genéticamente: ellos podrían ser los jázaros ashkenazim de origen asiático, o alguna mezcla bastarda de razas, o posiblemente incluso unos verdaderos semitas del antiguo Israel. Pero cualquiera que sea el caso, no se equivoque: por sus creencias y acciones actuales ellos no son los israelitas de los tiempos antiguos, ni tampoco ellos están bendecidos por ningún espíritu divino o justo.


Malvados Mentirosos e Hipócritas

     Cualquiera que tenga ojos para ver y oídos para oír, con la menor apariencia de moralidad y decencia que le quede, sabe que las acciones de estas personas hoy son claramente malas. No se requiere tener un grado en teología ni nada de la charlatanería de algún pseudo-predicador de televisión que pudiera tratar de explicarnos acerca del "judeo-cristianismo". Y usted realmente no tiene que ser siquiera un anciano promedio de tipo religioso para percibir esto fuertemente.

     Esta gente sabe bien en el fondo que lo que ellos hacen es en realidad malo. Por eso ellos trabajan tan duro para silenciar a aquellos de nosotros que nos levantamos y hablamos claro sobre su comportamiento hoy. Ellos no pueden citar hechos reales para combatir lo que decimos, de manera que ellos recurren a mentiras, difamación e incluso una completa censura en un país que supuestamente considera a la "libre expresión" como un derecho dado por Dios.

     Y ellos saben muy bien que estamos en lo correcto, pero les asusta que otros puedan llegar pronto a las mismas conclusiones.

     Ellos tratan de conseguir a los no informados y crédulos para simplemente descartarnos como "anti-semitas" y "extremistas", solamente porque ellos nos consideran así. Este gastado montón de basura está cayendo rápidamente en oídos sordos, por suerte. Esta gente está moralmente en bancarrota, no sólo por lo que ellos le hacen a los palestinos sino por su propio comportamiento personal en los países de Occidente, países que ellos continuamente debilitan para su propio beneficio y perjuicio de la gente Blanca.

     Religioso o no, cualquiera que resista a esta gente está haciendo lo correcto. De eso estoy completamente seguro.


Los Hechos de los Hipócritas

     Continuemos con aquel tan importante primer párrafo del capítulo 12 de Lucas, palabras que se demostrarán en los próximos años, no importa cuánto los judíos globalistas y holocuentistastraten de detenerlas.

     «Porque no hay nada encubierto que no haya de ser revelado, ni nada escondido que no haya de ser conocido.Por lo tanto, todo lo que ustedes han hablado en la oscuridad será oído a la luz del día; y lo que ustedes han dicho al oído en cuartos privados será proclamado desde las azoteas.Y os digo a vosotros, mis amigos: No temáis a los que matan el cuerpo, y que después de eso no tienen nada más que puedan hacer»(Lucas 12:2-4).

     La verdad siempre ganará al final, sólo que podría tomar un momento. Cualesquiera sean las mentiras y las conspiraciones ocultas de este malvado pueblo, verán finalmente la luz del día (como el 11-S y las mentiras del "Holocausto"). Todos nosotros tenemos que gritar sobre estas cosas en las azoteas (o en Internet) a cada uno que conozcamos. Podría ser un poco difícil a veces, pero esto ¡es mucho mejor que lo que podría venir si no lo hacemos!.

     Y la última línea del párrafo debería endurecerlo a usted si aquello sucede y ellos consiguen poner sus manos sobre usted. Sólo sonríales agradablemente a los hipócritas mentirosos, no importa lo que ellos puedan hacerle a vuestro cuerpo, si usted llegara a encontrarse en el vientre de la bestia (como Jonás dentro de la ballena).

     Miremos también el siguiente pasaje de Juan(8:44). Aunque más complicado que lo que usted podría pensar, básicamente Jesús le está diciendo a la estructura de poder judía que ellos ahora han llegado a ser descendientes de Satán, dispuestos a mentir y a asesinar. Y realmente vemos aquello hoy, por camionadas.

     "Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis cumplir. Él fue un asesino desde el principio, y no habita en la verdad, porque no hay ninguna verdad en él. Cuando él habla una mentira, habla de lo suyo propio, ya que él es un mentiroso, y el padre de la mentira".

     Jesús les dice que el Padre de él no es el mismo padre que el de ellos. Él sabe que la estructura de poder judaíta está buscando la muerte de él y por eso él procede a reprenderlos por querer matarlo. Él les dice que al rechazar la verdad de él y la de su Padre, estos judíos se han abierto ahora a falsedades, mintiendo, y a la misma fuerza malvada que busca la destrucción del hombre y del Hijo del Hombre, por haber rechazado en el desierto la oferta de Satándel poder mundano.


IMAGEN: Logotipo del sitio webde la ADL. Los mentirosos hipócritas lo han quitado desde entonces, comprendiendo que algunos de nosotros goyim aquí fuera, prestamos atención a su arrogante mierda.

     Lo mismo podría ser dicho de Mateo12:34 también, donde Jesús llama a los Fariseos "raza de víboras". Se dice que los judíos kabalistas usan el signo de la serpiente como un símbolo del "labio mentiroso". Curiosamente, la judía Liga Anti-Difamación (ADL) una vez usó un logotipo con una serpiente de aspecto demoníaco y la Estrella de David (o de los Rothschild) en su sitio web, glorificando su lucha contra nosotros los malvados "intolerantes" Blancos (los hipócritas nunca, ninguna vez, dicen una sola palabra sobre el racismo negro) y contra el "anti-semitismo", que es lo principal, realmente. Su "lucha" consiste sólo en la supresión y la intimidación de Gentiles Blancos *.

* Está claro a partir del Nuevo Testamento que la estructura de poder judía de aquella época, el Sanedrín, fue TOTALMENTE responsable de obligar a los romanos a ejecutar a Jesús. Y después de la crucifixión, ellos despiadadamente persiguieron a los primeros adoradores cristianos por todas partes de Israel, Siria y Roma. Adicionalmente, el Talmud judío contiene un "virulento discurso de odio" sobre Jesús como siendo el hijo de una prostituta, un mago de Egipto, y que está hirviendo ahora en excremento en el infierno.

     Ellos incluso se jactan alegremente de que fueron realmente los judíos los que llevaron a cabo la ejecución, y no los romanos, ¡estrangulando a Jesús hasta la muerte en el vertedero de Gomorra!. Pero ellos por cierto se vuelven locos siempre que decimos alguna maldita cosa ahora, ¿o no lo hacen?. Hoy, los judíos están haciendo todo lo que pueden para impedirle a los goyim decir una sola palabra sobre lo que ellos hacen, incluyendo lo que el Sanedrín una vez hizo a Jesucristo.


     ¿Sé realmente que los judíos son controlados por un espíritu demoníaco llamado Satán? Por supuesto que no. No hay manera de que yo, o algún otro ser viviente que conozca, pueda decir realmente eso de seguro. Ni tampoco podemos saber exactamente lo que Jesús podría decir a esto hoy en día. Lo único que tenemos que proseguir es lo que está ante nosotros y lo que sabemos en nuestras almas que es bueno y verdadero.

     Pero es cierto que EE.UU. está ahora bajo el control de gente moralmente en bancarrota, dispuesta a hacer cosas malas, y corrompida por los poderes del dinero, obviamente compuesta por la Judería Internacional y sionista. ¡Y ellos son en efecto suministradores de una total hipocresía!.

     ¿De qué otra manera podemos explicar cómo Israel se sale con la suya en cuanto a lo que hace en el mundo?. ¿De qué otra forma podemos explicar las interminables guerras en el Oriente Medio y cómo los medios de comunicación esconden del público de manera deliberada las atrocidades israelíes?. ¿Qué otra explicación abarca todo, desde el 11-S al Nuevo Orden Mundial, los fraudes financieros desde la Reserva Federal a Wall Street y la banca internacional, la deliberada inundación de nuestras propias tierras con una multitud de grupos étnicos, hasta las continuas bajezas morales y las destrucciones culturales desencadenadas sobre nuestros países y nuestra raza?.

     Considere los arrogantes caminos de estos rabinos y sus acólitos durante los pasados dos mil años. ¿No reinterpretan ellos continuamente el Talmud para justificar los pecados de su raza y jactarse de su superioridad intelectual entre ellos y a veces hasta delante de Dios mismo?.

     ¿Y acaso los profesores de esta raza no han ido adelante y han dicho a sus soldados que no sientan ninguna culpa cuando ellos despiadadamente matan a no-judíos —hombres, mujeres y niños— a quienes ellos llaman Amalek, los antiguos enemigos de la raza judía?.

     ¿Por qué persiste esta gente en llamarse a sí mismos los "Elegidos" y la "Luz sobre las Naciones" cuando sus acciones tan claramente muestran quiénes son verdaderamente?.

     Considere, también, el montón de Falsos Profetas "cristianos" que han infestado durante mucho tiempo las ondas radiales estadounidenses, predicándonos para que apoyemos a Israel y que al mismo tiempo ignoremos totalmente los males que los sionistas hacen a su prójimo. Hipócritas, totalmente. Estos obesos estafadores continuamente arengan a la gente pobre de nuestro país para que les dé dinero de manera que ellos puedan vivir la vida del cerdo. Usted los ve, peces gordos amistosos con los israelíes, cuando ellos pasan fastuosas vacaciones con sus familias y parásitos en la Tierra Santa, tierra violentamente limpiada de obstáculos y robada a los palestinos pobres del campo.

     ¡Estos tontos presuntuosos encontrarán pronto el mismo final que el resto!.

     Los hechos son indiscutibles de ahora en adelante. La raza Blanca y nuestros países están siendo ahora dados vuelta por causa de una agenda de largo plazo de poderosos pero públicamente ocultos judíos hipócritas, que intentan la elevación de su raza para convertirla en los amos del planeta, por cualquier medio necesario. Esta malvada ambición debe ser detenida, si deseamos que sobrevivan el cristianismo, la gente Blanca, o incluso la decencia común.

     Depende de cada uno de nosotros. Espero que mis palabras sean suficientes para que usted examine todo esto y se ponga a caballo. Confíe en mí: los medios de comunicación no se atreven a tocar nada que tenga que ver con los judíos.

     Lucharé contra esta gente con palabras ahora en los hogares, en las esquinas de las calles y por Internet. Si hace falta, y si mis derechos constitucionales fueran robados por ellos y sus corruptos agentes, lucharé contra ellos con la fuerza de mis brazos, junto a mis hermanos y hermanas, casa a casa, en las calles, bosques y campos, hasta que tengamos éxito y este dominio completo de estos malvados hipócritas sobre nuestra nación sea quebrantado. Eso lo haré incluso si yo no pudiera sobrevivir.

     ¡Ellos nunca me harán callar mientras un aliento anime mi cuerpo y todavía tenga una ronda en el cargador!.


                    Phillip Marlowe



La Guerra y la Israelización del Mundo

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     Desde el sitio antiwar.comhemos traducido el siguiente texto del ensayista político y periodista estadounidense Daniel J. Sánchez (Dan Sanchez), publicado hace dos días, que hace un contextualizador análisis de la situación en el Cercano y Medio Oriente, tanto pasada como presente, en conexión con la política exterior estadounidense y los intereses en juego del Estado sionista. Su analogía de base es la relación entre Israel y Palestina, que el autor expande a la actuación del Imperio en esa parte de Oriente, con su estela de ocupación, saqueo y explotación, y la consiguiente respuesta que provoca, preparado todo previamente por una cuidadosa siembra de cizaña y el consabido apoyo a ambos lados de un conflicto.


La Guerra Está Materializando la Israelización del Mundo
Dividir, Conquistar, Colonizar
por Dan Sánchez
22 de Diciembre de 2015



     A medida que las guerras conducidas por EE.UU. hunden al mundo musulmán cada vez más profundo en un caos de Estados fallidos llenos de yihadistas, los acontecimientos parecen estar inclinándose hacia un punto extremo. Eventualmente, la región llegará a ser una fuente tan profusa de terroristas y refugiados, que la resistencia popular occidental a las "botas en el terreno" [intervención militar directa] será superada por el terror y la rabia. Entonces, el Imperio conducido por EE.UU. tendrá finalmente el mandato público que necesita para colonizar completa y permanentemente el Gran Oriente Medio.

     Es fácil ver cómo el Complejo Industrial-Militar y su secuaz la industria de energía se beneficiarían de tal resultado. Pero ¿y qué hay del "mejor amigo" de EE.UU. en la región?: ¿cómo se beneficiará Israel al estar rodeado por tal caos?.

     Tel-Aviv ha perseguido durante mucho tiempo una estrategia de "dividir y conquistar", tanto directa como indirectamente por medio de la enorme influencia que el lobby de Israel y los neoconservadores tienen sobre la política exterior estadounidense.

     Un famoso artículo de principios de los años '80 del diplomático y periodista israelí Oded Yinon es más explícito en este respecto. El "Plan Yinon"[1] pide la "disolución"del "mundo árabe entero, incluyendo Egipto, Siria, Iraq y la Península Arábiga". Cada país debía conseguirse que fuera "fragmentado de acuerdo a agrupaciones sectarias y étnicas", después de lo cual cada fragmento resultante sería "hostil"a sus "vecinos". Yinon increíblemente afirmó que:

    "Este estado de cosas será la garantía para la paz y la seguridad en el área a largo plazo".

[1] http://www.globalresearch.ca/greater-israel-the-zionist-plan-for-the-middle-east/5324815

     Según Yinon, esta "balcanización" [fragmentación] debería ser realizada mediante la instigación de la discordia y la guerra entre los árabes:

    "Cada clase de confrontación inter-árabe nos ayudará a corto plazo y acortará el camino hacia el objetivo más importante de fragmentar Iraq en denominaciones, como en Siria y en el Líbano".

     La siembra de la discordia entre los árabes ya había sido parte de la política israelí años antes del informe de Yinon.

     Para contrarrestar a la Organización para la Liberación de Palestina(OLP), nacionalista y árabe secular, Israel apoyó un movimiento islamista en los Territorios Ocupados, comenzando a finales de los años '70 (casi al mismo tiempo que EE.UU. comenzó a apoyar directamente a los fundamentalistas muyahidinesislámicos en Afganistán). El movimiento islamista palestino patrocinado por Israel finalmente dio origen a la creación de Hamás, al que Israel también apoyó y ayudó a crecer [2].

[2] http://original.antiwar.com/justin/2006/01/27/hamas-son-of-israel/

     También a finales de los años '70 Israel comenzó a fomentar la lucha inter-árabe en el Líbano. Comenzando en 1976, Israel apoyó militarmente a los árabes cristianos maronitas, agravando la guerra civil libanesa que había comenzado recientemente. En 1978 Israel invadió el Líbano, y reclutó a gente local para crear una fuerza delegada llamada el "Ejército del Sur del Líbano".

     Israel invadió el Líbano nuevamente en 1982, y trató de instalar en el poder a una organización cristiana llamada la Falange. Esto fue frustrado cuando el nuevo dirigente falangista [Bashir Gemayel] fue muerto. En represalia, con la complicidad israelí, la Falange perpetró la matanza en los campos de refugiados de Sabra y Shatila, en Beirut, matando a cientos (quizá miles) de refugiados palestinos y chiítas libaneses.


     La guerra civil que Israel ayudó a fomentar fracturó al Líbano durante una década y media. Fue la caótica fragmentación del Líbano lo que Yinon citó como el "precedente" y el modelo para el resto del mundo árabe.

     Estados Unidos también ha azuzado durante mucho tiempo a naciones musulmanas, sectas y grupos étnicos unos contra otros. A lo largo de los años '80, además de patrocinar la yihad afgana y la guerra civil, EE.UU. armó a Iraq (incluso con armas químicas) en la invasión de éste y guerra contra Irán. Al mismo tiempo, EE.UU. también estaba vendiendo en secreto armas al lado iraní en aquel mismo conflicto. Vale la pena notar que dos funcionarios implicados en el escándalo Irán-Contras fueron los neoconservadores pro-Israel Elliot Abrams y Michael Ledeen. Abrams fue condenado (aunque más tarde perdonado) por cargos criminales.

     Este tema también puede ser visto en "A Clean Break"(Una Ruptura Limpia) [3], un documento de estrategia escrito en 1996 para el gobierno israelí por un "grupo de estudios" neoconservador liderado por futuros funcionarios de la administración de Bush II y arquitectos de la guerra contra Iraq. En aquel documento, el principio de "dividir y conquistar" se aplicaba bajo el eufemismo de "una estrategia basada en el equilibrio de poderes". Esta estrategia implicaba aliarse con algunas potencias musulmanas (Turquía y Jordania) para reducir y finalmente derrocar a otras. En particular, pedía el cambio de régimen en Iraq a fin de desestabilizar a Siria. Y la desestabilización tanto de Siria como de Irán era principalmente para contrarrestar los "desafíos" que aquellos países planteaban a los intereses de Israel en el Líbano.

[3] http://www.dansanchez.me/feed/clean-break-to-dirty-wars

     El autor primario de "Una Ruptura Limpia", David Wurmser, también escribió otro documento de estrategia en 1996 [4], esta vez para audiencias estadounidenses, llamado "Coping with Crumbling States"(Tratando con Estados que Se Desmoronan). Wurmser argumentaba que "el tribalismo, el sectarismo, y la competencia de tipo bandas o clanes"era lo que realmente definía la política árabe. Él afirmaba que los regímenes árabes nacionalistas y seculares como Iraq y Siria intentaban desafiar aquella realidad, pero finalmente fracasarían y serían destrozados por ella. Wurmser por lo tanto pedía el "aceleramiento"y el control de aquel inevitable "colapso caótico" por medio del cambio de régimen en Iraq.

[4] http://www.dansanchez.me/feed/seize-the-chaos

     Especialmente gracias a los esfuerzos increíblemente eficaces del neoconservador Proyecto para un Nuevo Siglo Estadounidense (PNAC) [5], el cambio de régimen en Iraq se convirtió en la política estadounidense oficial en 1998. El destino de Iraq fue sellado cuando el 11-S golpeó mientras la presidencia estadounidense estaba dominada por neoconservadores (incluyendo muchos signatarios de "Una Ruptura Limpia" y miembros del PNAC) y sus aliados cercanos.

[5] http://www.dansanchez.me/feed/the-neocon-hunger-for-universal-empire

     Comenzando con la consiguiente Guerra de Iraq, la estrategia Yinon/Wurmser de "dividir y conquistar" entró en una permanente alta actividad.

     Después del derrocamiento del gobernante árabe nacionalista y secular Sadam Hussein, las políticas de los invasores estadounidenses difícilmente podrían haber sido mejor diseñadas para instigar una guerra civil entre suníes y chiíes iraquíes.

     La "des-Baathificación" [partido Baath de Hussein] del gobierno iraquí envió a innumerables suníes seculares a la desesperación del desempleo. Esto fue acompañado por una total privación de derechos cuando la primera elección orquestada por EE.UU. entregó el poder total a los chiíes. Y fue acompañado posteriormente por la persecución cuando las milicias chiíes, armadas por los estadounidenses (y apoyadas por Irán), comenzaron a limpiar étnicamente Bagdad y otras ciudades de los suníes.

     La invasión también dio rienda suelta a Abu Musab al-Zarqawi, un terrorista que había estado antes escondido ocultándose de las fuerzas de seguridad de Sadam. Los disparos de extremistas suníes y los atentados suicidas contra chiíes y lugares sagrados chiíes, y las represalias anti-suníes que esto engendró, dividieron posteriormente a Iraq de acuerdo a las líneas sectarias. La banda de Al-Zarqawi se convirtió en Al-Qaeda en Iraq. Después de que muchos de sus seguidores extremistas fueron puestos por los estadounidenses en prisiones cerradas con ex-Baathistas, muchos de éstos fueron reclutados. La experiencia militar así adquirida fue crucial para el posterior surgimiento del grupo para la conquista, ahora como ISIS.

     Todo esto era la receta perfecta para la guerra civil. Y cuando aquella guerra civil estalló realmente, las fuerzas armadas estadounidenses hicieron imposible la reconciliación al ponerse completamente del lado chiíta.

     Ahora en la vecina Siria, EE.UU. ha estado alimentando una guerra civil durante los pasados cuatro años patrocinando a yihadistas suníes internacionales [6] que luchan junto a ISIS y a Al-Qaeda siria en la guerra de éstos para derrocar al gobernante nacionalista árabe secular Bashar al-Assad, y "purificar" la tierra de chiíes, drusos, cristianos y otros "apóstatas" no-salafistas. Los co-patrocinadores claves de esta yihadincluyen a los regímenes musulmanes de Turquía, Arabia Saudí, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos. Y los aliados claves y defensores de Assad incluyen a fuerzas musulmanas tales como Hezbolá, tropas iraníes y milicias iraquíes. En algunas batallas en Siria, los soldados iraquíes y los rebeldes sirios pueden estar disparándose unos a otros con armas estadounidenses.

[6] http://www.dansanchez.me/feed/where-does-isis-get-those-wonderful-toys

     Muchas de las armas y reclutas que fueron derramados en Siria por EE.UU. y sus aliados terminaron por llegar a ISISo a Al-Qaeda. Así reforzado, ISIS entonces irrumpió en Iraq (donde primero surgió durante la caótica ocupación estadounidense) y expulsó al ejército iraquí chiíta del Noroeste del país poblado por suníes.

     El "dividir y conquistar" de hoy parece ser el de los años '80 pero al revés. En los años '80 EE.UU. armó una invasión iraquí sunita de Irán. Ahora, armando a las milicias conducidas por Irán que dominan el nuevo ejército iraquí, EE.UU. ha armado eficazmente una invasión iraní chiíta de Iraq. Además, en los años '80 EE.UU. armó encubiertamente a la resistencia iraní chiíta a la invasión iraquí. Ahora EE.UU. está armando encubiertamente (mediante sus conductos en la insurrección siria) a la resistencia iraquí sunita a la invasión iraní.

     Guerras civiles plagadas de yihadistastambién han sido fomentadas en Afganistán, Somalia, Yemen y Libia, esta última después del derrocamiento estadounidense de otro gobernante nacionalista árabe secular.


     En estas catástrofes vemos prácticamente todo lo que pedían Yinon y Wurmser. Vemos la "confrontación inter-árabe" de Yinon, la "disolución" de países árabes que están "desintegrándose de acuerdo a líneas étnicas y sectarias" en fragmentos en guerra. Y vemos el "colapso caótico"de Wurmser acelerado por la destrucción de regímenes nacionalistas árabes seculares. También debería ser notado que Wurmser dio escasa consideración a la amenaza del fundamentalismo islámico, especialmente cuando se la comparaba con la del nacionalismo árabe.

     Pero, aparte de las rebuscadas fantasías de Wurmser de monarquías hashemitas endeudadas con Israel surgiendo del caos, ¿cómo podría probablemente estar "seguro" Israel rodeado por tal escenario infernal? Sheldon Richman [7] incisivamente postuló que:

    "La confrontación inter-árabe promovida por Estados Unidos e Israel... le convendría a los expansionistas israelíes que no tienen ningún deseo de tratar de manera justa a los palestinos y los Territorios Ocupados. Mientras más peligroso aparece el Oriente Medio, más los líderes israelíes pueden contar con Estados Unidos para no insistir en un arreglo justo con los palestinos. El pueblo estadounidense, además, probablemente será más tolerante hacia la brutalidad de Israel si el caos prevalece en los Estados vecinos".

[7] http://sheldonfreeassociation.blogspot.com/2015/10/is-instability-goal-of-us-mideast-policy.html

     Otra línea del pensamiento estratégico fue revelada por el New York Times en 2013 [8]:

    «Muy silenciosamente, los israelíes han sostenido cada vez más que el mejor resultado para la guerra civil de Siria que dura ya dos años y medio, al menos por el momento, es que no haya ningún resultado.

    «Para Jerusalén, el statu quo, horroroso como pueda ser desde una perspectiva humanitaria, parece preferible a una victoria del gobierno del señor Assad y sus respaldadores iraníes, o a un reforzamiento de los grupos rebeldes, cada vez más dominados por yihadistas suníes.

    «"Ésta es una situación de definiciones en la cual usted necesita que ambos equipos pierdan, o al menos usted no quiere que alguno gane. Nos conformaremos con un empate", dijo Alon Pinkas, un ex-cónsul general israelí en Nueva York. "Dejémoslos que se desangren, en una hemorragia hasta la muerte: ése es el pensamiento estratégico aquí. Mientras permanezca dicha situación, no hay ninguna verdadera amenaza de parte de Siria"».

[8] http://www.nytimes.com/2013/09/06/world/middleeast/israel-backs-limited-strike-against-syria.html?pagewanted=all&_r=0

     Tan amenazante como lo son los terroristas yihadistaspara los civiles, y tan horroroso como lo es la guerra civil para aquellos directamente afligidos, el régimen israelí prefiere estar rodeado por ambos males que colindar con siquiera un solo Estado musulmán o árabe estable que no esté sometido a la voluntad de Washington y Tel-Aviv.

     Esto es en parte debido a un simple imperialismo, hecho especialmente agresivo por la ideología sionista de Israel. Israel quiere un espacio vital, que incluye tanto un territorio adicional para sí mismo como un acceso forzoso a recursos y mercados en territorios extranjeros en la región. Los Estados musulmanes y árabes no-clientes simplemente se están interponiendo en dicho camino. Cada Estado desea un espacio vital. Lo que hace del deseo de Israel algo particularmente peligroso es su apoyo de cheque en blanco de parte de la superpotencia estadounidense.

     Pero está también la cuestión más concreta de mantener un trozo particular de espacio vital ya conquistado: la ocupación israelí de Palestina. No importa cuán débiles (como Sadam) y mansos (como Assad) sean los gobernantes árabes con respecto a ese asunto, la noción misma del nacionalismo árabe es una amenaza permanente para los israelíes como ocupantes permanentes y desposeedores sistemáticos de los árabes. Israel odia al Baathismo por la misma razón que odiaba a la OLP antes de que ésta fuera domada. Un mundo árabe nacionalmente consciente nunca aceptará totalmente la Ocupación.

     Israel tiene prejuicios contra la estabilidad regional, porque un Estado árabe estable y coherente es más probable que tenga tanto la motivación como los medios necesarios para resistir a los designios israelíes en su país, y posiblemente incluso para defender a los palestinos.

     Uno podría preguntarse cómo los yihadistasy la guerra civil son de algún modo mejor en este respecto. No parece que los recursos naturales bajo las "bombas de barril" de Assad o los furtivos tipos del ISIS estén más fácilmente disponibles para Israel. Y, dejando a un lado las teorías relacionadas con el Mossad sobre ISIS y Al-Qaeda, no parece que los extremistas islamistas sean necesariamente mucho más perdonadores de la Ocupación que los nacionalistas árabes.

     Pero los yihadistasson preferidos por Israel, no como vecinos permanentes sino como catalizadores para un recrudecimiento militar. Al derrocar a los moderados para beneficio de los extremistas, la política exterior estadounidense ocupada por los israelíes está acelerando más la guerra al polarizar al mundo, y está haciendo las divisiones entre árabes e israelíes y entre occidentales y musulmanes más severamente en blanco y negro, eliminando las "zonas grises" de la co-existencia. Ésta es la propia estrategia de ISIS también.

     Los "halcones" israelíes prefieren ISIS, Al-Qaeda y Hamás a Sadam, Assad y Arafat, porque la gente de Occidente es menos probable que esté dispuesta a coexistir con los primeros que con estos últimos. Especialmente a medida que los ataques terroristas y las crisis de refugiados aumentan en Occidente, la aparición y el reinado de los terroristas puede finalmente vencer a la oposición pública a un compromiso de tropas, y requerir la invasión occidental y la ocupación permanente del Gran Oriente Medio, seguido, por supuesto, de su explotación perpetua por parte de Israel y las corporaciones israelíes, entre otros favoritos de Washington.

     El Occidente puede llegar a convertirse en un Israel Global, siempre ocupando, siempre despojando, siempre bombardeando y eternamente inseguro. Y el Oriente Medio puede llegar a convertirse en una Palestina Global, perpetuamente ocupado, perpetuamente desposeído, perpetuamente bombardeado y por siempre desesperadamente violento. Así es cómo la guerra está materializando la Israelización del mundo.–




Kerry Bolton - El Mito del Ocultismo del Reich

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     Publicado ahora en Diciembre, en el vol. 7 Nº 4 del archivo trimestral de temas históricos Inconvenient History, este texto (Religion, Mysticism and the Myth of the "Occult Reich") del investigador y escritor neozelandés Kerry Bolton (1956) que presentamos en castellano toca el tema de la desmitificación de un supuesto ocultismo en el Tercer Reich, propagado ya en 1940 por el fraudulento Rauschning y 20 años más tarde por los famosos Pauwels y Bergier, aparte de otros autores posteriores que sin citar documentos difundieron aventuradas afirmaciones.


Religión, Misticismo y el Mito del "ReichOcultista"
por K. R. Bolton
Diciembre de 2015



     No hay nada como el sensacionalismo de combinar el Nacionalsocialismo con la Magia negra para asegurar la atención para un escritor. Puesto que el Nacionalsocialismo de Hitler ha sido considerado como "lo último en mal", vincular al Hitlerismo con la magia negra y el satanismo es un desarrollo lógico. Se podría afirmar que el sensacionalismo de novela barata, de Historia pop y de Hollywood al retratar a Hitler como habiendo vendido su alma a Mefistófeles, al estilo del doctor Fausto, es un pedazo de grotesquismo histórico por el cual investigadores supuestamente serios deben ser en último término considerados responsables.

     Gran parte de esto puede ser remontado a una pieza de propaganda de guerra, "Gespräche mit Hitler" (Hitler Speaks, Londres, 1939), de Hermann Rauschning, quien afirmó ser uno del "círculo interno" de Hitler. En ese libro hay muchas referencias a los tratos de Hitler con la magia negra y poderes oscuros, y a la presencia de una temprana miembro del NSDAP, Martha Küntzel, que era también tanto una teósofa como una destacada seguidora alemana del ocultista británico Aleister Crowley. Rauchning fue tomado en serio por los historiadores hasta muy recientemente. Mark Weber escribe que en 1983 un historiador suizo, Wolfgang Hänel, expuso el fraude:

    «Haenel fue capaz de establecer concluyentemente que la afirmación de Rausching de haberse reunido con Hitler "más de cien veces" es una mentira. Los dos realmente se reunieron sólo cuatro veces, y nunca solos. Las palabras atribuídas a Hitler, mostró Haenel, fueron simplemente inventadas o sacadas de muchas fuentes diferentes, incluyendo escritos de Jünger y Friedrich Nietzsche. Una descripción de Hitler escuchando voces, despertando por la noche con chillidos convulsivos y señalando con terror hacia una esquina vacía mientras gritaba "¡Allí, allí, en la esquina!", fue tomada de un cuento del escritor francés Guy de Maupassant»[1].


     De ahí la proliferación de obras de Historia pop que tratan de demostrar un vínculo entre el Tercer Reich y el ocultismo, como "El Retorno de los Brujos"(de Pauwels y Bergier, 1960), "El Reich Oculto"(de J. H. Brennan, 1974), "Satán y la Esvástica"(de Francis King, 1976) y "La Lanza del Destino"(de Trevor Ravenscroft, 1982). Uno puede hacer generalmente cualquier acusación sobre el "Nazismo", el "Fascismo" o la "Derecha" sin ser cuestionado.

     La industria del entretenimiento también ha llevado crecientemente esta imaginativa Historia pop a series de televisión como "True Blood" (2011), donde el movimiento clandestino alemán de posguerra los "Werwolves"es representado como integrado por licántropos reales. Hay también algo de profecía auto-cumplida en esto, en tanto ha habido tentativas de posguerra de retratar al Nacionalsocialismo y al Tercer Reich como manifestaciones de algún tipo de fuerza oculta (Nicholas Goodrick-Clarke, Black Sun: Aryan Cults, Esoteric Nazism and the Politics of Identity, Nueva York, 2002).

     Incluído en dichas tentativas está el intento más sobrio del diplomático chileno Miguel Serrano, cuyo "Hitlerismo esotérico" incluía la adoración de Lucifer como dios de la luz, y de Shiva como el equivalente de Wotan (Goodrick-Clarke, op. cit., pp. 173-192), y el del "Hitlerismo esotérico" de la griega convertida al hinduísmo Savitri Devi [2]. Algunos intentos algo cómicos de lograr una síntesis nazi-gótico-satanista se enfocan principalmente en Radio Werewolf / Werewolf Order [grupo californiano de música y  literatura] y elementos de la Church of Satan, bajo el supuesto de que el Nacionalsocialismo y el Satanismo comparten una doctrina común de misantropía y elitismo [3].

[2] Nicholas Goodrick-Clarke, Hitler’s Priestess: Savitri Devi, the Hindu-Aryan Myth, and Neo-Nazism, Nueva York, 1998).
[3] K. R. Bolton, «Gothic Nazi: "Fascist" Manifestations in Neo-Gothic Subculture», T. Southgate, ed., Helios: Journal of Metaphysical and Occult Studies, vol. 1, Londres, 2011, pp. 122-154.

     Uno de los pocos esfuerzos académicos para trazar las conexiones entre el ocultismo y el Partido Nacionalsocialista es el libro del fallecido doctor Nicholas Goodrick-Clarke "Las Raíces Ocultas del Nacionalsocialismo"(The Occult Roots of Nazism, 1985). Goodrick-Clarke, si bien establece un vínculo muy indirecto entre la "Ariosofía" pre-Primera Guerra Mundial y el Partido Nacionalsocialista, rechaza las exageraciones que han creído relacionar la Ariosofía, la Sociedad Thule, la Sociedad Vril y otros, con el ascenso de Hitler. Por ejemplo él declara que Dietrich Eckart, el temprano mentor de Hitler, y Alfred Rosenberg, fueron "no más que invitados de la Sociedad Thule durante su apogeo", mientras el teórico geopolítico Karl Haushofer no tenía ningún vínculo con la Sociedad, a pesar de mucha fantasía tejida alrededor de estos individuos y sus supuestos nexos ocultistas (Ibid., pp. 220-221). La influencia de Lanz von Liebenfels y su Ordo Novi Templi en la Austro-Hungría anterior a la Primera Guerra Mundial sobre el joven Hitler y posteriormente sobre el Tercer Reich también es puesta en contexto, señalando Goodrick-Clarke que la Orden fue disuelta por los nacionalsocialistas y que a Lanz se le prohibió publicar tras el advenimiento del Tercer Reich (Ibid., p. 198).

     Debería ser tenido presente que las opiniones de Hitler eran bastante frecuentes en Europa Central durante su juventud y que sus ideas en Mein Kampf no son originales sino que provenían de un extendido entorno intelectual del cual el movimiento de Lanz era sólo una manifestación.

     Otra cosa era el misticismo Wotanista y rúnico de Guido von List, del mismo modo sin influencia sobre Hitler. Si bien Rudolf von Sebottendorff, el fundador de la Sociedad Thule, fue influído tanto por Lanz como por List, la influencia de Thule en la fundación del NSDAP ha sido exagerada. Sebottendorff desapareció de la escena hacia 1919. "No hay ninguna prueba de que Hitler alguna vez asistiera a la Sociedad Thule", declara Goodrick-Clarke, "y tales teóricos fueron cada vez más marginados bastante antes de que el Partido tomara el poder". Además, las sociedades ocultas fueron prohibidas en el Tercer Reich, incluso aquellas que tenían un fundamento racial (Ibid., pp. 202-203).


Karl Maria Wiligut: El Rey Secreto

     En lo que se refiere a la lengua inglesa, aparte de "Las Raíces Ocultas del Nacionalsocialismo" de Goodrick-Clarke, el único otro libro creíble sobre el asunto parece ser "The Secret King: Karl Maria Wiligut: Himmler’s Lord of the Runes" [4]. La ventaja de este libro consiste en que es una colección de lo que está catalogado como "los verdaderos documentos del ocultismo nacionalsocialista", y permite que aquellos documentos en gran parte hablen por sí mismos.

[4] Stephen E. Flowers (traductor), Michael Moynihan (editor), The Secret King: Karl Maria Wiligut – Himmler’s Lord of the Runes, Vermont, 2001.

     Michael Moynihan, el editor, comenta en el prefacio:

    «Existe una verdadera industria artesanal de libros estrafalarios sobre el "ocultismo nazi", pero pocas personas han tenido la oportunidad de evaluar verdaderos documentos originales de esta naturaleza, y está claro que la mayor parte de los autores de esas historias baratas ciertamente no hicieron ningún esfuerzo para hacer aquello.

    «Junto con los fantásticos cuentos de nacionalsocialistas y el ocultismo, a menudo se hacen afirmaciones en cuanto a la agenda "pagana" del Tercer Reich, sobre todo en cuanto a la organización SS de Himmler. Sin embargo, si uno investiga los escritos de destacados ideólogos nacionalsocialistas, como Alfred Rosenberg, surge un cuadro mucho más ambiguo de la religiosidad de la época aprobada por el Estado» (Ibid., Prefacio).

     Moynihan alude a los festivales neo-paganos de la SS compilados en un libro por Friz Weitzl en 1939, Die Gestaltung der Feste im Jahres- und Lebenslauf in der SS-Familie (La Estructuración de los Festivales durante el Año y la Vida de la Familia SS). Moynihan declara que esto fue publicado como una pequeña prueba de imprenta, y puede suponerse por lo tanto que reflejaba la opinión de sólo una "minoría" dentro de la SS.

    Himmler era uno de aquellos que promovían una perspectiva neo-pagana. Bajo su patrocinio la influencia ocultista más duradera sobre un aspecto del Tercer Reich fue Karl Maria Wiligut, el místico rúnico que aconsejó a Himmler rediseñar el Castillo Wewelsburg como el "centro del mundo" SS (Ibid., p. 22). Si bien Wiligut tuvo una cierta influencia dentro de la SS, él también se encontró con una influyente oposición, con lo que se quiere decir que la SS, como todos los otros departamentos y divisiones del NSDAP y la administración del Tercer Reich, no eran tan monolíticos como popularmente se ha supuesto. A Wiligut y otros runólogos esotéricos se les opuso en particular la Ahnenerbe, una división de investigación académica de la SS(Ibid., p. 32), ella misma a menudo el centro de fantasías de Historia popsobre el ocultismo.

     El doctor Stephen Flowers proporciona una biografía introductoria sobre Wiligut sin interpretaciones ideológicamente tendenciosas. Nacido en 1866, Wiligut escribió su primer libro, Seyfrieds Runen, en 1903 cuando él era un capitán en el ejército austriaco. El libro es un poema épico sobre la leyenda del rey Seyfried de Rabenstein. En 1908 Wiligut escribió "Los Nueve Mandamientos de Gôt por primera vez desde las quemas de libros hechas por Ludwig el Piadoso". Él también en esa época estuvo asociado con varios iniciados de la Ordo Novi Templi de Lanz von Liebenfels. Sin embargo el interés activo de Wiligut en lo oculto puede ser remontado hasta 1889 cuando él se integró a la que Flowers llama la "logia cuasi-masónica"Schlarraffia, que no tenía una conexión völkisch. Wiligut renunció a la logia en 1909, quizás a consecuencia de la rivalidad que existe entre la Masonería y el ocultismo völkisch (Ibid., pp. 16-17).

     Ésa fue una época en que había mucho interés en el renacimiento ocultista en Europa y Gran Bretaña. La Sociedad Teosófica fue fundada durante la década de 1870, con un objetivo de "hermandad universal", a pesar de la forma en que su doctrina sobre las "razas-raíces" se ha sostenido que fue una inspiración para los nacionalsocialistas y otros movimientos völkisch. La neo-rosacruz "Order of the Golden Dawn"en Gran Bretaña fue una organización que influyó en el renacimiento ocultista, y que incluyó a W. B. Yeats y a su antagonista Aleister Crowley. La Ordo Templi Orientis fue fundada en Alemania por Theodor Reuss, quien pareció haber sido un agente alemán de Inteligencia y haber alcanzado Inglaterra, donde Aleister Crowley, que parece haber sido un agente de la Inteligencia británica cuando estuvo en EE.UU. [5], había asumido el mando.

[5] Tobias Churton, Aleister Crowley: The Biography, Londres, 2011, pp. 185-215.

     Estaba también la Fraternitas Saturni, que seguía la religión de Crowley "Thelema"sin seguir a Crowley la persona, cuya doctrina Flowers también ha documentado [6]. El misticismo rúnico de Guido von List en Austria fue un importante elemento en el movimiento völkisch, y estuvo aliado con Von Liebenfels. No hay ninguna prueba de que Hitler hubiera tenido alguna asociación con ninguna de estas órdenes más allá de leer el diario de Liebenfels "Ostara", el foco del cual era una batalla dualista entre los judíos satánicos y los arios divinos [7].

[6] Flowers, Fire & Ice: Magical Teachings of Germany’s Greatest Secret Occult Order, Minnesota, 1990.
[7] Goodrick-Clarke, The Occult Roots of Nazism, pp. 194-195.

     Wiligut, que sirvió en el frente ruso con distinción durante la Primera Guerra Mundial, ascendió al rango de coronel. Con su retiro del ejército, él fue preparado por los Nuevos Templarios. El agente de Von Liebenfels, Theodor Czepl, relató que Wiligut se consideraba a sí mismo como "el rey secreto de Alemania" por una tradición de familia como heredero de los Ueiskuning o "clan santo". Él creía que la Bibliase había originado en Alemania y que había sido intencionalmente deformada. Wiligut dio a Czepl un poema titulado Deutscher Gottes-glaube (Fe Alemana en Dios), que se decía que contenía "la esencia y la doctrina completa del cristianismo Irmínico"(Flowers y Moynihan, op. cit., p. 19). En los años '20 Wiligut editó un diario, Der eiserne Besen(La Escoba de Hierro) que atacaba a judíos, francmasones y católicos (Ibid.).

     En 1924, con tiempos difíciles y tensiones entre él y su esposa después de la muerte de su pequeño hijo, Wiligut fue llevado a la fuerza en ambulancia a un asilo para locos mientras estaba sentando en una cafetería con amigos, habiendo sido solicitado por su esposa. Curiosamente, después de un año, su continuado confinamiento fue notado por las autoridades del asilo como debido a sus ideas religiosas, y su trazado de su ascendencia hasta Wodan. (Parece sin embargo que él simplemente afirmó descender de un líder tribal llamado Wodan). Él fue sin embargo capaz de mantener contacto con amigos en los Nuevos Templarios y la Sociedad Edda (Ibid., p. 20). Las creencias religiosas de Wiligut no eran tan ajenas a grandes sectores de la sociedad austriaca y alemana de entonces, incluyendo las de muchos individuos prominentes, como muestra Goodrick-Clarke.

     En 1932 Frieda Dorenberg, miembro del Partido de los Trabajadores Alemanes antes de Hitler y miembro de la Sociedad Edda, visitó a Wiligut. Ella y otros miembros de Edda"pasaron de contrabando" a Wiligut a Múnich, donde él dio clases para un grupo esotérico, los Hijos Libres de los Mares del Norte y Báltico, y bajo el seudónimo Jarl Widar, escribió para el diario Hagal. El amigo de Wiligut Richard Anders, un miembro de la SS, lo presentó a Himmler en 1933, en una conferencia de la Sociedad Nórdica, después de la asunción de Hitler al gobierno (Ibid., pp. 20-21). Flowers no menciona ninguna otra asociación entre Wiligut y el NSDAP antes de ésta y de la asociación con Frieda Dorenberg.

     En Septiembre de 1933 Wiligut se integró a la SSbajo el nombre de Karl Maria Wiligut-Weisthor. En Noviembre él fue designado jefe del Departamento de Prehistoria e Historia Temprana en la Oficina del Reich para la Raza y la Colonización (Rasse- und Siedlungshauptamt, RuSHA). En 1934 él fue promovido a coronel en laAllgemeine SS. Flowers declara que Wiligut trabajó como el consejero personal de Himmler, y no era parte de la Ahnenerbe (preocupada por el estudio de la Historia antigua y ancestral) (Ibid., p. 21). Podría suponerse aquí que esto fue porque los estudios de Wiligut eran intuitivos (o imaginarios) y los de la Ahnenerbe eran empíricos, o que tenían lo que Flowers llama "estándares académicos más objetivos".

     Las contribuciones de Wiligut a Himmler incluyeron la conceptualización del Castillo Wewelsburg, donde sería fundada una Orden de Caballería de la élite SScomo el "centro del mundo"; los diseños parael SS Totenkopfring [anillo de la calavera]; la formulación de las ceremonias SS; diseño de objetos ceremoniales, como un pocillo de bodas, e informes sobre Historia y cosmología para Himmler (Ibid., p. 23).

Karl Maria Wiligut

     Uno de los aspectos más importantes del trabajo de Wiligut, afirma Flowers, fue su composición de una serie de mantras (los aforismos Halgarita) diseñados para abrir la memoria ancestral y astral (Ibid., p. 29). La eficacia de tales cosas desde un punto de vista esotérico es usar el consciente para evocar la memoria inconsciente, y más allá de esto, la memoria astral o colectiva. Las imágenes y las ideas que fluyen posteriormente en el consciente más allá, con tales técnicas serían usadas entonces para reconstruír la fe "Irminista".

     Independientemente de lo que uno piense de tales asuntos, ellos tuvieron su contraparte no sólo en la psicología esoterica sino también en la psicología analítica Jungiana. Los jungianos desarrollaron un homólogo con el concepto de la "imaginación activa", por la cual uno medita en una sola imagen del sueño y permite que imágenes asociadas surjan espontáneamente. Los jungianos también están de acuerdo con los esotéricos al declarar que la mente individual puede hacer una incursión en el inconsciente colectivo, y aquí los jungianos también se referían a la "memoria racial". No es sorprendente entonces que la "psicología aria" de Jung, como distinta de las versiones judías como la de Freud en particular, atrajera a místicos alemanes de la raza. En particular hubo una asociación entre el Jungismo y el Movimiento Alemán de la Fe [8].

[8] Carl Jung, "Wotan", en Essays on Contemporary Events, Londres, 1947.

     Jung creía que Hitler era la encarnación de Wotan como un arquetipo y que el Nacionalsocialismo había desatado el atavismo reprimido del pueblo germánico que había estado refrenado cerca de la superficie de la civilización por el cristianismo. La psicología jungiana sostiene que los rasgos reprimidos surgirán de nuevo de alguna manera, y que mientras más ellos estuvieran contenidos, más violentamente ellos irrumpirían como un torrente por una represa rota. Jung esperaba que el Hitlerismo pudiera liberar los atavismos reprimidos en una manera ordenada más bien que destructiva. Éste es el tema de su famoso ensayo de 1936 "Wotan"[9] que lo metió en tantos problemas. Jung consideraba al neo-pagano "Movimiento Alemán de la Fe"como una religión preferible a un cristianismo germanizado.


     Entre los colegas de Wiligut estaba Otto Rahn, alrededor de quien hubo mucha mitologización debido a sus expediciones esotéricas que iban desde el Sur de Francia hasta Islandia, en particular porque Rahn era un "luciferino", en tanto creía que Lucifer, el "Portador de la Luz", era un espíritu bueno en oposición con Yahvé el dios judío. Su libro principal se titula La Corte de Lucifer: Un Viaje a los Buenos Espíritus de Europa. No sorprendentemente, tal tema proporciona un gran campo de acción para los escritores de Historia pop al intentar retratar al Tercer Reichcomo una conspiración "satánica" o como evocador de fuerzas "satánicas". Sin embargo, se trata de una herejía gnóstica más bien que de Satanismo, herejías que consideran a Yahvé como "Satán" y a Lucifer no como Satán sino como un iluminado antagonista. Uno puede ver algo de dicha doctrina en la Antroposofía de Rudolf Steiner, cuyo movimiento más bien positivo también fue prohibido en el Tercer Reich, a pesar del antagonismo de Steiner con las mismas sociedades secretas masónicas que combatieron los nacionalsocialistas [10]. Estas herejías proporcionaron una base imaginaria para Hitleristas de posguerra, como el diplomático chileno Miguel Serrano, para desarrollar una perspectiva cosmológica del Nacionalsocialismo, que es "luciferino" y gnóstico [11].

[10] R. Steiner, "The Work of the Secret Societies in the World", Berlin, 23 de Diciembre de 1904, http://wn.rsarchive.org/Lectures/19041223p02.html; "The Ahrimanic Deception", Zúrich, 27 de Octubre de 1919, http://wn.rsarchive.org/Lectures/AhrDec_index.html
[11] Miguel Serrano, entrevista con Kerry Bolton, 1994, en http://editorial-streicher.blogspot.com/2014/02/entrevista-miguel-serrano-1994.html

     Si bien aquellos impacientes por ver una influencia oculta, para el bien o para el mal, dentro del Tercer Reich, y en particular de la SS, tienen información inusualmente confiable para sacar de The Secret King, Flowers también señala que Wiligut tenía importantes enemigos dentro de la SS, y en particular dentro de la académica Ahnenerbe. El jefe de Estado Mayor de Himmler, Karl Wolff, disolvió el departamento de Wiligut, y éste se retiró al olvido en 1939. Murió en 1946 (Flowers, op. cit., pp. 32-33).

     Flowers explica que la teología de Wiligut no era "Wotanismo" sino lo que él consideraba como la religión original de los germanos, el "Irmin-Kristianismo". Esto es similar a la teología del más conocido de los runólogos austro-alemanes de la época, Guido von List, quien también creía que el "Armanismo" precedió al "Wotanismo", más exótico. Sin embargo, List veía al Armanismo y al Wotanismo como trabajando en una colaboración histórica, mientras que Wiligut consideraba al Irminismo y al Wotanismo como involucrados en una "enemistad ancestral". Flowers escribe que esta tentativa de arianizar el cristianismo era completamente popular entre los nacionalsocialistas (Ibid., pp. 33-34). Sin embargo, eso no quiere decir que Wiligut fuera el defensor primario o más influyente del cristianismo germánico. En realidad, como señala Steigmann-Gall en The Holy Reich, un cristianismo germánico era la influencia religiosa primaria entre los nacionalsocialistas desde el comienzo del NSDAP [12], no el paganismo, el luciferismo, Thelema, la teosofía o el satanismo. En efecto, tales Órdenes fueron prohibidas en el Tercer Reich como hostiles al Nacionalsocialismo, de lo cual la lucha contra la Francmasonería era un aspecto.

[12] El Punto 24 del Programa del NSDAP, de 1920, dice: "El Partido como tal se suscribe a un cristianismo positivo sin comprometerse con alguna denominación específica. Se opone al espíritu materialista judío dentro y alrededor nuestro".

     Flowers concluye que Wiligut es la persona más importante que trató de establecer un eslabón entre lo esotérico y el Nacionalsocialismo. Sin embargo, Flowers también declara que las similitudes entre ocultistas y nacionalsocialistas son más atribuíbles a que ambos eran parte de la misma "matriz cultural común y eran parte de mismo Zeitgeist" (Flowers, op. cit., p. 40). Wiligut tuvo una influencia duradera principalmente como diseñador del Anillo SS de la Calavera, rituales SS y aspectos del castillo Wewelsburg como el visualizado centro de Himmler de un Imperio mundial germánico, dependiendo de si uno considera la influencia en esas materias como de significado notable.

     El valor de la mayor parte de The Secret King es la traducción de los textos de Wiligut. El primero son "Los Nueve Mandamientos de Gôt", que explican la cosmología fundamental de Wiligut de que Gôt es una "diada"de espíritu y materia, que actúa como una tríada de Espíritu, Energía y Materia en su "circulación corriente". Gôt es eterno, es "causa y efecto", de la cual fluye "el derecho, el poder, el deber y la felicidad", eternamente generando por medio de la materia, la energía y la luz; "más allá de los conceptos de bien y mal", llevando las "siete épocas" de la Historia humana (Ibid., p. 51). Gran parte del resto de los documentos de Wiligut son explicaciones esotéricas de las runas, la evolución de las razas y los ciclos cósmicos.


El Tercer Reich y el Ocultismo

     En un nivel muy fundamental, la mayor parte del renacimiento ocultista de la última parte del siglo XIX fueron emanaciones de la Masonería. Éstas son universalistas y por lo tanto antitéticas de la Derecha. Para hacer la situación más ambigua, sin embargo, no todas las organizaciones esotéricas que emanan de la Francmasonería son universalistas, y en efecto algunas como Thelema de Crowley son conservadoras [13]. Crowley era crítico hacia la Sociedad Teosófica por ejemplo, y mordaz al criticar su intento de endosarle al mundo un "mesías" indio, Krishnamurti, llamando a los Blancos a unirse contra esta parodia en términos imperialistas típicos de los tiempos [14]. Sin embargo, a Thelema no le fue mejor bajo el Nacionalsocialismo que a otras sociedades ocultistas.

[13] K. R. Bolton, "Aleister Crowley as a Political Theorist", en Crowley: Thoughts and Perspectives, vol. 2, Troy Southgate, editor, Londres, 2011, pp. 5-28.
[14] K. R. Bolton, «Thelema, Imperialism, and the "Black Messiah": Aleister Crowley and the Conflict Between Schools of Magick "Black" and "White"», Helios: Journal of Metaphysical and Occult Studies, vol. 2, Troy Southgate, editor, Londres, 2011, pp. 40-77.

     Mucho se ha comentado por parte de algunos autores acerca de una temprana miembro del NSDAP, Martha Küntzel, como siendo una importante thelemista en Alemania. Küntzel en efecto había procurado convertir a Hitler, sobe la base de que Crowley había dicho que cualquier Estado que adoptara a Thelemadominaría el mundo. Incluso Francis King, que escribe acerca del "ocultismo nazi", rechaza la idea de que Kuntzel o Crowley hubieran tenido alguna influencia sobe Hitler (Francis King, Satán y la Esvástica, 1976, p. 142).

     Se ha afirmado de manera convincente que Crowley sirvió a los intereses británicos en EE.UU. durante la Primera Guerra Mundial, y que trabajó con la Inteligencia británica durante la Segunda Guerra Mundial [15]. Con el amenazante advenimiento de Hitler al cargo, Crowley rápidamente dejó Berlín [16]. Karl Germer, la cabeza de la OTO en Alemania, fue detenido por la Gestapo en 1935 por diseminar las enseñanzas del "francmasón de alto rango Crowley"(Ibid., p. 364), y terminó en Estados Unidos. En 1937 todas las asociaciones masónicas y cuasi-masónicas fueron prohibidas, incluyendo a los seguidores völkisch de List y de Liebenfels (Flowers, Fire & Ice, Minnesota, 1990, p. 23.).

[15] Richard Spence, "The Magus Was a Spy: Aleister Crowley and the Curious Connections between Intelligence and the Occult", Melbourne, New Dawn, Nº 105, Nov-Dic. 2007.
[16] Tobias Churton, Aleister Crowley: The Biography, Londres, 2011, p. 354.

     En Mayo de 1939 Crowley escribió a Küntzel afirmando que los alemanes estaban muy por debajo de los judíos, y que estaban en el mismo nivel que los monos frente a los hombres, aunque él no quería insultar a los monos. Él concluyó: "Los Hunos serán eliminados"(Churton, p. 375). Crowley habían trabajado con propagandistas alemanes, en particular con la figura literaria George Viereck en EE.UU. durante la Primera Guerra Mundial para la Inteligencia británica (Ibid., pp. 186-215), y estaba ansioso por ofrecer sus servicios contra Hitler, especialmente ya que Hitler no había mostrado ningún interés por Thelema a pesar de los esfuerzos de Küntzel. Crowley también había trabajado para la Rama Especial británica en Berlín informando sobre comunistas. Él trabajó en la propaganda británica durante la Segunda Guerra Mundial, y se le atribuye el famoso signo "V" de la Victoria, un símbolo ocultista hecho alegremente por Churchill y otros (Ibid., pp. 376-386).


Herejías Cristianas

     El profesor James Biser Whisker (1939- ? )encontró una inspiración totalmente diferente para los elementos en el Tercer Reich: las herejías cristianas gnósticas. En su libro La Filosofía de Alfred Rosenberg, subtitulado "Orígenes del Mito Nacionalsocialista", Whisker se concentra en el interés de Rosenberg por la herejía cátara como el medio por el cual el cristianismo podría ser des-judaizado de lo que eran considerados como elementos judíos introducidos por el apóstol Pablo. Para Rosenberg sin embargo lo que también se requería era la des-romanización. Whisker comenta que las mentes tanto romana como judía habían convertido la religión en "formalidades legales", mientras que para la mente germánica nada de eso se requería.

     Martín Lutero, aunque un héroe popular, había mantenido una perspectiva judía mediante la influencia de Pablo [17]. Hubo un movimiento creciente durante los siglos XVIII y XIX entre los teólogos Protestantes alemanes para sacar el Antiguo Testamento de la teología cristiana, y Rosenberg mantuvo ese legado (Ibid., p. 23). Uno de los precursores del Nacionalsocialismo, el yerno inglés de Richard Wagner, Houston Stewart Chamberlain, teórico racial y germanófilo ya famoso en la Alemania del káiser Wilhelm, estaba entre aquellos que expusieron la noción del "Jesús Ario" como un galileo, no un judío [18]. Chamberlain fue una influencia germinal en el pensamiento de Rosenberg. Aunque la influencia de Rosenberg sobe Hitler y el Tercer Reichcomo "el filósofo del Nacionalsocialismo" sea discutible, su objetivo de crear una "religión nacional alemana" basada en el Protestantismo estaba de acuerdo con el objetivo de Hitler de una Iglesia nacional alemana unificada, como lo muestra Steigmann-Gall en The Holy Reich.

[17] James B. Whisker, The Philosophy of Alfred Rosenberg, California, 1990, pp. 20-21.
[18] Ibid., p. 41. Chamberlain, Foundations of the Nineteenth Century, vol. 1, Londres, 1911, pp. 174-250.

     Whisker declara que en el gnosticismo Rosenberg encontró una oposición religiosa al dios judío Yahvé, considerado por los gnósticos como el "demiurgo" que había creado un mundo corrupto para atrapar al espíritu de la Humanidad en lo material, mientras que el verdadero Dios era remoto (Whisker, Ibid., p. 45). Tales sectas incluían a los Marcionitas (ca. siglo II d.C.), y para Rosenberg en particular los cátaros, también conocidos como albigenses o maniqueos (ca. 1000 d.C.) (Ibid., p. 59).

     Whisker comenta que, una vez más, mucho se ha hablado acerca de los cátaros con relación al Tercer Reich y en particular con la SS (especialmente por los intereses de Otto Rahn) al afirmar que el catarismo era un tipo de "satanismo" gnóstico (Ibid., pp. 80-81). Sin embargo, por su parte, los gnósticos consideraban a Yahvé como el "diablo" [19].

[19] Véase de James Whisker su capítulo Orígenes Gnósticos del Pensamiento de Alfred Rosenberg en http://editorial-streicher.blogspot.cl/2012/05/james-b-whisker-rosenberg-y-el.html


Dietrich Eckart, ¿Mentor "Satánico"?

     Dietrich Eckart, celebrado poeta y dramaturgo desde la época del káiserWilhelm, fue el mentor tanto de Alfred Rosenberg como de Hitler desde el comienzo del activismo político de ambos. Él ha sido un foco particular de aquellos que tratan de retratar al NSDAP como conducido por fuerzas oscuras. Según Trevor Ravenscroft, Eckart dijo en su lecho de muerte que él había iniciado a Hitler en la "Doctrina Secreta", que había abierto sus poderes de comunicación astral y que le había dado los medios para comunicarse con "los Poderes". Ravenscroft no cita ni una sola referencia como fuente de esas afirmaciones (Ravenscroft, op. cit., p. 91). Ravenscroft declara que pocos sospecharon que ese bohemio jovial era "un dedicado satanista, el adepto supremo de las artes y el ritual de la Magia Negra, y la figura central en un círculo poderoso y extendido de ocultistas, el Grupo Thule" (Ibid.). Con Rosenberg y varios emigrados rusos Blancos, Eckart era supuestamente el "maestro de ceremonias" en sesiones de espiritismo que invocaban a espíritus oscuros (Ibid., p. 104).

     En un capítulo que habla de "La Moderna Mitología del Ocultismo Nacionalsocialista", Goodrick-Clarke muestra que las leyendas acerca de Eckart y el ocultismo, y la comunicación con poderes oscuros, que fueron revividas por Ravenscoft, habían sido antes publicitadas por Pauwels y Bergier (Goodrick-Clarke, The Occult Roots of Nazism, p. 220). A pesar de persistentes afirmaciones, Goodrick-Clarke alude a supuestos miembros de Thule como Eckart, Hess y Rosenberg como siendo solamente "invitados" de la Sociedad, que incluía a muchos otros activistas políticos de un amplio espectro de la "Derecha", como el Partido Liberal Nacional (Ibid., p. 149).

     Irónicamente, Eckart, el "adepto satánico" de alto rango, basó su cosmovisión en una interpretación heroica de Jesús y la misión mundial cristiana de Alemania. En un ensayo, El Bolchevismo desde Moisés a Lenin, publicado póstumamente en 1923, Lutero es criticado por haber sido influído por los judíos en su interpretación del Antiguo Testamento y su importancia en la teología luterana [20].

[20] Eckart, "Bolshevism from Moses to Lenin", traducido por William Pierce, National Socialist World, Arlington, Nº 2, Otoño de 1966, p. 27. En castellano, El Bolchevismo desde Moisés a Lenin, en http://der-stuermer.org/spanish/Alfred_Rosenberg_-_El_Mito_Del_Siglo_XX.pdf

     Cristo siempre fue completamente franco con los judíos, tomando el tema de Chamberlain y otros, de que Jesús era un galileo, "de la tierra de los Gentiles" (Ibid., p. IV). Jesús no fue tolerante hacia los judíos, golpeándolos con su látigo y condenando bruscamente a los fariseos (los rabinos de aquella época) como nada menos que los hijos del diablo. El NSDAP estaba "defendiendo los fundamentos cristianos de nuestra nación sin reservas mentales... Pero queremos germanismo, queremos un cristianismo genuino, queremos orden y propiedad..."(Ibid.). Fue Pablo quien había deformado el cristianismo y lo había llevado a los Gentilescomo una influencia subversiva y debilitadora (Ibid., p. V). Éstos son temas que se habían extendido cada vez más entre los teólogos y los académicos alemanes durante el siglo XIX.

Dietrich Eckart

      Escrito como un diálogo entre Eckart y Hitler, El Bolchevismo desde Moisés a Lenin se refiere a Hitler y a él mismo como católicos, y eso es porque ellos eran los que debían hablar claro contra el espíritu judaico que infectaba a su Iglesia. Permanecía una fe católica incorruptible, independiente de las influencias corruptas que pudieran dominar en la Iglesia a veces. Giordano Bruno, quemado en la estaca, fue uno de aquellos que habían hablado claro contra la influencia judía, llamando a los judíos una "raza pestilente, leprosa y públicamente peligrosa". De los muchos críticos de la Iglesia que había en Italia entonces, ¿por qué fue seleccionado Bruno para la muerte? Hitler responde a Eckart en este diálogo: "Roma se reunirá, pero sólo si nosotros nos reunimos primero. Y un día se podrá decir que la Iglesia está entera otra vez".

     Eckart responde que eso sucederá cuando la influencia judía, que ha puesto a los cristianos unos contra otros, haya sido purgada de la comunidad cristiana. En cuanto al Protestantismo, fue más fuertemente infiltrado que el catolicismo. Eckart veía la división de la Iglesia Católica provocada por Lutero como una desgracia para la cristiandad, y la aparición de un sangriento conflicto entre la gente germánica mientras la batalla contra la perenne influencia judía había sido evitada. Lutero debería haberse concentrado en los judíos que subvierten el catolicismo, no en atacar a la Iglesia per se (Ibid., p. VI).

     Steigmann-Gall cita un pasaje de Eckart que he sido incapaz de encontrar en la traducción de Pierce [de El Bolchevismo...], que describe a Cristo como un líder a ser imitado: "En Cristo, la encarnación de toda virilidad, encontramos todo lo que necesitamos. Y si de vez en cuando hablamos de Baldur, nuestras palabras siempre contienen cierta alegría, cierta satisfacción por causa de que nuestros antepasados paganos eran ya tan cristianos que tenían indicaciones de Cristo en esta figura ideal"[21]. Ésa fue la obra final de Eckart, y quedó inacabada en el momento de su muerte. Steigmann-Gall declara que el cristianismo de Eckart era la base de su cosmovisión. Él veía la Guerra Mundial, en la cual había luchado, en términos dualistas como una lucha entre "Cristo y el Anticristo". El conflicto de post-Primera Guerra fue uno entre "la Germanidad y la Judería", el conflicto entre la luz y la oscuridad (Ibid., pp. 18-19).

[21] Richard Steigmann-Gall, The Holy Reich: Nazi Conceptions of Christianity 1919-1945, Nueva York, 2003, p. 18, citando a Eckart.


Conclusión

     Independientemente de lo que pudiera ser alegado o rechazado en cuanto al carácter cruel del Tercer Reich, la perspectiva de Hitler no era la de un Apocalipsis nihilista y satánico. Si bien el ministro de Armamentos Albert Speer después de la guerra tuvo problemas para distanciarse de su ex-Führer, él notó que Hitler nunca estimuló un programa nuclear. Hitler no tenía ninguna intención de desencadenar un curso de acontecimientos que pudieran sumergir al mundo. Sus científicos no fueron capaces de contestar la pregunta en cuanto a si la fisión nuclear podía ser controlada o establecería una reacción en cadena.

     "Hitler claramente no estaba encantado con la posibilidad de que la Tierra bajo el dominio de él pudiera ser transformada en un astro brillante. Ocasionalmente, sin embargo, él bromeaba con que los científicos, en su impulso ajeno al mundo de desvelar todos los secretos bajo el cielo, podrían algún día poner al globo en llamas"[22]. La actitud parece claramente anti-fáustica. Había límites, y de lo que Speer declara, parece que Hitler no era tan desmedidamente orgulloso como para desear ser otro Fausto o Prometeo. De lo que Speer registra en cuanto a los sentimientos de Hitler, éstos pueden ser vistos como antitéticos a lo afirmado por el falsario Rauschning, por ejemplo. No existía una voluntad de destrucción, ni una voluntad fáustica/prometeica para negar a los dioses o a Dios.

[22] Albert Speer, Inside the Third Reich, Nueva York, 1970, p. 227.

     Hitler ridiculizó la "superstición", pero reconoció el papel que ésta jugaba en la psique, y rechazó la eficacia de las profecías y de la astrología [23]. El Partido Nacionalsocialista, muy lejos de ser neo-pagano, como a menudo se afirma, si bien revivió muchas antiguas costumbres y festivales germánicos, desde el principio tuvo una amplia base cristiana, particularmente de luteranos, y muchos "pastores" luteranos eran oficiales de la SA. Ellos tuvieron tempranas reuniones de Partido en sus casas parroquiales. Hitler se desilusionó por el fracaso de las denominaciones cristianas en unirse como una Iglesia nacional alemana; sin embargo él también permaneció desdeñoso de las tentativas de revivir el paganismo (Steigmann-Gall, op. cit.). Este último permaneció como una influencia periférica dentro del núcleo interno de la SS.

[23] Hitler’s Secret Conversations, 19 de Julio de 1942, pp. 544-545.

      Himmler procuró crear la SS como una orden neo-pagana con sus propias ceremonias de matrimonio, nacimiento y muerte fuera de las Iglesias cristianas, y con oficiales SS sirviendo como los sacerdotes [24]. La Fiesta de la Mitad del Verano fue substituída por la Navidad. Sin embargo, estas medidas que Himmler intentó imponer eran tan impopulares y no reconocidas entre la SS, que hacia Noviembre de 1940 él se vio obligado a revocar los previos castigos por desobedecer las regulaciones en cuanto a la religión. Himmler tampoco tuvo éxito en apartar a su SS lejos del cristianismo. "Dos tercios de la Allgemeine-SS permanecieron en la Iglesia, un 54,2% evangélicos y 23,7% católicos" (Ibid., p.144).–

[24] Heinz Höhne, The Order of the Death’s Head, Londres, 1969, p. 143.





Sobre la Mentira de la Maldad Alemana

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     Del libro "The Myth of German Villainy" (2012) del estadounidense Benton L. Bradberry, presentamos aquí en castellano su prefacio y su primer capítulo. El libro, con un relato sencillo y documentado, aborda la falsa caracterización que se ha hecho de Alemania como el villano más consumado de la Historia, simple falsa propaganda de guerra, de ingleses y estadounidenses, destinada a crear el odio necesario en la opinión pública que justificase y santificase ambas guerras mundiales, de las que Alemania fue víctima y no iniciadora. Y para la repugnante campaña de posguerra de difamación anti-alemana, que terminó convirtiéndose en una lucrativa industria y una extorsionadora religión, sólo cabría esperar que se descubriese en toda su espantosa desnudez.


El Mito de Alemania como una "Nación Malvada"
por Benton L. Bradberry, 2012




Prefacio

     Serví en la Marina de Estados Unidos desde 1955 a 1977, sobre todo como un piloto naval, y vi mucho del mundo, por lo tanto. Los portaaviones en los cuales serví regularmente visitaban puertos europeos, así como otros puertos alrededor del mundo. También he viajado extensamente en los años desde que dejé la Marina. Después de viajar alrededor de la mayor parte de Europa, Alemania surge como mi país favorito. Durante nuestras visitas allí encontramos que la gente alemana era agradable, laboriosa, disciplinada y civilizada, con muchas semejanzas con los estadounidenses tradicionales. Ellos de ninguna manera se parecen a los estereotipos representados en todas las películas, libros y artículos anti-nazisa los que hemos estado sometidos durante todos estos años.

     Tengo 74 años al momento de escribir estas palabras. Mi generación creció prácticamente inundada con propaganda anti-alemana. Nos enseñaron, muy literalmente, a odiar a los alemanes como pueblo. Sin embargo, los alemanes con los que me he encontrado o con quienes he hecho amistad durante los años no parecen diferentes de los otros europeos, o incluso de los estadounidenses, y ellos no parecen más inclinados a la violencia y al militarismo que cualquier otro; y si es algo, lo parecen menos.

     Nunca he descubierto nada que pudiera ser considerado intrínsecamente "incorrecto" en el carácter alemán. Ellos son un pueblo muy cultivado, muy civilizado en todo sentido. Si se los estudia objetivamente, incluso los líderes de la Alemania de los años '30 y '40 no eran muy diferentes de los otros líderes europeos. Ellos sólo fueron interpretados como diferentes por la implacable propaganda de odio dirigida contra ellos.

     Alemania sufrió por lejos más que cualquier otro país a consecuencia de la Segunda Guerra Mundial. Aproximadamente 160 de sus más grandes ciudades y pueblos fueron completamente destruídos por la campaña Aliada de bombardeos, y quizásno menos de 20 millones de alemanes perdieron sus vidas a consecuencia de la guerra. Sin embargo, nadie quiere oír sus relatos de sufrimiento, y ninguna compasión ha sido permitida a los derrotados y deshonrados alemanes. La propaganda anti-alemana ha cultivado el sentimiento general de que ellos recibieron lo que ellos merecían.

     Toda la responsabilidad de comenzar ambas guerras y de toda la muerte y destrucción que resultó de ellas ha sido adjudicada a los alemanes (aunque los hechos no confirmen esto). Como ellos fueron los perdedores de ambas Guerras Mundiales, nunca se les permitió presentar su caso ante el tribunal mundial, ni contar su versión de la historia por ningún medio. Los vencedores de las guerras, después de todo, escriben los libros de Historia. Tampoco la historia verdadera de lo que sucedió durante la guerra apareció en los Juicios de Núremberg. Los Juicios de Núremberg no fueron nada más que juicios-espectáculos de estilo soviético que violaron cada estándar de la justicia británica y estadounidense tradicional. Su objetivo no era descubrir la culpa o la inocencia sino extender un barniz de legalidad sobre una decisión que ya había sido tomada para ejecutar a los líderes de Alemania. El circo de Núremberg entero fue una impostura y una parodia.

     La propaganda anti-alemana, usada para crear el clima de odio que hizo posible la destrucción y la matanza masivas de civiles alemanes, continuó implacablemente mucho después de que la guerra había terminado, cuando parecería natural para los historiadores de mente sobria comenzar a moderar sus opiniones extremas sobre Alemania. Las fantasiosas historias de atrocidades perduran hasta hoy. Uno sólo tiene que sintonizar el History Channel para verlas repetidas una y otra vez.

     En contraste, no pasó mucho tiempo después de que la Primera Guerra Mundial hubiera terminado cuando las historias de atrocidades atribuídas a los alemanes durante aquella guerra fueron expuestas como las mentiras deliberadas que ellas eran. Hombres responsables condujeron cuidadosas investigaciones y encontraron que ninguna de ellas era verdadera. Todas las historias sensacionalistas fueron deliberadamente fabricadas para ganar el apoyo público británico para la guerra contra Alemania y también para atraer a EE.UU. a la guerra.

     Pero un factor diferente estaba en juego después de la Segunda Guerra Mundial para mantener vivas las falsas historias de horror, factor que no existía después de la Primera Guerra Mundial. Después de la Segunda Guerra los judíos explotaron el sentimiento mundial anti-alemán, que ellos mismos habían creado en gran parte con su propaganda, para justificar la creación de su largamente buscado Estado de Israel como una patria para el pueblo judío.

     Mediante la manipulación de los medios internacionales de información, los judíos consiguieron la compasión mundial para ellos con sus historias sensacionalistas del sufrimiento judío único a manos de los crueles alemanes. Ellos afirmaron que Alemania había seguido un plan sistemático para exterminar a todos los judíos de Europa, y que antes del final de la guerra habían logrado matar a 6 millones de ellos. El supuesto método era acorralar a los judíos de todas partes de Europa, arrastrarlos en trenes a supuestos "campos de exterminio" donde ellos eran reunidos en manada en cámaras de gas y asesinados, y sus cuerpos luego eran quemados en crematorios gigantescos, con, convenientemente, ninguna evidencia forense de lo que había pasado entonces. En ausencia de pruebas forenses, el testimonio de testigos oculares, no importa cuán disparatado fuese, bastaba para condenar a Alemania y convertirla en el paria de las naciones civilizadas.

     Los jueces de los Juicios de Núremberg no eran inmunes a los torrentes de la propaganda de odio anti-alemán, y estaban predispuestos, ya antes de que los procesos siquiera comenzaran, a creer cualquier historia de horror, no importa cuán fantástica fuese, sobre los alemanes. Otro factor que predeterminó el resultado de dichos "juicios" fue que los acusadores también sirvieron como investigadores, acusadores y jueces finales. Los procesos también estuvieron completamente impregnados de una atmósfera de búsqueda de venganza judía. Justo detrás de los testaferros Gentiles, la mayor parte de los abogados, acusadores e investigadores eran judíos.

     Cientos de judíos que apenas podían hablar inglés se divertían en uniformes de oficial del Ejército estadounidense. Dos de los ocho jueces de Núremberg eran judíos, Robert Falco de Francia, y el teniente coronel A. F. Volchkov (de apellido real, Berkman) de la Unión Soviética. El Acusador General para la"Alta Corte" era el doctor Jakob Meistner, un judío. Su dominio y control de los procesos era ostensible. Incluso el verdugo de los 10 líderes nacionalsocialistas condenados a muerte, el sargento mayor John C. Woods, era un judío, y los colgamientos ocurrieron el 16 de Octubre de 1946, el feriado judío de "Purim". En el Libro de Ester, los 10 hijos de Hamán, un enemigo de los judíos, fueron ahorcados durante el día de Purim. Según Louis Marschalko, un periodista húngaro de guerra que escribió sobre los procesos, "De las 3.000 personas empleadas del personal en los Tribunales de Núremberg, 2.400 eran judíos". La historia del "Holocausto" que conocemos tan bien hoy fue desarrollada durante los Juicios de Núremberg.

     Cultivando y propagando hábilmente esa historia del "Holocausto", los judíos han sido capaces de arrancar cientos de miles de millones de dólares de Alemania y Estados Unidos, la mayor parte de los cuales fue usada para financiar al nuevo Estado de Israel. La afirmación de que los judíos en Israel "hicieron florecer el desierto" era verdadera. Ellos lo hicieron con el dinero alemán y estadounidense. Ellos están ahora trabajando duro para arrancar miles de millones más de otros países europeos en lo que ha sido despectiva pero correctamente llamado "la Industria del Holocausto".

     Incluso ahora, más de medio millón de supuestos "sobrevivientes del Holocausto" que viven principalmente en Israel y Estados Unidos reciben pensiones de por vida del gobierno alemán. ¿Y qué es un "sobreviviente del Holocausto"? Cualquier judío que vivió en cualquier parte en territorio controlado por los alemanes en cualquier momento durante la guerra, ya fuese viviendo en un campo de concentración o en el regazo del lujo, es un sobreviviente del "Holocausto"y por lo tanto elegible para una pensión alemana. Además, cualquier judío que fue obligado a dejar Europa durante la época nacionalsocialista es un sobreviviente del "Holocausto". Los sobrevivientes cristianos de la guerra, no importa cuán horrorosa haya sido su experiencia, no son elegibles para pensiones. "Shoah"es la palabra hebrea para el "Holocausto". Se ha bromeado con que"No hay negocio como el negocio de la Shoah".

     El fraude entero del "Holocausto" no se ha convertido en nada sino en una enorme extorsión contra los países europeos, especialmente Alemania. La historia del "Holocausto" tiene otros usos también. Es rutinariamente invocada para desarmar al público general de defenderse contra las depredaciones judías. El Primer Ministro Netanyahu regularmente invoca el "Holocausto"para justificar los ataques israelíes sobre sus vecinos.

      Mantener ese lucrativo tren moviéndose requiere la continuada legitimación de los judíos como el grupo víctima definitivo de la Historia, la cual, por su parte, requiere al victimizador definitivo de los judíos, y Alemania ha sido designada para desempeñar aquel papel a perpetuidad. El History Channel controlado por los judíos, o "Hitler Channel"como a veces es burlonamente llamado, debe su éxito a la repetición sin parar de estos programas de propaganda anti-alemana. Cualquier modificación o revisión de esa imagen cuidadosamente cultivada de Alemania como el monstruo malvado de la Historia, y particularmente como el malvado victimizador de los judíos, amenazaría la historia entera del "Holocausto". Por lo tanto esa imagen es celosamente y cuidadosamente protegida por la prensa y los medios de información controlados por el judío, y ay de aquel que se atreva a cuestionarla. Cualquiera que haga eso es inmediatamente atacado y difamado como un enloquecido "anti-semita".

     Los judíos son también reacios a abandonar o siquiera moderar su búsqueda de venganza. Ancianos que han sufrido toda su vida como fugitivos, todavía están siendo perseguidos como "criminales de guerra", y "llevados ante la justicia" o sumariamente asesinados inmediatamente (ellos lo llaman venganza). El único delito del que estos ancianos pueden ser culpables es de haber sido un oficial o un soldado en el ejército alemán durante la guerra.

     Pero, ¿por qué —uno podría preguntar— entre toda la carnicería, muerte y destrucción que ocurrió durante la Segunda Guerra Mundial, ha surgido el llamado "Holocausto" como la historia central de atrocidades? Aproximadamente 55 millones de personas murieron durante la guerra, siendo sólo un porcentaje diminuto de ellos judíos, seguramente sólo una fracción de los supuestos 6 millones. Todas las otras nacionalidades combatientes han puesto hace mucho la guerra detrás de ellas y han tratado de hacer la paz con sus antiguos enemigos, ¡pero no los judíos! Dos tercios de un siglo han pasado, pero los judíos todavía están alimentando sus resentimientos, todavía están construyendo museos del "Holocausto"y monumentos conmemorativos (a costa de varios gobiernos, a propósito), y todavía están investigando nuevos modos de arrancar dinero de varios países como "compensación". ¿Pero por qué deberían sólo los judíos ser compensados? Muchos millones de otras personas a través de Europa perdieron todo en la guerra.

     El "Holocausto"ha evolucionado durante los años para convertirse en el mito nacional del pueblo judío, con todas las características de una religión, completa, con su propio Satán: Hitler. El mito del "Holocausto" es el aglutinante que mantiene unida a la gente judía como una nacionalidad distinta, y debido a esto ellos lo conservan y lo protegen cuidadosamente. Como una consecuencia, los pobres alemanes son confinados a perpetuidad al papel del malvado monstruo de la Historia, sin tener en cuenta cuáles puedan ser los hechos reales.

     Pero incluso si todas las historias de atrocidades alemanas durante la Segunda Guerra fueran verdaderas en cada detalle, ellas todavía no se compararían en su inhumanidad con las atrocidades cometidas contra los alemanes. El indiscriminado bombardeo de saturación de las ciudades alemanas, la expulsión brutal de poblaciones alemanas enteras después de la guerra, las privaciones de posguerra impuestas por los Aliados, las masacres soviéticas y las liquidaciones políticas, simplemente empequeñecen el "Holocausto"en su destrucción de la vida humana y su destrucción de las obras acumulados de la civilización humana. Cualquier contabilidad final y balance de la conducta de todos los combatientes durante la 2ªGM sólo podrían resultar en la exculpación de Alemania como "únicamente" bárbara en sus métodos de emprender la guerra, o en su tratamiento de poblaciones sometidas.

     La gente alemana fue devastada por la guerra, en un grado mayor que cualquier otro participante, incluyendo los judíos, mientras al mismo tiempo ellos han sido estigmatizados como los malvados y predadores perpetradores de la guerra. A ellos se les ha hecho pagar un precio terrible por atrocidades durante la Segunda Guerra Mundial que podrían no haber ocurrido nunca, o al menos nunca haber ocurrido en el grado que se alega. Se hace más claro, a medida que pasa el tiempo, que los alemanes fueron las verdaderas víctimas de ambas Guerras Mundiales, y que continúansiéndolo.–



CAPÍTULO 1
El Mito de Alemania como una "Nación Malvada"


     Como resultado de haber perdido dos apocalípticas guerras mundiales, Alemania ha adquirido una reputación como la nación malvada de Europa, y quizá como la nación malvada de todos los tiempos. Sólo la mención de la palabra "alemán" todavía hace aparecer en la mente de algunos una imagen de robóticas tropas de asalto, marchando con el paso de ganso, bajo las órdenes de ceremoniosos oficiales prusianos, listos a marchar para inferir asesinatos gratuitos y destrucción sobre sus vecinos amantes de la paz.

     Hemos sido lavados de cerebro por la implacable propaganda para considerar a los alemanes como intrínsecamente militaristas, agresivos, brutales, racistas y anti-judíos, con una predilección por la obediencia ciega a figuras de autoridad. Cientos de películas de Hollywood, la incansable propaganda del "Holocausto"e innumerables libros y artículos de revista han reforzado permanentemente esta imagen negativa de Alemania en la mente popular. No se requieren motivos racionales para los inexplicables horrores de los que se acusa a los alemanes que cometieron rutinariamente. Es axiomático que su naturaleza malvada explica todo esto.

     Considere la película "La Lista de Schindler"del director judío Steven Spielberg, por ejemplo. El comandante nacionalsocialista del campo de concentración (supuestamente el campo Plaszow fuera de Cracovia, no lejos de Auschwitz), está sin camisa en el balcón de su casa con un rifle de caza sobre sus hombros desnudos. El rifle está equipado con una mira telescópica. En la película, la casa está localizada en una colina encima del campo de modo que él pueda mirar los grupos de prisioneros que se mueven alrededor en el recinto abajo. Él levanta el rifle y lo apoya en su hombro y por el telescopio comienza casualmente a explorar de un preso al otro. La imagen que se ve por el telescopio ahora llena la pantalla de la película. Las líneas de la mira telescópica se detienen en un preso seleccionado al azar. Él tira del gatillo y el preso cae a tierra, muerto. La pantalla entonces regresa al comandante nacionalsocialista para mostrar el aburrido desapego con que él actúa al provocar la descarga de su rifle y casualmente lo levanta hasta su hombro. Él dispara otra vez, y nuevamente un preso cae a tierra, muerto.

     Aburrido con su "práctica de tiro"él vuelve su atención a la hermosa, atractiva y desnuda mujer que está en una cama justo dentro de la casa desde el balcón. La mujer es supuestamente una de sus criadas judías seleccionadas del campo, quien también por lo visto sirve como su esclava sexual. La cara de él expresa un desdeñoso aunque indiferente cinismo. El propósito de los disparos, así como presentar a la criada desnuda (la que resulta ser judía, ¿qué otra cosa?), es mostrar al oficial nacionalsocialista como totalmente depravado, sin conciencia, moralidad o empatía por otros humanos; en resumen, un psicópata. Se supone, por supuesto, que los prisioneros asesinados eran todos judíos. Dos populares temas judíos son combinados aquí: los malvados nacionalsocialistas y la persecución judía.

     Este episodio es completamente ficticio, basado en una novela de Thomas Keneally, un australiano que sólo visitó los campos de concentración una vez en 1980 y que no tenía ningún verdadero conocimiento de lo que ocurrió allí. Ningún acontecimiento real como el descrito ha sido registrado alguna vez, y sin embargo la gran mayoría de los asiduos a las películas se lo traga entero y lo acepta como historia real. El verdadero campo Plaszow estaba localizado al otro lado de una colina desde la casa del comandante, y completamente fuera de la vista desde el balcón del comandante. Hubiera sido imposible para él disparar hacia el recinto como se muestra en la película, incluso si él hubiera estado inclinado a hacer aquello, lo que es muy improbable.

     El comandante real de Plaszow, Amon Goeth, en el cual está basado el personaje de la película, vivía en la casa con su novia Ruth Kalder, con quien él tenía un hijo. Ruth dijo que ellos tenían la intención de casarse, pero eran incapaces de hacer eso debido al caos al final de la guerra. Ella cambió su apellido y el de su hijo a Goeth después de la guerra con la ayuda del padre de Amon Goeth. Amon Goeth fue ahorcado después de la guerra por el gobierno polaco (el gobierno polaco de posguerra era completamente judío, a propósito) principalmente por ser un miembro del Partido Nacionalsocialista y un miembro de las Waffen-SS, no por disparar a los prisioneros. Ruth describió a Amon Goeth como un hombre culto que tenía una hermosa voz de canto. Goeth, en efecto, tenía realmente dos criadas judías seleccionadas del campo mientras él era el comandante, pero ellas no eran hermosas y atractivas como es representado en la película, y no hay ninguna información de que él haya tenido relaciones indecorosas con ellas. Aquella historia sólo fue incluída para añadir condimento a la película.

     Otro ejemplo es la película "La Decisión de Sophie", de otro director judío, Alan J. Pakula, en la cual "Sophie" y sus dos pequeños hijos son enviados a Auschwitz (Auschwitz es el santo templo de la tradición del "Holocausto"). Durante el proceso de "selección" (la "selección" es ahora una de las "estaciones" del "Vía Crucis"de la religión del "Holocausto") inmediatamente después de su llegada, a Sophie le dice un estereotípicamente malvado oficial nacionalsocialista (supuestamente el doctor Joseph Mengele de Auschwitz, de pésima fama) que ella sólo puede conservar a uno de sus hijos y que el otro debe ir a la cámara de gas. Ella es obligada a elegir cuál conservará y cuál será enviado a la cámara de gas. De ahí el título de "La Decisión de Sophie". El malvado oficial nacionalsocialista no proporciona ninguna razón o explicación en la película para requerir que un niño muriera o para obligarla a hacer dicha desgarradora decisión. Que él sea un "malvado" nacionalsocialista se supone que es suficiente explicación. Esa absurda película está basada en una novela del escritor del Sur estadounidense William Styron, quien no tenía ningún conocimiento de primera mano de los campos en absoluto.

     Auschwitz fue simplemente usado como el escenario para un cuento que salió de su imaginación. Nada por el estilo alguna vez sucedió en la vida real. Con todo, malvadas historias nacionalsocialistas como éstas han sido durante mucho tiempo un artículo básico en Hollywood. El público de las películas ha sido tan condicionado por estas tonterías, que la ficción ha llegado a ser el "hecho" en la mente pública. Hemos sido todos lavados de cerebro para aceptar tales absurdos sin escepticismo. Los alemanes son "malos", de modo que ellos hacen cosas "malas". Ninguna explicación adicional es necesaria. Sin embargo, Alemania no siempre fue vista bajo esta luz.

      La imagen de Alemania como una nación siniestra, predadora y belicista sólo echó raíces en el siglo XX. La Alemania del siglo XIX, por contraste, era vista como un lugar de paz e ilustración. El historiador inglés Frederic William Maitland describió el modo en que la gente inglesa veía a los alemanes durante el siglo XIX: "Era habitual y plausible describir al alemán como un ser poco práctico, soñador, sentimental, que mira con tranquilos ojos azules hacia una nube de música y metafísica y humo de tabaco".

     La altamente influyente escritora francesa y matrona de salón Madame de Stael retrató a los alemanes durante el período de las guerras napoleónicas como una nación de "poetas y pensadores, una raza de soñadores amables, poco prácticos y desapegados del mundo, sin prejuicios nacionales y reticentes a la guerra".

     Los estadounidenses también tenían una opinión benigna de los alemanes antes del siglo XX. El historiador estadounidense Henry Cord Meyer escribió: "Ya sean vistos en su nación recientemente unida [Alemania se unió en una nación en 1871] o en este país [los inmigrantes alemanes en Estados Unidos], los alemanes eran generalmente considerados como gente metódica y enérgica que era modelos de progreso, mientras que por su devoción a la música, la educación, la ciencia y la tecnología ellos despertaban la admiración y la emulación de los estadounidenses".

     En 1905 Andrew Dickson White, un célebe historiador estadounidense, educador y embajador ante Alemania, escribió justo nueve años antes del inicio de la Primera Guerra Mundial:

     "Alemania, desde ser una gran masa confusa de guerreros y pensadores y trabajadores, militante en propósitos diversos, desgastándose en luchas vanas, y depredados por vecinos malévolos, se ha convertido [después de la consolidación] en una gran potencia en armas, en el arte, en la ciencia, en la literatura; una fortaleza de alto pensamiento; un guardián de la civilización; el aliado natural de cada nación que busca el mejor desarrollo de la Humanidad".

     El pueblo alemán ha hecho históricamente grandes contribuciones en cada esfera del logro cultural, intelectual y científico. En el campo de la música, hubo genios del siglo XVIII tales como Bach, Haydn, Mozart, Beethoven, Shubert y Schuman, por nombrar unos pocos. Este genio musical continuó en el siglo XIX con los Strauss, Mahler y Richard Wagner. Hubo contribuciones literarias de Goethe y Schiller, los trabajos históricos de Ranke y Niebuhr, los estudios filosóficos de Kant y Hegel, y las grandes contribuciones científicas de Alexander von Humboldt y William Conrad Roentgen. Éstos son sólo unos pocos ejemplos de una lista muy larga. El sistema prusiano de enseñanza superior y el florecimiento cultural que caracterizó a Prusia durante los años posteriores a las guerras napoleónicas influyó enormemente tanto a Europa como a Estados Unidos. El sistema escolar público estadounidense, así como nuestro sistema universitario, fue deliberadamente modelado a partir del sistema escolar público prusiano y su sistema universitario.

     Alemania fue admirada por el mundo como un centro de aprendizaje, por su alta cultura y por sus logros en cada campo, pero también por su cultura de honestidad, trabajo duro, orden y economía, que existía incluso en el nivel más bajo de la sociedad. Los estudiosos y los periodistas británicos habían estado muy favorablemente dispuestos hacia todas las cosas alemanas, incluyendo su historia, su cultura e instituciones a través de todo el siglo XIX. El muy respetado historiador de Cambridge Herbert Butterfield comentó extensamente sobre la alta consideración británica por Alemania.

     "En Inglaterra la opinión que una vez prevaleció era que la historia alemana era particularmente la historia de la libertad, ya que era una historia que comprendía la federación, el Parlamento, las ciudades autónomas, el Protestantismo, y una ley de la libertad llevada por las colonias alemanas al Este eslavo. En aquel tiempo eran los Estados latinos los que eran considerados inclinados hacia el autoritarismo, aferrándose al Papado en Italia, la Inquisición en España y las dictaduras Bonapartistas en la Francia militarista. La inversión de esta opinión en el siglo XX y su reemplazo por una opinión común de que Alemania había sido el agresor y el enemigo de la libertad a través de todas las épocas, sin duda será objeto de la investigación histórica algún día, especialmente ya que parece haber coincidido tan estrechamente con un cambio en la política exterior británica... Hasta principios de 1900 cuando la erudición histórica en Inglaterra llegó a su clímax con hombres como Acton y Maitland, las palabras difícilmente pueden describir la admiración por Alemania —y el confesado discipulado— que existía entre los historiadores ingleses".

     Y luego el escritor británico Thomas Arnold (1795―1842) vio a Alemania no como una nación con una predisposición única hacia el autoritarismo y la reglamentación sino más bien como una "cuna de la ley, la virtud y la libertad", y consideró como una "distinción de primer orden"que los ingleses pertenecieran a la familia germánica de pueblos. Muchas fotografías representan la manera en la cual el mundo veía a Alemania durante los siglos XVIII y XIX, hasta el comienzo de la Primera Guerra Mundial. La Alemania previa a dicha guerra era vista como una tierra pacífica de cuentos de hadas y castillos de ensueño, y de una gente laboriosa, respetuosa de la ley y disciplinada.


La positiva imagen de Alemania cambia de la noche a la mañana

     Esta opinión de Alemania iba a cambiar casi durante la noche con el inicio de la Primera Guerra Mundial. Después de que la guerra comenzó en 1914, una imagen grotesca de una Alemania rapaz, sanguinaria y singularmente agresiva rápidamente tomó forma y se convirtió en la imagen estereotípica de Alemania en Europa y Estados Unidos. Esta nueva imagen de Alemania era el resultado directo de una virulenta campaña de propaganda anti-alemana conducida por el gobierno británico, a la que más tarde su unió el gobierno de Estados Unidos, en la cual fueron diseminadas mentiras deliberadas y sistemáticas, distorsiones y falsas historias de atrocidades entre el público británico y estadounidense.

     Las emociones tanto del público británico como del estadounidense fueron deliberadamente fustigadas hasta una enfebrecida tonalidad de odio contra los "hunos". Una hostilidad patológica hacia todo lo alemán, que más tarde se convirtió en una parte integral y familiar del pensamiento occidental en cuanto a Alemania, tuvo su nacimiento en esta hábil campaña de propaganda. Después de la Segunda Guerra Mundial el historiador Harry Paxton Howard examinó esta transformación de la reputación de Alemania que comenzó inmediatamente después del comienzo de la 1ªGM. Se inventó, dijo él, que Alemania no sólo era mala sino que siempre había sido de esa forma, y que Alemania, contrariamente a los hechos, siempre había sido el enemigo histórico de Europa y de EE.UU. Él escribió:

     «Realmente, en el sentido literal de la palabra, el mayor trabajo de revisionismo histórico fue hecho durante la Primera Guerra Mundial cuando nuestras "historias" fueron completamente revisadas para mostrar que Alemania siempre había sido nuestro enemigo, que Alemania había comenzado la guerra en 1914, que Alemania había comenzado incluso la guerra franco-prusiana en 1870, y que en la Guerra Revolucionaria (estadounidense) no habíamos estado luchando contra los británicos sino contra los Hessianos; para no mencionar cosas tales como que los alemanes cortaban las manos de bebés belgas, en vez de que los belgas eran los que cortaban las manos de los congoleños. Ésta fue una verdadera revisión de nuestras historias que ha deformado la mente estadounidense durante más de cuarenta años».

     Todos los beligerantes, por supuesto, incluída Alemania, usaron la propaganda contra sus enemigos, como todos los beligerantes lo han hecho en todas las guerras a través de toda la Historia; pero los esfuerzos de propaganda de Alemania y las Potencias Centrales eran de aficionado e ineficaces comparados con los de los británicos. En sus esfuerzos de propaganda, los alemanes tendían a apelar a la razón en vez de a las emociones. Ellos nunca retrataron a sus enemigos como bestias sanguinarias e inhumanas. Los Aliados, Gran Bretaña en particular, por contraste, se demostraron maestros en manipular hábilmente la opinión mundial por medio de la extensa propagación de fantásticos cuentos de la villanía alemana.

     Desde el principio de la Primera Guerra, las historias de atrocidades alemanas llenaron los periódicos británicos y estadounidenses. (Los periódicos estadounidenses dependían entonces de las agencias británicas de noticias para la mayor parte de sus historias sobre Europa, que llegaban a través de cables submarinos controlados por Gran Bretaña. Los alemanes no tenían ningún acceso a los medios estadounidenses de comunicación. Gran Bretaña se aseguró de aquello cortando los seis cables transatlánticos desde Alemania a EE.UU.).

     Las primeras historias de atrocidades surgieron tras la marcha alemana por Bélgica a principios de la guerra. El objetivo de Alemania no era atacar Bélgica per se sino pasar a través de ella a fin de eludir las defensas francesas y luego hacer un giro hacia París. Esa estrategia fue conocida como el Plan Schlieffen, que los alemanes creían que era el único modo de conseguir una victoria rápida sobre Francia. La "violación" de la neutral Bélgica por parte de Alemania sirvió como el pretexto británico para ir a la guerra en contra de Alemania, aunque la decisión de ir a la guerra por otros motivos (principalmente económicos) hubiera estado ya tomada.

     Bélgica fue sólo un pretexto. Para entrar en la guerra, era necesario ganar el apoyo público y aprovechar las oportunidades de propaganda resultantes de la invasión de Bélgica por parte de Alemania, tal como las fabricadas historias de atrocidades alemanas en Bélgica sirvieron para aquel objetivo. Aparecieron "testigos oculares" que describían a los "hunos" de nudillos peludos con sus cascos puntiagudos sacudiendo a bebés belgas en el aire y atrapándolos con sus bayonetas mientras ellos marchaban, cantando canciones de guerra. Historias de soldados alemanes que amputaban las manos de muchachos belgas fueron ampliamente relatadas (supuestamente para impedirles disparar rifles). Cuentos de mujeres con sus pechos cortados se multiplicaban aún más rápido. Había también cuentos de crucifixiones de soldados Aliados. Los europeos y los estadounidenses eran más religiosos entonces que lo que lo son hoy, y las historias de crucifixión despertaban indignación. (Debería ser mencionado que de todas las formas de prueba aceptadas en los tribunales modernos, el testimonio de un testigo ocular es considerada la menos confiable).

    Pero las historias de violaciones eran las favoritas de todos los cuentos de atrocidades. Un "testigo ocular" describió cómo los alemanes arrastraron a veinte mujeres jóvenes desde sus casas en una ciudad belga capturada, y las pusieron en mesas en la plaza del pueblo, donde cada una fue violada por al menos doce "hunos" mientras el resto de los soldados miraba y aclamaba. Después de ser alimentado con una dieta estable de esta clase de propaganda, el público británico verdaderamente exigió la venganza contra los repugnantes hunos.

     Un grupo de belgas recorrió Estados Unidos (a costa del gobierno británico) contando estas historias a los estadounidenses. (Gran Bretaña quería hacer entrar a Estados Unidos en la guerra). El Presidente Woodrow Wilson solemnemente recibió a dicho grupo en la Casa Blanca. La propaganda retrataba a Gran Bretaña como "un Caballero en un caballo blanco" yendo a la defensa de la violada neutral Bélgica. Ésa fue una cínica manipulación de la opinión pública, por supuesto, porque si Alemania no hubiera violado la neutralidad belga, Gran Bretaña lo hubiera hecho sin pensarlo dos veces.

     Alemania negó airadamente todas esas historias. Lo mismo hicieron reporteros estadounidenses que estaban con el ejército alemán y que sabían que aquéllas eran mentiras. Pero estos desmentidos no se abrieron camino en los periódicos estadounidenses. Los británicos controlaban lo que entraba en los periódicos estadounidenses y eran los británicos los que generaban las historias de atrocidades. Para realzar la credibilidad de esas fantásticas historias de atrocidades, el gobierno británico le pidió al vizconde Bryce a principios de 1915 que encabezara una comisión Real para conducir una investigación.

     El gobierno británico, por supuesto, quería que Bryce apoyara esa falsa propaganda, lo que él obedientemente hizo. Bryce era un historiador conocido con una buena reputación en Estados Unidos. Él no sólo había servido como el embajador británico en Washington sino que había escrito varios libros elogiosos del gobierno estadounidense. Los británicos sabían que él era altamente respetado y admirado en EE.UU., y que tenía una reputación de rectitud y honestidad. Estados Unidos creería lo que él dijera. Bryce era también sumamente leal a su propio país y por lo tanto perfecto para el trabajo.

     Bryce y sus seis colegas comisionados, todos abogados, historiadores y expertos legales, "analizaron", si usted puede llamarlo así, 1.200 declaraciones de "testigos oculares" que afirmaban haber visto esas atrocidades alemanas de primera mano. Casi todos los relatos de testigos oculares venían de belgas que se habían ido de Bélgica a Inglaterra como refugiados, aunque algunos relatos también provenían de soldados británicos en Francia. La comisión nunca interrogó a ni uno solo de esos testigos oculares, sino que en cambio confió en sus declaraciones escritas (sombras de los futuros Procesos de Núremberg después de la siguiente guerra).

     Puesto que había una guerra en curso, no hubo investigaciones "en el sitio del suceso" de ninguna atrocidad reportada. Ni un solo testigo fue identificado por su nombre, incluyendo los soldados que habían proporcionado narraciones escritas. Y, sin embargo, la comisión oficialmente confirmó que todas las historias de atrocidades, no importando cuán fantásticas fuesen, eran verdaderas. Esta falsa investigación era sólo otra parte de la campaña británica de propaganda anti-alemana.

     El "Reporte Bryce" fue publicado el 13 de Mayo de 1915, y el gobierno británico se aseguró de que le llegara a cada periódico en Estados Unidos. El impacto fue fenomenal, sobre todo viniendo justo después de ser torpedeado el transatlántico británico Lusitania, lo que causó la muerte de 135 estadounidenses. Los estadounidenses de costa a costa estaban indignados. Una ola de repugnancia para todas las cosas alemanas barrió el país. El odio hacia los alemanes alcanzó el tono de la fiebre. De repente el público estadounidense estaba pidiendo la guerra a gritos. (Hay una sospecha bien fundada de que el Lusitania fue establecido como un señuelo por el Primer Lord del Almirantazgo, Winston Churchill, al exponerlo deliberadamente a un ataque alemán submarino para llevar a EE.UU. a la guerra).

     Pero hubo escépticos del reporte de Bryce. En Inglaterra, sir Roger Casement llamó al reporte una mentira, y escribió un informe propio refutándolo, aunque nadie le prestara mucha atención. El abogado estadounidense Clearance Darrow fue tan escéptico que viajó a Francia en 1915 y buscó en vano un solo testigo ocular que pudiera confirmar siquiera una de las historias de Bryce. Cada vez más dudoso, Darrow anunció que él pagaría 1.000 dólares, equivalentes a alrededor de 25.000 dólares de hoy, a cualquiera que pudiera mostrar un muchacho belga cuyas manos hubieran sido amputadas por algún soldado alemán, o cualquier otra víctima belga o francesa que hubiera sido mutilada por tropas alemanas. Ninguno fue encontrado.

     Las "pruebas" proporcionadas por el Comité Bryce en su investigación, así como los métodos empleados para recolectarlas, violaban cada regla elemental de la presentación de evidencia. Investigadores cuidadosos han demostrado hace mucho que el informe entero estaba compuesto de nada más que distorsiones y falsedades absolutas.

     Pero Gran Bretaña estaba determinada a arrastrar a Estados Unidos a la guerra, y Bryce y sus colegas fueron cómplices deliberados en aquel esfuerzo. Ellos justificaron sus mentiras y exageraciones porque servían a la causa más alta de la Madre Inglaterra. Después de la guerra la mayor parte de los historiadores descartó el 99% de las atrocidades de Bryce como fabricaciones.

     Alguien calificó al informe como "en sí mismo una de las peores atrocidades de la guerra". "Después de la guerra", cuenta Thomas Fleming en su libro Ilusión de Victoria, "a los historiadores que procuraban examinar la documentación de las historias de Bryce se les dijo que los archivos habían desaparecido misteriosamente". A medida que la guerra perdía fuerza, otra historia fabricada circuló ampliamente. Se relataba que los alemanes estaban manejando una "fábrica de cadáveres" donde los cuerpos tanto de soldados alemanes como Aliados muertos en batalla eran supuestamente fundidos para obtener grasas y otros productos útiles al esfuerzo de guerra alemán. Los alemanes fueron acusados de hacer jabón a partir de la grasa humana. Las pieles humanas, se decía, eran usadas para hacer finos artículos de cuero, como pantallas de lámparas, guantes para conducir y pantalones para montar. Se decía que los huesos de esos cadáveres habían sido molidos y usados como fertilizantes en las granjas alemanas.

     Un detallado relato de esa presunta "fábrica de cadáveres" apareció en el muy respetado periódico británico The Times, el 17 de Abril de 1917. Según la historia, trenes llenos de cadáveres llegaban a una gran fábrica. Los cuerpos eran atados a ganchos conectados a una cadena sin fin. El artículo describía cuidadosamente el proceso dentro de la fábrica de cadáveres:

     "Los cuerpos son transportados por esta cadena sin fin hacia un compartimento largo y estrecho donde ellos pasan por un baño que los desinfecta. Luego ellos pasan por una cámara secante, y finalmente son automáticamente llevados hacia un digestor o gran caldera, en la cual ellos son dejados caer por un aparato que se separa de la cadena. En el digestor ellos permanecen entre seis y ocho horas, y son tratados mediante vapor, el cual los rompe mientras ellos son lentamente revueltos por la maquinaria. De este tratamiento resultan varios productos. Las grasas son descompuestas en estearina, una forma de sebo, y aceites, que requieren ser destilados de nuevo antes de que puedan ser usados. El proceso de destilación es realizado hirviendo el aceite con carbonato de sodio, y algunos de los subproductos resultantes de esto son usados por fabricantes alemanes de jabón. La destilería y la refinería del aceite están en la esquina Sudeste de la fábrica. El aceite refinado es enviado en pequeños barriles como aquellos usados para el petróleo, y es de un color marrón amarillento".

     Note los meticulosos detalles. La historia era una fabricación total, pero era una historia "plausible", especialmente con todo el detalle, y no fue posible para los alemanes refutarla completamente mientras la guerra todavía continuaba. Después de la guerra, por supuesto, la historia fue expuesta como la mentira que era. Ninguna tal fábrica de cadáveres existió. Es interesante que la historia de hacer jabón a partir de cuerpos surgiera otra vez durante la Segunda Guerra Mundial cuando los alemanes supuestamente hicieron jabón a partir de cadáveres judíos. Aquella mentira todavía es ampliamente creída y sigue siendo un artículo básico de la propaganda del "Holocausto"judío. Las historias de las "pantallas de lámparas hechas de piel humana" también tuvieron su origen en la Primera Guerra Mundial, y surgieron otra vez durante la Segunda Guerra Mundial cuando los alemanes supuestamente hacían pantallas de lámparas con piel de judíos. No hubo nada de eso, pero también permanece como un artículo básico de la propaganda judía del "Holocausto".

     «El propósito de la propaganda de guerra», observa en su libro "La Ilusión de la Victoria" el historiador Thomas Fleming, «de acuerdo a como es vendida por las élites inglesa y estadounidense, era crear una generalizada imagen pública de los alemanes como "monstruos capaces de un sadismo espantoso", encubriendo así un llamado al cruel odio colectivo con un barniz de mojigatería».«El truco», decía Fleming, «es dejar al auditorio-objetivo a la vez estremeciéndose de horror por un espectáculo de la depravación infrahumana, y jadeando por un deseo visceral de venganza, y entusiastamente auto-justificado con respecto a la pureza de sus motivos humanos. La gente que sucumbe a ello es fácilmente subsumida en una mentalidad de colmena de un odio oficialmente aprobado, y queda preparada para perpetrar crímenes aún más horribles que aquellos que ellos creen que tipifican al enemigo».

     El Reporte Bryce, así como toda la otra propaganda anti-alemana, incuestionablemente ayudó a Inglaterra a ganar la guerra. Convenció a millones de estadounidenses y a otros neutrales de que los alemanes eran bestias en forma humana, y esto, tanto como todo lo demás, ayudó a arrastrar a EE.UU. a la guerra. Pero hubo consecuencias adversas ante esta sensacionalista campaña de propaganda de atrocidades. Envenenó a la opinión pública contra los alemanes hasta tal punto que no pudo ser deshecha. Dicha campaña fue un factor obvio, por ejemplo, en la decisión británica de mantener el bloqueo total de Alemania durante siete meses después de que la guerra había terminado, lo cual, a propósito, era una violación de la ley internacional. El bloqueo hizo que un millón de civiles alemanes pasaran hambre hasta la muerte, y causó el sufrimiento insoportable de millones más. El bloqueo mismo fue con mucho la mayor atrocidad de la Primera Guerra Mundial, aunque reciba muy poca publicidad, y fue llevado a cabo no por los malvados alemanes sino por los santos británicos.

     Creando un odio ciego contra Alemania, la campaña de propaganda anti-alemana también contribuyó a los duros términos de paz impuestos a Alemania al final de la guerra, lo cual entonces sembró las semillas de la Segunda Guerra Mundial. Aunque los historiadores y otros investigadores hayan expuesto estas historias de atrocidades alemanas como absurdas, la imagen de la villanía alemana ha permanecido fija. La buena opinión mundial con respecto a Alemania que existió hasta 1914 fue sustituída de la noche a la mañana por el mito del incomparable salvajismo alemán que dejó un residuo permanente en la profunda germanofobia que existe en las mentes occidentales. Esto explica por qué "nuestros muchachos" estaban tan dispuestos a borrar ciudades alemanas enteras y a matar a cientos de miles de civiles alemanes con bombardeos aéreos durante la Segunda Guerra Mundial. Esta propaganda de odio, tan falsa como era, también tuvo el efecto de desmoralizar totalmente al pueblo alemán.–





El Dogma Orweliano del "Holocausto"

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     En Diciembre de 1997 la revista estadounidense Liberty Bell (vol. 25 Nº 4) publicó tres artículos, siendo el segundo el siguiente ensayo y crónica (House of Orwell) que ofrecemos ahora traducido, donde el autor, el mayor Joseph G. Stano, retirado de la fuerza aérea, hace un constante paralelo entre la novela "1984" de George Orwell y la conducta de los medios de comunicación estadounidenses con respecto a la fábula del "Holocausto", demostrada como falsa por muchas evidencias, como se verá. Relacionado directamente con la entrada anterior, este sensato escrito plantea que, historiográficamente considerado, u­n "Holocausto"no sujeto a discusión, como hecho, está completamente solo como una aberración y no puede reclamar ninguna autenticidad en absoluto.


La Casa de Orwell
por Joseph G. Stano, 1997



     El reportaje pomposo y altamente emocional hecho por los medios de noticias con respecto a la apertura de un nuevo Museo del "Holocausto" en Nueva York constituye un clásico ejemplo del orweliano "doble pensar", definido por George Orwell como "la capacidad de tener dos creencias contradictorias en la mente simultáneamente, y aceptar ambas". En este caso, mientras continuamente se profesa una dedicación apasionada a la libertad de expresión y la libertad de prensa, todos los medios informativos han censurado rutinariamente cualquier desafío a cualquier parte de aquella masiva, no documentada, no probada y, en algunos casos, científicamenteimposible, colección de exagerados cuentos conocida como el "Holocausto". Tal como el tiránico "Partido" en la novela de Orwell "1984", los holocaustistas pueden "hacer las leyes de la Naturaleza". Y hacerlas con el apoyo pleno de todos los medios de comunicación.


     Es un error táctico construír otro Museo del "Holocausto" en esta fecha tardía, puesto que el "Holocausto", como ha sido presentado a la gente estadounidense por los medios de comunicación, ha sido durante mucho tiempo abandonado por algunos de sus partidarios más ardientes. Incluso el Yad Vashem, el Museo del "Holocausto" en Israel, ha abandonado hace tiempo el "Holocausto"con que se alimenta al público estadounidense cada día —si no cada hora— por la totalidad de los medios estadounidenses de comunicación. Unos cobardes medios informativos rutinariamente censuran la Historia bien documentada en favor de la "Historia de Hollywood".

     Tal como ocurre con el Ministerio de la Verdad en el libro de Orwell, los "Agujeros de la Memoria" de los medios informativos estadounidenses están funcionando a plena capacidad. Con cada año que pasa hay una cantidad creciente de incómodas verdades "no dignas de ser informadas" para ser empujadas abajo a los Agujeros de la Memoria de los medios. Desafortunadamente, esasverdades siguen reapareciendo.

     Algunas de las verdades "inmencionables" no dignas de ser informadas que simplemente no se quedarán abajo:

     Ya en 1960 el Yad Vashem se vio obligado a reconocer que no hubo ningún "campo de exterminio" o "cámaras de gas" en toda Europa Occidental o en todo el Reichalemán, ya que todos esos campos habían estado abiertos a la inspección por parte de investigadores y científicos, y se determinó que todos ellos habían sido "campos de trabajo".

     Esto presentó varios problemas:

     En primer lugar, Estados Unidos ejecutó a más de 450 alemanes, "En nombre de Estados Unidos y del pueblo estadounidense". Muchos de aquéllos fueron ejecutados por hacer funcionar "campos de exterminio" y "cámaras de gas" en Europa Occidental y Alemania, ¡donde éstas no existieron! Por no decir algo peor, ésta es una página bastante deshonrosa para añadir a la historia de una nación [EE.UU.] que profesa creer en la justicia.

     Segundo problema: Cinco de los ficticios seis millones habían sido repartidos entre todos los campos en Europa Occidental y Alemania, con sólo un millón asignado a campos detrás de la Cortina de Hierro en Polonia.


     Solución orweliana: Simplemente tome a los 5 millones de míticas víctimas y sus míticas cámaras de gas y póngalos detrás de la Cortina de Hierro en Polonia donde a los investigadores entrometidos y a los científicos no se les permite ir.

     O, en aritmética orweliana: ¡seis menos cinco es igual a seis! De la noche a la mañana, Auschwitz fue desde "casi un millón"a "cuatro millones y medio", un hecho bastante asombroso que la totalidad de los medios noticiosos estadounidenses encontró que era "no digno de interés periodístico", como lo sería una declaración de los holocaustistas de que el mundo es plano y que la Luna es un queso verde.

     George Orwell llamó a este ejercicio de los holocaustistas "Negro-Blanco", es decir, "la capacidad de afirmar impúdicamente que negro es blanco, en contradicción con los hechos claros".

     La respuesta de los medios informativos fue un perfecto "doble pensar" orweliano. Una aceptación sumisa y servil de "la mutabilidad del pasado y la negación de la realidad objetiva". Aplastados por la rueda del "Holocausto", para los medios noticiosos 6 menos 5 era ahora 6. Cuando el experto en sistemas de ejecuciones Fred Leuchter fue a Polonia —creyendo en el "Holocausto"— para examinar las presuntas "cámaras de gas", él encontró que eran científicamente imposibles. De hecho, ellas eran completamente ridículas. Sin embargo, para estar seguro, él tomó 20 muestras forenses en todas las supuestas "cámaras de gas". Un laboratorio independiente en Massachusetts examinó esas muestras y confirmó su dictamen pericial de que todas las presuntas "cámaras de gas" nunca habían sido "cámaras de gas".

     Los holocaustistas profesionales los ubicuos (Serge y Beate) Klarsfeld se indignaron y exigieron que el prestigioso Instituto de Investigación Forense de Cracovia, en Polonia, repitiera las mismas pruebas y demostrara que el señor Leuchter estaba equivocado. El jefe del Instituto condujo el equipo de científicos que tomaron muestras de los mismos sitios que Leuchter, y ellos consiguieron exactamente los mismos resultados: ¡ninguna cámara de gas! De parte de los Klarsfeld, antes locuaces y exigentes: ¡Silencio!.

     Ambos lados del asunto de las "cámaras de gas" consiguieron exactamente los mismos resultados científicos. Si viviéramos en un país libre donde la libertad de expresión y la libertad de prensa abundaran, el asunto de las "cámaras de gas" hubiera sido resuelto. Nuestra prensa libre sin ningún temor habría informado al público la verdad. En la tiranía de "Oceanía", en el libro de Orwell, la verdad habría sido un "crimen de pensamiento". En nuestra tiranía, la verdad es llamada "anti-semítica". En ambas tiranías los cobardes medios de información se encogen de terror.

     Cuando se vio forzado a defender los cuentos ridículos e imposibles archivados en el Yad Vashem, el director declaró que de los 20.000 testimonios de "sobrevivientes del Holocausto" que él tenía en el archivo, al menos la mitad de ellos eran "no fiables". Cuando se le presionó para que definiera "no fiable", él dijo que dichos testimonios simplemente no eran verdaderos. Al tratar de justificar esos exagerados cuentos, él dijo que "estos judíos querían ser parte de la Historia, de manera que ellos inventaron cuentos o repitieron cuentos que ellos habían escuchado".

     ¡Encantador! Estos cuentos "no fiables" aparecen rutinariamente en los medios de noticias como una sagrada escritura, y ellos son parte de los cursos del "Holocausto"enseñados en nuestras escuelas. En la "Oceanía" de Orwell su ciudadanía era rutinariamente adoctrinada con unos "Dos Minutos de Odio" cotidianos. Los niños estadounidense consiguen "Una Hora de Odio" completa en sus escuelas, donde se les enseña a odiar a los alemanes en base a indignantes mentiras que incluso el Yad Vashem ha rechazado.

     Hemos ejecutado a gente basados en estos cuentos "no fiables", y expulsamos a gente mayor en base a esos cuentos "no fiables", gente cuyo único delito podría ser haber servido a su nación en el bando perdedor de la Segunda Guerra Mundial, o haber luchado contra los esfuerzos de la aplanadora soviética para invadir Europa. Más desgracia y deshonra para nuestra desafortunada nación.

     Al final, el director polaco del Museo del "Holocausto"en Auschwitz ha admitido algo que los científicos y los investigadores ya habían sabido durante muchos años: que la infame "cámara de gas" mostrada a los turistas en Auschwitz es un completo fraude. Fue creada a partir de una morgue existente, para todos los turistas judíos que exigían ver una "cámara de gas".

     El infame "campo de exterminio" de Auschwitz y todos sus estrafalarios horrores específicamente creados para el comercio turístico terminarán como una especie de "Disneylandia de los Condenados", donde los turistas judíos pueden revolcarse en un puro Hollywood y llamarlo Historia.


     Recientemente, el Yad Vashem ha tratado de establecer alguna credibilidad entre los historiadores que finalmente se han armado del coraje para cuestionar todos los muchos y variados increíbles cuentos y objetos expuestos para los turistas. En una valiente jugada —que sólo tomó cincuenta años— el Yad Vashem ha rechazado todos los cuentos de "jabón humano" y "pantallas de lámparas", y todos los fantasiosos productos supuestamente manufacturados a partir de judíos.

     En resumen, ellos eliminaron una industria enorme y provechosa creada por un ejército de holocaustistas aficionados y profesionales. Ya no están los pequeños bolsos de fertilizante humano y el relleno para colchones. Ya no está la variedad infinita de productos de cuero humano vendidos a un público crédulo, como botas de combate, cinturones, carteras, botas de montar, monederos, pantalones de montar, sillas de caballería y, no olvidemos, guantes para conducir hechos para la SS a partir de bebés judíos que fueron desollados vivos. Recuerde,esos cuentos sólo fueron limitados por la imaginación del judío que "quería ser una parte de la Historia". Digo, dejémoslos ser juzgados por los cuentos que ellos crearon en la suciedad llena de odio que está entre sus orejas; como una tal Olga Lengyel, conocida por su panfleto Cinco Chimeneas de Auschwitz (publicado primeramente en 1947 como "Yo Sobreviví a los Hornos de Hitler"). Esa encantadora mujer inventó la existencia de una industria en Auschwitz donde los judíos eran convertidos en... ¡salchichas!.


     El ex-alcalde de la ciudad de Nueva York Ed Koch, que contribuyó decisivamente a erigir allí la propia casa de los horrores del "Holocausto"para todos los turistas, inventó la existencia de una industria donde los terribles alemanes cortaban todos los dedos de los judíos y los usaban como interruptores eléctricos. El cuento de Koch le añadió, considerablemente, a su nivel de respeto la fama de ser uno de los asnos más tontos e insufribles en el planeta Tierra.

     Pero no hay de qué preocuparse, las fábricas de cuerpos pueden estar muertas y sepultadas en el Yad Vashem, pero la industria es floreciente en Estados Unidos. Es incluso una industria en desarrollo donde nuevos y más fantásticos cuentos aparecen diariamente. Koch puede seguir subiendo y bajando sus "interruptores de dedos" lejos en el futuro. Me pregunto si él podría idear un uso industrial para todas las partes privadas que han sido obviamente removidas de todos los medios informativos estadounidenses. Máxima orweliana: La herejía de todas las herejías en una tiranía es el sentido común. Ed "Dedos" Koch nunca será un hereje.

     La caída de la Unión Soviética fue un desastre para el negocio del "Holocausto".Los rusos entregaron a la Cruz Roja Internacional todos los "Registros de Muertes" alemanes que ellos habían incautado en 1944 cuando ocuparon Auschwitz. Los alemanes, con la típica eficiencia alemana, habían documentado escrupulosamente todas las muertes en Auschwitz. No cuatro millones y medio. Ni siquiera un millón. Eran ligeramente más de 74.000 en total. Y esto incluía a cada uno —incluso el personal alemán— que había muerto en Auschwitz.

     Para el investigador del "Holocausto" esto puede ser completamente divertido. Parece que los crueles e insensibles alemanes registraron el nombre de cada persona que murió en Auschwitz, el apellido de soltera de la madre de la persona —una necesidad para identificar a judíos que tienen los mismos nombres—, la ciudad de donde venía la persona, la causa de la muerte, y otras informaciones pertinentes. Incluso se hacía un esfuerzo para entregar las cenizas del difunto a sus parientes. Con la poco profunda capa acuífera en Auschwitz que lo hacía parecer a un pantanal, la incineración era la única opción. Los judíos han hecho mucho escándalo de las incineraciones, una práctica común en Alemania, sin explicar qué se suponía que los alemanes debían hacer con los muertos cuando el entierro era imposible.

     Recientemente fueron descubiertas cajas cuidadosamente etiquetadas de cenizas humanas en uno de los crematorios. Me reí mucho mirando a los holocaustistas profesionales mintiendo por entre sus dientes y más bien manifestando nerviosamente una confusión absoluta en cuanto a por qué los alemanes habían conservado tan cuidadosamente las cenizas de algunos judíos. Una perfecta conclusión ilógica y una perfecta negación orweliana de la realidad objetiva: "Doble pensar".
 

     La simple justicia demanda que los judíos deban ser juzgados por el peso de las mentiras que ellos han cargado sobre el pueblo alemán. Mientras más grande, más cruel y más vil es la mentira, más repugnante es el mentiroso. Desafío a cualquiera a que encuentre una letanía de mentiras más viles, viciosas y sádicas en las páginas de la Historia.

     En un tiempo había 19 losas con grandes letras en 19 idiomas que hablaban de los más de 4 millones de víctimas que murieron en Auschwitz. Gracias a los esfuerzos de la Sociedad Histórica Polaca, las losas en Auschwitz han tenido ahora recortado este trozo de la "Historia de Hollywood". Una victoria para la verdad histórica en el "juego de números" del "Holocausto".

     El "juego de números" del "Holocausto"ha sido realmente notable. He guardado fichas de ello durante los pasados veinte años. Aquí hay algunas de las afirmaciones de los holocaustistas profesionales con respecto al número de judíos muertos por los terribles alemanes: Cincuenta millones, 41 millones, 36 millones (Olga Lengyel), 26 millones, 25 millones(Kurt Gerstein y Oswald Pohl, ambos bajo tortura), 18 millones, 12 millones (afirmación judía en Naciones Unidas) y los siempre populares 6 millones.

     Es divertido notar que a los cobardes y sumisos medios informativos estadounidenses los holocaustistas les han dado permiso para referirse al "1,1" o "1,5" millón de víctimas en Auschwitz, "la mayor parte de las cuales eran judíos". Cuatro millones y medio han sido dejados caer, y nadie en todos los medios estadounidenses de comunicación hanotado el horroroso estruendo. Puro orweliano "Crimestop"[evitación del crimen de pensamiento], como es practicado por los medios informativos estadounidenses: "La facultad de pararse en seco, como por instinto, en el umbral de cualquier pensamiento peligroso". En efecto, comentar algo de esto habría sido un muy "anti-semítico" y muy serio "crimen de pensamiento" por parte de los medios informativos.

     La estampida está ahora en curso y muchísimos famosos holocaustistas profesionales están desesperadamente tratando de salvar algo de sus reputaciones abandonando los fabulosos 6 Millones por un número lejos debajo de 1 millón. Incluso si creemos la cifra de 1,1 ó 1,5 millón impuesta a los medios informativos —la verdad es lejos inferior a esa cantidad— eso significa que incluso el más dedicado de los holocaustistas profesionales reconoce ahora que al menos 3 millones de muertes, la mitad del "Holocausto", ¡nunca ocurrieron!.

     Para aquellos que no tienen miedo de pensar, aquí hay algunos números racionales: Los holocaustistas han afirmado siempre que los judíos representaban el 20% de todos los prisioneros en los campos de concentración. Eso no es verdadero: nunca fue tan alto el porcentaje. Pero, sólo por el bien del argumento, usemos sus cifras.

     Los judíos afirman que hubo 3 millones de judíos sobrevivientes y 6 millones de judíos muertos para un total de 9 millones de judíos en los campos. Si los judíos constituían el 20% de los prisioneros en los campos, ¡debe haber habido 45 millones de personas en los campos! Usted está bromeando: ésa es casi la población de Italia antes de la guerra y mayorque la población de Francia antes de la guerra. Éstos son números que sólo un completo idiota podría creer.

     Está bien, intentémoslo otra vez: Los alemanes eran signatarios de la Convención de Ginebra, de modo que la Cruz Roja Internacional (CRI) tuvo acceso e inspeccionó TODOS los Campos de Concentración durante toda la guerra. Repito: TODOS LOS CAMPOS. Y ellos no vieron ninguna política de matar a alguien. Tampoco ellos vieron ninguna "cámara de gas". Según la Cruz Roja el número total de muertes en los campos de concentración no excedió las 300.000 personas. Los alemanes afirmaron que el número de muertes era de 250.000. Con la caída de la Unión Soviética, a la CRI le fue dado acceso a los "Registros de Muertes" que los rusos habían confiscado cuando ellos invadieron los campos de concentración. Habiendo consultado los Registros de Muertes, la Cruz Roja Internacionalrevisó a la baja las cifras de muertes en los campos dejándolas en 273.000. Si aceptamos la cifra del 20% sostenida por los holocaustistas, no más de 55.000 judíos murieron en todos los campos, ¡NO SEIS MILLONES!.


     Recientemente, los holocaustistas obligaron a la CRI a admitir que ellos no reportaron en ese entonces todo el abuso a judíos en los campos por miedo de que los alemanes pudieran negarles el acceso a los campos, o incluso invadir Suiza. (No muy probablemente).

     Para aquellos que todavía pueden pensar, eso significa que —en último término— los holocaustistas han reconocido el hecho de que la CRI tuvo acceso a todos los campos de concentración durante la guerra, que ella había inspeccionado todos los campos durante la guerra, y que la CRI sabía de las condiciones que existían en todos los campos durante la guerra. En resumen, un reconocimiento de la experiencia de la CRI en el asunto de los campos de concentración.

     Al obligar a la CRI a admitir un "fracaso moral" al no haber reportado ningún abuso a judíos en los campos, los holocaustistas no tienen ninguna otra opción sino aceptar la cifra de la CRI de muertes en los campos de 273.000. Habiendo certificado a la CRI como expertos en la materia, los holocaustistas tienen que aceptar las conclusiones de sus expertos.

     O, como George Orwell lo hubiera dicho,"La herejía de todas las herejías en una tiranía es el sentido común".

     No es sorprendente que aquellos que instruyen acerca del "Holocausto" en nuestras escuelas y universidades aquí en Estados Unidos tengan una erudición básica en sus cabezas, al rechazar absolutamente defender, en un debate libre y abierto, el curso que ellos enseñan. Yo sé: he desafiado a los muchachos que están en el negocio del "Holocausto" y los he visto desaparecer en una nube de polvo. Claramente una confirmación de que ellos están enseñando una basura que no puede ser defendida.

     El "Holocausto" se alega que es Historia. ¿Cómo podría serlo? Hay literalmente miles de asuntos: civilizaciones, naciones, pueblos, culturas e innumerables acontecimientos que dedicados historiadores investigan, documentan cuidadosamente y convierten en gruesos tomos. Sólo cuando esos tomos son sometidos a una revisión hecha por expertos, donde cada hecho no probado es cuestionado y adecuadamente defendido, pueden esos tomos ser considerados como Historia.

     Ésta no es la excepción, es la norma. Uno no puede negar que cada faceta de la ciencia es rutinariamente cuestionada y debe ser demostrada. Incluso el nebuloso asunto de la religión está abierto al debate, y existen aquellos que defenderán apasionadamente las imposibilidades del "Jardín de Edén", Noé y su oscilante arca, y Jonás y su gran ballena. En defensa de lo imposible, la británica Sociedad de la Tierra Plana todavía lucha, y ellos incluso han ideado una fórmula matemática bastante sofisticada para demostrar que la Tierra es plana. ¡Una fórmula que ha dejado perplejos a algunos científicos porque parece funcionar! En una sociedad libre donde a las personas se les permite pensar, uno puede preguntar y cuestionar, defender y atacar, absolutamente todo y cada cosa en una búsqueda de la verdad. Un "Holocausto"no discutible está completamente solo como una aberración y no puede reclamar ninguna autenticidad en absoluto. Incluso la Sociedad de la Tierra Plana con su extraña fórmula y su disposición a defender su caso presenta más pruebas que el caso de los holocaustistas, que puede ser rebatido con aritmética simple.

     Este último Museo del "Holocausto" en la ciudad de Nueva York constituye un esfuerzo frenético para substituír con cemento la sustancia del "Holocausto", como si uno pudiera apoyar con éxito mentiras escandalosas con ladrillo y hormigón.

     Incluso los mejores esfuerzos de los medios informativos estadounidenses para censurar la verdad fallarán finalmente y la gente estadounidense verá el "Holocausto"como lo que es: un fraude monumental que dura más de cincuenta años, durante los cuales los judíos se han beneficiado política, económica y hasta sádicamente cuando nuestro gobierno castigó, e incluso ejecutó, a cientos de personas inocentes en base a mentiras.

     Desde su mismo comienzo el "Holocausto"fue una estafa. La justificación para la creación de un Estado judío estaba basada en la opinión judía de que los judíos no podían vivir con seguridad en ninguna parte en Europa después de que las naciones europeas permitieron que los alemanes establecieran "campos de exterminio" y "cámaras de gas" en cada Estado europeo. Por eso 5 de los fabulosos 6 millones de víctimas fueron originalmente esparcidos a través de Europa Occidental para cargar la culpa sobre las naciones occidentales y demostrar un caso para un Estado judío independiente. El Estado de Israel fue creado sobre un fundamento de mentiras, y sacar ganancias a partir de mentiras es claramente una estafa. Estafar al mundo y ganar una nación es claramente la mayor estafa de la Historia.

     Hay que tomar nota del hecho de que todos los sistemas legales del mundo comparten un rechazo común contra la retención de riqueza o propiedad ganada por medios deshonestos. Los miembros de Naciones Unidas fueron todos estafados cuando ellos crearon el Estado de Israel en base a las mentiras del "Holocausto". Todas las naciones que votaron para crear el Estado de Israel ahora comparten la culpa de haber tomado tierras de la infortunada gente palestina en base a mentiras. El razonamiento empírico dicta que si Naciones Unidas tuvo el poder para "crear" el Estado de Israel, entonces Naciones Unidas tiene el poder para "des-crear" el Estado de Israel.

     La solución a todos los problemas en el Oriente Medio requiere nada más que un voto de Naciones Unidas para convertir a Jerusalén en una Ciudad Internacional —como debería haber sido— y la devolución de todas las tierras palestinas a sus dueños legítimos.

     Por supuesto, nuestros cobardes y rastreros políticos probablemente vetarán la justicia para el pueblo palestino en Naciones Unidas hasta que la destartalada Casa de Orwell se venga abajo estrepitosamente bajo el peso de sus escandalosas mentiras.

     Cuando esta casa de mentiras del "Holocausto"colapse, los judíos de Estados Unidos se ganarán el desprecio y la repugnancia de la gente estadounidense por haber suplicado su bondad y su compasión para conseguir poder y ganancia, a la vez que involucraron a los estadounidenses en el castigo e incluso la muerte de personas inocentes.

     Los judíos ciertamente se ganarán la cólera de la gente estadounidense cuando ésta comprenda que a generaciones de niños estadounidenses se les enseñó el odio y la intolerancia en sus escuelas sólo para el placer sádico de los judíos. Para que la gente no olvide, el público estadounidense tendrá todos los Museos del "Holocausto"a través de esta nación, construídos con los impuestos, como recordatorios constantes de la mayor estafa de la Historia.

     Me temo que la reacción será terrible y que abarcará a todos los judíos que viven en Estados Unidos y en la mayor parte de las naciones del planeta. Es irónico: judíos que han practicado ansiosamente el castigo colectivo del pueblo alemán por diversión y ganancia durante más de cincuenta años, soportarán ahora el castigo colectivo del mundo.

     El "Holocausto"estuvo limitado sólo por la imaginación de aquellos que lo crearon, sostenido solamente por la mágica palabra «anti-semita» y la disposición de la totalidad de los medios estadounidenses de comunicación a censurar la verdad. La reacción negativa ciertamente apuntará al total de los medios de comunicación, rebajando a todos los sujetos de dichos medios más aún —si eso es posible— a los ojos del pueblo estadounidense.–





Sobre la Enseñanza Obligatoria del "Holocausto"

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     Del mismo autor de la entrada anterior, el Mayor retirado de la fuerza aérea estadounidense Joseph G. Stano, pero publicada trece años antes, en Julio de 1984 (vol. 11 Nº 11 de la revista Liberty Bell), presentamos aquí en castellano una carta abierta que él dirigiera al gobernador de New Jersey de entonces, Thomas Howard Kean, en dicho cargo entre 1982 y 1990, y elegido posteriormente por George W. C. Bush en 2002 como presidente de la 9/11 Comission, responsable de investigar las causas de los ataques del 11-S. El motivo de dicha carta es la creación por parte de Kean, en Octubre de 1982, del Consejo Consultor sobre Educación del "Holocausto" en las escuelas públicas de New Jersey, primer Estado en tener tal tipo de organismo propositor de planes escolares de estudio. Las graves y profundas consecuencias e implicaciones de sugerir la enseñanza pública de un capítulo de la Historia completamente no comprobado, lo cual las personas atentas saben que es así, es el centro de la preocupación manifestada aquí por el señor Stano. Como anexo final incluímos la traducción de la ley de 1994, diez años después de esta carta, decretada en New Jersey que hace obligatoria la enseñanza de mentiras, confirmando las anticipatorias aprehensiones del Mayor Joseph Stano.


UNA CARTA ABIERTA AL GOBERNADOR DE NEW JERSEY
por Joseph G. Stano, Mayor Retirado de la USAF
Julio de 1984




     Estimado Gobernador (de New Jersey Thomas H.) Kean:

     Quedé alarmado al leer que usted ha introducido en el sistema escolar de New Jersey un curso sobre el "Holocausto", fácilmente el fraude más desacreditado que haya emergido alguna vez como "Historia".

     Se reporta que usted ha dicho que aquellos que dudan del "Holocausto"no han leído Historia. Gobernador: He dedicado mi vida al estudio de la Historia y he vivido una parte bastante grande de la Historia durante dos guerras. Por favor, dígame ¿qué libro de Historia respetable y confiable certifica al "Holocausto" como Historia y no como mito?.

     Incluso después de treinta años de solicitudes, súplicas y amenazas por parte de la ADL (Anti-Defamation League) de la B'nai B’rith, las enciclopedias no reconocen que Seis Millones de judíos murieron durante la Segunda Guerra Mundial, ¡por ninguna razón en absoluto! Y ellas ciertamente no reconocen la existencia de ninguna "cámara de gas". Gobernador Kean: Si seis millones de judíos fueron "gaseados" en "cámaras de gas"nacionalsocialistas, uno pensaría que las enciclopedias habrían hecho notar este "hecho" histórico.

     Muchísimos historiadores han dicho durante el último milenio que si un hombre no conoce las lecciones de la Historia, él está condenado a repetir los errores de la Historia. La verdad histórica es simplemente un asunto demasiado vital e importante como para ser atiborrada con un "mito" completamente desacreditado que distorsiona enormemente la historia de una sangrienta guerra mundial. Ciertamente la verdad absoluta acerca de una guerra mundial es la lección más vital que puede ser enseñada a los estudiantes estadounidenses, si tenemos la intención de evitar otra guerra mundial. Durante más de treinta años la ADL y la B'nai B’rith han rechazado absolutamente debatir o siquiera habla de las afirmaciones que ellos hacen sobre el "Holocausto". Ahora bien, ¿parece eso como de alguien interesado en la verdad histórica?.

     Permítame referir un poco de Historia en este gran engaño y mostrarle por qué la ADL y la B'nai B’rith rechazan debatir el así llamado "Holocausto":

     En orden descendente, las afirmaciones hechas por los judíos en cuanto al número de judíos "gaseados" por los nacionalsocialistas son como sigue: Cuarenta y un millones, 40 millones, 26 millones, 25 millones, 12 millones (la afirmación original de los judíos ante Naciones Unidas), 10 millones (la afirmación de los medios informativos estadounidenses), y los siempre populares 6 millones. Todas estas afirmaciones son realmente notables cuando uno considera que los demógrafos han demostrado, una y otra vez, que hubo, a lo sumo, TRES MILLONES de judíos bajo control de los alemanes. Que seis millones de judíos, dos veces el número conocido de los que estuvieron bajo control alemán, hubieran sido "gaseados", es asombroso; y que hacia 1965 el Gobierno de Alemania Occidental tuviera a 3.375.000 judíos reclamando una compensación como "sobrevivientes" del "Holocausto", ¡es INCONCEBIBLE! ¿Podría ser ésta la versión judía del milagro de la multiplicación de panes y peces del Nuevo Testamento?.


Al final de la guerra, los "fabulosos" seis millones de "gaseados"

     Los judíos fueron distribuídos entre los veinte así llamados "campos de concentración / exterminio" que existían a través de Europa, desde Holanda en el Oeste a Polonia en el Este. Desde el mismo comienzo, las afirmaciones del "Holocausto"acerca de "campos de exterminio" cayeron como palitroques ante los historiadores, y la retractación de las afirmaciones originales supusieron una completa derrota.

     El Estado de Israel, el guardián del mito, reconoció a regañadientes que no hubo ningún "campo de exterminio" en Holanda, Francia, Alemania, Austria ni Checoslovaquia, sino que todos los presuntos "campos de exterminio" estuvieron detrás de la Cortina de Hierro en Polonia, donde el gobierno comunista tenía un interés creado en mantener el mito del "Holocausto", y en que Polonia ocupase una parte bastante grande de lo que era antes Alemania, de tal manera que el Gobierno polaco rechazó permitir que alguien inspeccionara los "campos de exterminio"durante diez años.

     Mucho depende de mantener vivo el mito del "Holocausto": la reclamación polaca de territorio alemán, la reclamación judía de Palestina, y la reclamación israelí de la Tesorería de Estados Unidos.

     Confío en que usted se da cuenta de que el reconocimiento por parte de Israel de que no hubo "campos de exterminio" en Alemania es una admisión bastante sorprendente, cuando uno considera que los alemanes fueron ejecutados como "criminales de guerra" por hacer funcionar aquellas inexistentes "cámaras de gas".

     Durante muchísimos años a Auschwitz-Birkenau en Polonia le fue asignado por los guardianes del mito el papel de "campo de exterminio". De hecho, en respuesta a las muchas demandas de los turistas para ver una "cámara de gas", los rusos, a fines de los años '50, construyeron una cámara de gas "de muestra" (ya que no había ninguna allí) que ha sido descrita por aquellos que la han visto como un escenario cinematográfico ruso muy, muy malo. (Los rusos tienen fama mundial por sus efectos especiales con acorazados de juguete en una tina de baño). Pero desafortunadamente los israelíes se vieron obligados a admitir que Auschwitz-Birkenau era un campo de trabajo y no un "campo de exterminio".

     La aseveración de que Auschwitz era un "campo de exterminio" estaba condenada al fracaso desde su mismo comienzo. Era una afirmación absurda, puesto que, como un enorme complejo industrial que producía material bélico, estuvo bajo la cercana mirada de los Aliados durante toda la guerra. Y aunque estaba demasiado lejos en Polonia para las misiones de bombardeo, la fuerza aérea británica y la estadounidense emprendieron muchos vuelos de reconocimiento del complejo y tomaron miles de fotografías aéreas que claramente descartan el mito de la "cámara de gas" como absurdo.

     Además de la evidencia fotográfica y de los informes de agentes que estaban en los campos, 2.000 prisioneros británicos de guerra trabajaron en el complejo industrial junto a los presidiarios del campo de concentración, y ellos no supieron nada sobre ninguna "cámara de gas" o sobre alguna política de exterminio contra alguien.

     El mito del "Holocausto" ahora reside en dos pequeños campos de trabajo en un área remota de Polonia, un poco más que unos claros en los bosques. Entre historiadores, el "Holocausto"es un muy mal chiste.

     Después de todo, uno podría entrar en algunos inimaginables absurdos matemáticos al tratar de "gasear" mentalmente a seis millones de judíos en unas cuantas chozas de madera en áreas remotas de Polonia.

     Gobernador: Si usted está en duda sobre este fraude monumental, yo sugeriría que usted leyera los tres volúmenes de la información compilada por la Cruz Roja Internacional titulados "Informe del Comité Internacional de la Cruz Roja sobre Sus Actividades durante la Segunda Guerra Mundial, Ginebra, 1948".

     Usted ve: los alemanes, como signatarios de la Convención Militar de Ginebra de 1929, estaban obligados a permitir que la Cruz Roja Internacional inspeccionara los campos. Y la Cruz Rojaasí lo hizo, desde 1942 hasta el final de la guerra, cuando los rusos, como no-signatarios de ninguna Convención de Ginebra, la expulsó de todos los campos en el territorio ocupado por las fuerzas soviéticas. El hecho es que la Cruz Roja había inspeccionado todos los campos durante la guerra, y hacia el final de la guerra, los alemanes estuvieron de acuerdo en permitir un miembro permanente de la Cruz Roja Internacional en cada campo. Ésta es Historia documentada. Usted ha estado tratando con un FRAUDE no documentado.

     Según el informe de la Cruz Roja Internacional, no hubo NINGUNA política de exterminio contra NADIE en ninguno de los campos. No hubo NINGUNA "cámara de gas" en NINGUNO de los campos. Y el tratamiento de los prisioneros fue considerado como aceptable hasta los meses finales de la guerra cuando los envíos de alimentos no podían pasar a través de la prohibición aérea Aliada, y el hambre y la enfermedad cobraron un gran número de víctimas entre los prisioneros. De hecho, está registrado que la Cruz Roja protestó a los Aliados que "su bárbara guerra aérea" estaba haciendo inevitables el hambre y la enfermedad para la población entera.

     Como un ex-piloto de caza sé muy bien cuán eficaz puede ser la prohibición de "objetivos de oportunidad"[objetivos o blancos inesperados o no planificados]; como un historiador militar, sé que en este caso la prohibición de las líneas de abastecimiento alemanas fue casi absoluta, y ningún automóvil, o camión, o ciclista, o tren, o barco o barcaza fue capaz de moverse sin atraer el fuego de los aviones Aliados. No es sorprendente que la población entera estuviera en un estado próximo a morir de hambre. En los campos, un brote de tifus (registrado por la Cruz Roja), y similar al desastroso brote de 1943, diezmó la población cuando el orden, la disciplina y el mantenimiento de estándares higiénicos se acabaron cuando el personal alemán abandonó los campos. Ésa fue la razón de que nuestras tropas sellaran los campos y no permitieran salir a los prisioneros. El tifus se había hecho endémico en los campos, y la cuarentena era para prevenir un brote entre las fuerzas Aliadas y la población civil.

     Debería señalarse que en la mitología del "Holocausto"las tropas Aliadas que liberaron los campos fueron condenadas por actuar "tal como los nacionalsocialistas"al confinar a los judíos a los campos de concentración y no permitirles salir y esparcir el tifus entre la población. Los embaucadores hablan penosamente de exigir una "compensación" a los Aliados por aquella terrible indignidad. Otros dicen que los Aliados deben purgar su culpa en esta materia con grandes pagos al Estado de Israel.

     No fueron los "violentos e implacables"SS los que asesinaron en los campos. Fue el azote de los ejércitos desde tiempo inmemorial: la fiebre tifoidea (una enfermedad asociada con la suciedad) y los piojos que transmiten el tifus, todo documentado por los equipos médicos Aliados y la Cruz Roja. Las fotografías tomadas para documentar el efecto debilitante de la fiebre tifoidea y el tifus han sido incorporadas ahora en el mito del "Holocausto"como documentación del "hambre"impuesta a los prisioneros.

     Los Aliados tenían un nuevo magnífico método para tratar con el tifus, un nuevo insecticida que podía ser rociado (en forma de polvo) sobre la gente. Era un maravilloso insecticida que mataría a los piojos y no dañaría a la gente. Se llamaba DDT.

     Antes de la invención del DDT, todos los ejércitos usaban un gas de cianuro (incluso nuestro propio ejército) para despiojar la ropa. El Ejército alemán y los servicios de salud alemanes usaban el "Zyklon B", que se ha convertido ahora en el supuesto agente para la exterminación de los judíos en todas aquellas no-existentes "cámaras de gas". El Zyklon B estuvo en uso en el Ejército alemán como un insecticida durante más de cincuenta años, el mismo ejército alemán que inventó el cloro, el fosgeno y el gas mostaza durante la Primera Guerra Mundial; el mismo ejército alemán que había inventado el gas nervioso durante la Segunda Guerra Mundial. ¿POR QUÉ, Gobernador (si debemos creer el mito del "Holocausto"), el despiadadamente eficiente Ejército alemán usaría un insecticida común para gasear gente? El Zyklon B fue elegido por los holocaustistas porque fue el único gas encontrado en cualquiera de los campos de concentración. Si los alemanes hubieran desarrollado un insecticida como el DDT, los guardianes del mito nos dirían que seis millones de judíos fueron "gaseados"por una lata muy grande de "Raid".

     Los Aliados tuvieron mucho menos éxito al tratar con la menos peligrosa fiebre tifoidea, una enfermedad causada por una bacteria, debido a la resistencia de los antiguos prisioneros a cualquier forma de higiene. Como era de esperar, las fuerzas Aliadas que liberaron los campos de concentración son culpadas ahora, por los holocaustistas profesionales, de todas las muertes debidas a la fiebre tifoidea mucho después de que los campos fueran liberados. Naturalmente, como un soldado profesional, pienso que la mejor evaluación de la situación viene del general George S. Patton, específicamente los comentarios que él hizo sobre el rechazo de los antiguos prisioneros a lavarse, y sobre todo sobre su rechazo a usar retretes. La descripción de Patton es algo pintoresca, por decir lo menos.

     Gobernador Kean: Hubo actos de atrocidad cometidos por ambos lados durante la guerra. Pero el mito del "Holocausto"declara que fue una política del gobierno alemán exterminar a los judíos, y ésa es una materia completamente diferente, ¡Y COMPLETAMENTE NO DEMOSTRADA! Cuando uno considera la inclinación alemana a guardar un registro meticuloso que linda con el detallismo, es realmente asombroso que ni un solo papel, ni un solo fragmento de evidencia, haya aparecido entre las innumerables toneladas de documentación, acerca de una política alemana para la exterminación de alguien. Ni una sola "cámara de gas"ha sido encontrada. Nadie ha encontrado nunca a un testigo ocular respetable que haya visto alguna vez una "cámara de gas", y sí enormes cantidades de rumores de segunda o tercera mano:"Un amigo de un amigo me dijo que...".

     El "Holocausto" es mucho más que un ENGAÑO: es un asalto monumental contra el sentido común.

     Gobernador: Usted inconscientemente ha estado moviéndose en el medio de una guerra. ¿Quizás usted fue empujado allí? Usted obviamente no sabe lo que ha estado ocurriendo, las batallas que han sido luchadas y los riesgos en este conflicto particular. Permítame tratar de explicar en qué se ha involucrado usted.

     La ADL y la B'nai B’rith han rechazado debatir el "Holocausto"durante los pasados treinta años porque ellos no tienen ningún caso entre sus manos y porque es imposible defender el MITO que ellos han creado.

     Bien; éste es un país libre y ellos tienen derecho a rechazar un debate. Ellos pueden contentarse con el apoyo masivo que tienen en los medios estadounidenses de comunicación, un país donde uno puede creer en Santa Claus, el Conejo de Pascua y el Hada de los Dientes. Pero cuando ellos introducen su PATRAÑA en nuestro sistema escolar, ellos asaltan nuestro derecho más precioso como ciudadanos estadounidenses: ¡EL DERECHO A LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN!.

     Gobernador: El único modo en que el fraude del "Holocausto"puede sobrevivir en un sistema escolar libre y democrático es si es convertido en algo NO DISCUTIBLE y por lo tanto en la misma antítesis de un sistema escolar libre y democrático. En nuestra sociedad libre animamos a nuestros estudiantes a pensar, a preguntar, a discutir, y a nuestros estudiantes se les permite y son estimulados a cuestionar cualquier faceta de cualquier asunto en el plan de estudios escolar. He luchado esta batalla antes y estoy seguro de que bajo la "guía para el profesor"y la"antología"de la ADL y la B'nai B'rith a nuestros estudiantes NO se les permitirá cuestionar NINGUNA faceta del guión del "Holocausto". Aquel particular castillo de naipes no puede permitirse siquiera un examen superficial.

     Si usted piensa que esto no es verdad, yo sugeriría que usted le pregunte a la ADL y la B'nai B'rith si el curso de ellos sobre el "Holocausto"puede ser cuestionado y debatido de un modo más o menos parecido a como los estudiantes tienen el derecho de cuestionar y debatir cualquier faceta de la historia estadounidense.

     Cuando usted oiga su resonante "¡NO!", usted entenderá por qué muchísimos políticos durante los pasados veinte años trataron de complacer a la ADL y a la B'nai B'rith con un curso similar, y se vieron obligados a rechazar el concepto entero por ser groseramente anti-democrático, anti-estadounidense e inconstitucional.

     Lo que usted ha introducido en nuestro sistema escolar es un concepto detestable conocido por los estudiantes en Rusia y otras tiranías, donde una interpretación absurda de la Historia es metida a la fuerza por las gargantas y nadie se atreve a cuestionar nada de ella. En el mito del "Holocausto" se les dirá a nuestros estudiantes, en efecto, que cinco más cinco es igual a treinta y siete, que la Tierra es plana y que la Luna está hecha de queso verde, y que si ellos no lo creen, entonces son ANTI-SEMITAS y ellos reprueban el curso. En esto, usted inconscientemente ha aceptado una autoridad no concedida a ningún Gobernador o "Presidente": la autoridad de suspender la libertad de expresión.

     Una faceta mucho más siniestra de la "Holocaustización"fue mejor evidenciada durante una conferencia en Noviembre pasado [de 1983] titulada "Anti-Semitismo en el Mundo Contemporáneo", que fue patrocinada por el Centro Internacional de la Universidad Rutger, conjuntamente con el American Jewish Congress.

     En la conferencia, los honores por EL desprecio más monumental por la libertad de expresión fueron ganados por el señor S. J. Roth, director del Instituto de Asuntos Judíos en Londres.

     Según el señor Roth, cualquiera que llame al "Holocausto"un ENGAÑO, es un CRIMINAL. En esto, llamar al presunto "Holocausto"un FRAUDE es equivalente a la aprobación del presunto "crimen", y ello debería ser castigable como un "crimen". La ovación que recibió el señor Roth indicó que la pena de muerte era probablemente un castigo demasiado clemente para todos aquellos "criminales"estadounidenses que andan por ahí ejerciendo su derecho a la libertad de expresión y a la libertad de prensa. Ahora, Gobernador, ¿encuentra usted esta actitud siquiera remotamente compatible con nuestra Constitución?. ¿Piensa usted que esto tiene cabida en nuestro sistema escolar?. ¿En realidad, piensa usted que esto es aceptable en Estados Unidos?.

     Presente en la conferencia estuvo el señor Howard Squadron, presidente del American Jewish Congress, a quien estoy seguro que usted conoce. El señor Squadron siempre ha tenido el mismo problema que el señor Roth: una repugnancia contra los estadounidenses que andan por ahí diciendo lo que se les antoja decir, debatiendo todo lo que se les ocurre discutir, y ocasionalmente escribiendo lo que les place escribir. El señor Squadron ha estado luchando contra los males gemelos de la libertad de expresión y la libertad de prensa durante muchos, muchos años. Él es el autor de muchísimas advertencias extremas y amenazas que han aterrorizado a nuestros cobardes medios de información, a los que H. L. Mencken tan exactamente describió como teniendo "el coraje de una rata". El éxito del señor Squadron en el control de la libertad de prensa ha sido astronómico, porque nuestros "caballeros del cuarto estado" se acobardan ante la sola mención de su nombre. Desafortunadamente, el señor Squadron ha fracasado en acabar con la libertad de expresión —hasta ahora— cuando usted introdujo, como mínimo, la húmeda nariz de un camello muy grande llamado Howard Squadron en nuestro sistema escolar. (Es más bien medio camello).

     Gobernador: Permítame informarle sobre el "plan de batalla" de la "Holocaustización", de modo que usted pueda ver dónde calza su "curso"en el esquema total.

     Por supuesto, el objetivo último es hacer del "Holocausto" un curso OBLIGATORIO de instrucción para TODOS los estudiantes estadounidenses. Esto es considerado VITAL para el interés del Estado de Israel. Recuerde: la NECESIDAD declarada de una patria judía estuvo basada en el mito del "Holocausto", la falacia de que seis millones de judíos fueron "gaseados" en aquellas inexistentes "cámaras de gas" y todas las otras inventadas historias de horror acerca del sufrimiento de los judíos durante la guerra, incluyendo la resurrección del cuento británico de la Primera Guerra Mundial de que los alemanes estaban convirtiendo a los belgas en pastillas de jabón. (Los británicos pidieron perdón al pueblo alemán por aquel pedazo de basura después de la guerra). El lobby de Israel tuvo éxito en el establecimiento del Estado de Israel, pero en el proceso ellos se quedaron pegados en su absurda interpretación de la Segunda Guerra Mundial. Y aquélla se fue derrumbando sobre sus oídos cuando los historiadores le echaron un vistazo cercano a los cuentos de horror.

     Muchos judíos han dicho que sin Auschwitz no habría habido ningún Israel. Bien; ellos han perdido ahora Auschwitz. El nuevo grito de guerra del lobby israelí es: "Sin el Holocausto no habría Israel".

     Esto es completamente verdadero. Cuando el pueblo estadounidense averigüe (es inevitable que ellos lo harán) que ellos han sido engañados para apoyar un fraude con enormes sumas de su dinero fiscal, el castillo de naipes del "Holocausto"se vendrá abajo y el Estado de Israel se verá duramente presionado para estrujar un centavo del pueblo estadonidense. (Predigo que los israelíes se convertirán entonces instantáneamente en amigos con los rusos).

     Gobernador Kean: A la gente estadounidense no le gusta ser engañada, ni embaucada ni defraudada. Sólo el año pasado el flujo de la ayuda estadounidense a Israel excedió los 10.300 MILLONES de dólares. (Cifras de Button & Dutton Research, confirmadas por el profesor Thomas Stauffer de Harvard). Como usted puede ver, las apuestas son bastante altas. Y estoy seguro de que usted puede apreciar el costo que significa para el pueblo estadounidense el sostenimiento de Israel después de vuestros vigorosos esfuerzos para recolectar cinco millones de dólares para recontratar a algunos policías y bomberos en New Jersey. El "Holocausto", sólo el año pasado, fue ¡un FRAUDE DE 10.300 MILLONES DE DÓLARES!.

     Hace más de treinta años, la ADL y la B'nai B’rith decidieron impedir, tanto como les fuese posible, la inevitable denuncia que haría la gente estadounidense acerca del "Holocausto", al rechazar debatir el asunto, censurando, con estridentes amenazas, cualquier referencia a la verdad en los medios de comunicación, poniendo en la lista negra a aquellos que hablan de manera franca acerca del ENGAÑO, poniendo documentos en la ahora famosa (¿infame?) lista de archivos en "Cuarentena"de la ADL, y apoyando una avalancha de los Holocaustizantesmedios de comunicación que se ha convertido en una venenosa diatriba anti-alemana. (Los europeos que vivieron bajo la ocupación alemana durante la guerra están sorprendidos por el lenguaje venenoso dirigido contra los alemanes en EE.UU.).

     Cuando la guerra finalizó en Europa, también lo hizo la mayor parte de la propaganda de guerra, para los europeos. En Estados Unidos la propaganda de guerra actualmente ha empeorado mucho a fin de sostener el mito del "Holocausto". (La táctica de la "GRAN MENTIRA"). Vuestro "curso" sobre el "Holocausto"será tal como todos los otros esfuerzos de la ADL y la B'nai B’rith: el vómito de una venenosa marca de anti-germanismo, algo como las SESIONES DE ODIO de dos minutos en el libro "1984"de Orwell, sólo que mucho más largas. Cuando uno considera que una mayoría de estadounidenses remonta su linaje a antepasados alemanes, nuestro "curso"toma el aspecto de una nueva forma de suicidio político.

     Fue hace más de veinte años cuando la ADL y la B'nai B’rith decidieron introducir en los sistemas escolares estadounidenses un curso OBLIGATORIO sobre el "Holocausto" que CONDICIONARÍA eficazmente a nuestros estudiantes para apoyar el FRAUDE del "Holocausto" y por lo tanto a Israel. Es en realidad auspicioso que usted eligiera el libro "1984"para la introducción de un curso sobre el "Holocausto", puesto que éste es Orwell puro.

     Nuestros estudiantes no sólo conseguirán sus SESIONES DE ODIO, sino que ellos aprenderán lo que es el CRIMESTOP: "La facultad de pararse en seco, como por instinto, en el umbral de cualquier pensamiento peligroso". Algo como... ¿cuestionar alguno de los cuentos absurdos del "Holocausto"?. Gobernador: Yo no creo realmente que usted haya planificado este "tributo"a Orwell, ¿o sí lo hizo?.

     Gobernador: Un concepto aún más detestable (si es posible) ha surgido en el aprobado plan para el adoctrinamiento de nuestros estudiantes, un concepto repugnante y ofensivo que no es tolerable en ningún país libre: el uso del curso OBLIGATORIO acerca del "Holocausto"para "examinar" a aquellos estudiantes que son considerados "no aptos" para la enseñanza superior. En otras palabras, si un estudiante tiene la inteligencia para cuestionar las muchas incoherencias en el "curso", él encontrará muy difícil ir a la universidad con una calificación reprobatoria en "Holocausto", incluso si sus otras calificaciones son superiores. Este repulsivo sistema calza perfectamente con los métodos empleados en la Unión Soviética, donde el fracaso en repetir como loro la política aprobada, de memoria, lo pondrá a usted a manejar una picota y una pala, sin importar cuáles puedan ser sus calificaciones.

     Encuentro repugnante todo este concepto entero, y un grosero asalto contra los preciosos derechos por los que luché y por los que mis amigos y camaradas murieron. Ya que los muertos no pueden hablar por ellos mismos, es el deber de aquellos que sobreviven asegurarse de que su sacrificio no hubo sido en vano, y de que nadie corromperá nuestra democracia con un adoctrinamiento de estilo soviético de nuestros estudiantes, ¡EN NINGÚN TEMA!. Un examen político en base a un solo factor (Litmus test) ¡no es aceptable en nuestro sistema escolar!.

     Por lo tanto, sugiero que usted proponga a aquellos que han diseñado la "guía del profesor" y la "antología", que nosotros, de acuerdo a las mejores tradiciones estadounidenses, debatamos el contenido del curso que ellos tienen la intención de imponer a nuestros estudiantes. Éste es el estilo estadounidense y ése sería un debate fabuloso, puesto que algunos historiadores han estado esperando más de treinta años esta oportunidad.

     Si usted descubre, como sospecho, que aquellos que han construído este "curso"sobre una PATRAÑA rechazan involucrarse en un debate abierto y honesto sobe los presuntos "hechos" que ellos se proponen imponer a nuestros estudiantes,Gobernador, ¡UNA CAMPANA MUY FUERTE DEBERÍA COMENZAR A SONAR! Y a menos que usted personalmente esté preparado para aceptar toda la responsabilidad por el contenido del curso, sugiero que usted encuentre a un historiador profesional respetable, confiable e IMPARCIAL para revisar el contenido del curso, junto con un anuncio público de que el curso sobe el "Holocausto"no es diferente que cualquier otro curso en nuestro sistema escolar y que el contenido del curso puede ser cuestionado y debatido por los estudiantes.

     Gobernador Kean: Si usted ha encontrado difíciles de creer mis declaraciones acerca de los objetivos de la ADL y la B'nai B’rith, permítame asegurarle que estos planes groseramente anti-democráticos aparecen con regularidad en la prensa judía e incluso en la prensa estándar.

    Que la censura, el poner en la lista negra, la propaganda, el condicionamiento político de nuestros alumnos y el castigo por ejercer la libertad de expresión y la libertad de prensa sean tan abiertamente discutidos y planeados en un país libre, es un excelente ejemplo de la ARROGANCIA monumental del lobbyisraelí en este país. Ellos se han colocado a sí mismos, desde hace mucho, por encima de la Constitución y las leyes de este país.

     Gobernador: Usted debe saber ya que usted está en una situación en la que no podrá ganar nada. Si usted opta por la libertad de opinión, usted sentirá el cálido aliento de Howard Squadron en el dorso de su cuello, diciéndole por qué la libre expresión es anti-semita. Si usted deja que todo el asunto se deslice tranquilamente, usted será etiquetado como un tonto o algo peor, por los historiadores y los diversos departamentos de educación en otros Estados que tuvieron el buen juicio de rechazar el "Holocausto" como si fuese "Historia", para no decir nada de la batalla en la que usted se verá involucrado aquí en New Jersey cuando los padres sientan el fuerte hedor de la propaganda anti-alemana con que se está alimentando a sus hijos. Pienso que su mejor apuesta es llenar sus oídos con algodón (para que usted no pueda oír los gritos y las amenazas de Howard Squadron) y defender la libre expresión en nuestras escuelas.

     En cualquier caso, hágame un favor y demuestre su creencia en la libertad de expresión diciéndole a su departamento de educación que me permita comprar la así llamada "guía del profesor" y la "antología" del curso sobe el "Holocausto". Después de todo, eso no va a ser un secreto, ¿o sí?.

     Gobernador: Como usted ha visto, me he tomado un tiempo considerable y grandes molestias para escribir esta carta, aunque yo sepa por la experiencia pasada que será probablemente detenida en el sistema y nunca llegará hasta su escritorio.Sin embargo, la he escrito por dos motivos. En primer lugar, como una cuestión de principios: yo me sentiría culpable si dejara alguna piedra sin remover en esta batalla. En segundo lugar, es mi sentido innato y estadounidense del juego limpio el que me hace rechazar tratar injustamente a alguien, incluído usted mismo. Por lo tanto, he tratado de explicar detalladamente el conflicto en el que usted está antes de que el cielo caiga sobe su cabeza cuando "Los Vientos de Guerra" (de Herman Wouk, novela y serie de televisión) o alguna otra de tales estupideces entren en el sistema escolar de New Jersey como "Historia".

     Por supuesto, siéntase libre para mostrar esta carta a quienquiera que usted desee: a la ADL, a la B’nai B’rith, a Howard Squadron (si usted no hace caso de sus pataletas)... al que usted desee. Yo soy un gran creyente en la LIBERTAD DE EXPRESIÓN.


Cordialmente,

Mayor Joseph G. Stano, USAF (Retirado).–



* * * *


ANEXO:


     El Estado de New Jersey adoptó el 10 de Marzo de 1994,patrocinada por los senadores Ewing, McGreevey y Sinagra,una LEY en cuanto a la educación sobre el genocidio en las escuelas públicas, que complementael capítulo 35 del Título 18A de los Estatutos de New Jersey.

SEA DECRETADO por el Senado y la Asamblea General del Estado deNew Jersey:

     La Legislatura encuentra y declara que:

1. a. New Jersey se ha convertido recientemente en el foco de la atención nacionalpor los más venenosos y viles discursos de odio étnico.

b. Hay un vínculo inevitable entre violencia y vandalismoe intolerancia étnica y racial. El mismo Departamento de Educación de New Jersey ha reconocido formalmente la existencia de lamagnitud de este problema en las escuelas de New Jersey mediante la formaciónde una Unidad de Tarea del Comisionado sobe Violencia y Vandalismo.

c. New Jersey está orgullosa de su enorme diversidad cultural. La enseñanza de la tolerancia debe ser convertida en una prioridad si aquella diversidad cultural debe seguir siendo una de las fortalezas del Estado.

d. Los estudios nacionales indican que menos del 25% delos estudiantes tiene un conocimiento de los intentos organizadosa través de toda la Historia para eliminar a diversos grupos étnicospor medio de un programa sistemático de asesinatos masivos ogenocidio.

e. La Comisión de New Jersey sobre Educación del Holocausto hace varios años amplió su misión de estudiary recomendar el material curricular sobre una amplia variedad degenocidios. La Comisión del Holocausto es una agencia idealpara recomendar materiales curriculares a distritos locales.

2. a. Cada Consejo de educación incluirá instrucción sobre el Holocaustoy genocidios en un lugar apropiado en el plan de estudios de todoslos alumnos de escuelas primarias y secundarias.

b. La instrucción permitirá a los alumnos identificar yanalizar teorías aplicables acerca de la naturaleza y la conducta humanas, entender que el genocidio es una consecuenciadel prejuicio y la discriminación, y entender que los asuntosde dilema moral y conciencia tienen un impacto profundo sobre la vida.La instrucción enfatizará posteriormente la responsabilidad personalque tiene cada ciudadano para combatir el racismo y el odio cuando y donde suceda.

3. Esta ley entrará en vigor inmediatamente y se aplicará primero a las propuestas curriculares en el año escolar 1994-1995.–




William Lind - La Corrección Política, Marxismo Cultural

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     Del historiador, investigador y asesor legislativo estadounidense William S. Lind (1947), publicamos en castellano dos textos que tienen similitudes, por cuanto ambos abordan el tema de la Corrección Política, que tiene su origen en la judía Escuela de Frankfurt de pensamiento marxista, y cuyos frutos son hoy dicha ideología y juntamente el "multiculturalismo" (ya denunciado como fracaso) y las nociones de "diversidad" y "tolerancia", y la novedad de los hipócritas "delitos de odio", ataque directo contra la libertad de expresión y de pensamiento por parte de los solapados tiranos cuyo fin último, como lo destaca aquí el señor Lind, es la destrucción de la sociedad occidental tradicional en su conjunto para materializar la "revolución" de los hijos del mal. El primer texto (academia.org), una conferencia, es de Febrero de 2000, y el segundo (wnd.com), de 2007, es el capítulo 10 del libro "The Culture-Wise Family. Upholding Christian Values in a Mass Media World" publicado ese año. No hay que olvidar que la expresión "políticamente correcto" tiene su origen último en el Kremlin soviético, y se usaba para referirse a alguien que estaba alineado con las directrices del partido comunista.


LOS ORÍGENES DE LA "CORRECCIÓN POLÍTICA"
por William S. Lind
5 de Febrero de 2000



     ¿De dónde viene toda esta materia de la que usted ha escuchado esta mañana: el feminismo víctima, el movimiento de derechos de los homosexuales, la estadística inventada, la Historia reescrita, las mentiras, las demandas, y todo el resto de ello? Por primera vez en nuestra historia, los estadounidenses tienen que estar temerosos de lo que ellos dicen, de lo que ellos escriben y de lo que ellos piensan. Ellos tienen que tener miedo de usar la palabra incorrecta, una palabra denunciada como ofensiva o insensible, o racista, sexista u homosexofóbica.

     Hemos visto otros países, en particular en este siglo, donde éste ha sido el caso. Y siempre los hemos considerado con una mezcla de compasión y, para ser sinceros, con alguna diversión, porque nos ha impactado como algo muy extraño el que la gente permita que se desarrolle una situación donde ellos tengan miedo de cuáles palabras ellos usan. Pero ahora tenemos esta situación en este país. La tenemos principalmente en los campus universitarios, pero se está extiendiendo a través de toda la sociedad. ¿De dónde viene?, ¿y qué es?.

     La llamamos "Corrección Política". El nombre se originó como una especie de chiste, literalmente en una historieta cómica, y tendemos todavía a pensar en ello sólo como algo semi-serio. De hecho, es terriblemente serio. Es la gran enfermedad de nuestro siglo, la enfermedad que ha dejado a decenas de millones de personas muertas en Europa, en Rusia, en China, y en realidad por todo el mundo. Es la enfermedad de la ideología. La Corrección Política no es graciosa sino que es mortalmente seria.

     Si la miramos analíticamente, si la miramos históricamente, rápidamente averiguamos exactamente qué es. La Correción Política es Marxismo Cultural. Es el marxismo traducido desde lo económico a términos culturales. Es un esfuerzo que se remonta no a los años '60 y los hippies y el movimiento de la paz, sino a la Primera Guerra Mundial. Si comparamos los principios básicos de la Corrección Política con el marxismo clásico, los paralelos son muy obvios.

     En primer lugar, ambos son ideologías totalitarias. La naturaleza totalitaria de la Corrección Política no es revelada en ninguna parte más claramente que en los campus universitarios, muchos de los cuales en este punto son pequeñas Coreas del Norte cubiertas de hiedra, donde el estudiante o miembro de la facultad que se atreve a cruzar cualquiera de las líneas establecidas por las feministas de género o los activistas de los derechos homosexuales, o el grupo negro o hispánico local, o cualquiera de los otros grupos de santificadas "víctimas" alrededor de los cuales gira la Corrección Política, rápidamente se encuentra en problemas judiciales. Dentro del pequeño sistema legal de las universidades, ellos enfrentan acusaciones formales, algún procedimiento de tipo tribunal arbitrario, y castigo. Eso es un poco mirar el futuro que la Corrección Política quiere para la nación en su conjunto.

     En efecto, todas las ideologías son totalitarias, porque la esencia de una ideología (yo señalaría que el conservadurismo correctamente entendido no es una ideología) consiste en tomar alguna filosofía y decir sobre la base de ella ciertas cosas que deben ser verdaderas, tales como que toda la historia de nuestra cultura es la historia de la opresión contra las mujeres. Ya que la realidad contradice esto, la realidad debe ser prohibida. Debe quedar prohibido reconocer la realidad de nuestra historia. La gente debe ser obligada a vivir una mentira, y puesto que la gente está naturalmente poco dispuesta a vivir una mentira, ellos naturalmente usan sus oídos y sus ojos para mirar hacia fuera y decir: "Espere un minuto. Eso no es verdadero. Puedo ver que no es verdadero". El poder del Estado debe ser puesto detrás de la demanda de vivir una mentira. Por eso la ideología invariablemente crea un Estado totalitario.

     Segundo, el Marxismo Cultural de la Corrección Política, tal como el marxismo económico, tiene un solo factor como explicación de la Historia. El marxismo económico dice que toda la Historia está determinada por la propiedad de los medios de producción. El Marxismo Cultural, o Corrección Política, dice que toda la Historia está determinada por el poder, por medio del cual los grupos definidos en términos de raza, sexo, etc., tienen poder sobre otros grupos. Nada más importa. Toda la literatura, en efecto, es sobre esto. Todo en el pasado es sobre aquella única cosa.

     Tercero, tal como en el marxismo económico clásico, ciertos grupos, es decir trabajadores y campesinos, son a priori buenos, y otros, es decir, la burguesía y los dueños del capital, son malos. En el Marxismo Cultural de la Corrección Política ciertos grupos son buenos: mujeres feministas (sólo mujeres feministas, ya que las mujeres no feministas se considera que no existen), negros, hispánicos, homosexuales, etc. Estos grupos están determinados a ser "víctimas", y por lo tanto automáticamente buenos, sin tener en cuenta lo que cualquiera de ellos haga. De manera similar, los varones Blancos están determinados automáticamente a ser malos, convirtiéndose por lo tanto en el equivalente de la burguesía en el marxismo económico.

     Cuarto, el marxismo tanto económico como cultural se basa en la expropiación. Cuando los marxistas clásicos, los comunistas, se apoderaron de un país como Rusia, ellos expropiaron a la burguesía, y ellos le arrebataron su propiedad. Del mismo modo, cuando los marxistas culturales se apoderan de un campus universitario, ellos expropian por medio de cosas como las cuotas para admisiones. Cuando a un estudiante Blanco con calificaciones superiores se le niega la entrada a una universidad en favor de un negro o de un hispánico que no está tan bien calificado, el estudiante Blanco es expropiado. Y en efecto, la Acción Afirmativa[discriminación inversa] en nuestra sociedad entera hoy, es un sistema de expropiación. Las compañías poseídas por Blancos no consiguen un contrato porque el contrato está reservado para una compañía poseída por, digamos, hispánicos o mujeres. De esta manera, la expropiación es una herramienta principal para ambas formas de marxismo.

     Y finalmente, ambos tienen un método de análisis que automáticamente da las respuestas que ellos quieren. Para el marxista clásico, es la economía marxista. Para el marxista cultural, es la Des-construcción. La des-construcción esencialmente toma cualquier texto, remueve todo significado de él e inserta de nuevo cualquier significado deseado. Así encontramos, por ejemplo, que todo lo de Shakespeare es acerca de la supresión de las mujeres, o que la Biblia es realmente sobre raza y género. Todos estos textos simplemente se convierten en granos para el molino, lo que demuestra que "toda historia es acerca de qué grupos tienen poder sobre otros grupos". Entonces los paralelos son muy evidentes entre el marxismo clásico con el que estamos familiarizados en la vieja Unión Soviética, y el marxismo cultural que vemos hoy como Corrección Política.

     Pero los paralelos no son accidentales. Los paralelos no vinieron de la nada. La verdad del asunto es que la Corrección Política tiene una historia, una historia que es mucho más larga de lo que muchas personas están conscientes, aparte de un pequeño grupo de académicos que han estudiado esto. Y la historia se remonta, como dije, a la Primera Guerra Mundial, al igual que tantas de las patologías que están subvirtiendo hoy nuestra sociedad, y en realidad nuestra cultura.

     La teoría marxista decía que cuando viniese la guerra europea general (como vino realmente a Europa en 1914), la clase obrera a través de toda Europa se levantaría y derrocaría a sus gobiernos —los gobiernos burgueses— porque los trabajadores tenían más en común unos con otros a través de los límites nacionales, que lo que ellos tenían en común con la burguesía y la clase dirigente en su propio país. Bien; 1914 vino y aquello no sucedió. A través de toda Europa los trabajadores se reunieron en torno a sus banderas y marcharon felizmente para luchar unos contra otros. El Káiserestrechó la mano a los líderes del marxista Partido Socialdemócrata en Alemania y dijo que no había partidos entonces sino sólo alemanes. Y esto sucedió en cada país de Europa. Entonces algo estaba equivocado.

     Los marxistas sabían por definición que no podía ser la teoría. En 1917 ellos finalmente consiguieron un golpe marxista en Rusia y pareció como que la teoría estaba funcionando, pero se detuvo nuevamente. No se extendió, y cuando se hicieron intentos para esparcirla inmediatamente después de la guerra, con el levantamiento Espartaquista en Berlín, con el gobierno de Bela Kun en Hungría y con el Múnich soviético, los trabajadores no la apoyaron.

     Entonces los marxistas tenían un problema. Y dos teóricos marxistas se pusieron a trabajar en ello: Antonio Gramsci en Italia y Georg Lukacs en Hungría. Gramsci dijo que los trabajadores nunca verán sus verdaderos intereses de clase, como fueron definidos por el marxismo, hasta que ellos sean liberados de la cultura occidental, y particularmente de la religión cristiana, puesto que ellos están cegados por la cultura y la religión en cuanto a sus verdaderos intereses de clase. Lukacs, quien fue considerado el teórico marxista más brillante desde Marx mismo, dijo en 1919: "¿Quién nos salvará de la Civilización Occidental?". Él también teorizó que el gran obstáculo para la creación de un paraíso marxista era la cultura: la civilización occidental misma.

     Lukacs consiguió una oportunidad para poner sus ideas en práctica, porque cuando el gobierno bolchevique de Bela Kun fue establecido en Hungría en 1919, él se convirtió en el vice-comisario para la cultura, y la primera cosa que él hizo fue introducir la educación sexual en las escuelas húngaras. Esto aseguró que los trabajadores no apoyaran al gobierno de Bela Kun, porque la gente húngara miró esto horrorizada, los trabajadores así como todos los demás. Pero él ya había hecho la conexión por la cual hoy muchos de nosotros todavía estamos sorprendidos, que consideraríamos la "última cosa".

     En 1923 en Alemania fue establecido un centro de estudios que asumió el papel de traducir el marxismo desde términos económicos en culturales, que creó la Corrección Política como la conocemos hoy, y que esencialmente creó la base para ella hacia fines de los años '30. Esto ocurrió porque el muy adinerado joven hijo de un comerciante alemán millonario de nombre Felix Weil se había hecho un marxista y tenía mucho dinero para gastar. Él estaba perturbado por las divisiones entre los marxistas, de modo que él patrocinó algo llamado la Primera Semana de Trabajo Marxista, donde reunió a Lukacs y a muchos de los pensadores alemanes claves durante una semana, para trabajar en las diferencias del marxismo.

     Y él dice: "Lo que necesitamos es un centro de estudios". Washington está lleno de centros de estudio y los consideramos como muy modernos, pero de hecho ellos van hacia atrás de muchas maneras. Weil estableció un instituto en 1923, asociado con la Universidad de Frankfurt, que originalmente se suponía que sería conocido como el Instituto para el Marxismo. Pero la gente detrás de ello decidió al principio que no era para su ventaja ser abiertamente identificado como marxista. La última cosa que quiere la Corrección Política es que la gente se entere de que ella es una forma de marxismo. Entonces en vez de ese nombre, ellos decidieron llamarlo el Instituto para la Investigación Social.

     Weil es muy claro en cuanto a sus objetivos. En 1971 él escribió a Martin Jay, el autor de un libro principal sobre la Escuela de Frankfurt, como llegó a ser pronto conocido informalmente el Instituto para la Investigación Social, y dijo: "Yo quería que el Instituto se hiciera conocido, quizá famoso, debido a sus contribuciones al marxismo". Bien, él fue exitoso. El primer director del Instituto, Carl Grunberg, un economista austriaco, concluyó su discurso inaugural, según Martin Jay, "afirmando claramente su lealtad personal al marxismo como una metodología científica". El marxismo, dijo él, sería el principio rector en el Instituto, y eso nunca ha cambiado.

     El trabajo inicial en el Instituto era bastante convencional, pero en 1930 adquirió un nuevo director llamado Max Horkheimer, y las opiniones de Horkheimer eran muy diferentes. Él era en gran medida un marxista renegado. La gente que creó y formó la Escuela de Frankfurt eran marxistas renegados. Ellos eran todavía bastante marxistas en su pensamiento, pero ellos efectivamente se habían salido del partido. Moscú observó lo que ellos hacían, y dijo: "Oigan, eso no somos nosotros, y no vamos a bendecir esto".

     La herejía inicial de Horkheimer fue que él estaba muy interesado en Freud, y la clave para hacer la traducción del marxismo desde términos económicos a términos culturales es esencialmente que él lo combinó con el freudismo. Nuevamente, Martin Jay escribe: "Si se puede decir que en los primeros años de su historia el Instituto se preocupó principalmente de un análisis de la sub-estructura socioeconómica de la sociedad burguesa, en los años después de 1930 sus intereses primarios estaban en la súper-estructura cultural. En realidad, la fórmula marxista tradicional en cuanto a la relación entre las dos fue cuestionada por la Teoría Crítica". Yyo señalo que Jay tenía mucha simpatía por la Escuela de Frankfurt.

     La materia acerca de la cual hemos estado oyendo esta mañana —el feminismo radical, los departamentos de estudios de la mujer, los departamentos de estudios sobre el homosexualismo, los departamentos de estudios sobre los negros—, todas estas cosas son ramas de la Teoría Crítica. Lo que la Escuela de Frankfurt esencialmente hizo fue usar tanto a Marx como a Freud en los años '30 para crear esta teoría llamada la Teoría Crítica. El término es ingenioso porque usted se ve tentado a preguntar: "¿Cuál es esa teoría?". La teoría es criticar. La teoría es que el modo de echar abajo la cultura occidental y el orden capitalista es noestablecer una alternativa. Ellos explícitamente rechazan hacer aquello. Ellos dicen que eso no puede ser hecho, que no podemos imaginar a qué se parecería una sociedad libre (su definición de una sociedad libre).

     Mientras vivimos bajo la represión —la represión de parte de un orden económico capitalista que crea (en la teoría de ellos) la condición freudiana, las condiciones de la represión que Freud describe en los individuos— no podemos siquiera imaginarla. De lo que se trata la Teoría Crítica es simplemente de criticar. Ella pide la crítica más destructiva posible, de cada modo posible, y está diseñada para echar abajo el orden actual. Y, por supuesto, cuando escuchamos de parte de las feministas que toda la sociedad simplemente quiere causarle problemas a las mujeres, etcétera, aquella clase de crítica es un derivado de la Teoría Crítica. Todo esto viene de los años '30, no de los años '60.

     Otros miembros claves que se unieron en aquella época fueron Theodore Adorno, y, más importante aún, Erich Fromm y Herbert Marcuse. Fromm y Marcuse introdujeron un elemento que es central para la Corrección Política, que es el elemento sexual, y particularmente Marcuse, que en sus propios escritos pide una sociedad de "perversidad polimorfa", que es su definición del futuro del mundo que ellos quieren crear. Marcuse en particular hacia los años '30 escribió alguna materia muy extrema acerca de la necesidad de la liberación sexual, pero esto vale para el Instituto entero. Lo mismo ocurre con la mayor parte de los temas que vemos en la Corrección Política, de nuevo a principios de los años '30. En opinión de Fromm, la masculinidad y la feminidad no eran reflejos de diferencias sexuales "esenciales", como los Románticos habían pensado. Ellas se derivaban, en cambio, de diferencias en las funciones de la vida, que estaban en parte socialmente determinadas: "El sexo es un constructo; las diferencias sexuales son un constructo".

     Otro ejemplo es el énfasis que ahora vemos en el ecologismo. "El materialismo, ya desde los tiempos de Hobbes, había conducido a una actitud de dominación manipuladora hacia la Naturaleza". Así escribía Horkheimer en 1933 en Materialismus und Moral. "El tema de la dominación de la Naturaleza por parte del hombre", según Jay, "se iba a convertir en una preocupación central de la Escuela de Frankfurten años posteriores".

     "El antagonismo de Horkheimer contra la fetichización del trabajo (aquí es donde ellos se estaban apartando obviamente de la ortodoxia marxista) expresaba otra dimensión del materialismo de él: la demanda de una felicidad humana y sensual". En uno de sus ensayos más mordaces, El Egoísmo y el Movimiento para la Emancipación, escrito en 1936, Horkheimer "habló de la hostilidad contra la satisfacción personal inherente en la cultura burguesa". Y él se refirió específicamente al marqués de Sade, favorablemente, por su "protesta... contra el ascetismo en nombre de una moralidad superior".

     ¿Cómo entró a raudales todo este material aquí?; ¿cómo inundó nuestras universidades, y en realidad nuestras vidas hoy? Los miembros de la Escuela de Frankfurt son marxistas, y ellos son también, sin excepción, judíos. En 1933 los nacionalsocialistas subieron al poder en Alemania, y no sorprendentemente ellos cerraron el Instituto para la Investigación Social. Y sus miembros huyeron. Ellos huyeron a Nueva York, y el Instituto fue restablecido allí en 1933 con la ayuda de la Universidad de Columbia. Y los miembros del Instituto, gradualmente durante los años '30, aunque muchos de ellos siguieron escribiendo en alemán, cambiaron su foco desde la Teoría Crítica sobre la sociedad alemana, una crítica destructiva sobre cada aspecto de aquella sociedad, a la Teoría Crítica dirigida contra la sociedad estadounidense. Hubo otra transición muy importante cuando la guerra llegó. Algunos de ellos fueron a trabajar para el gobierno, incluso Herbert Marcuse, quien se convirtió en una figura clave en la OSS (la precursora de la CIA), y algunos, incluyendo a Horkheimer y Adorno, se trasladaron a Hollywood.

     Estos orígenes de la Corrección Política probablemente no significarían demasiado hoy para nosotros excepto por dos acontecimientos subsecuentes. El primero fue la rebelión estudiantil a mediados de los años '60, que fue conducida en gran parte por la resistencia a la conscripción militar y a la Guerra de Vietnam. Pero los estudiantes rebeldes necesitaban una teoría de alguna clase. Ellos no podían simplemente aparecer por ahí y decir: "Diablos, no, no iremos". Ellos tenían que tener alguna explicación teórica detrás de aquella actitud.

     Muy pocos de ellos estaban interesados en cruzar a través de Das Kapital. El marxismo económico clásico no es algo liviano, y la mayor parte de los radicales de los años '60 no eran profundos. Por suerte para ellos, y lamentablemente para nuestro país hoy, y no sólo en la universidad, Herbert Marcuse permaneció en Estados Unidos cuando la Escuela de Frankfurt se volvió a trasladar a Frankfurt después de la guerra. Y mientras que el señor Adorno en Alemania quedó consternado por la rebelión estudiantil cuando ella irrumpió allí (cuando los estudiantes rebeldes entraban en la sala de Adorno, él llamaba a la policía y los hacía detener), Herbert Marcuse, que permaneció aquí, vio la rebelión estudiantil de los años '60 como una gran oportunidad. Él vio la posibilidad de tomar el trabajo de la Escuela de Frankfurt y convertirlo en la teoría de la Nueva Izquierda en Estados Unidos.

     Uno de los libros de Marcuse fue el libro clave, que prácticamente se convirtió en la "biblia" del movimiento Estudiantes por una Sociedad Democrática (SDS) y de los estudiantes rebeldes de los años '60. Aquel libro era Eros y Civilización. Marcuse sostiene que bajo un orden capitalista (él minimiza al marxismo muy fuertemente aquí, y se subtitula Una Investigación Filosófica acerca de Freud, pero el marco teórico es marxista), la represión es la esencia de aquel orden, y eso nos da la persona que Freud describe: la persona con todos los complejos y neurosis, porque sus instintos sexuales están reprimidos.

     Podemos prever un futuro, dice él, sólo si podemos destruír dicho orden opresivo existente, en el cual liberaremos el eros, liberaremos la libido, cuando tendremos un mundo de "perversidad polimorfa", en el cual usted puede "hacer lo suyo". Y a propósito, en aquel mundo ya no habrá trabajo sino sólo juego. ¡Qué maravilloso mensaje para los radicales de mediados de los años '60! Ellos son estudiantes, ellos son personas nacidas en la posguerra, y han crecido sin ninguna necesidad de preocuparse por nada excepto eventualmente de tener que conseguir un trabajo, y aquí está un tipo que escribe en un modo que ellos pueden seguir fácilmente. Él no requiere que ellos lean mucho del pesado marxismo y les dice todo lo que ellos quieren oír, que es esencialmente: "Haz lo tuyo", "Si te hace sentir bien, hazlo", y "Tú nunca tendrás que ir a trabajar". A propósito, Marcuse es también el hombre que creó la frase "Haz el amor, no la guerra".

     Volviendo a la situación que la gente enfrenta en los campus, Marcuse define la "tolerancia liberadora" como la intolerancia contra cualquier cosa que venga de la Derecha y la tolerancia por cualquier cosa que venga de la Izquierda. Marcuse se integró a la Escuela de Frankfurt en 1932 (si recuerdo bien). De este modo, todo esto se remonta a los años '30.

     Para concluír, Estados Unidos hoy está en las convulsiones de la mayor y más extrema transformación en su historia. Nos estamos convirtiendo en un Estado ideológico, un país con una ideología estatal oficial impuesta por el poder del Estado. Por "delitos de odio" ahora tenemos a gente cumpliendo penas de cárcel por sus pensamientos políticos. Y el Congreso se está moviendo ahora para ampliar aquella categoría aún más.

     La Acción Afirmativa[discriminación inversa] es parte de ello. El terrorismo contra cualquiera que disienta de la Corrección Política en el campus es parte de ello. Eso es exactamente lo que hemos visto suceder en los países comunistas, y ahora eso está viniendo aquí. Y no lo reconocemos porque lo llamamos Corrección Política y nos reímos de ello. Mi mensaje hoy es que aquello no es gracioso; está aquí, está creciendo y finalmente destruirá, porque eso procura, todo lo que hemos definido alguna vez como nuestra libertad y nuestra cultura.–




¿Quién Robó Nuestra Cultura?
por William S. Lind, 2007


     En algún momento durante el último medio siglo, alguien robó nuestra cultura. Sólo hace 50 años, en los años '50, Estados Unidos era un gran lugar. Era seguro. Era decente. Los niños conseguían una buena educación en las escuelas públicas. Incluso los padres que trabajaban en industrias llevaban a casa ingresos de la clase media, de modo que las mamás podían quedarse en casa con los niños. Los programas de televisión reflejaban valores sanos y tradicionales.

     ¿A dónde se fue todo eso?. ¿Cómo aquel EE.UU. se convirtió en el lugar moralmente degradado y decadente en el que vivimos hoy, tan diferente que a aquellos que crecieron antes de los años '60 les parece que éste es un país extranjero?. Aquello ¿simplemente "sucedió"?.

     No "sucedió" simplemente. De hecho, una agenda deliberada fue seguida para robar nuestra cultura y dejar una nueva y muy diferente en su lugar. La historia de cómo y por qué, es una de las partes más importantes de nuestra historia nacional, y es una historia que casi nadie conoce. La gente detrás de ello quiso que fuese así.

     Lo que ocurrió, en resumen, es que la cultura tradicional de EE.UU., que había crecido durante generaciones desde nuestras raíces occidentales y cristianas, fue barrida por una ideología. Conocemos aquella ideología mejor como "corrección política" o "multi-culturalismo". Ella realmente es Marxismo Cultural, marxismo traducido desde la esfera económica a términos culturales, en un esfuerzo que se remonta no a los años '60 sino a la Primera Guerra Mundial. Increíble como pueda parecer, como el viejo marxismo económico de la Unión Soviética se ha desvanecido, un nuevo marxismo cultural se ha convertido en la ideología dirigente de las élites de Estados Unidos. El objetivo Nº 1 de aquel marxismo cultural, desde su creación, ha sido la destrucción de la cultura occidental y la religión cristiana.

     Para entender algo, tenemos que conocer su historia. Para entender quién robó nuestra cultura, tenemos que mirar la historia de la "corrección política".


TEORÍA MARXISTA TEMPRANA

     Antes de la Primera Guerra Mundial, la teoría marxista decía que si Europa alguna vez estallaba en guerra, las clases obreras en cada país europeo se levantarían en rebelión, derrocarían a sus gobiernos y crearían una nueva Europa comunista. Pero cuando la guerra estalló en el verano de 1914, eso no ocurrió. En vez de ello, los trabajadores en cada país europeo se alinearon por millones para luchar contra los enemigos de su país. Finalmente, en 1917, una revolución comunista ocurrió realmente, en Rusia. Pero las tentativas de extender aquella revolución a otros países fallaron porque los trabajadores no la apoyaron.

     Después de que la Primera Guerra Mundial se terminó en 1918, los teóricos marxistas tuvieron que hacerse la pregunta: ¿Qué salió mal? Como buenos marxistas, ellos no podían confesar que la teoría marxista había sido incorrecta. En cambio, dos importantes intelectuales marxistas, Antonio Gramsci en Italia y Georg Lukacs en Hungría (Lukacs fue considerado el más brillante pensador marxista desde Marx mismo) aparecieron independientemente con la misma respuesta. Ellos dijeron que la cultura occidental y la religión cristiana habían cegado tanto a la clase obrera en cuanto a sus verdaderos y marxistas intereses de clase, que una revolución comunista era imposible en Occidente, hasta que ambas pudieran ser destruídas. Aquel objetivo, establecido como el objetivo del Marxismo Cultural directamente desde el principio, nunca ha cambiado.


UNA NUEVA ESTRATEGIA

     Gramsci conocidamente presentó una estrategia para destruír el cristianismo y la cultura occidental, una que ha resultado demasiado exitosa. En vez de pedir una revolución comunista al frente, como en Rusia, él dijo que los marxistas en Occidente deberían tomar el poder político al final, después de una "larga marcha a través de las instituciones"—las escuelas, los medios de comunicación, incluso las Iglesias, a través de cada institución que pudiera influír en la cultura. Aquella "larga marcha a través de las instituciones" es lo que EE.UU. ha experimentado, sobre todo desde los años '60. Por suerte, Mussolini reconoció el peligro que Gramsci representaba y lo encarceló. Su influencia permaneció pequeña hasta los años '60, cuando sus obras, sobre todo "Los Cuadernos de la Prisión", fueron descubiertos de nuevo.

     Georg Lukacs demostró ser más influyente. En 1918 él se convirtió en el vice-comisario para la cultura en el efímero régimen bolchevique de Bela Kun en Hungría. Allí, preguntándose "¿Quién nos salvará de la civilización occidental?", él instituyó lo que él llamó el "terrorismo cultural". Uno de sus principales componentes fue introducir la educación sexual en las escuelas húngaras. Lukacs comprendió que si él pudiera destruír la moral sexual tradicional del país, él habría dado un paso gigantesco hacia la destrucción de su cultura tradicional y su fe cristiana.

     Lejos de reunirse en torno al "terrorismo cultural" de Lukacs, la clase obrera húngara se indignó tanto por ello que cuando Rumania invadió Hungría, los trabajadores no lucharon por el gobierno de Bela Kun, y éste cayó. Lukacs desapareció, pero no por mucho tiempo. En 1923 él apareció en una "Semana de Estudio Marxista" en Alemania, un programa patrocinado por un joven marxista llamado Felix Weil que había heredado millones. Weil y los demás que asistieron a aquella semana de estudio quedaron fascinados por la perspectiva cultural de Lukacs dentro del marxismo.


LA ESCUELA DE FRANKFURT

     Weil respondió usando un poco de su dinero para establecer un nuevo centro de estudios en la Universidad de Frankfurt, en Alemania. Al principio debía ser llamado el "Instituto para el Marxismo", pero los marxistas culturales comprendieron que ellos podrían ser mucho más eficaces si ellos ocultaban su verdadera naturaleza y objetivos. Ellos convencieron a Weil de dar al nuevo instituto un nombre que sonara neutro, el "Instituto para la Investigación Social". Pronto conocido simplemente como la "Escuela de Frankfurt", el Instituto para la Investigación Social se convertiría en el lugar donde fue desarrollada la Corrección Política como ahora la conocemos. La respuesta básica a la pregunta "¿Quién robó nuestra cultura?", es los marxistas culturales de la Escuela de Frankfurt.

     Al principio, el Instituto trabajó principalmente en cuestiones marxistas convencionales, como el movimiento sindical. Pero en 1930 aquello cambió dramáticamente. Ese año, del Instituto se hizo cargo un nuevo director, un brillante joven intelectual marxista llamado Max Horkheimer. Horkheimer había sido fuertemente influído por Georg Lukacs. Él inmediatamente se puso a trabajar para convertir la Escuela de Frankfurten el lugar donde el trabajo pionero de Lukacs en cuanto al Marxismo cultural podría ser desarrollado posteriormente como una verdadera ideología.

     Para tal efecto, él llevó algunos nuevos miembros a la Escuela de Frankfurt. Quizás el más importante fue Theodor Adorno, que llegaría a ser el colaborador más creativo de Horkheimer. Otros nuevos miembros incluían a dos psicólogos, Eric Fromm y Wilhelm Reich, quienes eran conocidos promotores del feminismo y el matriarcado, y un joven estudiante graduado llamado Herbert Marcuse.


AVANCES EN MARXISMO CULTURAL

     Con la ayuda de esta sangre nueva, Horkheimer hizo tres importantes avances en el desarrollo del Marxismo Cultural. Primero, él rompió con la opinión de Marx de que la cultura era simplemente parte de la "súper-estructura" de la sociedad, que estaba determinada por factores económicos. Él dijo que, por el contrario, la cultura era un factor independiente y muy importante en la formación de una sociedad.

     Segundo, también al contrario de Marx, él anunció que en el futuro la clase obrera no sería el agente de la revolución. Él dejó abierta la pregunta de quién desempeñaría aquel papel, una pregunta que Marcuse contestó en los años '50.

     Tercero, Horkheimer y los otros miembros de Escuela de Frankfurt decidieron que la clave para la destrucción de la cultura occidental era cruzar a Marx con Freud. Ellos argumentaron que así como los trabajadores eran oprimidos bajo el capitalismo, del mismo modo bajo la cultura occidental cada uno vivía en un estado constante de represión psicológica. La "liberación" de cada uno de aquella represión se convirtió en uno de los objetivos principales del marxismo cultural. Aún más importante, ellos comprendieron que la psicología les ofrecía un instrumento mucho más poderoso que la filosofía para destruír la cultura occidental: el condicionamiento psicológico.

     Hoy, cuando los marxistas culturales de Hollywood quieren "normalizar" algo como la homosexualidad (así "liberándonos" de la "represión"), ellos ponen por la televisión programa tras programa donde el único varón Blanco de apariencia normal es un homosexual. Así es cómo trabaja el condicionamiento psicológico: la gente absorbe las lecciones que los marxistas culturales quieren que ellos aprendan sin siquiera saber que están siendo enseñados.

     La Escuela de Frankfurt estaba bien encaminada para crear la Corrección Política. Entonces de repente, el destino intervino. En 1933 Adolf Hitler y el Partido Nacionalsocialista subieron al poder en Alemania, donde la Escuela de Frankfurt estaba localizada. Ya que la Escuela de Frankfurt era marxista, y los nacionalsocialistas odiaban el marxismo, y ya que casi todos sus miembros eran judíos, dicha escuela decidió dejar Alemania. En 1934 la Escuela de Frankfurt, incluyendo sus principales miembros de Alemania, fue restablecida en Nueva York con la ayuda de la Universidad de Columbia. Pronto, su foco cambió desde destruír la cultura occidental tradicional en Alemania a hacer lo mismo en Estados Unidos. Aquello demostraría ser demasiado exitoso.


NUEVOS DESARROLLOS

     Tomando ventaja de la hospitalidad estadounidense, la Escuela de Frankfurt pronto reanudó su trabajo intelectual para crear el Marxismo Cultural. A sus logros más tempranos en Alemania, añadió estos nuevos desarrollos.


Teoría Crítica

     Para servir a su objetivo de "negar" la cultura occidental, la Escuela de Frankfurt desarrolló un poderoso instrumento que llamó la "Teoría Crítica". ¿Cuál era esa teoría? La teoría era criticar. Sometiendo a cada institución tradicional, comenzando con la familia, a una crítica interminable y constante (la Escuela de Frankfurt se cuidó mucho de definir a favor de qué estaba, sino sólo contra qué), ella esperaba destruírlas. La Teoría Crítica es la base para los departamentos de "estudios" que ahora están presentes en las universidades e instituciones de educación superior estadounidenses. De manera no sorpresiva, aquellos departamentos son el hogar territorial de la corrección política académica.


Estudios en torno a los Prejuicios

     La Escuela de Frankfurt procuró definir como "prejuicio" las actitudes tradicionales en cada cuestión, en una serie de estudios académicos que culminaron en el libro enormemente influyente de Adorno "La Personalidad Autoritaria", publicado en 1950. Ellos inventaron una falsa "escala F", que pretendía vincular las creencias tradicionales en cuanto a la moral sexual, las relaciones entre hombres y mujeres y cuestiones tocantes a la familia, como apoyos del Fascismo. Hoy, el término favorito de uso políticamente correcto para cualquiera que discrepe con ellos es "fascista".


Dominación

     La Escuela de Frankfurt de nuevo se alejó del marxismo ortodoxo, que sostenía que toda la Historia estaba determinada por quién poseía los medios de producción. En vez de eso, ellos dijeron que la Historia estaba determinada por qué grupos, definidos como hombres, mujeres, razas, religiones, etc., tenían el poder o el "dominio" sobre otros grupos. Ciertos grupos, especialmente varones Blancos, fueron etiquetados como "opresores", mientras otros grupos fueron definidos como "víctimas". Las víctimas eran automáticamente buenas, y los opresores, malos, sólo por causa de qué grupo ellos provenían, sin tener en cuenta el comportamiento individual.

     Aunque marxistas, los miembros de la Escuela de Frankfurt también sacaron ideas de Nietzsche (alguien más que ellos admiraban por su desafío de la moral tradicional era el marqués de Sade). Ellos incorporaron en su marxismo cultural lo que Nietzsche llamó la "transvaloración de todos los valores". Lo que esto significa, en lenguaje simple, es que todos los antiguos pecados se convierten en virtudes, y todas las viejas virtudes se convierten en pecados. El homosexualismo está bien y es una buena cosa, pero cualquiera que piense que los hombres y las mujeres deberían tener papeles sociales diferentes es un malvado "fascista". Eso es lo que la Corrección Política ahora enseña a los niños en las escuelas públicas a través de todo Estados Unidos. (La Escuela de Frankfurt escribió acerca de la educación pública estadounidense. Dijo que no importaba si los alumnos aprendían alguna habilidad o algún hecho. Todo lo que importaba era que ellos se graduaran de las escuelas con las "actitudes" correctas sobre ciertos asuntos).


Medios de Comunicación y Entretenimiento

     Liderada por Adorno, la Escuela de Frankfurt al principio se opuso a la industria de la cultura, a la que ellos consideraban como una cultura comercialmente cosificada. Entonces ellos comenzaron a escuchar a Walter Benjamin, un cercano amigo de Horkheimer y Adorno, que sostenía que el Marxismo Cultural podría hacer un uso poderoso de instrumentos como la radio, el cine y posteriormente la televisión para condicionar psicológicamente al público. La opinión de Benjamin prevaleció, y Horkheimer y Adorno pasaron los años de la Segunda Guerra Mundial en Hollywood. No es ninguna casualidad que el mundo del espectáculo sea ahora el arma más poderosa del Marxismo Cultural.


El Crecimiento del Marxismo en Estados Unidos

     Después de la Segunda Guerra Mundial y de la derrota de los nacionalsocialistas, Horkheimer, Adorno y la mayor parte de los otros miembros de la Escuela de Frankfurt volvieron a Alemania, donde el Instituto se restableció en Frankfurt con la ayuda de las autoridades de ocupación estadounidenses. El Marxismo Cultural con el tiempo se convirtio en la ideología no oficial pero omni-penetrante de la República Federal de Alemania.

     Pero el infierno no había olvidado a Estados Unidos. Herbert Marcuse permaneció aquí, y él empezó a traducir los muy dificultosos escritos académicos de los otros miembros de la Escuela de Frankfurt en términos más simples, que los estadounidenses pudieran comprender fácilmente. Su libro "Eros y Civilización"usó el cruce de la Escuela de Frankfurt de Marx con Freud para sostener que si sólo pudiéramos "liberar el eros no-procreativo"por medio de una "perversidad polimorfa", podríamos crear un nuevo paraíso donde habría sólo juego y ningún trabajo. "Eros y Civilización"se convirtió en uno de los textos principales de la Nueva Izquierda en los años '60.

     Marcuse también ensanchó el trabajo intelectual de la Escuela de Frankfurt. A principios de los años '30 Horkheimer había dejado abierta la pregunta de quién sustituiría a la clase obrera como el agente de la revolución marxista. En los años '50 Marcuse contestó la pregunta, diciendo que sería una coalición de estudiantes, negros, mujeres feministas y homosexuales —el núcleo de la rebelión estudiantil de los años '60, y los sagrados "grupos víctimas" de la corrección política hoy. Marcuse posteriormente tomó una de las palabras favoritas de la Corrección Política, "tolerancia", y le dio un nuevo sentido. Él definió la "tolerancia liberadora" como la tolerancia por todas las ideas y movimientos que vienen de la Izquierda, e intolerancia para todas las ideas y movimientos que vienen de la Derecha. Cuando usted oye que los marxistas culturales hoy piden "tolerancia", ellos quieren decir la "tolerancia liberadora" de Marcuse (tal como cuando ellos piden "diversidad", ellos quieren decir la uniformidad de creencia en la ideología de ellos).

     La rebelión estudiantil de los años '60, conducida en gran parte por la oposición a la conscripción para la Guerra de Vietnam, dio a Marcuse una oportunidad histórica. Como quizás su "gurú" más famoso, él inyectó el Marxismo Cultural de la Escuela de Frankfurt en la generación de posguerra. Por supuesto, ellos no entendieron de qué se trataba realmente. Como fue verdadero desde el comienzo del Instituto, Marcuse y la poca otra gente que sabía, no anunciaron que la corrección política y el multi-culturalismo eran una forma del marxismo. Pero el efecto fue devastador: una generación entera de estadounidenses, especialmente la élite educada en la universidad, absorbió el marxismo cultural como algo propio, aceptando una ideología venenosa que procuraba destruír la cultura tradicional de EE.UU. y la fe cristiana. Aquella generación, que dirige cada institución de la élite en EE.UU., ahora agita una guerra incesante contra todas las creencias e instituciones tradicionales. Ellos han ganado en gran parte aquella guerra. La mayor parte de la cultura tradicional de EE.UU. está en ruinas.


UNA CONTRA-ESTRATEGIA

     Ahora usted sabe quién robó nuestra cultura. La pregunta es ¿qué vamos a hacer nosotros, como cristianos y como conservadores culturales, al respecto?.

     Podemos elegir entre dos estrategias. La primera es tratar de recapturar las instituciones existentes —las escuelas públicas, las universidades, los medios de comunicación, el mundo del espectáculo y la mayor parte de las Iglesias de línea principal— de los marxistas culturales. Ellos esperan que nosotros tratemos de hacer eso, ellos están listos para ello, y nosotros nos encontraríamos, con una pequeña voz y pocos recursos comparados con los suyos, haciendo un asalto frontal contra posiciones defensivas preparadas. Cualquier soldado puede decirle a lo que aquello casi siempre conduce: a la derrota.

     Hay otra estrategia más prometedora. Podemos separarnos nosotros y nuestras familias de las instituciones que los marxistas culturales controlan y construír nuevas instituciones para nosotros, las instituciones que reflexionan y que nos ayudarán a recuperar nuestra cultura occidental tradicional.

     Hace varios años, mi colega Paul Weyrich escribió una carta abierta al movimiento conservador sugiriendo esta estrategia. Mientras la mayor parte de los otros líderes conservadores (realmente Republicanos) pusieron reparos, su carta resonó poderosamente entre los conservadores de base. Muchos de ellos son ya parte de un movimiento para separarse de la cultura corrupta y dominante y crear instituciones paralelas: el movimiento de la educación escolar en casa (homeschooling). Movimientos similares están comenzando a ofrecer alternativas sanas en otros aspectos de la vida, incluyendo movimientos para promover granjas familiares pequeñas y a menudo orgánicas y desarrollar mercados comunitarios para los productos de aquellas granjas. Si el lema del Brave New World es "Piense globalmente, actúe localmente", el nuestro debería ser "Piense localmente, actúe localmente".

     Así, nuestra estrategia para deshacer lo que el marxismo cultural ha hecho a EE.UU. tiene un cierto paralelo con su propia estrategia, como Gramsci la presentó hace mucho. Gramsci pidió que los marxistas emprendieran una "larga marcha a través de las instituciones". Nuestra contra-estrategia sería una larga marcha para crear nuestras propias instituciones. Aquello no sucederá rápidamente, ni fácilmente. Será el trabajo de generaciones, como lo fue el trabajo de ellos. Ellos fueron pacientes, porque ellos sabían que las "inevitables fuerzas de la Historia" estaban de su lado. ¿Podemos no ser igualmente pacientes, y perseverantes, sabiendo que el Hacedor de la Historia está de nuestro lado?.–






Acerca de Erik Jan Hanussen

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     Publicado primeramente en el vol. 8 Nº 3 de la revista New Dawn, de Mayo de 2014, y en newdawnmagazine.com en Noviembre de 2015, el siguiente texto, que presentamos en castellano, del historiador estadounidense doctor Richard B. Spence, profesor en la Universidad de Idaho, explora de manera no exhaustiva aspectos de un curioso personaje que circuló con alguna fama durante la Alemania de Weimar y los comienzos del Nacionalsocialismo, de quien al parecer se ha hecho más caudal del merecido. El clarividente judío austriaco cuyo seudónimo era Erik Jan Hanussen (1889-1933) ganó la apreciación de Hitler cuando en su propio semanario, el Berliner Wochenschau, predijo en Marzo de 1932 que en el plazo de un año aquél se convertiría en el Canciller del Reich, reuniéndose, se dice, con el futuro Führer varias veces. Sin embargo, Hanussen se trataba de un personaje de la decadencia que prosperó precisamente entre la ruina moral y cultural de la Alemania post-Primera Guerra, como lo revelan sus gustos y costumbres.


ERIK JAN HANUSSEN:
EL PSÍQUICO JUDÍO DE HITLER
por Richard B. Spence
3 de Noviembre de 2015



     Durante la mañana del 7 de Abril de 1933, al Sur de Berlín, unos trabajadores hicieron un descubrimiento espeluznante. Cerca del camino que unía a la capital alemana con la ciudad de Baruth estaba el cuerpo de un hombre acribillado por las balas, vestido con ropa formal. La muerte se había producido, estilo ejecución, por dos tiros en la cabeza. Más allá de eso, era difícil decir algo. El cadáver estaba lleno de gusanos, y los animales habían roído la cara haciéndola prácticamente irreconocible. La investigación del policía de la Kriminalrat de Berlín Hermann Albrecht rápidamente determinó que el difunto era Erik Jan Hanussen, un famoso clarividente de Berlín, astrólogo y figura pública que había estado desaparecido desde hacía dos semanas.

    Las preguntas críticas, por supuesto, eran quién mató a Hanussen y por qué. Parecía que el muerto tenía muchos enemigos. Psíquicos rivales, ex-empleados amargados, amantes abandonadas, maridos cornudos, víctimas chantajeadas y habitantes del hampa, todos tenían motivos para quererlo muerto. Albrecht quizá sabiamente concluyó que el médium había sido "llevado a dar un paseo" por gángsters de Berlín [1]. El caso permaneció sin resolver.

[1] "Seer who Foretold Hitler’s Rise Found Slain", New York Times (9 Abril 1933), p. 12, y "Hellseher-Leiche im Wald – Vor 80 Jahren wurde Erik Jan Hanussen von einem SA-Kommando nahe Zossen erschossen", Maerkische Allgemeine (online), 21 Marzo 2013.

     Como Albrecht seguramente sabía, los verdaderos asesinos de Hanussen eran miembros de la organización nacionalsocialista SA de Berlín. Esto era raro, porque hasta su fallecimiento, Hanussen era un prominente amigo de muchos nacionalsocialistas, para no mencionar que era un miembro del Partido y un miembro honorario de la SA. Él conocía a Adolf Hitler mismo, y sus exactas predicciones a favor de los nacionalsocialistas le habían ganado a Hanussen los apodos de "El Profeta del Tercer Reich", "El Rasputin Nacionalsocialista", "El Nostradamus de Hitler", y otros. Más raro todavía era el hecho de que Hanussen fuera un judío.

     La historia de Hanussen es fascinante, improbable y desconcertante, y ha sido analizada en diversas biografías, quizás más notablemente en Erik JanHanussen: El Clarividente Judío de Hitler(2001) de Mel Gordon, y La Sesión Espiritista Nacionalsocialista: La Extraña Historia del Psíquico Judío en el Círculo de Hitler (The Nazi Séance, 2011) de Arthur J. Magida [2].

[2] Los lectores alemanes deberían consultar también de Wilfried Kugel "Hanussen: Die wahre Geschichte des Hermann Steinschneider" (1998), y los lectores españoles también, de Jesús Palacios, "Erik Jan Hanussen. La Vida y los Tiempos del Mago de Hitler" (2005).

     Este artículo ofrecerá una breve descripción de la carrera de Hanussen, pero enfocará su atención en unas pocas preguntas que ameritan un examen más cercano. Primero, ¿hay alguna pista de los talentos y comportamiento de Hanussen a ser encontrada en sus antecedentes familiares?. ¿Estuvo implicado Hanussen en el espionaje, o tuvo él alguna vinculación con servicios de Inteligencia? Finalmente, ¿cuál era la naturaleza de su relación con el futuro Führer?.


¿Quién Era "Erik Jan Hanussen"?

     Hanussen no era Hanussen en absoluto. Su nombre verdadero era Hershmann (posteriormente Hermann) Chaim Steinschneider. Él nació en Viena en 1889, hijo de Siegfried Steinschneider, un vago y ocioso comediante y vendedor viajero judío. El nacimiento de Herschmann fue registrado en Prossnitz (hoy Prostejov en la República Checa), la ciudad morava que era la casa tradicional de los Steinschneider. La familia y el lugar tienen historias interesantes.

     En el siglo XVIII Prossnitz tenía una próspera comunidad judía que produjo una serie impresionante de rabinos y eruditos talmúdicos. Entre éstos estaban los rabinos Daniel Prossnitz el Joven y su hijo Aaron Daniel Prossnitz, quien adoptó el apellido Steinschneider. Ambos eran vunder-rebbes [líderes hasídicos "maravillosos"] reputados de tener poderes "mágicos y curativos" [3]. Mel Gordon especula que el apellido Steinschneider, que significa "cortador de piedras" o "sastre de piedras", se derivó de la práctica de Aaron Daniel de hacer amuletos con papeles kabalísticos a partir de bloques de piedra esculpidos (Ibid.).

[3] Mel Gordon, Erik Jan Hanussen: Hitler’s Jewish Clairvoyant, Los Angeles, 2001, p. 4.

     Pero no todo era lo que parecía en Prossnitz. La comunidad judía de la ciudad era un semillero de la herejía sabatea, una secta secretista que reverenciaba al "mesías" del siglo XVII Sabbatai Zevi [5]. Los sabateos no sólo consideraban a Zevi como el Mesías, sino que también seguían sus enseñanzas antinómicas que abogaban por la deliberada transgresión de la Ley judía y por una idea de tipo gnóstico de "redención por medio del pecado" [6]. Además, Prossnitz estaba infiltrada por la aún más radical y ocultista secta Frankista, cuyas prácticas incluían rituales orgiásticos [7].

[5] "Prossnitz", en The Jewish Encyclopedia (1906), www.jewishencyclopedia.com/articles/12394-prossnitz
[6] Gershom Scholem, "Redemption Through Sin", The Messianic Idea in Judaism, Nueva York, 1971, pp. 78-141.
[7] Ibid. y Jay Michaelson, "Heretic of the Month: Jacob Frank", en American Jewish Life Magazine (Marzo/Abril 2007).

     En opinión de Gershom Scholem, la influencia sabatea subvirtió completamente la cultura rabínica ortodoxa en Prossnitz (Scholem, p. 141). Un infame proselitista de las creencias sabateas fue Judah Leib (Loebele) Prossnitz, quien afirmaba ser capaz de invocar la Shekinah (la Presencia Divina), un truco que él llevaba a cabo con un sistema de retro-iluminación que hacía aparecer letras mágicas en su pecho [8].

[8] "Prossnitz, Loebele (Prostiz)", The Jewish Encyclopedia (1906), www.jewishencyclopedia.com/articles/12395-prossnitz-lobele-prostiz

     El truco suena muchísimo a algo que Hanussen podría haber intentado dos siglos más tarde. Pero, dado que él nunca vivió en Prossnitz, ¿cuánto pudo él haber sido influído por su cultura sectaria? El rabino Marvin Antelman sostiene que los Steinschneider eran una "familia de sabateos" y señala al tío abuelo de Hanussen, Moritz Steinschneider, como un ejemplo principal [9].

[9] Marvin S. Antelman, To Eliminate the Opiate, vol. 1. Jerusalem, 1974, p. 137.

     Hanussen indudablemente aprendió algo sobre Prossnitz de su padre. Él visitó y asombró a los locales realizando un exorcismo sobre una muchacha de una lechería (Gordon, pp. 40-41). Conscientemente o no, el comportamiento posterior de Hanussen, desde su negación de sus raíces judías a su rechazo de costumbres sexuales y otras, su obsesión con el misticismo, e incluso su asociación con virulentos anti-judíos, todo más o menos se conformaba al molde sabateo-Frankista.

     Un problema fundamental al tratar con el Hanussen de antes de los años '20 es que la mayor parte de lo que se sabe sobre él proviene de una sola fuente, su autobiografía de 1930, Meine Lebenslinie. Llamarla un auto-engrandecimiento sería poco, aunque parezca bastante exacta en cuanto a tiempos y lugares. El autor se mueve alrededor del asunto de los orígenes étnicos, declarando que él nació en Viena (verdad), no en Dinamarca, Sicilia o Tarnopol, esta última una ciudad en gran parte judía en los lejanos límites del viejo Imperio austro-húngaro [10]. Si se le ha de creer, sus poderes psíquicos primero se manifestaron cuando estaba en el vientre materno, cuando él deseó que sus padres solteros se casaran (Ibid.).

[10] Hanussen, Meine Lebenslinie (orig. 1930), edición Kindle, Frankfurt a. M., 2012, location 74.

     Hermann "Harry" Steinschneider siguió los pasos de su padre y pasó su juventud viajando por Europa Central con circos y espectáculos de comedia donde él se codeó con adivinos, hombres fuertes, hipnotizadores, magos y curanderos. Él aprendió muchos de sus trucos, inventó unos cuantos propios, y armó un acto de escenario basado en telepatía e hipnotismo. Él también se aventuró en el periodismo. En los años previos a la Primera Guerra Mundial, él trabajó para un célebre pasquín sensacionalista vienés, Der Blitz, el cual ganaba la mayor parte de sus ingresos tomando dinero por mantener historias fuera de sus páginas [11]. Steinschneider aplicaría bien esta lección en su posterior carrera.

[11] Markus Kompa (con Wilfried Kugel), "Erik Jan Hanussen – Hokus-Pokus-Tausendsassa", Telepolis Magazin, www.heise.de/tp/artikel/27/27562/1.html

     Durante la guerra, Harry sirvió en el Ejército austro-húngaro donde sus evidentes talentos como un adivinador de pensamientos y zahorí lo sacaron de las trincheras y lo llevaron a un cómodo servicio en la retaguardia. Él incluso organizó una sesión de espiritismo o dos. Si ésta fue una prueba de una genuina capacidad extrasensorial o sólo un astuto engaño, como siempre, es un asunto de opinión.

     Steinschneider hizo uso de varios alias, entre ellos Siegfried Krakauer y Saul Absolom Herschwitter, que todavía llevaba un fuerte indicio de ascendencia judía (Hanussen, Ibid.). Alrededor de 1919, él finalmente se quedó con el nombre Erik Jan Hanussen, afirmando ser un danés de ascendencia noble cuyos poderes telepáticos lo llevaron a convertirse en un artista de espectáculos, un investigador psíquico y un estudiante de lo oculto. No había, por supuesto, nada danés en él, y nadie parece haber tomado el papel demasiado seriamente, y menos que nadie Hanussen. En una visita en 1919 a Praga, él abiertamente se jactó de su herencia "checo-judía" (Gordon, p. 77). Hanussen era lo que las circunstancias mejor sugerían que él debía ser.

     En la Viena de posguerra, él ganó notoriedad como un mentalista e hipnotizador de escenario. Él incluso intentó suerte como estrella de cine en la película de bajo presupuesto Hypnose, en la que personificaba a un detective clarividente que luchaba contra los malvados planes de un swamimanipulador. Él ganó más atención, y dinero, jugando al detective psíquico en la vida real. Su caso más famoso involucraba misteriosos robos en la oficina de imprenta del Banco Estatal austriaco. Los billetes recién impresos estaban desapareciendo y las autoridades estaban confundidas para explicar cómo. Hanussen solucionó el caso por simple deducción de que el crimen tenía que ser un trabajo interno. Él correctamente revisó a los culpables, lo que condujo a la recuperación de la mayor parte de los billetes robados (Hanussen, loc. 2359-2434).

     Sus logros en la resolución de delitos, sin embargo, le ganaron la enemistadde la Polizeidirektionde Viena, la cual sospechaba de él, no sin razón, o que organizaba delitos que él simulaba solucionar o de ser receptor de información privilegiada. Pero Hanussen encontró al menos un defensor entre la policía. El doctor Leopold Thoma era un psicoanalista, un investigador de lo paranormal, y jefedel Psychologische Abteilung [departamento psicológico] de la policía vienesa. En 1921 él formó su propio Institut für Kriminal Telepatische Forschung (Investigación Telepática Criminal). Los caminos de él y los de Hanussen se cruzarían otra vez unos años más tarde.

     Cuando las autoridades vienesas tomaron medidas enérgicas contra la exhibición de hipnotismo, Hanussen buscó pastos más verdes. Con el magnate austriaco del tabaco Hans Hauser, Hanussen se convirtió en parte de un esquema para vender equipo militar sobrante a los griegos, que en ese entonces estaban involucrados en una violenta guerra contra la naciente república turca. El asunto hedía a intriga internacional, aunque el trabajo de Hanussen, supuestamente, consistía en usar su poder hipnótico como una ventaja agregada en las negociaciones (Hanussen, loc. 2447-2482).

     Puede ser significativo que en el comercio balcánico de tabaco, Hauser casi ciertamente trató con la Tobacco Company Ltd., una firma británica que también resultó "proporcionar un disfraz en Europa para agentes del S.I.S [MI6] y ex-empleados del servicio secreto"[12]. Además, los británicos apoyaban a los griegos, mientras los franceses, los italianos y los soviéticos silenciosamente suministraban armas a los turcos. Hanussen recordó que a él y a un compañero se les rechazó el ingreso en la isla de Rodas, controlada por los italianos, por sospechar que ellos eran espías griegos (Hanussen, loc. 2977). Sus posteriores andanzas por el Levante y África del Norte añadieron mucho a su conocimiento del misticismo del Este, pero también proporcionaron una amplia oportunidad para espiar. Él afirmó haber ayudado a la policía egipcia a combatir un círculo de contrabandistas de hachís, aunque uno tiene que preguntarse si no era Hanussen el que estaba haciendo el contrabando (Kugel, p. 60).

[12] Robin Lockhart, Reilly: Ace of Spies, Nueva York, 1984, p. 136 nota.

     En 1924 Hanussen cruzó el Atlántico para un viaje por Estados Unidos, pero encontró audiencias yanquis en gran parte indiferentes a su acto. En Europa, sin embargo, sobre todo en Alemania, Hanussen se convirtió en una gran atracción, y hacia 1928 se publicitó como "El Mago de la Época", y amplió su repertorio para incluír quiromancia, grafología y astrología (Kompa, Ibid.). Lo que le daba de comer, sin embargo, seguía siendo la lectura de la mente. Comúnmente, los miembros de su audiencia entregaban preguntas escritas a un ayudante, y el asombroso Hanussen adivinaba la pregunta y la respuesta mediante sus poderes mentales, más un código secreto entre él y su ayudante. Él siguió siendo consultado en casos criminales, entre ellos el del "Vampiro de Düsseldorf", un asesino en serie que aterrorizó a la ciudad durante 1929-1930. Él también ofreció lecturas privadas a clientes ricos, y supuestamente se convirtió en un "consejero de la realeza europea" (New York Times, Ibid.).


     La fama, sin embargo, le atrajo oposición. En 1928 un fiscal en la ciudad checoslovaca de Leitmeritz acusó a Hanussen de fraude y latrocinio, basando su caso en el hecho de que la clarividencia no existía. En un proceso largo y público Hanussen consiguió la absolución al demostrar con éxito sus "poderes" al juez, o falsificándolos tan bien que nadie pudo sorprenderlo [13].

[13] "Clairvoyant Proves Power in Czech Court", New York Times, 29 Mayo 1930, p. 8.


Berlín y el Ascenso de Hanussen al Poder

     Hacia 1930 Hanussen puso su tienda de campaña más o menos permanentemente en Berlín, donde él se convirtió en una celebridad de primer orden y un símbolo del hedonismo decadente de la agonizante República de Weimar. Su habilidad para ganar tal reconocimiento es tanto más notable dada la competencia que enfrentaba. La capital alemana era el hogar de miles de videntes, hipnotizadores, curanderos y místicos de una variedad u otra (Gordon, p. 181). Sus extravagantes presentaciones en La Scala y otros teatros fueron presenciadas por gente como Marlene Dietrich, Sigmund Freud, Peter Lorre, Fritz Lang y Hermann Goering. Hanussen adquirió automóviles de fantasía, un yate y un aeroplano, así como un pequeño Imperio de publicación de libros, revistas y periódicos, que infatigablemente lo promovían a él, sus productos y sus predicciones.

     Su riqueza fue aumentada por medio del chantaje (que se remontaba hasta sus días en el Blitz) y venta de influencias. Etiquetado por Mel Gordon como el "Magister Ludi del Sexo", Hanussen albergó, y filmó en secreto, sesiones de espiritismo privadas que atraían a una mezcla embriagadora de políticos, aristócratas, estrellas de cine e industriales [14]. Los eventos agasajaban a todas las preferencias sexuales, y algunos invitados terminaban en posiciones comprometedoras por las que ellos estaban dispuestos a pagar para que permanecieran en silencio (Kompa, Ibid.). Él también extendía préstamos privados a "amigos especiales", entre ellos nacionalsocialistas prominentes como Wolf Heinrich conde de Helldorf, jefe de la organización SA en Berlín, un libertino, jugador degenerado y reputado conocedor de las "artes negras" [15].

[14] Mel Gordon, Voluptuous Panic: The Erotic World of Weimar Berlin, Los Angeles, 2008, p. 216.
[15] Gordon, Hanussen, p. 213, y Kompa, Ibid.

     Cualesquiera fuesen sus habilidades ocultistas, Hanussen era un personaje astuto, inescrupuloso y corrupto que se insinuaba en la confianza de gente importante en Alemania y otras partes. Él claramente tenía un talento, de una u otra forma, para obtener información secreta. Su dinero como un informante sólo aumentó cuando él consiguió tener acceso a Hitler. Todo esto hizo del falso danés un activo que cualquier agencia de Inteligencia habría estado ansiosa por explotar.


     Curiosamente, otro ocultista que estaba haciendo de Berlín su hogar durante 1930-1932 era el conocido Aleister Crowley. Crowley tenía una larga conexión con la Inteligencia británica, y parte de su propósito en Alemania era vigilar e informar sobre ciertos individuos [16]. Dada la prominencia de Hanussen y su proclamada habilidad en hipnotismo y sexo tántrico, no hay ningún modo de que la Gran Bestia [Crowley] no hubiera hecho caso de él. Extrañamente, no hay ninguna mención observable en los diarios de Crowley acerca de Hanussen o algo referido a él [17].

[16] Richard B. Spence, Secret Agent 666: Aleister Crowley, British Intelligence and the Occult, Los Angeles, 2008, pp. 210-213
[17] Mis agradecimientos a William Breeze y a los archivos de la OTO [Ordo Templis Orientis] por esta información.

     Sin embargo, ellos no estuvieron sin vinculaciones indirectas. Hacia 1930, el ya mencionado doctor Leopold Thoma había reaparecido en la vida de Hanussen y se había convertido en uno de sus colaboradores más cercanos. Thoma estaba bien relacionado con su colega psicoanalista austriaco Alfred Adler, un hombre de quien Crowley afirmó conocer personalmente y trabajar con él en Berlín (Spence, pp. 214-215). Además, Thoma llegó a ser amigo del doctor Alexander Cannon, otro psiquiatra, investigador de lo paranormal y amigo de Crowley que cruzó caminos con Hanussen [18].

[18] Gordon, Hanussen, p. 252. Después de que los nacionalsocialistas llegaron al poder, Cannon (y quizá Crowley) ayudaron a Thoma a emigrar a Gran Bretaña.

     Cannon, a veces llamado "el yogui de Yorkshire" o "el líder de la magia negra en Inglaterra", enfrentaría más tarde acusaciones de ser un simpatizante nacionalsocialista y un espía alemán [19]. Por último, pero no lo menor, el falso danés era un confidente de Hanns Heinz Ewers, un escritor y ocultista alemán que era entonces un ferviente nacionalsocialista con acceso a Hitler, además de un viejo socio de Crowley [20]. Así, este último tenía varios canales por los cuales él podría haber recogido información de o sobre Hanussen.

[19] "Edward VIII’s Links to a Mystic", BBC News (6 Dic. 2008). http://news.bbc.co.uk/2/hi/uk_news/7767919.stm.
[20] Werner Gerson (Pierre Mariel), "Mage ou Espion?", en Le Nazisme: Société Secrète, París, 1972, http://humanisme.canalblog.com/archives/2010/08/22/18871564.html y Gordon, Hanussen, p. 195. Como la mayoría de los asociados nacionalsocialistas de Hanussen, Ewers posteriormente fue excluído del Partido.

     La conexión Crowley-Hanussen puede estar en la raíz de la aseveración posterior de René Guénon de que la Bestia [Crowley] se infiltró en el círculo de Hitler y se convirtió en un "consejero secreto" del líder nacionalsocialista [21]. No hay ninguna indicación de que Crowley estuviera en ninguna parte cerca del futuro Führer, pero Hanussen ciertamente sí.

[21] Guénon a Marcelo Motta, 1949, citado en Giorgio Galli, Hitler e il Nazismo Magico, Milan, 1989, p. 129.

     Existe también la posibilidad de que Thoma estuviera trabajando para la Inteligencia austriaca. La Polizeidirektionde Viena, con la cual él permaneció relacionado, estuvo implicada en actividades de Inteligencia y de contraespionaje [22]. Averiguar lo que había en la mente del hijo nativo (de Austria) Adolf Hitler habría sido una alta prioridad. Hanussen, nuevamente, podría haber sido una fuente muy valiosa de información.

[22] Mario Muigg, "Geheim-und-Nachrichten-Dienste in und aus Oesterriech, 1918-1938", SIAK-Journal, Nº 3 (2007), pp. 64-72.

     En 1933 Pierre Mariel, un escritor con lazos con la Inteligencia francesa, escribió (como "Teddy Legrand") un curioso libro, Les Sept Tetes du Dragon Vert (Las Siete Cabezas del Dragón Verde). Allí se afirmaba revelar las maquinaciones de una conspiración internacional que, entre otras cosas, estuvo detrás del ascenso de Hitler al poder. Hanussen aparece escasamente velado como "el hombre con los guantes verdes", un agente de la conspiración [23]. Años más tarde, en un libro sobre el ocultismo nacionalsocialista, Mariel, escribiendo como "Werner Gerson", afirmó que "Hanussen era un espía para Gran Bretaña", basado en la supuesta admisión del ex-agente británico John Goldsmith (Gerson, Ibid.). Si no hubo ninguna agencia de espionaje explotando a Hanussen, ciertamente debería haberla habido.

[23] Richard B. Spence, "Behold the Green Dragon: The Myth and Reality of an Asian Secret Society", New Dawn 112 (Ene-Feb 2009), p. 69.


Hanussen y Hitler

     Exactamente cuándo y cómo Hanussen se reunió con Hitler es un asunto de incertidumbre y debate. El escritor Juri Lina afirma, improbablemente, que su asociación comenzó en 1920 [24]. Gordon sostiene que ambos se encontraron, por intermedio del conde de Helldorf, a finales de Junio o a principios de Julio de 1932. Palacios piensa que el intermediario puede haber sido Ewers y que la reunión ocurrió hacia el final de 1932, mientras Magida se pregunta si los dos alguna vez se encontraron en absoluto [25].

[24] Juri Lina, Architects of Deception, Stockholm, 2004, p. 422. En castellano en http://es.scribd.com/doc/217187946/Arquitectos-del-engano-Juri-Lina#scribd
[25] Arthur J. Magida, The Nazi Séance: The Strange Story of the Jewish Psychic in Hitler’s Circle, Nueva York, 2011, pp. 169-170.

     En 1943 (el falsario judío) Walter Langer compiló un "Perfil Psicológico" de Hitler para la OSS estadounidense. Una de sus fuentes fue el nacionalsocialista disidente Otto Strasser, él mismo un antiguo admirador de Hanussen, quien relató que "durante principios de los años '20 Hitler tomó lecciones regulares de oratoria y de psicología de masas de un hombre llamado Hamissen [sic] quien era también un astrólogo practicante y adivino" [26]. En su propio escrito, Strasser simplemente pone la reunión en el "período de la posguerra" y describe a Hanussen como "un súper-clarividente"que actuaba como el "médium" de Hitler [27]. En el World Diary, el periodista estadounidense contemporáneo Quincy Howe identifica 1930 como el año en el cual Hitler "constantemente consultó a un hipnotizador judío que había cambiado su nombre de Steinschneider a Hanussen"[28].

[26] Walter C. Langer, A Psychological Profile of Adolf Hitler: His Life and Legend, Washington, DC, Office of Strategic Services, 1943, 9. www.nizkor.org/hweb/people/h/hitler-adolf/oss-papers/text/profile-index.html
[27] Otto Strasser, Hitler and I, Londres, 1940, p. 37.
[28] Quincy Howe, World Diary, 1929-1934, Nueva York, 1934, p. 54.

    Hacia 1932, sin embargo, lo que Hitler quería del médiumno eran lecciones de declamación sino atisbos del futuro. Tan temprano como en 1930, Hanussen había predicho que Alemania recibiría a un dictador de tipo radical y socialista, aunque sus publicaciones satirizaban a políticos, incluyendo a Hitler. Eso cambió a principios de 1932. Hitler estaba postulando para Presidente contra el actual, Paul von Hindenburg. Hanussen predijo que Hindenburg ganaría (él lo hizo) pero que Hitler se convertiría en el Canciller dentro de un año. Desde ahí en adelante, Hanussen y sus publicaciones tomaron una postura decididamente pro-nacionalsocialista.

     Sin embargo, el incidente que más pudo haber atraído la atención de Hitler, tal como llamó la de otros, no tuvo nada que ver con la política. En Mayo de 1932 se congregaron competidores en Berlín para el Gran Premio AVUS [Automobil-Verkehrs- und Übungs-Straße]. Uno de ellos era el joven noble checo Georg Christian von Lobkowicz. Unos días antes de la carrera, Hanussen predijo que Lobkowicz sufriría un feroz accidente. Unos cuantos minutos después de comenzado el evento, su automóvil Mercedes se estrelló, matándolo al instante [29].

[29] "Motor Race Tragedy", Singapore Free Press and Mercantile Advertiser, 24 Mayo 1932, p. 9.

     La investigación mostró que la tragedia fue el resultado de una falla mecánica anormal. Incluso los escépticos más obstinados de Hanussen se vieron apremiados para explicar cómo él podría haber fabricado aquello. Los enemigos no llegaron a sugerir que el psíquico hubiera confabulado para sabotear el automóvil de Lobkowicz, probablemente coludido con los otros competidores. El joven checo también había fantaseado con una mujer que Hanussen deseaba, de modo que los celos eran otro motivo posible. Para la mayoría, sin embargo, el accidente era la prueba positiva de que el "danés" realmente era un vidente. Arthur Magida se pregunta si a lo largo de los años de disciplina mental, Hanussen realmente había desarrollado alguna capacidad psíquica (Magida, p. 138).

     Una reunión con Hitler siguió poco después, y Hanussen aseguró a un nervioso Hitler que él no tenía que preocuparse de las próximas elecciones. Bastante seguros, los nacionalsocialistas marcaron un éxito enorme en la votación de Julio, duplicando sus asientos para convertirse en el partido más grande en el Reichstag. Durante el día de Año Nuevo de 1933, Hanussen hizo un horóscopo y declaró que Hitler sería el Canciller antes del final de mes. Eso, también, llegó a suceder.


El Palacio del Ocultismo y el Incendio del Reichstag

     Hanussen parecía en la cúspide de su poder. Él no sólo se asociaba con nacionalsocialistas sino que era uno de ellos. Incluso su secretario de confianza, Ismet Dzino, era un hombre del Partido y de la SA. Además de ser el adivino favorecido del nuevo régimen, él estaba a punto de abrir su opulento Palacio del Ocultismo. La élite de la capital clamó por invitaciones. Pero habían problemas aguardando. Su inclinación hacia los nacionalsocialistas le ganó a Hanussen la enemistad de la prensa comunista, que había publicado la prueba de su ascendencia judía. Hanussen hizo todo lo posible para ignorar el asunto, y sus amigos nacionalsocialistas, como Helldorf, permanecieron invariables, por el momento de todos modos.


     El Palacio del Ocultismo abrió sus puertas durante la tarde del 26 de Febrero. En una sesión de espiritismo semi-privada, uno de los médiums de Hanussen, una ex-actriz, Maria Paudler, tuvo una visión profética. En un trance, ella afirmó ver un "gran edificio" incendiándose [30]. La prensa atribuyó la predicción a Hanussen mismo. Menos de 20 horas más tarde, el Reichstag estaba en llamas. Los nacionalsocialistas culparon del incendio a un complot comunista y contestaron por medio de poderes extraordinarios que dieron a Hitler el control dictatorial.

[30] Geoffrey Ashe, Encyclopedia of Prophecy, Santa Barbara, 2001, p. 99.

     La policía de Berlín detuvo a Marinus van der Lubbe, un holandés con vinculaciones comunistas y una historia de incendios provocados. La presunción general es que los nacionalsocialistas estuvieron detrás del incendio y que usaron a Van der Lubbe como un chivo expiatorio. Kugel sugiere que el titiritero hipnotista que controlaba al holandés era Hanussen (Kugel, pp. 231-234). Gerson/Mariel sugiere otra posibilidad: que el psíquico instigara el incendio por orden de alguien que quería desacreditar a Hitler. De ser así, el complot produjo malamente el efecto contrario (Gerson, Ibid.).

     A mediados de Marzo, la mayor parte de los amigos nacionalsocialistas de Hanussen, incluído Helldorf, se encontraron expulsados o reasignados. El 24 de Marzo, una unidad de la SA llevó al psíquico al cuartel central de la Gestapo para un interrogatorio. Ellos lo soltaron, pero la tarde siguiente tres hombres lo arrebataron de la calle, y él nunca fue visto vivo otra vez.

     La conjetura más fácil es que los nacionalsocialistas mataron a Hanussen porque ellos descubrieron que él era un judío, pero aquello realmente no tiene sentido. La evidencia de sus orígenes hebraicos había estado disponible durante meses, y sus camaradas de Partido no lo habían rechazado. No había ninguna razón apremiante para que ellos hicieran eso ahora. Otra teoría, la de que Helldorf y otros lo asesinaron para escapar de sus deudas, ignora el hecho de que ellos hubieran estado matando a la gallina de los huevos de oro. No hay ninguna indicación de que Hanussen hubiera hecho alguna tentativa de recolectar sus deudas o de que él no hubiera estado dispuesto a prestar más.

     El fallecimiento de Hanussen está casi ciertamente vinculado al incendio del Reichstag, pero podría haber más al respecto. La mayor parte de los contactos nacionalsocialistas de Hanussen estaban vinculados a la SA, y la mayor parte de ellos a Ernst Roehm, el único rival serio restante de Hitler. Casi un año más tarde, Hitler y la SS matarían a Roehm y a docenas de líderes más de la SA durante la así llamada Noche de los Cuchillos Largos. Varios, incluso Roehm, eran ex-socios de Hanussen. Helldorf se escapó, pero participó en intrigas anti-Hitler y murió por su parte en el fallido intento de asesinato de 1944 contra el Führer. Por contraste, los tres hombres SAidentificados más tarde como los asesinos de Hanussen todos sobrevivieron para perecer en la Segunda Guerra Mundial, y uno de ellos, Rudolf Steinle, llegó a convertirse en un oficial de la Gestapo y de la SS. Hanussen, por lo tanto, puede haber sido una temprana baja de intrigas entre nacionalsocialistas.

     Un interesante epílogo de la historia involucra al secretario de Hanussen, Ismet Dzino. Diversamente descrito como un bosnio, un turco o un libanés, él se casó con una joven inglesa, Grace Cameron, contra el consejo de su maestro. Hanussen le advirtió que si ellos se casaban, ella moriría y Dzino se convertiría en un asesino y un suicida (Gordon, Hanussen, p. 254).

     La Gestapodetuvo a Dzino inmediatamente después de la muerte de Hanussen, pero Grace, usando sus contactos en la embajada británica, aseguró la liberación de él. Según un informe en un periódico suizo, ellos más tarde aparecieron en Londres donde Dzino le dijo a amigos suyos que la Gestapo andaba detrás de él porque él poseía "importantes documentos acerca de la amistad de su maestro con ciertos líderes nacionalsocialistas". Los documentos permanecieron en Londres, pero Dzino y su esposa establecieron su residencia en Viena. ¿Tenían Dzino o su esposa vínculos con la Inteligencia británica?. ¿Quién se hizo cargo de los documentos?. ¿Jugaron Crowley o Cannon alguna parte en esto?.

     En Austria, Dzino pasó por un período de dificultad y se ganó la vida como un croupier de casino. Él llegó a ser poseído por los celos, lo que llevó a Grace a huír. En Septiembre de 1937 él le habló en un reencuentro, donde le disparó a ella y al hijo de ambos, de cuatro años, y luego apuntó el arma contra sí mismo. La predicción de Hanussen se había cumplido [31].

[31] "Après avoir tue sa femme et sa fils, l’ancien secretarie du mage Hanussen se suicide a Vienne", L’Impartiale, 29 Sept. 1937, p. 3.

     Corrió el inevitable rumor de que el cadáver no era Hanussen, que el estafador evitó a sus enemigos cambiando nuevamente de forma y desapareciendo. Ésa es otra posibilidad, dudosa pero intrigante.–





Las Revoluciones Fabricadas por los Rothschild

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     Hace cuatro días fueron publicadas (veteranstoday.com) las siguientes reflexiones del ex-oficial paracaidista del ejército y ex-productor televisivo el estadounidense Jack Speer Williams, que presentamos aquí en castellano. El señor Williams se centra inicialmente en la demencial y masónica Revolución francesa, desencadenada por ciertas sociedades secretas cuyo fin es destruír para reinar, para terminar enfocándose en la realidad de Estados Unidos, que, como siempre, resulta un paradigma para muchas otras sociedades, sobre todo occidentales, enfatizando siempre en la manipulación psicológica de las masas, tanto de entonces como de ahora, pasando también por la Revolución soviética.


¡Conozca a Madame Guillotina!
por Jack Speer Williams
31 de Diciembre de 2015



     Con la atronadora caída de la hoja de la guillotina, una cabeza es violentamente arrancada de un par de hombros. La sangre borbotea en un torrente instantáneo, y un ser humano menos habita nuestro mundo material.

     Madame Guillotina reclamó las vidas de miles de ciudadanos inocentes que no eran culpables de nada salvo de estar en el lugar incorrecto en el momento equivocado.

     ¿Fue ése el trabajo de musulmanes radicales que degollaban a inocentes cristianos?No. Fueron cristianos que degollaban a cristianos. Eran franceses degollando a franceses. Ésa fue Francia entre 1789 y 1799: ¡La Revolución francesa!.

     La Revolución francesa, como las Revoluciones rusa y española que seguirían, fueron todas astuta y secretamente provocadas por los príncipes y los agentes del clan Rothschild, su cártel bancario, y la furtiva red Illuminati. Todos ellos eran y son de la Sinagoga de Satán, aquellos que no contaminan simplemente lo que ellos tocan sino que lo envenenan hasta la muerte.

     Y esta tribu cohesiva de psicópatas ha controlado la narrativa entera de las causas y los acontecimientos ocultos de aquellas terribles revoluciones desde entonces. Escuchemos un poco de aquella duradera y eficaz propaganda acerca de la Revolución francesa:

     Si usted era un campesino, usted se deslomaba trabajando como un esclavo para que su noble patrón pudiera llevar puesta ropa espléndida y bailar en brillantes fiestas de palacio. Sin embargo, después de trabajar y pagar sus impuestos, usted no tenía suficiente para alimentar a su familia.
     Si usted era un trabajador de la ciudad, usted probablemente estaba sin trabajo. Si usted era un carpintero, un tejedor, un conductor de carros, sus gastos eran demasiado altos para que obtuviera alguna ganancia. Si usted era un panadero, usted no tenía harina para el pan. Si usted tenía hambre, usted no tenía pan.
     Entonces vino la revolución.

     Estas palabras eran bastante verdaderas, pero éste era un caso de la verdad siendo usada para una razón innoble.

     Para la gente de Francia, el pan era la esencia de la vida misma. Cada ciudadano de las masas comunes de Francia comía un promedio de 1 kilo de pan al día. Pero sin pan, el hambre se apoderaba de Francia. Y pronto aquella hambre se convirtió en rabia.


     No había nadie allí para decirle a la gente de Francia que su hambre, y la rabia resultante, no provenía de su rey, Luis XVI, ni de su nobleza o de sus clérigos, sino de los agentes encubiertos de los Rothschild, que son adherentes demoníacos de los Illuminati y de la masónica logia del Gran Oriente.

     Fueron esos demonios los que compraron en grandes cantidades todo el grano disponible y luego vendieron la mayor parte de ello en el extranjero (o en secreto escondieron el grano de la gente francesa y su gobierno).

     Al borde de la bancarrota, el gobierno francés no estaba en posición, de ninguna manera, de aliviar el hambre y la ira de sus ciudadanos. De nuevo, la tribu Rothschild era la responsable, con su financiación, basada en la alta usura, de la Guerra de los Siete Años [1756-1763] de Francia y las contribuciones francesas a Estados Unidos en su lucha por la independencia.

     Sí, el gobierno francés estaba quebrado, como lo está el gobierno estadounidense hoy. La diferencia era y es que la camarilla de banqueros controlados por los hermanos Rothschild y sus banqueros internacionales rechazó rotundamente prestar más dinero a Francia, mientras que hoy ellos todavía están prestando su dinero ilegal a EE.UU. a fin de financiar sus guerras ilegales en el Oriente Medio.

     Gracias a los detestables Rothschild y sus socios de la Sinagoga de Satán, la economía francesa de 1789 estaba en un caos terrible. Si usted tiene problemas para ver una correlación entre el EE.UU. de hoy y la Francia del pasado, por favor siga leyendo.

     Todas estas complicaciones financieras estaban mucho más allá de cualquier cosa que la masa francesa de campesinos tuviera la capacidad de entender. Ellos tenían hambre y ellos estaban enojados. Y había Rothschild y agentes Illuminati en Francia diciéndoles quiénes eran los culpables.

     Primero, era el rey, Luis XVI.
     En segundo lugar, era el Primer Estadode Francia, el clero.
     En tercer lugar, era el Segundo Estadode Francia, la nobleza.

     Las únicas víctimas eran el Tercer Estado de Francia, las masas comunes y no informadas.

     A través de todo París, y sus medios informativos de boletines y periódicos, había agentes de la tribu Rothschild que eran rabiosos partidarios de la muerte y la revolución. Ellos fustigaban a los ignorantes de Francia hasta provocarles un frenesí.

     Escuchemos más de lo que estos rabiosos revolucionarios de los medios decían a la colectiva mente de colmena de la Francia antes de su revolución:

     Mientras usted pasa hambre, los nobles cazan en las tierras que usted está obligado a cultivar para ellos, pero en la cual a usted no se le permite cazar.
     Mientras usted y sus hijos pasan hambre, la nobleza come en grandes banquetes y bebe vino en fiestas fabulosas en Versalles.
     La comida y la bebida de sólo una de esas fiestas podrían alimentar a la hambrienta ciudad de París durante un mes.
     Mientras usted está obligado a vestirse con harapos, los nobles y sus damas gastan enormes cantidades de dinero en ropa y joyería. Ellos son solamente figurines. Derríbelos.

     Si bien el sistema feudal de Francia tenía mucha responsabilidad, uno no tenía que ser erudito para saber que cualquier solución al problema francés promovido por los Rothschild y sus adláteressólo podía terminar en un desastre mucho peor.

     Levantado en la Edad Media, había un imponente edificio fortificado en París. Era La Bastilla, una fortaleza. Los agentes Illuminati dijeron a las masas que La Bastilla alojaba a cientos, quizás miles, de prisioneros políticos, gente tal como ellos mismos.

     El 14 de Julio de 1789 una enorme y furiosa muchedumbre asaltó La Bastilla. Ellos asesinaron a sus seis guardias y al gobernador. Entonces ellos pusieron en libertad a todos los SIETE prisioneros de La Bastilla.

     Pero La Bastilla era un símbolo tan odiado de la depresión de Francia, que la gente, a mano, desmanteló el viejo edificio, ladrillo por ladrillo.

     A tres kilómetros de distancia, en el palacio de Versalles, el rey de Francia fue despertado de un profundo sueño por uno de sus ministros.

—"Majestad, la muchedumbre parisiense ha tomado La Bastilla".

—"Por qué... por qué. Esto es... ah... una rebelión", masculló el sorprendido rey.

—"No, majestad. Esto es una revolución".

     La red bancaria de los Rothschild, maestros en la creación de pobreza, sufrimiento y muerte, estaban en ello otra vez. Ellos consiguieron su Revolución francesa, y la muerte de las mejores, más cultas y patrióticas personas de Francia.

    La mente colectiva de las masas francesas fue entonces dirigida para asesinar amplia e indiscriminadamente a través de todo París y toda Francia por gente de los principales agentes Illuminati, Maximilien Robespierre, Jean-Paul Marat y Georges Danton.

    El 4 de Agosto de 1789 el rey, los clérigos y la nobleza fueron lo suficientemente sabios para proponer cambios fundamentales y vitales del tejido social y político de Francia.En una reunión especial de noche de la Asamblea Nacional francesa, un noble habló:"Nosotros los de la nobleza debemos reconocer la justicia de las reclamaciones de la gente. Haremos enmiendas. ¡Para siempre renunciamos a nuestros derechos de caza, a nuestras asignaciones señoriales, a nuestros privilegios!. ¡A la servidumbre!".

     Entonces un clérigo habló:"La Iglesia ya no puede cobrar de cada campesino más de un décimo de lo que su tierra produce. ¡La Iglesia renuncia a tales diezmos suplementarios ahora!".

     Otro noble patriótico habló y fue seguido con aplausos generales:"Todos los privilegios especiales de la Iglesia y la nobleza se dan por finalizados. El feudalismo es, por este medio, abolido".

     Tres semanas más tarde, el 26 de Agosto de 1789, la Asamblea Nacional publicó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano. Estaba basada en la estadounidense Declaración de la Independencia y la británica Declaración de Derechos. Ella decía:

     «Los hombres nacen y permanecen libres e iguales, con derechos naturales, inalienables y sagrados. Estos derechos son la libertad, la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión».

     Ella garantizaba:«Libertad de expresión, de prensa y de religión».También decía:«Nadie puede ser detenido o castigado excepto por el proceso de la ley».Además decía:«La ley debe aplicarse por igual sobre todas las personas. La ley es la expresión de la voluntad general, a ser hecha por todos los ciudadanos o sus representantes».

     Esta maravillosa declaración fue impresa en miles de libros y folletos. Fue leída en voz alta en sitios públicos, y colgada en las paredes. Pronto se convirtió en la guía de todos quienes eran racionales. Fue traducida a otros idiomas, llevando su mensaje de libertad a toda Europa y el mundo.

     Legalmente, la nación de Francia se había convertido en lo que es quizá la mejor de todas las formas de gobierno, una Monarquía Constitucional, con un rey benigno en ella. Con pocos de los cuidados del Estado, Luis XVI se retiró a su afición favorita, la de la fabricación de cerraduras.


     La Revolución había sido ganada por el pueblo en menos de dos meses con poco o ningún sufrimiento, matanza o muerte.Monsieur Rothschild debe haber estado furioso con este cambio en los acontecimientos. La libertad, la prosperidad, la paz y la seguridad para las masas no eran su juego. Él y sus compañeros Iluministas no se preocuparon ni un ápice por ningún proletariado de origen humilde. El maleducado obrero común debía ser usado para derribar gobiernos y eliminar religiones, y luego desechado.

     Para los ciudadanos de Francia, los Iluministas querían el sufrimiento, el caos, la destrucción y la muerte, como es corriente en el Oriente Medio hoy. Y ellos lo consiguieron.

     Inmediatamente Francia estuvo llena de propaganda anticonformista, toda destinada a radicalizar a las masas francesas, y toda difundida por aproximadamente veinte fanáticos Illuminati conocidos como los Jacobinos, los neoconservadoresde la época.Incapaz de pensamiento crítico, la mente de colmena de los franceses ignorantes compró las mentiras y distorsiones de los Jacobinos. Francia fue convertida en un manicomio durante una década, a pesar de la nueva Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de la nación.

     Rápidamente el rey y su joven esposa, Marie Antoinette, y sus hijos, se convirtieron en prisioneros virtuales en las Tullerías, el palacio Real parisino que estaba en la orilla derecha del río Sena.El 10 de Agosto de 1792 una gran muchedumbre de revolucionarios atacó las Tullerías.Esperándolos, había 800 guardias suizos y 1.200 nobles con los cañones cargados.Pero el rey Luis XVI, a quien la máquina de propaganda de los Rothschild había vilipendiado durante tanto tiempo ante las masas francesas, rechazó dar la orden a las tropas para disparar sobre su pueblo.En vez de eso, él propuso hablar con ellos.

     Al rey no se le dio ninguna posibilidad para hablar ya que la muchedumbre cayó sobre sus guardias inactivos, matando a la mayor parte de ellos. El rey y su familia fueron tomados como prisioneros reales, no virtuales.

     Hay una bajeza animal en muchos hombres de cada clase, raza y nación. Es esta carencia de carácter moral —esta carencia de generosa nobleza— a lo que le da forma la propaganda que conduce a la gente a la guerra y a la revolución y que justifica la crueldad del hombre contra el hombre.

     El rey Luis XVI no era un hombre malo, pero él era un ingenuo. Su inocente carencia de astucia no era competencia para la astucia inhumana y satánica de los supremos Rothschild de aquel entonces.El lunes 21 de Enero de 1793 el rey Luis XVI con valentía encontró su destino con la Amante de la Muerte, Madame Guillotina.En Octubre del mismo año, Marie Antoinette también fue decapitada.

     Sin una corte Real, las muchedumbres parisienses se volvieron cada vez más enajenadas. Ellos incluso irrumpieron en varias prisiones y mataron a aquellos que apoyaban la Declaración de los Derechos de los Hombres y de los Ciudadanos del gobierno. Muchas de aquellas víctimas inocentes fueron dolorosamente degolladas con cuchillos, y sus cabezas fueron puestas en mástiles para ser orgullosa y jactanciosamente llevadas en procesión alrededor de la ciudad.

     Cada parisiense quedaba bajo sospecha si no expresaba irracionalmente y en voz alta su apoyo a los asesinos perros rabiosos de la revolución.Después de discursos extemporáneos en juicios-espectáculos, carentes de justicia, la nobleza y los sacerdotes, las mujeres y los hombres, eran decapitados.En las provincias de Francia las mujeres eran violadas y a menudo mutiladas. Los sacerdotes y otros hombres de Iglesia eran destripados. Los aristócratas y los nobles fueron cortados a pedazos.

     El clan de los Rothschild y sus agentes del terrorismo fueron particularmente cuidadosos para asegurarse de que a aquellos que habían sido responsables de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de Francia se les diese un tratamiento especialmente brutal.Nadie se cruza con un Rothschild y se sale con la suya.

     En varios días, más de mil cristianos fueron asesinados por cristianos vueltos locos.Esa enajenación hizo de las suyas en lo que llamamos hoy el Régimen del Terror, que en un año mató a 40.000 personas francesas, en una población nacional de sólo aproximadamente veinticinco millones de personas.

     La Revolución Illuminati (llamada la Revolución francesa) devoró a aquellos que estaban mejor capacitados para conducir. Como ocurre actualmente en el Oriente Medio, el terror se había convertido en la orden del día. Las murmuraciones denunciaban a vecinos, y los niños denunciaban a los padres, con pocos conociendo las verdaderas causas de esa locura.

     En ciudades como Lyon, aquellos que eran sospechosos de oponerse a todas las matanzas masivas fueron amarrados y obligados a marchar por campos abiertos donde ellos eran fusilados a muy corta distancia.En el Oeste de Francia, los ciudadanos y los sacerdotes eran amarrados juntos y ahogados en ríos. Algunos eran fusilados en los ríos, hasta que el agua se volvía roja, los cuales eran comúnmente llamados a través de toda Francia las Bañeras Nacionales, del mismo modo que las guillotinas parisinas eran llamadas las Navajas de Afeitar Nacionales.

     Durante años, cristianos franceses asesinaron a miles de miles de cristianos franceses.En París, la guillotina caía a un ritmo cada vez más frenético.

     Al otro lado del canal (de la Mancha), el Times de Londres dio voz a la repugnancia general sentida a través de Europa:

     «¿Éstos son los derechos del hombre?. ¿Ésta es la libertad de la naturaleza humana?Los más salvajes tiranos cuadrúpedos que recorren la inexplorada África son superiores a estos animales parisinos de dos piernas».

    A medida que la revolución entró en una espiral de un caos cada vez mayor durante diez largos y tortuosos años, seguramente en la lista de deseos de los Illuminati estaba el final del cristianismo en Francia.Los signos de la calle con la palabra "San" o "Santa" en ellos fueron rebautizados. Los iconos religiosos fueron destruídos y sustituídos por bustos de Jean-Paul Marat, el jacobino que fue asesinado por una doncella francesa, la cual a su vez fue degollada posteriormente.

     Las catedrales fueron despojadas de sus altares. Los vitrales y las estatuas religiosas fueron destruídos, la riqueza de la Iglesia fue robada, y sacerdotes y cristianos fueron masacrados.Ni siquiera el calendario cristiano se salvó. Los años ya no fueron numerados desde el nacimiento de Cristo sino a partir de 1789, el año de la infamia.

     Durante toda la revolución, los soldados franceses estuvieron luchando contra enemigos extranjeros en sus fronteras. Los Rothschild lo habían organizado todo primero: una gran nación matándose a sí misma internamente, a la vez que luchando guerras externas.

     Pero esas guerras fronterizas pudieron haber derrotado los proyectos de monsieur Rothschild a largo plazo. Y aquel fracaso pudo haber llegado en la persona de un general llamado Napoleón Bonaparte. El general Bonaparte le puso un punto final a la práctica de los cristianos franceses de matar a cristianos franceses. Es mejor matar a cristianos de Austria, Rusia e Inglaterra, debe haber pensado Napoleón.En cualquier caso, desde los largos años del terror doméstico, Napoleón llevó a Francia a guerras de terrorismo en el extranjero conocidas como las Guerras Napoleónicas.

     De estos horrores gemelos de la revolución y la guerra, Francia nunca se ha recuperado totalmente. Incluso la altura promedio de los franceses se redujo en 5 centímetros. Pero su prestigio nacional ha caído mucho más que eso, gracias a los Illuminati y a la tribu psicopática de los Rothschild.

     El cártel bancario y monetario internacional de los Rothschild ¿dejará de prestar a Estados Unidos su dinero ilegal, ampliamente conocido como dinero no convertible (fiat money)?.Ellos han creado gran parte de esa materia a partir de la nada en sus computadores que está circulando por el ciber-mundo. El valor de aquel falso dinero Rothschild ¿se reducirá a cero?.

     ¿Tendrán éxito los neoconservadores (bolcheviques Rothschild) que controlan nuestro gobierno federal (y a todos los actuales candidatos presidenciales) en provocar una guerra nuclear con Rusia?. Por qué no, ya que estos Iluministas han causado cada guerra importante en nuestra Historia, mientras ellos afirman que su Orden Mundial traerá la paz al eliminar todas las guerras. En verdad, sin embargo, los belicistas de los Rothschild siempre provocarán la guerra, porque las guerras llevan el caos, la destrucción, la muerte y el agotamiento tanto a los ganadores como a los perdedores. La guerra lleva la ruina económica a todos los partidos en la guerra, pero enriquece a los Rothschild y a sus aduladores.

     Uno puede preguntar razonablemente, sin embargo: la larga cadena de los Rothschild ¿ha sido la causa primera de los Illuminatio la familia ha obedecido a cerebros secretos que están por encima de los Illuminati?.

     No hay muchos que sepan o que conozcan la respuesta a esta pregunta, excepto quizás por una vieja señora, Gutle Schnaper, que era la esposa de Amschel Rothschild Mayer. En 1849, en su lecho de muerte, ella dijo:"Si mis hijos no quisieran guerras, no habría ninguna".

     Pero más importante para los seres demoníacos de los Illuminati es la degradación espiritual de los hombres jóvenes, ya sea por muerte, daños o el ennegrecimiento de sus almas producto de sus matanzas de otros en la guerra.¿Puede algún ser humano matar a otro humano y no sufrir kármicamente por ello?.Y seguramente con todos los crímenes contra la Humanidad cometidos por Estados Unidos, atraeremos finalmente un fuego pesado sobre nosotros.

     ¿Se apoderarán internamente de Estados Unidos hispánicos radicalizados, negros, feministas y homosexuales?, ¿o tal vez manadas de demonios y luciferinos?Con su control de los medios de comunicación, los Illuminati han convertido a muchas personas que están en esos grupos en nihilistas por motivos diferentes que hacer progresar los derechos civiles.

    Los negros no sólo componen un hilo característico en la tapicería de la vida urbana estadounidense. Su cantidad ahora se acerca al 20% de la población estadounidense, de manera que EE.UU. se elevará o caerá al igual que nuestros negros.Y el éxito de los negros sólo puede ser conseguido con educación y no con más leyes de derechos civiles, ni con la educación del Gobierno que sólo es un simulacro de educación.

     Mientras tanto, espere cada vez más disparos gratuitos de la policía contra negros e hispánicos, ya que ése es uno de los modos en que las minorías están siendo radicalizadas por los Illuminati.

     No puede haber ninguna negación racional de que los Illuminati están deliberadamente polarizando a EE.UU. de acuerdo a líneas raciales, mientras fingen una preocupación por las minorías.

     Mientras los negros componen menos del 20% de la población estadounidense, ellos cometen 8 veces más crímenes contra Blancos que Blancos contra negros.Y un varón negro es 40 veces más probable que asalte a una persona Blanca que al revés. Los medios Illuminati de comunicación no nos cuentan estos hechos ya que ellos no ayudan a radicalizar a los negros.

     Hay muy pocos reportajes de negros asesinando a Blancos; sin embargo, crímenes violentos de Blancos contra negros se convierten en noticias durante días, o tal vez semanas; al menos el suficiente tiempo para que los agentes secretos de los Illuminati (como George Soros) financien y organicen disturbios raciales.

     Los medios estadounidenses de comunicación son importantes no tanto por su propaganda abierta sino por lo que ellos no reportan. Por ejemplo, si debemos creer a los ciber-pasquines promedio como la CNN o Fox News, los hechos de un solo crimen de un Blanco contra un negro son de mucho mayor interés periodístico que el hecho de que EE.UU. gubernamentalmente esté ejecutando un genocidio cristiano y musulmán en el Oriente Medio.

     Tal como la Revolución francesa de hace mucho, los negros ganaron su revolución pacífica hace décadas, con poco caos, destrucción o derramamiento de sangre. Los negros consiguieron una legislación de derechos civiles, igualdad de derechos, cientos de miles de empleos locales, estatales y federales, la Acción Afirmativa [discriminación inversa], matrículas en universidades, y atletas multimillonarios. Los negros consiguieron lo que estaban pidiendo: ponerle fin a la segregación.

     Lo que los negros no pidieron fue la subversión Illuminati de sus familias, comunidades y raza con drogas * callejeras importadas por la CIA. Las drogas han costado a los negros todos los avances que ellos habían logrado con los nuevos progresos de los derechos civiles. Las drogas hicieron de Estados Unidos, per cápita, la nación más encarcelada en la Tierra, tal como fue planeado.

* Durante algún tiempo hasta ahora, también ha habido una epidemia de consumo de drogas en las comunidades Blancas, incluso en Estados rurales como New Hampshire. Los Iluministas están concentrados en poner a Estados Unidos de rodillas, y que pida clemencia.
     Esto ha sido llevado a cabo haciendo de la heroína, alguna vez cara, algo barato y abundante. Los Infantes de marina estadounidenses no protegen los campos de amapolas de Afganistán por los motivos declarados por los medios estadounidenses de comunicación.

     Y, ya que nuestras prisiones estatales y federales son una red de universidades del crimen en donde los presidiarios aprenden la jerga del hampa y las diversas prácticas del delito, los negros están siendo otra vez preparados para ser radicalizados.

     La importación Illuminati de drogas en las comunidades negras también produjo familias rotas, donde agentes gubernamentales clandestinos financiaron y organizaron pandillas negras que a menudo se convirtieron en los padres adoptivos de la juventud negra.

     Justo antes de la mayor parte de nuestras leyes de derechos civiles de principios de los años '60, los negros tenían una tasa de nacimientos ilegítimos menor al 20%. Hoy, aquella tasa excede el 75%. Hogares rotos a menudo producen niños destruídos, y luego adultos destruídos, todo bien sabido por aquellos de los Illuminati.

     Y cuando tiempos de penurias económicas caen sobre los Negros, aquel destino también cae sobre los Blancos. La principal diferencia ha sido la inundación de drogas callejeras Illuminati y la constante propaganda anti-Blanca que ha sumergido la mente colectiva de los negros, lo que ha ayudado a radicalizar aún más a los negros estadounidenses.

     ¿Tomarán finalmente los millones de enfurecidos negros la espada contra los Blancos de un modo incalculablemente amplio?

     Los bolcheviques *, quienes se llaman a sí mismos Neocons, ciertamente estarán en cualquier mezcla revolucionaria en Estados Unidos; y ellos estarán pidiendo más sangre Blanca, de la manera en que ellos lo hicieron con las masas ignorantes de la Humanidad a través de toda Francia y Rusia.

* El azote que son los Rothschild importó cientos de bolcheviques (desde EE.UU. y Europa) a Rusia; esos psicópatas criminalmente enajenados se convirtieron en la mayor máquina de matanza que el mundo haya conocido alguna vez. Aquellos bolcheviques son responsables de matar a más de 60 millones de cristianos durante y después de la Revolución rusa, que comenzó en 1917.

     Y tal como ellos lo hicieron en Francia, Rusia y España, los Illuminati han estado durante mucho tiempo en su trabajo sucio en Estados Unidos, pero hoy con cada vez más gente Blanca y negra que se está dando cuenta de sus engaños.

    Sin embargo, sólo aquellos de mayor categoría entre los Illuminati conocen de cierto el futuro a mediano plazo de Estados Unidos; y seguirá siendo de esa forma hasta que suficientes personas tomen conciencia de las actividades de los sub-humanos que controlan nuestro país, y nuestro mundo, por medio de sus sociedades secretas.

    «La propia palabra "secreto" es repugnante en una sociedad libre y abierta; y estamos como pueblo intrínseca e históricamente opuestos a sociedades secretas, a juramentos secretos y a procedimientos secretos» (John F. Kennedy 1917-1963).

     «Nuestra República no fue establecida por cobardes; y los cobardes no la resguardarán» (Elmer Davis 1890-1958).

     Pero no espere ninguna afabilidad de parte de los neocons Rothschild que controlan nuestro gobierno estadounidense, puesto que ellos son cobardes asesinos de sangre fría.

     Y así como las luces del campo invitan a insectos, ranas, y eventualmente a serpientes, la oscuridad espiritual y mundana invita a las Víboras Iluminadas.–




Elias Akleh - El Adoctrinamiento Judío de los Cristianos

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     El doctor Elias Akleh, autor de los dos siguientes artículos que ofrecemos en castellano, es un escritor árabe de ascendencia palestina. Él y su familia, dice la información, fueron expulsados de Haifa después de la "Nakba"(Catástrofe palestina) de 1948, y luego desde Beit-Jala después del "Nakseh" (Revés palestino) de 1967, y vive ahora en Estados Unidos, donde ha publicado numerosos análisis políticos y culturales en diversos sitios. El primer artículo fue publicado en intifada-palestine.com hace tres días, y el segundo, aparecido en dos partes en mwcnews.net, fue presentado en Febrero de 2013. Ambos textos tienen un tema en común: la manipulación e infiltración judaica del cristianismo, el estadounidense pero también el de todas partes, y el relato de diversos ejemplos históricos y de la actualidad en la Palestina ocupada, donde se manifiesta un virulento y patológico odio a todo lo cristiano por parte de la gente talmúdica.


EL ADOCTRINAMIENTO JUDAICO
DE LOS CRISTIANOS ESTADOUNIDENSES
por Elias Akleh
4 de Enero de 2016



     Durante mis 36 años viviendo en Estados Unidos he notado un proceso sistemático y gradual de un judaico lavado de cerebro y adoctrinamiento de los cristianos estadounidenses. La élite judía sionista estadounidense, los rabinos talmúdicos de Chabad Lubavitch, han controlado el sistema bancario financiero estadounidense por medio de la sionista y privada Reserva Federal, han controlado la economía estadounidense, han controlado las publicaciones de los medios estadounidenses de comunicación, los periódicos, las radios y las estaciones de televisión, Internet y las publicaciones de los medios sociales; han controlado el sistema educacional estadounidense, han controlado las industrias principales, han poseído y manipulado los complejos militares estadounidenses, han manipulado a congresistas e incluso a Presidentes mediante soborno y/o extorsión, han dictado la política exterior e interior estadounidense, y recientemente en las etapas finales han enajenado a los cristianos estadounidenses de su fe y los han adoctrinado en la camuflada tradición judaica.

     He visitado iglesias cristianas de diferentes denominaciones, y hay muchas de ellas. En una franja de la calle de 11 kilómetros de extensión cerca de mi vecindario conté 17 iglesias diferentes. La religión es un negocio muy provechoso. Al asistir a los servicios uno raramente oye sermones sobre las verdaderas enseñanzas de Jesús. Si oye alguno, ellos hablan de la vida de Jesús y sus milagros. La mayoría de los sermones se concentran en el Antiguo Testamento, en la interacción de Abraham con Dios, en el pueblo elegido judío de Dios, el éxodo, Moisés y sus diez mandamientos (realmente hay más de 600 mandamientos: Éxodo 20:23), en las violentas guerras judías contra los habitantes autóctonos de Palestina, y en el apremio para bendecir a Israel, el pueblo elegido, favorito y amado de Dios, para que uno pueda evitar la ira de Dios y ganar sus bendiciones. Lo peor de todo es cuando usted encuentra a un rabino judío invitado en la iglesia para que enseñe a los goyim cristianos acerca del pueblo elegido de Diosy la Tierra Prometida por Dios.

     Hablando con algunos fieles después del servicio uno puede descubrir cuán profundo es este adoctrinamiento, hasta el punto de que muchos creen que Dios está uniendo fuerzas con el actual Estado israelí en sus guerras contra los árabes. Quedé muy sorprendido de descubrir que esos fieles, algunos de los cuales son científicos y profesores, pierden todo el pensamiento lógico cuando ellos, mientras afirman que Dioses amor, creen que Dios ama sólo a los judíos. Las otras naciones no son amadas por Dios, sino que, como afirman los rabinos judíos, los goyim fueron creados sólo para servir a los judíos. Ellos no logran concebir el prejuicio, el racismo y el supremacismo judío existente en este concepto pagano.

     Lo que es más asombroso es la completa ignorancia de los sacerdotes cristianos en cuanto a las verdaderas enseñanzas cristianas que ellos afirman predicar. Al acercarse a algunos de ellos con preguntas como ¿por qué celebramos la Navidad con un árbol?, ¿en qué consiste la dualidad de la naturaleza humana?, ¿qué significa realmente la Santa Trinidad?, o preguntas más simples como ¿por qué Jesús se describió a sí mismo a veces como "el hijo de Dios" y otras como "el hijo del Hombre"?, uno descubriría cuán completamente ignorantes son esos sacerdotes. Todo lo que ellos saben es cómo realizar rituales, ignorantes de lo que esos rituales significan. El ciego guiando a los ciegos.

     Estados Unidos está lleno de iglesias pseudo-cristianas, organizaciones, escuelas, canales de televisión y sitios webde Internet cristianos, cuyo objetivo encubierto es lavar el cerebro y pacificar a los cristianos estadounidenses. Los más eficaces de éstos son el Proyecto Philos [1], los Sionistas Cristianos, y Cristianos Unidos en Pro de Israel (Christians United for Israel, CUFI), entre muchos otros, tales como el tele-evangelista bautista Pat Robertson, el tele-evangelista Jerry Falwell, y el tele-evangelista pentecostal Jimmy Swaggart.

[1] http://rightweb.irc-online.org/profile/philos_project

     La misión declarada del Proyecto Philosincluye "educar a los cristianos en las cuestiones teológicas, históricas y políticas que rodean a Israel y al pueblo judío". El grupo Sionismo Cristiano es simplemente una organización política judía que sigue pidiendo a los cristianos estadounidenses que financien las guerras de Israel para conseguir la salvación mediante el Rapto / Armagedón. El director ejecutivo de CUFI es un judío sionista, David Brog, primo del ex-Primer Ministro israelí Ehud Barak, y su hombre de fachada es el predicador John Haggee, que no dejaría de defender a Israel y pedir guerras nucleares contra Irán. Estas instituciones pseudo-cristianas son financiadas por organizaciones judías sionistas como el Comité Judío Estadounidense, la Liga Anti-Difamación, el Congreso Judío Estadounidense y el AIPAC.


     Estas mismas organizaciones judías han emprendido una guerra religiosa contra el cristianismo en Estados Unidos. Ellas han financiado y han patrocinado numerosos pleitos judiciales, y han tenido éxito, para prohibir el despliegue de símbolos religiosos cristianos en terrenos públicos, en las instituciones federales y en las escuelas públicas, citando la "Separación del Estado y la Iglesia", lo cual realmente estaba destinado a impedir que el gobierno estadounidense, básicamente cristiano desde su establecimiento, favoreciera a una denominación cristiana sobre otra.

     De este modo, erigir un Árbol de Navidad o la Cruz, los símbolos del amor y la paz, está prohibido en la Casa Blanca, pero la erección de la más grande menorá judía, el símbolo de guerra y destrucción, fue permitida en la Casa Blanca. Los medios de comunicación controlados por los sionistas tuvieron éxito también en convertir los saludos de "Feliz Navidad" en "Felices Fiestas", "vacaciones de Navidad" en "vacaciones de invierno", y la palabra "Christmas" en "Xmas", significando la letra "X", suprimido.

     Estos judíos talmúdicos sionistas y sus instituciones pseudo-cristianas están adoctrinando a los cristianos estadounidenses con falsas creencias de que Jesús era un judío o un rabino, siendo que él era realmente un esenio palestino revolucionario. Los judíos como el pueblo elegido de Dios y Palestina como su tierra prometida sólo para los judíos, más la obtención de las bendiciones de Dios al bendecir a los judíos y al Estado de Israel, son las principales creencias que enfatizan esas instituciones.

     Ellos pacifican a los estadounidenses por medio de enseñanzas como "ama a tu enemigo", "ofrece la otra mejilla", "perdona a aquellos que pecan contra ti", "salvación por medio del sufrimiento" y "sólo los mansos heredarán el reino de los cielos". La creencia sin sentido del "judeo-cristianismo" se ha extendido entre los cristianos estadounidenses. Está destinada a engañar a los cristianos para que crean que el judaísmo es la raíz del cristianismo, y que los judíos son los hermanos mayores de los cristianos.

     El hecho del cual muchos estadounidenses son ignorantes, es que Jesús y su cristianismo son el enemigo número uno del judaísmo. Este odio y enemistad están enfatizados en los libros religiosos judíos, en su literatura, en su cultura, en sus celebraciones, en su entretenimiento y en sus sistemas educacionales. El odio judío contra Jesús es fomentado a sus niños por la televisión. La televisión israelí crea programas de entretenimiento insultando a Jesús y su madre María.

     La actriz judía estadounidense Sarah Silverman, que es recibida en Hollywood con alfombra roja, entretiene a su alborozado y risueño auditorio con su deseo de matar a Cristo otra vez. Las enseñanzas religiosas judías describen a Jesús como sexualmente inmoral y a su madre como una puta [2]. Para comprender la profundidad del odio judío talmúdico contra Jesús uno tiene que leer "Jesus in the Talmud", un libro escrito por un judío, Peter Schafer [3], un profesor de estudios judaicos del departamento de religión en la Universidad de Princeton.

[2] http://www.noahide.com/yeshu.htm
[3] http://www.pdfarchive.info/pdf/S/Sc/Schafer_Peter_-_Jesus_in_the_Talmud.pdf

     Esta enemistad también se encuentra en el libro religioso judío la "Torá Mishná" escrita por Moisés Maimónides, uno de los principales árbitros y filósofos rabínicos en la historia judía. Esa Mishná enseña que es un "mitzvah"(deber religioso) erradicar a los enemigos judíos, como Jesús de Nazaret y sus discípulos.

     Un hecho muy importante que hay que reconocer es que el judaísmo moderno es simplemente una extensión disfrazada del antiguo culto pagano sexual y de fertilidad del dios El / Ba’al / Yahvé. Según el Antiguo Testamentoéste es un dios terrorista, belicista, celoso, furioso y sin hogar, que exige a su pueblo que le construya una casa, un templo. En la Antigüedad, cada tribu tenía su propio dios y se llamaba a sí misma el pueblo de Dios. Israel (la gente de El) es una herencia de los tiempos antiguos. Ba'al es una palabra hebrea que significa varón-marido. Ese dios El / Ba’al / Yahvé tenía una consorte / esposa conocida como Ashera o Astarté según una antigua inscripción hebrea encontrada en una cerámica del siglo VIII a.C. desenterrada en los sitios arqueológicos de Kuntilet Ajrud y Khirbet el-Kom en Palestina [4].

[4] http://www.stopthereligiousright.org/exodus.htm

     El erudito bíblico y teólogo Thomas L. Thompson menciona en su libro "The Mythic Past", en la página 170, que Asherah, también conocida como Shekinah y como la Reina del Cielo, es la consorte y la amada de Yahvé y la esposa de El o Ba'al (Varón marido). El escritor judío Raphael Patai da una descripción similar en su libro "La Diosa Hebrea".

     La Biblical Archeology Review citó al periódico israelí Ha'aretz Magazine de Octubre de 1999, que escribió lo siguiente [5]: "Será una desagradable sorpresa para muchos que el dios de Israel, YHWH, tenía una consorte, y que la religión israelita temprana adoptó el monoteísmo sólo en el período menguante de la monarquía y no en el monte Sinaí".

[5] http://www.freerepublic.com/focus/news/704190/posts

     La diosa Reina del Cielo también es mencionada muchas veces en el Antiguo Testamento. Un ejemplo es Jeremías 44:16-17, cuando los judíos que vivían en Egipto contestaron a Jeremías diciendo: "¡No te escucharemos! Quemaremos incienso a la Reina del Cielo y derramaremos ofrendas de bebida para ella, como lo hemos hecho nosotros y nuestros padres, nuestros reyes y nuestros príncipes, en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén".

     Los talmudistas y su instrumento terrorista que es el Estado de Israel son "El Anticristo", que está absorto en la destrucción de todo el mundo de los goyim, comenzando en el Oriente Medio, a fin de establecer su culto judío satánico de El / Ba'al / Yahvé. Los judíos odian y miran hacia abajo a todos los no-judíos / gentiles / goyim. Los principales rabinos judíos describen a los Gentiles como ganado creado en forma humana sólo para servir a los judíos.

     Esta guerra judaica anti-cristiana fue comenzada inmediatamente después del establecimiento de Israel en 1948. Las iglesias y comunidades cristianas palestinas, como en Nazaret y Haifa, fueron brutalmente atacadas de manera rutinaria por judíos extremistas. El peor brote de profanación organizada de propiedades e iglesias cristianas ocurrió en Septiembre de 1963, cuando cientos de miembros del grupo vigilante ultra-ortodoxo religiosamente extremista llamado la Sociedad de Activistas del Campo de la Torá (Hever Peelei Hamahane Hatorati), orquestaron ataques simultáneos contra misiones y escuelas cristianas en las ciudades de Jerusalén, Haifa y Jaffa.

     Este odio y los ataques judíos anti-cristianos todavía están teniendo lugar en el presente en la Tierra Santa. Incluso periódicos israelíes como Haaretz reportaron este odio. Bajo el título de "Cristianos en Jerusalén Quieren que los Judíos Dejen de Escupir sobre Ellos" [6], el periódico reportó: "Según el arzobispo Manougian de Jerusalén, el gobierno israelí es anti-cristiano. Los sacerdotes y las monjas cristianos están siendo escupidos cada día por judíos en Jerusalén, y las iglesias cristianas están siendo quemadas y destrozadas rutinariamente".

[6] http://www.haaretz.com/christians-in-jerusalem-want-jews-to-stop-spitting-on-them-1.137099

     El sitio web israelí "Tikun Olam" dio un ejemplo del odio israelí contra los cristianos el mes pasado justo antes de Navidad. Bajo el título de "Guerra Israelí contra la Navidad y el Cristianismo"[7],su sitio web reportó que Bentzi Gopstein, líder del dictatorial grupo judío Lehava, financiado por el gobierno israelí y por organizaciones judías extremistas, está pidiendo la limpieza étnica de todos los cristianos y palestinos de la Palestina ocupada.

[7] http://www.richardsilverstein.com/2015/12/22/the-israeli-war-against-christmas-and-christianity/?utm_source=digg

     Por medio de las muchas organizaciones estadounidenses pro-sionistas, numerosas emisoras de radio pseudo-religiosas, estaciones de televisión judeo-cristianas, y diversos periódicos cristianos sionistas, los talmudistas sionistas han lavado el cerebro y han adoctrinado con éxito a casi 40 millones de cristianos estadounidenses. Los estadounidenses están viviendo bajo la misericordia del sistema bancario usurero judío, se han convertido en consumidores más bien que en productores, se convirtieron en absurdos judeo-cristianos, aceptaron el homosexualismo como algo normal, y con entusiasmo se convirtieron en soldados delegados de los judíos, luchando las guerras de Israel.

     La pregunta decisiva ahora es si el resto de los cristianos estadounidenses pondrán la otra mejilla para sufrir más abuso talmúdico, o harán lo que Jesús hizo: ¡azotar y echar a esos talmudistas cambiadores de dinero de las iglesias y completamente de nuestras vidas!.–




LA GUERRA contra los CRISTIANOS ESTADOUNIDENSES
por Elias Akleh
11 y 18 de Febrero de 2013



Parte I: Historia Corta

     Los cristianos estadounidenses han sido durante mucho tiempo el objetivo de una guerra religiosa encubierta cuyos campos de batalla incluyen sus hogares, sus escuelas públicas, sus iglesias y sus escuelas dominicales. Ellos son sometidos a masivos programas de lavado de cerebro bien planificados y científicamente basados, cuyos objetivos son distorsionar y debilitar sus creencias cristianas, y dividirlos en grupos diferenciados más pequeños que pueden ser fácilmente manipulados, controlados y esclavizados para servir ciega y lealmente a las genocidas agendas coloniales del sionismo e Israel bajo la falacia de servir al pueblo elegido de Dios. Grupos como Sionistas Cristianos y Cristianos Unidos en Pro de Israelson víctimas de tal guerra. Tales grupos son las ovejas perdidas de los cristianos estadounidenses.

     Las escuelas religiosas adoctrinan a sus estudiantes desde la infancia en la racista teología judaica del pueblo elegido de Dios en la Tierra Prometida por Dios. Muchos sacerdotes se concentran en el Antiguo Testamento (Talmud judío) en la mayor parte de sus ceremonias, excepto durante Navidad, Pascua de Resurrección y otras pocas ocasiones. Algunos incluso invitan a rabinos judíos a sus iglesias para que prediquen sobre la presunta divinidad de los judíos y para recolectar donaciones monetarias para Israel. Sintonizando en la televisión a muchas estaciones cristianas uno sólo puede oír llamados belicistas a purgar la Tierra Prometida de paganos islámicos y financiar a los judíos israelíes para reconstruír el Templo a fin de apresurar el Arrebatamientoy la Segunda Venida de Jesús. El sionismo colonial parece haber ocupado la mayor parte del cristianismo de la misma forma en que ocupó Palestina.

     "Sionismo cristiano" es un término incongruente, ya que el cristianismo y el sionismo son totalmente opuestos y antagonistas uno frente a otro. El cristianismo es una religión pacífica y afectuosa, mientras que el sionismo es un movimiento político colonial genocida. El cristianismo está basado en las amorosas enseñanzas de Cristo con un dios compasivo, mientras que el sionismo está basado en las elitistas enseñanzas judaicas racistas con un dios airado, celoso, vengativo y belicista.

     Adineradas organizaciones judías sionistas están detrás de esta guerra contra el cristianismo en Europa y en las Américas. Ellos son los fundadores de grupos de cristianos sionistas como Christians United for Israel (CUFI) con más de un millón de miembros cristianos estadounidenses. El director ejecutivo de CUFI no es ni siquiera cristiano, sino más bien un devoto judío sionista llamado David Brog, que es primo del actual ministro de Defensa y ex-Primer Ministro israelí y criminal de guerra Ehud Barak, que condujo la agresión contra palestinos sitiados en la Franja de Gaza. La biografía de Brog publicada en el sitio web de CUFI lo describe como uno de los 50 judíos más influyentes en Estados Unidos.

     Estas organizaciones judías sionistas han sido la fuerza impulsora para prohibir todos los símbolos cristianos y su cultura dentro de la vida pública estadounidense, y su sustitución con símbolos religiosos judíos y cultura judía. Mediante sus lobbystas políticos pagados ellos proscribieron las manifestaciones cristianas de la Navidad en sitios públicos y prohibieron los villancicos, la celebración y los rezos en las escuelas públicas. Ellos han cambiado los saludos de "Feliz Navidad" por saludos de "Felices Fiestas". Ellos han quitado el Árbol de Navidad del patio delantero de la Casa Blanca y lo han sustituído por una enorme menorá judía. Por medio de las fuentes mediáticas controladas y financiadas por los sionistas, televisión, películas y periódicos, ellos han estado inyectando a la cultura cristiana estadounidense con la cultura judía. Estados Unidos está tan infectado por la cultura y la ideología judía sionista que el Gobierno ha estado enviando tropas estadounidenses al mundo árabe en el Oriente Medio para luchar y morir por el sionista Israel.

     El cristianismo, las enseñanzas de Cristo, es una continuación de las enseñanzas de Melquisedec, el rey de Salem (Jerusalén, Al-Quds, árabe para la ciudad santa), el sacerdote del "Dios más Alto" que bendijo a Abram con pan y vino. Después de esa bendición "Dios" hizo un convenio con Abram (Génesis 14:18-20). David era también "un sacerdote para siempre según la Orden de Melquisedec" (Salmo 110:4). La Orden de Melquisedec era superior al sacerdocio levita y más alta que la Orden de Aarón: «Por lo tanto, si la perfección se realizara por medio del clero levítico ¿qué necesidad posterior habría para que surgiera otro sacerdote "según el orden de Melquisedec" y que no fuera llamado "según el Orden de Aarón?"» (Hebreos 7:11).

     El judaísmo consiste en las enseñanzas de Judá, el cuarto hijo del patriarca Jacob. Judá odiaba a su hermano menor José y confabuló contra él. Él presionó a sus hermanos para que se le unieran y vendieran a José a comerciantes ismaelitas por 20 piezas de plata. Sintiendo culpa y vergüenza por la pena de su padre, los hermanos depusieron y excomulgaron a Judá, quien dejó la casa de su padre y vivió con los cananeos casándose con una de sus hijas (Génesis 37:38). Judá estableció su propio orden: el judaísmo, con los fariseos como sus sacerdotes, separados de su padre Jacob, y su tribu llegó a ser conocida como judíos más bien que israelitas. El judaísmo es la religión de los fariseos, que desarrollaron tradiciones talmúdicas y kabalísticas, creadas para controlar, manipular y esclavizar a la gente.


     Los fariseos se habían desarrollado como un clero político muy poderoso dentro del Sanedrín, el Consejo judío, que rivalizaba con las otras tres principales escuelas judías de pensamiento: los saduceos, los esenios y los zelotes. Los saduceos eran los principales antagonistas de los fariseos que competían por el control de la gente. Algunos historiadores creen que los fariseos habían conspirado junto con los romanos durante las guerras judío-romanas (70 d.C.) cuando los romanos aplastaron a las otras tres escuelas de pensamiento y gobernaron la tierra y designaron a Yohanan ben-Zakkai, un fariseo principal, como un patriarca judío para que gobernara a todos los judíos. Ben Zakkai restableció el Sanedrín bajo control fariseo. Los fariseos se convirtieron en los rabinos y recolectaban el diezmo de la gente. Ellos tenían el control del Templo y lo habían convertido en un banco usurero para sus cambistas de dinero.

     Los fariseos siempre habían procurado matar a Jesús por emancipar a la gente del control esclavizador de los fariseos. Juan el Bautista y Jesús llamaron a los fariseos "raza de víboras". Jesús les dijo: "Si ustedes son los hijos de Abraham, hagan las obras de Abraham, pero ahora ustedes procuran matarme"(Juan 8:39-40). Él también les dijo: "Ustedes son de su padre el diablo, y los deseos de su padre ustedes quieren cumplir. Él fue un asesino desde el principio, y no está en la verdad"(Juan8:44). Finalmente Jesús expulsó a sus cambistas de dinero del templo y les ordenó: "¡No conviertan la casa de mi Padre en una casa de mercado!"(Juan 2:16).

     Al crucificar a Jesús los fariseos habían perdido la guerra contra él. Muchos, incluso judíos, habían adoptado el cristianismo. Los fariseos comprendieron su fracaso cuando Roma, también, adoptó el cristianismo como su principal religión. Sin embargo, ellos no abandonaron la guerra sino que adoptaron tácticas diferentes. Ellos conspiraron para atacar a los cristianos desde dentro, pretendiendo esclavizar a los cristianos por medio de su propia religión. Gracias a su riqueza acumulada y a su control de las principales profesiones en la sociedad, poderosos fariseos (falsos conversos) se infiltraron en la Iglesia cristiana y causaron la eliminación de muchos libros cristianos durante la reunión del primer Concilio de Nicea en 325 d.C., determinando así el contexto del Nuevo Testamento oficial. Ellos también comenzaron una búsqueda y castigo para eliminar toda oposición posible y quemar todos los supuestos libros blasfemos conocidos como los libros apócrifos de la Biblia.

     Los judíos de la Diáspora fueron todavía victimizados por los fariseos, ahora como rabinos judíos, que mantuvieron el control de ellos por medio de sus distorsionadas enseñanzas judaicas. Esos rabinos políticos le lavaron el cerebro a los judíos para que acumularan riqueza mediante la usura y otras cuestionables formas, como el alcoholismo, la prostitución, las guerras y el comercio de esclavos. Ellos establecieron instituciones financieras y bancos de préstamo que finalmente controlaron los recursos vitales de cualquier país, incluyendo su economía, su comercio, su educación, sus medios de comunicación y finalmente su sistema político. Ellos habían fomentado y financiado revoluciones y habían perpetrado genocidios de cristianos [1] e incitado guerras religiosas entre cristianos y musulmanes. Finalmente, fue creado el sionismo para congregar a los judíos en Palestina a fin de reconstruír el Templo y convertir Jerusalén en la capital política más influyente del mundo entero.

[1] http://www.mwcnews.net/focus/editorial/18550-holocausts.html

     Los judíos sionistas llegaron a infiltrarse en el Vaticano mismo en una tentativa de distorsionar el cristianismo y engañar a los cristianos para que sirvieran a los judíos y a Israel. En su libro "From Enemy to Brother: The Revolution in Catholic Teaching on the Jews, 1933-1965"  (Harvard, 2012), John Connelly, un profesor de Historia en la Universidad de California en Berkeley, afirma que judíos convertidos al catolicismo, como Johannes Oesterreicher, Gertrud Luckner, Paul Demann, Geza Vermes, Renee Block, el sacerdote Gregory Baum y el sacerdote Bruno Hussar, entre otros, fueron los principales impulsores detrás de la "Declaración del Vaticano II"de 1962 conocida como "Nostra Ætate", que revertió completamente el modo de ver de la Iglesia en cuanto a los judíos y su religión.

     Dicha declaración contiene afirmaciones de que Jesucristo, su madre y sus apóstoles eran judíos, y que la Iglesia tuvo su origen en el Antiguo Testamento. Allí se niega que los judíos puedan ser considerados colectivamente responsables de la muerte de Cristo, y llamaba a los judíos los "más amados" por Dios, y que los judíos "poseían una santidad especial". Esa declaración finalmente permitió que los Papas Juan Pablo II y Benedicto XVI visitaran Israel en 2000 y 2009 respectivamente, donde ellos estuvieron en veneración en el Muro de los Lamentos (la islámica muralla Al-Buraq) y en el Memorial del "Holocausto" lamentando la muerte de judíos alemanes, pero no dijeron nada sobre los genocidios de palestinos cristianos y musulmanes o del sitio de Gaza.

     El Papa Juan Pablo II se había sometido al judaísmo sionista cuando visitó la sinagoga de Roma el 13 de Abril de 1988, ocasión en que afirmó la pecaminosa mentira de que "los judíos son nuestros hermanos mayores en la fe". Los judíos NO son hermanos de los cristianos ya que ellos no creen en Jesús y ellos lo maldicen a él y a su madre en cada oportunidad que tienen. Ese Papa desvergonzadamente trató de absolver al judaísmo y de engañar a los cristianos cuando él declaró que "las semillas infectadas por el anti-judaísmo nunca deben echar raíces... el judaísmo es una respuesta a la revelación de Dios en el Antiguo Pacto... y los rezos eucarísticos están de acuerdo al modelo de la tradición judía”, en su "Audiencia General" en Roma, como lo reporta el periódico oficial del Vaticano L’Osservatore Romano el 5 de Mayo de 1999 bajo el título de "Cristianos y Judíos Comparten Mucho Juntos".

     La influencia sionista sobre la Iglesia ha sido tan eficaz que en 1995 el cardenal Joseph Bernardin de Chicago dio un discurso en la Universidad Hebrea culpando al Evangelio de Juan por "incitar el anti-judaísmo". Él también inició un diálogo acerca de "una necesidad para su (del Evangelio de Juan) nueva redacción o supresión".

     ¿Va la Iglesia, finalmente, a adoptar el Sionismo?.


Parte II: Sionización de los Cristianos

     Los sionistas no sólo ocuparon Palestina y crearon el Estado israelí sino que también han ocupado los gobiernos de los países más poderosos, sobre todo la administración estadounidense. Ellos controlan tanto el partido Demócrata como el Republicano y han ocupado el Congreso con sus comprados congresistas. Ellos también han ocupado la Casa Blanca y determinan quién se convierte en Presidente. Los sionistas dictan la política exterior e interior estadounidense. Ellos controlan casi cada aspecto de la vida estadounidense, comenzando con el control de la natalidad / aborto, la educación, la industria, la economía, e incluso la muerte. Ellos hicieron esto por medio de su sistema de usura de cinco mil años de antigüedad.

     Por medio de su sistema de usura y su comercio de drogas, alcohol, prostitución y esclavitud, los judíos sionistas acumularon una gran riqueza y poder que les permitió finalmente crear y controlar la Reserva Federal estadounidense, los principales bancos centrales occidentales y sus instituciones financieras. Ellos también han controlado las economías y, por ese medio, los gobiernos de ambas Américas y de los países europeos. Ellos fueron capaces de comprar a políticos y jefes de Estado imponiendo sus propias agendas sionistas. La implementación de las agendas sionistas necesita la capitulación de las masas. Un proyecto de sionización global, usando principalmente al cristianismo, los sistemas de educación y los recursos de los medios de comunicación, fue desarrollado y está a mitad de camino.

     Los sionistas descubrieron que el método más eficaz para sionizar a los estadounidenses era por medio de su religión, el cristianismo. Mediante el plan de estudios impuesto por los sionistas al menos a los 12 primeros años de la educación pública, mediante las 200 organizaciones pro-sionistas, mediante el lobby israelí (AIPAC), aproximadamente 1.700 emisoras de radio religiosas, 245 estaciones cristianas de televisión, y aproximadamente 120 periódicos cristianos, los sionistas han sionizado exitosamente a casi 40 millones de cristianos estadounidenses.

     El judeo-cristianismo y el sionismo cristiano, aunque ideologías incongruentes y antagonistas, se han convertido en la moda y se han extendido extensamente entre los ingenuos, faltos de sentido crítico y ciegamente fieles cristianos estadounidenses. Los sionistas cristianos, tales como los Amigos Anglicanos de Israel y Christians United for Israel, son más leales a Israel y a los judíos sionistas que a su propio país y pueblo. Estos grupos han sido engañados para creer en la falacia de que la Biblia (el Nuevo Testamento) es una extensión del Talmud judaico (Antiguo Testamento), y que ellos no podrían entender la Biblia sin estudiar el Talmud. Sus "pastores" predican principalmente del Talmud, enfocándose en la presunta divinidad de y el amor de Dios a los judíos (sionistas), y raramente predican sobre el mensaje perdonador, afectuoso y pacífico de Jesús.

     Cuando se trata de Israel estas almas perdidas son realmente más sionistas que los líderes judíos sionistas israelíes. Ellos defienden el terrorismo estatal de Israel, sus crímenes de guerra, y las violaciones de las leyes internacionales y de derechos humanos como una aceptada auto-defensa contra la supuesta amenaza existencial para el pueblo elegido de Dios, el único pueblo que tiene un "convenio sagrado" (un contrato de tipo comercial) con un dios tendencioso. Los sionistas cristianos han apoyado todas las guerras de agresión israelíes contra todos sus vecinos, incluyendo el uso de armas ilegales como bombas de uranio empobrecido y bombas de fósforo. En sus sitios web ellos prometen apoyar a Israel para asegurar sus fronteras, para enfatizar el sufrimiento de los judíos infligido por los cristianos y para exigir compensaciones, para presionar a la Iglesia para que confirme la herencia divina judía, para apoyar a Israel política, económica y militarmente, y para proteger a Israel de los musulmanes paganos.

     Tristemente, aquellos sionistas cristianos o no estudiaron su Biblia o realmente no entendieron lo que ellos leyeron. Parece que ellos no usan el pensamiento independiente racional y lógico y son totalmente dependientes de las distorsionadas explicaciones con las que su sacerdocio sionista político los alimenta.

     Si ellos leyeran críticamente el Antiguo Testamento descubrirían que el dios judaico es un dios racista terrorista (Éxodo 33:15). Él le ordenó a su pueblo elegido judío que cometiera genocidios (1 Samuel 15:3, Deuteronomio 20:16), fratricidio (Éxodo32:27-28), canibalismo (Levítico 26:29), robos y estafas (Éxodo 3:22), esclavización de otros (Levítico 25:44-45), y que predica la avaricia y la usura (Deuteronomio 23:20). Él es un dios celoso (Éxodo 20:5, 34:16, Deuteronomio 6:15), que odia a todas las naciones de la Tierra, incluyendo a sus propios judíos elegidos (Números 14:27-45, 16:31-35), y los amenaza con la aniquilación si ellos no le sirven diligentemente (Deuteronomio 28:15-68), y exige que todo el oro y la plata le sean entregados (Éxodo 25:3). Éstas son sólo unas pocas descripciones de muestra del dios judaico en el Antiguo Testamento. Este dios judaico es un dios pagano; él es realmente Satán en su alma.

     Si ellos hubieran leído periódicos extranjeros independientes y mirado emisiones de la televisión no-estadounidense, o incluso los propios periódicos de Israel y sus canales de televisión, ellos habrían descubierto el odio extremo que la psique colectiva judía alberga contra Jesús específicamente y contra los cristianos en general. Bajo el título "El Nuevo Testamento: Venganza Pagana" [2] los Noéicos judaicos [relativos a las leyes dadas a Noé] describen al cristianismo como una religión pagana inventada para controlar a las naciones y para combatir a la presunta religión verdadera del judaísmo y para "desgastar a los santos (los judíos)". Las leyes Noéicas consideran la adoración de Jesús como una idolatría que es castigable con la muerte. Los eruditos israelíes de la Torá han ordenado: "Si bien los cristianos aceptan generalmente la Bibliahebrea como realmente proveniente de Dios, muchos de ellos (aquellos que aceptan la supuesta divinidad de Jesús) son idólatras según la Torá, castigables con la muerte". Aparentemente, para los judaicos la divinidad es exclusiva sólo de los judíos, no de Jesús.

[2] http://www.noahide.com/paganism.htm

     El rabino Ovadia Yosef [1920-Oct. 2013], el principal rabino sefardí de Israel y un reconocido erudito talmúdico, y la principal autoridad en la Halajá [las leyes judías], enseña la ideología supremacista de que los no-judíos (los Gentiles, incluyendo a los cristianos) tienen almas animales creadas para servir a los santos (los judíos). Junto con todos los rabinos judíos israelíes, pide la exterminación de todos los palestinos, cristianos así como musulmanes. Esto fue reportado en los periódicos Jerusalem Post y Haaretz.


     Moisés Maimónides, que vivió y prosperó bajo la protección del líder musulmán Salah al-Din al-Ayubi, es considerado el más importante de los árbitros y filósofos rabínicos en la historia judía. Su libro la Mishná Torá es considerado una autoridad canónica en la ley talmúdica. Él enseñó que los cristianos deberían ser exterminados. En su Mishná, capítulo 10, página 184, él declaró: "Es un mitzvah [un deber religioso] erradicar a los traidores judíos, los minim [cristianos] y los apikorsim [herejes]... ya que ellos causan dificultades a los judíos y alejan de Dios a la gente, como lo hizo Jesús de Nazaret y sus discípulos".

     Todas las figuras rabínicas judaicas y toda la literatura judaica están llenas de odio hacia los no-judíos, no importa quiénes sean ellos. Ese odio es alimentado y reforzado en la psique colectiva de las nuevas generaciones judías en Israel por medio de su sistema educacional [3], desde el kindergarten hasta sus instituciones de post-graduados, incluyendo sus escuelas religiosas (yeshiva), las organizaciones judías más extremistas, racistas y elitistas. El efecto de este adoctrinamiento racista puede ser visto en las muchas violentas guerras israelíes contra sus vecinos, y en sus crímenes terroristas extremistas contra los palestinos.

[3] http://www.mwcnews.net/focus/analysis/16389-brainwashing-jews.html

     Israel se ha convertido en una cultura de odio que no tiene ninguna vergüenza al difundir su veneno en sus canales de televisión. El programa israelí de Historia televisada para niños Toffee and the Gorilla, presentó a una joven israelí en ropas menores y un muñeco representando la crucifixión de Jesús, llamándolo un "nazi"y el enemigo de los judíos. La televisión israelí regularmente ridiculiza a la Iglesia y hace burla de Jesús y su madre María a la cual llama una puta. Esto es exactamente lo que el Talmud (Sanedrín 106a) enseña: que Jesús era un bastardo y que su madre era una prostituta.


     Dentro de la Palestina ocupada (el terrorista Israel) los palestinos cristianos son severamente perseguidos más que los musulmanes. Antes de que el Estado israelí fuera establecido en la tierra palestina usurpada en 1948, la comunidad cristiana palestina se contaba en 200.000, comparada a aproximadamente 600.000 judíos. Ahora la población cristiana es menos del 1% de la población de la Palestina ocupada, debido a la persecución israelí. El gobierno israelí usurpa las propiedades de la Iglesia y presiona a los funcionarios no-palestinos de la Iglesia para que vendan o arrienden dichas propiedades al gobierno israelí.

     Los cristianos palestinos, sus iglesias, sus escuelas, y hasta los sacerdotes, están todavía bajo ataques físicos e insultos por parte tanto de civiles como de soldados israelíes.  

     Los rabinos extremistas judaicos israelíes estimulan la formación de grupos vigilantes religiosos como Hever Peelei Hamahane Ha-Torati (Sociedad de Activistas del Campo de la Torá) y Yad Le’Achim, quienes solían atacar a misioneros cristianos e instituciones de los cristianos. El 10 de Septiembre de 1963 cientos de estos grupos vigilantes atacaron simultáneamente misiones cristianas en las ciudades de Jaffa, Haifa y Jerusalén, en un esfuerzo concertado para intimidar a los cristianos. En 1995 el soldado israelí Daniel Koren, de 22 años, entró en la iglesia católica de San Antonio en Jaffa disparando 100 balas en el altar y la cruz. Él afirmó más tarde que sus convicciones judaicas lo impulsaron a destruír todos los símbolos cristianos no-judíos.

     Los crímenes de odio anti-cristiano han llegado a ser muy desenfrenados últimamente en la Palestina ocupada, sobre todo en Jerusalén. Intimidar y escupir a sacerdotes cristianos y monjas en las calles por parte de estudiantes religiosos ultra-ortodoxos y jóvenes ciudadanos israelíes se ha salido de control de manera muy escandalosa, hasta el punto de que el periódico israelí Haaretzlo reportó en sus páginas [4]. Una última manía terrorista anti-cristiana llamada "etiqueta de precio" se ha convertido en el último delito común contra iglesias y monasterios cristianos. Los atacantes vandalizan la propiedad de la iglesia con lemas anti-cristianos de odio y muchas veces prenden fuego a la iglesia. Tales ataques terroristas fueron reportados extensamente por la agencia israelí de noticias Ynet [5]. Las investigaciones israelíes de tales delitos no condujeron a ninguna condena, llevando al arzobispo Manougian, jefe de una de las iglesias más antiguas en Jerusalén, a acusar al gobierno israelí de ser anti-cristiano.

[4] http://www.haaretz.com/christians-in-jerusalem-want-jews-to-stop-spitting-on-them-1.137099
[5] http://www.ynetnews.com/articles/0,7340,L-4318831,00.html

     El odio judío contra el cristianismo es tan satánico que su literatura religiosa, como Shabbath 116a, los anima a quemar los libros cristianos sagrados. En 2008 estudiantes judíos ortodoxos amontonaron cientos de copias del Nuevo Testamento y les prendieron fuego [6]. En Julio de 2012 el parlamentario Nissim Ze’ev (partido Shas) pidió la quema del Nuevo Testamento [7] porque fue escrito por herejes, como lo reporta el periódico israelí Jerusalem Post.

[6] http://muslimvillage.com/2010/09/11/6081/orthodox-jews-burn-hundreds-of-bibles-in-israel-world-media-silent/
[7] http://www.jpost.com/Diplomacy-and-Politics/Rivlin-to-Ben-Ari-Stop-giving-Knesset-a-bad-name

     El judaísmo expresa un severo prejuicio, xenofobia, hipocresía e intolerancia religiosa. El odio judío a toda la gente no-judía, especialmente a los cristianos, es patológico. Ellos no tienen ningún respeto por los sentimientos de billones de otras personas que respetan a Jesús y su madre. Sus rabinos no tienen la moral para enseñarles tal humanidad. Su ilusión supremacista expresa un severo y patológico complejo de inferioridad. Su mecanismo de defensa compensador consiste en incitar guerras entre otras religiones (musulmanes contra cristianos, goy contra goy) mientras ellos arman a ambos lados y recogen la riqueza.

     Ellos cometieron los ataques terroristas del 11-S contra Estados Unidos para comenzar lo que ellos llamaron la guerra global contra el terrorismo islámico. Ellos inventaron la islamofobia. Ellos convencieron a los cristianos estadounidenses de que el cristianismo se derivó del judaísmo, y así los muchachos cristianos estadounidenses tienen la obligación religiosa y el deber de luchar las guerras de Israel en el Oriente Medio para proteger a los "santos", el "pueblo elegido de Dios", de los musulmanes paganos.

     La triste realidad que los ingenuos cristianos estadounidenses no han comprendido todavía es que es el judaísmo, y no el Islam, el verdadero enemigo del cristianismo así como de todos los no-judíos. Si hubieran estudiado el Corán, el libro sagrado islámico, antes de odiarlo y quemarlo, los cristianos estadounidenses habrían descubierto que el Islam está más cercano al cristianismo. El mensaje del Islam de hermandad, amor y paz es similar a las enseñanzas de Jesús. Similar al cristianismo, el Islam es una religión universal para todas las naciones y no es exclusivo de sólo un grupo elitista, como el judaísmo. El Islam reconoce a todos los profetas cristianos, comenzando desde Adán hasta llegar a Mahoma, incluyendo a Jesús (Issa, en árabe) y a su madre. El Islam reverencia a la Virgen María hasta el punto que dedicó un capítulo entero en el Corán a su nombre, algo que ni el judaísmo ni el cristianismo nunca han hecho.–



John Kaminski - Acerca de la Reencarnación

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     El conocido ensayista estadounidense John Kaminski (1944), en este artículo de tono bastante personal que presentó en renegadetribune.com hace una semana y que ofrecemos ahora en castellano, toca el tema de la posibilidad de la Reencarnación haciendo alusiones íntimas y aludiendo a un no muy conocido pero documentado personaje de la Segunda Guerra Mundial al que el autor dedica algunos inquietantes pensamientos. Al final hemos puesto algunos comentarios de los lectores que están en el sitio original y que por su interés van también aquí.


Si Yo Creyera en la Reencarnación...
por John Kaminski
2 de Enero de 2016


...Hubiera sido un general ruso
cuya lealtad estaba con el Führer


     Siempre he tenido una visión escéptica de la reencarnación. Cuando se me ha preguntado sobre ella, siempre he fruncido el ceño y he ladrado: "¡Matemáticamente imposible!", y me irritado un poco de que alguien sugiriera una idea tan ridícula.

     Recuerdo haber reconsiderado el concepto en mi mediana edad, cuando leí un maravilloso libro, El Libro Tibetano de los Muertos (edición de Evans-Wentz de 1927), que también es llamado El Libro de la Liberación por el Escuchar, y que es un texto budista fundacional. Si usted pudiera navegar por entre los nombres tremendamente largos e impronunciables de las deidades tibetanas, usted podría entender más o menos el argumento básico, que es que cuando usted muere, usted entra en algo llamado el estado bardo.

     En aquel estado, su primera opción es ir hacia la luz, y usted nunca tendrá que preocuparse nuevamente de las miserias de la vida, ya que usted será uno con todo y feliz como una almeja, o más específicamente, estará más allá de la felicidad y en una beatitud permanente. Pero por lo general, sólo los maestros disciplinados son lo bastante sagaces para hacer aquella elección, porque la mayor parte de nosotros, justo después de que morimos, comenzamos a pensar en el maravilloso estado llamado la vida que acabamos de dejar, en todos los tiernos recuerdos de las personas que amamos, y aquella clase de cosas.

     El deseo de volver a la vida rápidamente se hace irresistible.

     Ese sentimiento finalmente se hace tan poderoso que pronto comenzamos a desear que pudiésemos volver por otra ronda, y después de un período indeterminado de retozar con las Deidades Pacíficas y Coléricas (lo que significa el repaso de cada cosa que nos sucedió en nuestra vida anterior, tanto buena como mala), finalmente elegimos a nuestros futuros padres para lo que juzgamos que es un modo apropiado de volver a vivir otra vez en forma corpórea.

     Siempre he encontrado aquella fórmula como una especie de buenos deseos proyectados por los vivos sobre sus amados difuntos como un modo de disminuír el dolor de la pérdida, y como decirle a un niño que la Abuela está feliz en el cielo, o, como los indios norteamericanos que hablaban de la Tierra de la Cacería Feliz, como un modo de atribuír una buena fortuna a la persona que nos abandonó y a la que echamos de menos intensamente.

     De ese modo, llegué a considerar El Libro Tibetano de los Muertos como un libro sobre la vida más bien que como sobre la muerte, per se, en tanto toda vida es realmente una preparación para la muerte, siendo el mejor resultado el que usted sepa que ha hecho todo lo que pudo cuando llega el momento de su partida.

     Fue veinte años después de aquello cuando publiqué una historia de reencarnación que yo no podía refutar. Le tomó mucho tiempo a mi amigo Patrick, conocido como un niño genio, convencerme de que él había sido el gran inventor servio Nikola Tesla, y no fue su historia lo que realmente me convenció, sino que fue una historia que él me contó sobre su propio hijo lo que realmente cerró la puerta a cualquier posibilidad de que su historia no fuera verdadera.

     Su hijo, parece, cuando él había alcanzado una cierta edad, aproximadamente 8 ó 9 años, pienso, seguía insistiendo en que él había vivido en Florida, y que su esposa de su anterior vida todavía vivía allí. Además, él siguió hablando acerca de ciertos objetos, sobre todo un reloj Rolex, que él quería recuperar. Finalmente Patrick, que creía que él mismo era reencarnado, llevó a su hijo a Florida, y encontró a la persona que su hijo decía que había sido su esposa.

     Cuando ellos instantáneamente se reconocieron el uno al otro, su hijo preguntó: "¿Dónde están mis cosas?", tras lo cual su antigua esposa le presentó la caja que contenía su relojRolex.

     Aquello me impactó para comprender que tal vez mejor yo debiese conceder un poco más de credibilidad a los relatos de individuos reencarnados, de modo que adquirí una copia de un libro titulado"Almas Antiguas" (Old Souls) de Tom Shroder (1999), que llegué a considerar como una de las mejores exposiciones de este polémico fenómeno conocido como la reencarnación.

     De aquel libro aprendí que un número significativo de gente en el mundo creía incuestionablemente en este fenómeno y tenía el testimonio de amigos y parientes a ambos lados de la gran línea divisoria —es decir, que habían sido sus amigos en vidas anteriores— quienes podían verificar que ellos eran en efecto la persona que ellos afirmaban ser.

     "Almas Antiguas" trata acerca de la historia del fallecido doctor Ian Stevenson, un profesor de la Universidad de Virginia que viajó por el mundo documentando más de 2.000 de estos casos de recuerdos de vidas pasadas. Shroder, el autor del libro, viajó con Stevenson al Líbano y a la India y presenció pruebas irrefutables de que miles de personas pueden documentar suficientemente y demostrar que ellos fueron quienes ellos dicen que fueron en vidas anteriores.

     Las dos principales impresiones que conseguí del libro fueron que esos ejemplos de almas reencarnadas parecían pertenecer a aquellos que sufrieron muertes injustas, violentas o prematuras, y que muchas personas, sobre todo en India y el Líbano, aceptaban ese fenómeno como una parte natural de sus vidas actuales y anteriores.

     De este modo, después de todos estos acontecimientos yo ya no fui capaz de descartar la reencarnación como una especie de ilusión poseída por gente que no es feliz con sus propias vidas actuales. Pero buscando en mi propia mente, yo no estaba todavía listo para afirmar algún conocimiento de una vida pasada para mí mismo.

     Pero mientras rumiaba la idea, me vi obligado a recordar un acontecimiento ocurrido hace algunos años durante el cual una antigua novia y yo —realmente una relación no muy seria, al menos en lo que tenía que ver conmigo— adquirimos una copia de un análisis de vidas pasadas de nosotros dos de astrology.com para ver si seríamos compatibles como marido y esposa (lo cual resultó que no). Quedé enormemente perturbado al enterarme de que, según mi información de nacimiento (20 de Noviembre de 1944, a las 00:02 horas (tiempo universal [estadounidense] durante la Segunda Guerra Mundial), yo había cometido algún crimen importante en una vida pasada, y que yo estaba comprometido en esta vida a hacer algo que expiara aquello. No me gustó aquella idea. Se me pusieron los pelos de punta con sólo pensar en ello.

     Pensé poco en el asunto en los años intermedios hasta que completamente por casualidad (mientras yo había estado investigando el nombre de mi abuela paterna, cuyo nombre era Bronislava Kolodiej), me encontré con un artículo en Wikipedia que trajo el asunto de la reencarnación otra vez a mi mente.


     Coincidentemente, un hombre llamado Bronislav Kaminski (16 de Junio de 1899 — 28 de Agosto de 1944) fue un oficial militar ruso que posteriormente se convirtió en un general en el ejército alemán y que fue muerto más tarde en una emboscada o ejecutado por la Gestapo.

     Según http://en.wikipedia.org/wiki/Bronislav_Kaminski[1], su padre era polaco y su madre era alemana, pero él se consideraba a sí mismo un ruso. Él sirvió en el Ejército Rojo durante la guerra civil rusa [1917-1923]. Durante la "Gran Purga", Bronislav fue encarcelado. Más tarde desterrado a una región rural de lo que es ahora Bielorrusia, él se pasó al lado alemán y se convirtió en el comandante de una creciente milicia destinada a combatir la Amenaza Roja.

[1] En castellano en https://es.wikipedia.org/wiki/Bronislav_Kaminski

     Yo podría imaginar su odio contra los judíos que habían tomado el control de Rusia, y que, cuando todo fue dicho y hecho, habían matado a 66 millones de rusos no-judíos (según Solyenitsin). Este odio, supuse, lo había llevado a identificarse con Adolf Hitler y su pasión por impedir que los bolcheviques judíos invadieran Europa del Este y finalmente la recientemente revivida Alemania del Tercer Reich.

     Wikipedia describe cómo en 1942 Kaminski era el líder de su propio grupo de partisanos alemanes, y que pronto se convirtió en el comandante de la brigada de milicias [SS Sturmbrigade R.O.N.A., Ejército Ruso de Liberación Nacional, conocida como la Brigada Kaminski] en la ciudad de Lokot. Él administró el gobierno local, y estableció sus propios tribunales, cárceles y periódico.

     Después de algún éxito en diversas batallas en 1943, Kaminski estaba al mando de 10.000 soldados, pero su unidad comenzó a sufrir deserciones a medida que los soviéticos ganaban terreno. Aproximadamente 10.000 vidas civiles se perdieron cuando sus tropas se retiraron hacia el Oeste a Polonia.

     Durante la retirada aumentaron enormemente las deserciones, y su formación entera pareció cercana a la desintegración. Cuando uno de sus subordinados decidió desertar su unidad entera al enemigo, Kaminski según se afirma lo estranguló a él y a otros ocho delante de sus hombres. Esta acción no impidió que más hombres desertaran ante la exitosa embestida soviética.

     Sin embargo, el 27 de Enero de 1944 Himmler recompensó los "logros" de Kaminski con la Cruz de Hierro, de primera y segunda clase. Hacia Agosto, Kaminski había sido promovido a mayor-general de las Waffen SS.Pero el Levantamiento de Varsovia comenzó ese mes y los proyectos de Himmler cambiaron. Kaminski terminó siendo culpado por gran parte de un acontecimiento llamado la Masacre de Ochota en Polonia, en la cual 10.000 personas murieron en las circunstancias más angustiosas. Más tarde, habiendo sido culpado de robar propiedad que debería haber sido entregada al Reich, él fue ejecutado junto con su jefe de Estado Mayor, Ivan Frolov.

     Pero a sus hombres se les dio una explicación falsa: que él había sido muerto por partisanos polacos. Según reporta el artículo de Wikipedia, cuando los hombres de Kaminski rechazaron esa explicación, la Gestapo tomó el automóvil de Kaminski, lo empujó a una zanja, lo llenó de balas con una ametralladora, y esparció sangre de ganso por todas partes del automóvil. La desmoralizada unidad fue removida pronto de la ciudad y colocada lejos al Norte.

     Otra versión del fallecimiento del comandante de brigada Bronislav Kaminski declara que los funcionarios alemanes determinaron que su brigada era demasiado indisciplinada y poco confiable, y él fue llamado a Lodz para una conferencia de líderes, donde fue colocado delante de un consejo de guerra y ejecutado por un pelotón de fusilamiento. Otra versión sostiene que él fue fusilado cuando la Gestapo lo capturó.

     Meses después de la eliminación de Kaminski, en 1945 su antiguo subordinado Yuri Frolov declaró que Kaminski había dado permiso a sus hombres para saquear, proporcionando sustancia a la noción de que Kaminski había traicionado a la causa alemana.

     Por mi parte, después de oír tantos hechos negativos sobre alguien que posiblemente pudo haber sido mi antepasado pre-reencarnado, comencé a buscar algunas pruebas positivas de qué pudo haber sido realmente este personaje, pero la única defensa que pude encontrar fue que Kirill Frolov es el actual patriarca de la Iglesia Ortodoxa rusa, quien ha sido un abierto opositor de aquellos que han defendido lo justo de la causa alemana al tratar de frustrar ésta el despojo por parte de Stalin de Europa del Este.

     ¿Cómo fue que la Iglesia Ortodoxa rusa fue capaz de sobrevivir a casi un siglo de opresión judía sin ir sobre el enemigo de algún u otro modo? Ésa todavía es mi pregunta.

     De este modo, ésta es la historia de Bronislaw Kaminski, un polaco que se convirtió en un ruso y que se puso de parte de Hitler porque él odiaba lo que los judíos le habían hecho a Rusia. Y él murió, fue baleado por un pelotón de fusilamiento, faltando ocho días para que se cumplieran tres meses antes de que yo naciera.

     Entonces aquí estoy, uno de los críticos notables de la criminalidad judía en el mundo, que ha llegado a creer que la Segunda Guerra Mundial fue muy ciertamente un caso de tres países judíos —Estados Unidos, Gran Bretaña y la Unión Soviética— uniéndose para hacer desaparecer a la Alemania Nacionalsocialista, que se había convertido en la mayor amenaza en toda la Historia mundial para la hegemonía financiera judía sobre todo el mundo.

     De hecho creo que la maniobra de Hitler bien puede haber sido la última posibilidad legítima del resto del mundo para frenar al despiadado pulpo financiero judío que hoy tiene al mundo entero bajo su apretón, y que es la causa principal de todas estas guerras ejecutadas por Estados Unidos, el cual realmente está cumpliendo las instrucciones judías de Israel.

     Yo diría que esto presenta un caso circunstancial bastante fuerte de que yo pudiera ser la reencarnación del mayor-general de las Waffen SS Bronislav Kaminski.

     Podría ser, excepto que no tengo ni una sola escena retrospectiva de tal encarnación, ningún fragmento de memoria distante de mi tiempo como un luchador rebelde en la tundra rusa, aniquilando cuerpos en Polonia o jugueteando con la SS.

     No, mi conocimiento sobre lo que le sucedió a Alemania en la Segunda Guerra Mundial ha ocurrido completamente a consecuencia de mis lecturas. Pasó primero casi por casualidad cuando un conocido me dio una copia del Informe Leuchter, que no mostraba ningún rastro de residuos de cianuro en las paredes de lo que las autoridades alemanas insistían (y mintieron al respecto) que eran las murallas de las cámaras de gas de Auschwitz.

     Luego leí los Protocolos de Sión, que son una descripción misteriosamente exacta de lo que está sucediendo en el mundo hoy (así como estaba sucediendo en la época de Henry Ford también).

     Yo de algún modo puse aparte todo aquello a finales de los años '90 hasta que ocurrió el 11-S. Aquél no fue el acontecimiento inicial que llamó mi atención hacia los judíos, sino que lo fueron los efectos posteriores, las mentiras que fueron presentadas como la explicación oficial, la destrucción de evidencias, las falsas historias contadas por todos los políticos que todavía son repetidas hoy, y la presencia ubicua de judíos en todas las posiciones claves, desde consejeros presidenciales, pasando por los judíos del DHS [Departamento de Seguridad Interior] que permiten que los sospechosos supervisores israelíes vayan libres, hasta los jueces judíos que frenaron las investigaciones.

     Quizás el factor más importante fueron los periódicos, que habían sido mi profesión antes en la vida. Los periódicos apoyaron cada mentira que el gobierno contó como la verdad absoluta. No fue ninguna coincidencia que todos esos periódicos estén poseídos por judíos.

     Mientras yo estaba ingiriendo ese material también estaba sorbiendo los análisis del "Holocausto" hechos por Arthur Butz, Germar Rudolf, James Bacque, Ernst Zündel, Robert Faurisson y todos los otros héroes que han luchado durante décadas para tratar de destruír la Gran Mentira Judía que hasta hoy lleva obligatoriamente a tantas personas a la cárcel.

     Entonces yo realmente no necesitaba ninguna experiencia de alguna vida pasada para dirigirme inconscientemente a mi temática seleccionada a comienzos del siglo XXI.

     Se hizo obvio para mí que había que destruír este candado mental judío que ha anestesiado a la mayor parte de la población del mundo poniéndola en una realidad artificial donde la gente puede ser desaparecida, suicidada y exterminada mucho más fácilmente... donde la filosofía judía ha borrado completamente todas las nociones de honor, deber, integridad, compasión y entendimiento y las  ha reemplazado por avaricia insaciable, perversión, infidelidad, sadismo, y el abuso sexual contra sus propios niños...

     No tengo ningún particular deseo de difamar o idolatrar a Bronislaw Kaminski, porque tuve que confiar en el recurso judío Wikipediapara aprender algo sobre él de algún modo. Wikipedia no es necesariamente una fuente fidedigna.

     Pero si yo quisiera soñar, y tener algún pensamiento sobre la reencarnación de alguna manera, no debería ser averiguado quién yo pude haber sido en alguna vida pasada sino saber que alguien por ahí se reencarnaría como yo (no, no tengo que estar allí) y tomaría el trabajo que he intentado torpemente, tarde en la vida, de exponer, neutralizar, des-toxificar, y de alguna manera hacer que se extinga lo que considero el mayor peligro alguna vez enfrentado por la especie humana, que sería este horrible veneno conocido como el Judaísmo, que miente sobre la vida misma y promete destruír el mundo entero si se le impide infligir sobre cada uno la enfermedad secreta que alberga dentro de su propia alma.

     Así, si alguien como yo apareciera en algunos años en el futuro, quejándose de todo y pegando gritos acerca de la retorcida depravación que es la religión judía, eso significaría que el mundo estaría tratando de ser sano, y aquello me daría la gran satisfacción de saber que yo hube desempeñado algún pequeño papel para hacer que eso sucediera.

     Tenemos que seguir aquel curso si nuestra especie debe sobrevivir en alguna forma que se parezca a los seres que en un tiempo u otro, en nuestros momentos más felices, hemos aspirado todos a ser.–





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ALGUNOS COMENTARIOS

Steve
3 de Enero de 2016

     Concuerdo con usted, John, en que el Libro de los Muertos es acerca de la vida. Hemos tomado la palabra "muerto" y "muerte" para significar la muerte corporal física, pero, lo mismo que como con la Biblia, esto no significa eso. "Muerto" o "muerte" en las Escriturasse refiere a que el alma cuando se encarna en el cuerpo animal llega figuradamente a su "muerte". El cuerpo es la "tumba" y es también el "útero" del alma. Somos los muertos vivientes, y de ahí que el alma debe ser "nacida otra vez" del espíritu. El primer hombre es de la tierra terrenal, el segundo hombre es del espíritu. El alma es comparada a una semilla que tiene que ser plantada en el reino inferior para que "muriendo" traiga posteriormente la vida. El alma (como una semilla divina) es plantada en el reino inferior —el cuerpo animal—, y figuradamente llega a su muerte en la Materia para el propósito de su desarrollo, que es nacer otra vez del espíritu.

     El cuerpo está compuesto aproximadamente por 7 octavos de agua, de modo que la encarnación del alma en la Materia es el bautismo de agua, y el renacimiento al espíritu es el bautismo de fuego. La tierra y el agua eran símbolos de lo físico inferior, y el aire y el fuego, símbolos de la mente (aire) y el espíritu (fuego). La vida está en la sangre, y la sangre tiene la misma constitución química que el agua de mar. María (del latín Maria) significa "agua amarga", y María simboliza la Materia. De este modo, María o la Materia es la "Madre de Dios". María, entonces, es la Madre Divina. La reencarnación entonces es el Ciclo de la Necesidad para el desarrollo del alma.


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Robert Heimdal
3 de Enero de 2016

     A veces me pregunto si muchos de aquellos millones de personas que murieron en la 2ªGM, sobre todo en Alemania (en la destrucción de Dresden, Hamburgo, Berlín, en el hundimiento del Wilhelm Gustloff, en las expulsiones de alemanes después de la guerra) están volviendo a la vida en este nuevo milenio, ahora como jóvenes nacionalistas Blancos, para poner las cosas de vuelta en su lugar legítimo.

     Creer en la reencarnación, incluso de una manera débil, puede ser un buen antídoto contra el nihilismo.


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Ramaski
6 de Enero de 2016

     En el modelo metafísico védico, las reencarnaciones repetidas son el proceso por el cual podemos alcanzar la iluminacióno moksha. Después de un número suficiente de vidas, aquellos que han buscado diligentemente la verdad son capaces de ver más allá de la ilusión / maya de la separatividad individual. Cuando su conciencia se ha expandido a aquel grado, ellos vencen todos los deseos mundanos, se retiran de sus cuerpos, y se fusionan en Brahmán / Dios / Todo-lo-que-Es. Esta dichosa fusión finaliza los ciclos repetidos de nacimiento, lucha y muerte. En cierto modo, las almas individuales que navegan por la vida correctamente "se gradúan" finalmente de este mundo. A la inversa, las almas individuales que descuidan, o aún peor, intencionalmente rechazan la verdad espiritual, permanecerán atrapadas en la ilusión mundana de separatividad y todo el sufrimiento / samsara que va junto con ella.


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Mr. Greystone
7 de Enero de 2016

     Entiendo sus pensamientos en cuanto al hinduísmo y he considerado inconsistencias similares dentro de la religión. Tiendo a creer que la religión védica más temprana, pre-hindú (es decir, la religión basada sólo en las escrituras sánscritas arias más tempranas: los Vedasy los principales Upanishads) incluyó una cosmovisión basada en la Naturaleza. Los dioses védicos tempranos (léase: pre-hindúes) eran realmente nombres / personificaciones de fenómenos naturales tanto en los niveles macrocomo micro. Esos "dioses" abarcan todo en el universo natural, desde el nivel atómico al universal, es decir, el universo natural cuando los "rishis" o videntes védicos "oyeron" este conocimiento antiguo directamente de una fuente primordial, invisible, no humana pero tampoco artificial.

     Según la información que he sido capaz de reunir, el hinduísmo post-védico (y su descendiente más corrompido, el budismo), sobre todo las variedades modernas, es, con todo, una cosa completamente diferente. Por favor vea la entrada reciente aquí en este sitio, de Revilo P. Oliver en cuanto al hinduísmo [1]. Oliver pareció tener una buena comprensión de por qué el hinduísmo moderno tiene muy poco que ofrecernos. Sin embargo, creo realmente que la religión védica es digna de ser investigada, si es que no de nuestra fe o práctica. (Los elaborados rituales de la religión védica son, para la mente moderna, insanamente detallados, complicados y derechamente poco prácticos; algunos rituales pueden durar días o incluso semanas). Aunque no sea por ninguna otra razón sino que es el politeísmo indoeuropeo más antiguo existente, la religión védica es digna de nuestra consideración.

[1] http://renegadetribune.com/a-religion-for-aryans/ y en castellano en http://editorial-streicher.blogspot.com/2012/03/revilo-p-oliver-una-religion-para-arios.html


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Bhelenos
6 de Enero de 2016

     El Zoroastrismo de Irán encuentro que es una ideología aria preferible, con su progresión eterna, alcanzando el estado divino, o la inmortalidad y más allá.

     De http://authenticgathazoroastrianism.org/2015/07/28/auspicious-immortals-and-mortals-destined-for-immortality/ :

     «En el Zoroastrismo, los Afortunados Inmortales inspiran a los mortales una "fuerza sobrehumana" para ser tal como los dioses. Como leemos en los gathas poéticos, Yasna 48.1, "La Inmortalidad triunfará sobre las fuerzas demoníacas y los hombres mortales".

     «Para los demonios, la muerte y la mortalidad representan una limitación. Pero la "imperecedera energía del poder de la mente / pasión"representa a "Mazda".

     «Mazda y su ahûras"virtudes supremas / seres divinos" reharán la creación con esplendor y la inspirarán para ser imperecedera, no envejeciente e inmortal.

     «El poder imperecedero de la mente / pasión, las ideas geniales y creativas, son inmortales e indestructibles. Para la doctrina Zoroastriana, es el destino de los mortales llegar a hacerse inmortales. Estamos destinados para manifestar las ideas geniales y creativas en forma física, para evolucionar en un nuevo cuerpo y para hacernos inmortales en la carne. El viaje de la conciencia nunca terminará ni tampoco la evolución del hombre.

     «Los superhombres divinos de Ahûra Mazda le darán forma al mundo de nuevo en espléndida excelencia, y lo harán no envejeciente, inmortal, inmarchitable, eterno y por siempre joven, como es en el reino ideal (vasö / deseo de) (Yašt. 19. 11)».


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Mr. Greystone
7 de Enero de 2016

     Sí, para mí (en mi limitado conocimiento), el Zoroastrismo, siendo una religión monoteísta y menos basada en la Naturaleza que el politeísmo indoeuropeo antiguo, también ha sido mejor conservada (léase: menos corrompida) y es más fácil de comprender y practicar. Mientras la religión védica realmente sólo fue bien entendida alguna vez por las clases sacerdotales de brahmanes, debido a los complejos y alucinantes rituales de la religión, el Zoroastrismo fue y es una religión que podía ser entendida y practicada por el laico, como lo fue hace miles de años y todavía lo es hoy (aunque en pequeños números). Tristemente, incluso encontrar buenas traducciones inglesas de escrituras zoroastrianas y otras escrituras no es tan fácil debido al relativamente pequeño número de eruditos zoroastrianos y adherentes de habla inglesa a dicha fe.

     Me gustaría definitivamente aprender más sobre Zoroastrismo y lo que aquél tenía en común (y contraste) con su antigua fe pariente también aria, la politeísta religión védica.


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psychoNWO
6 de Enero de 2016
     
     Según los gnósticos hay dos creaciones, cada una reflejando orígenes ontológicos diferentes. Dos creaciones separadas y distintas, una divina y otra maléfica. Ambas creaciones están aparentemente atrapadas en la misma fisicalidad.

     La creación maléfica está absorta en la destrucción de todo lo que toca, como fue programada para hacer por su diseñador el Demiurgo, también conocido como Yaldabaoth, Yahvé, etc. El gnóstico del día moderno sostiene que el ADN de esa creación ha sido programado a la imagen de ese diseñador.

     Ellos también sostienen que la creación divina ha sido programada a la imagen de su diseñador, y como tal, su ADN está predispuesto a alcanzar brillantez, creatividad e inmortalidad. A pesar de haberse encontrado atrapada en la abyecta fisicalidad, su naturaleza divina ha determinado que haga lo mejor de una situación mala creando un ambiente civilizado en el cual conservarse hasta que sea rescatada. Además, su intelecto superior ha reconocido que el mejor camino para que esta civilización sobreviva es cumplir con la ley de la tierra sobre la que fue fundada. Ya que la ley está basada en la Naturaleza, esta civilización procura basar sus principios fundacionales sobre las leyes de la Naturaleza.

     La consideración del aspecto de inmortalidad de una creación y la ausencia de ella en la otra dará quizás una pista en cuanto a por qué el Demiurgo y sus bribones, que son probablemente judíos, parecen ser atraídos a establecer religiones grandiosas, y por qué la creación divina, que es probablemente la Raza Blanca, parece ser aspirada por las promesas de esas religiones grandiosas.

     Si éste es en efecto el caso, y si el sistema es regulado por el mecanismo de la reencarnación, como sostenían los gnósticos, entonces claramente ambas creaciones requerirían algo de la Naturaleza de diferentes dimensiones (o frecuencias) con lo cual facilitar las idas y venidas del sistema.

     Muchos investigadores afirman que a estas diferentes frecuencias dimensionales se puede acceder por medio del consumo de plantas psicodélicas, basadas en la Naturaleza, alteradoras de la conciencia. Pero el consumo de tales plantas, recibiendo ciegamente la instrucción de un sacerdote, no es un requisito previo para el descubrimiento de la propia divinidad. No deje, sin embargo, que los secuaces del Demiurgo lo atrapen a usted en ello, porque ellos podrían arrojarlo en una de sus cárceles para problema suyo. Eso es porque lo que usted descubre ¡podría significar que la fraudulenta "alianza cristiana-islámica-budista-hindú" de ellos se acabó!.–




Elias Akleh - Sobre los Criminales Genocidas Judíos

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     Publicado en tres partes en el sitio mwcnews.netdurante Febrero y Marzo de 2014, apareció el siguiente texto del analista palestino doctor Elias Akleh, que presentamos en castellano en una sola entrada. Como lo indica el título, el señor Akleh pasa revista aquí a diversos acontecimientos criminales: el genocidio de los armenios, la criminal Revolución bolchevique y el genocidio de los ucranianos, el genocidio perpetrado por la gente de Colón en el Caribe, el de los africanos por parte de los traficantes de esclavos, para concluír con el de los palestinos que no se ha detenido, todos los cuales el autor los atribuye, de acuerdo a la abundante documentación histórica existente, a la gente judía.


Los Mayores Criminales Genocidas Judíos
por Elias Akleh
Febrero-Marzo de 2014



     Desde el principio de la historia humana hemos presenciado a muchos asesinos genocidas: reyes, presidentes, líderes militares y clero político, que pidieron, defendieron y perpetraron crímenes genocidas contra naciones enteras. Un estudio exhaustivo de aquellos criminales muestra claramente que los peores asesinos genocidas a través de toda la Historia fueron mayormente judíos.

     Uno puede descubrir claramente una característica genocida judía en sus líderes y sus rabinos desde el principio de su historia que comienza con Moisés junto con otros líderes y rabinos como Josué, David, Samuel, Saúl, Salomón, y otros líderes israelíes de los tiempos contemporáneos como Ariel Sharon, Ovadia Yosef, Shimon Peres, Benjamin Netanyahu, Tzipi Livni, Ehud Barak y todos los Primeros Ministros y rabinos israelíes desde el establecimiento de Israel.

     Mientras los judíos atacan ferozmente a cualquier no-judío que los critique o exponga sus crímenes, ellos aprecian y honran a sus propios criminales genocidas y se jactan de ellos en su propia literatura, en sus propios medios judíos de comunicación y hasta en sus propios libros religiosos, como p. ej. en la Torá, en la Enciclopedia Judaica, la Universal Jewish Encyclopedia, el Who is Who in American Jewry, y muchos periódicos israelíes como Ynet y muchos otros.

     Se requerirían muchos volúmenes para enumerar a aquellos criminales judíos a través de toda la Historia; por lo tanto limitaré este artículo a algunos de sus criminales del siglo XX y dejaré que los lectores hagan su propia investigación sobre los miles de otros.

     A los judíos generalmente se les lava el cerebro para creer que ellos mismos son el pueblo elegido de Dios y que todas las otras naciones son sus sirvientes esclavos. Su élite se esfuerza por controlar las finanzas globales, un país a la vez, en su camino a construír su Israel judío en Palestina para que sea el centro de control del globo entero. Por medio de su retorcido sistema de la usura ellos fueron capaces de controlar el destino de Imperios, comenzando con el Imperio romano hasta el actual Estados Unidos. Ellos incitan el odio, los conflictos étnicos y las guerras religiosas azuzando a cristianos contra musulmanes para destruír esos Imperios para eliminar a cualquier Imperio rival de su soñado Israel judío. Su modo de actuar favorito es mediante los cripto-judíos, que aparentemente se convierten a otras religiones, cambian sus nombres y perpetran genocidios para culpar de ellos a otros.

     En 1915 aquellos cripto-judíos perpetraron el genocidio de los armenios y culparon de ello a los turcos. El Imperio otomano estaba controlando Palestina, buscada para ser convertida en el Estado judío, y había rechazado la oferta de Rothschild de comprarlo. La comunidad israelita sionista de Salónica, en Grecia, financió al turco "Comité para la Unión y el Progreso"(Ittihad ve Terakke) formado principalmente por cripto-judíos, para derrocar al Imperio turco en la que es conocida como la "Revolución de los Jóvenes Turcos" de 1908. Esa revolución fue de hecho una toma judía del poder conducida por cripto-judíos, como lo ha expuesto sir Gerard Lowther, embajador del Reino Unido ante el Imperio otomano.

     Después de la "Revolución de los Jóvenes Turcos" los nuevos líderes del Imperio otomano como Mustafá Kemal Pashá (Ataturk), Tala'at Pashá, Djavid Bey y muchos otros, eran cripto-judíos. Ellos controlaban el Imperio, la intelectualidad turca de entonces, que formaba la muy rica e influyente clase media, y aprovecharon la oportunidad para asesinar masivamente a los cristianos armenios. Tala'at Pashá fue el principal organizador del proceso de masacre y deportación. Los hombres armenios fueron asesinados en masa en sus propios barrios residenciales, y las mujeres junto con los niños y los ancianos fueron deportados al desierto sirio y fueron dejados allí para morir sin comida ni agua. El resultado fue 1,5 millón de armenios muertos.

     Los judíos querían una guerra religiosa global entre la Europa cristiana y el Imperio otomano musulmán, con la esperanza de asegurar Palestina para ellos. A fin de atraer a la Europa cristiana para que atacara al Imperio otomano con la justificación de proteger a los cristianos, los cripto-judíos mataron a los cristianos armenios y culparon de ello a los turcos musulmanes. Otros grupos étnicos cristianos, como asirios y griegos, fueron también puestos en la mira.

     Los turcos, más bien que los judíos, todavía son hasta ahora culpados por el genocidio armenio. Para una investigación en profundidad adicional revise de Christopher Jon Bjerknes la exhaustiva investigación "El Genocidio Judío de Cristianos Armenios" [1].

[1] En inglés en http://www.jrbooksonline.com/pdf_books/jewishgenocide.pdf

     La Revolución bolchevique de 1917 condujo al genocidio de aproximadamente 100 millones de rusos cristianos. Muchos no saben que la Revolución bolchevique fue de hecho una revolución judía. La edición de Mayo de 1907 de la revista National Geographic declaró que "Los líderes revolucionarios casi todos pertenecen a la raza judía, y la agencia revolucionaria más eficaz es la Asociación Judía...".

     El historiador ruso ganador del Premio Nóbel Aleksandr Solzhenitsyn culpó a los judíos por la Revolución y genocidio de los rusos en sus dos libros "El Archipiélago Gulag"y "Doscientos Años Juntos".

     Winston Churchill llamó a la Revolución bolchevique un movimiento judío en su artículo "Bolchevismo versus Sionismo"en el "Illustrated Sunday Herald"el 8 de Febrero de 1920 [2]. Él describió al comunismo como una "siniestra confederación de Judíos Internacionales, que han agarrado a la gente rusa por sus cabellos y se han convertido prácticamente en los amos indiscutibles de aquel enorme Imperio".


     En su libro "Les Derniers Jours des Romanofs"(Los Últimos Días de los Romanov), Robert Wilton, el renombrado corresponsal extranjero del Times de Londres, relató que de los 384 comisarios rusos, había 300 judíos, 264 de los cuales llegaron desde Estados Unidos tras la caída del gobierno imperial, y él enumeró los nombres de todos los líderes judíos de la Revolución.

     Los informes del capitán Schuyler, un oficial de Inteligencia del ejército estadounidense en Rusia durante la Revolución rusa, están guardados en los Archivos Nacionales estadounidenses en Washington. En su reporte de Marzo de 1919 él declaró que "el movimiento bolchevique es y ha sido desde su comienzo dirigido y controlado por judíos rusos del tipo más grasiento".

     La revista "American Hebrew"en Nueva York declaró en su edición del 10 de Septiembre de 1920 que "La Revolución bolchevique en Rusia fue el trabajo de la planificación judía y la insatisfacción judía. Nuestro plan es tener un Nuevo Orden Mundial. Lo que funcionó tan maravillosamente en Rusia va a convertirse en la realidad para el mundo entero".

     La Encyclopedia Judaica publica que la Revolución bolchevique era tan judía que los líderes judíos eran instruídos para que cambiaran sus nombres a fin de ocultar la dominación judía. El fundador del Ejército Rojo León Trotsky (verdadero nombre, Lev Bronstein) y el ministro soviético de asuntos exteriores Maxim Litvinov están denominados como judíos en la publicación "Quién es Quién en la Judería Mundial". Karl Marx aparece en una lista en el "Inside Judaica"como un judío proveniente de una larga línea de eruditos talmúdicos que había aprendido el comunismo del sionista Moisés Hess. Lenin (verdadero nombre, Vladimir Ulyanov) era en parte judío, casado con una judía, y defendió la superioridad judía.

     Según el libro del rabino Marvin Adelman "To Eliminate the Opiate", Jacob Shiff, el capitalista judío estadounidense de la firma bancaria Kuhn & Loeb, había financiado a los revolucionarios comunistas judíos con 24 millones de dólares, y recibió como un retorno de inversión 100 millones de rublos rusos.

     En Diciembre de 1917 Lenin estableció un organismo de Inteligencia conocido como la Cheka (más tarde fue conocido como GPU, NKVD y luego KGB) supuestamente para combatir a los contra-revolucionarios y saboteadores. La Cheka fue encabezada por el judío Genrikh Yagoda (Yahuda), quien fue responsable de la muerte de aproximadamente 66 millones de rusos —políticos, educadores, industriales, sacerdotes cristianos y otros— víctimas de la política de la colectivización forzada, el hambre, las grandes purgas, las expulsiones, los destierros, las ejecuciones y muertes masivas en los campos de concentración de prisioneros del Gulag. Él había expropiado las propiedades de la rica clase media y grandes propiedades de la Iglesia. Las iglesias y las mezquitas fueron su objetivo para la demolición, mientras que las sinagogas y las propiedades judías fueron dejadas intactas.

     Yagoda (Yahuda) fue responsable de la ejecución de millones de rusos y del encarcelamiento de otros millones en las prisiones del Gulag, donde él y otros comandantes judíos, como Lazar Kogan, Yakov Rappaport, Naftaly Frenkel, Aaron Solts y Matvei Berman, administraron 11 de 12 prisiones de muerte concentracionaria en el Gulagentre los años 1930 y 1938. Yagoda (Yahuda) es considerado el mayor asesino genocida judío del siglo XX, aunque muy pocas personas están conscientes de este hecho, mientras que el supuesto y todavía impugnado "Holocausto"emprendido por Hitler, con una cantidad comparada de víctimas de menos del 0,1%, es muy conocido en todo el planeta. 

     Lazar Kaganovich fue otro asesino genocida judío en Rusia. Con su hermana (Rosa) casada con Stalin y su hijo (Mihaíl) casado con la única hija de Stalin (Svetlana), a Kaganovich se le aseguraron las posiciones políticas más altas después de Stalin mismo. Él puso en práctica las políticas de Stalin de industrialización y colectivización de los modos más crueles, ya que él fue responsable de la muerte de al menos 20 millones de personas, incluyendo el Holodomor ("holocausto" de hambre) ucraniano de 1932-1933, donde 8 millones de ucranianos murieron de hambre. Él supervisó personalmente la confiscación de granos en Ucrania que provocó el Holodomor. Los archivos soviéticos en Moscú indican que "El hambre en Ucrania fue provocada para disminuír la cantidad de ucranianos, sustituír a los muertos con gente de otras partes de la URSS, y así matar el más leve pensamiento de alguna independencia ucraniana".

     Kaganovich había firmado personalmente las órdenes de ejecución de al menos 36.000 personas. Sus políticas también habían provocado un sufrimiento enorme a otras regiones rusas, como Kazajstán, la región Kuban, la región del Volga Inferior, el Cáucaso del Norte, Siberia y Kulaks. En 1957 Nikita Jrushev lo acusó de haber asesinado a 20 millones de rusos, lo cual él no negó, pero contestó que Jrushev mismo tenía mucha sangre en sus manos.

     Para una investigación posterior en profundidad puede revisar "Behind Communism"de Frank Britton [3], "The Jewish Century"de Yuri Slezkine [4], "The Rulers of Russia"de Denis Fahey [5], y "The Secret Behind Communism"[6] de David Duke.

[3] http://www.iamthewitness.com/books/Frank.L.Britton/Behind.Communism.htm
[4] Revisión de Kevin MacDonald en http://www.vdare.com/articles/stalins-willing-executioners
[5] http://www.whale.to/c/rulers-of-russia-by-denis-fahey.pdf
[6] http://www.pdfarchive.info/pdf/D/Du/Duke_David_-_The_secret_behind_communism.pdf

     Mientras los judíos han cargado al mundo occidental con la culpa por su presunto "holocausto" de 6 millones y, todavía hasta la fecha, demandan millones de dólares en reparaciones, ellos mismos no han reconocido su propia culpa directa en el genocidio armenio, el ruso y muchos otros que ellos perpetraron contra muchas naciones durante toda la Historia. Los judíos se dan a sí mismos el derecho de acusar a otros de genocidas, pero no permiten que los demás pronuncien una sola palabra sobre crímenes genocidas judíos o ni siquiera investigar la validez de su propio "Holocausto". Ellos usan esta última historia del "holocausto" de 6 millones de judíos (ha habido varias historias de un "holocausto" de 6 millones de judíos en el pasado) para manipular y dictar la política exterior de países europeos y de Estados Unidos.


* * * *


     Los judíos han estado desempeñando un siniestro y egoísta papel manipulador en Estados Unidos desde que Colón descubrió el Nuevo Mundo. Sus crueles explotaciones han provocado el exterminio de millones de personas de las naciones indígenas. Sus comerciantes de esclavos causaron la muerte de aproximadamente 100 millones de víctimas africanas.

     Muchos no son todavía conscientes de que Cristóbal Colón era de hecho un judío marrano. Los marranos, a veces llamados conversos (convertidos) eran los judíos españoles que vivieron y prosperaron bajo el dominio árabe en España, y que más tarde, después de la recaptura cristiana de España, fingieron convertirse al cristianismo para evitar la Inquisición española de 1350 iniciada por la Iglesia Católica para afirmar el cristianismo a través de toda Europa. Cecil Roth, el historiador judío británico declaró: "No fue difícil para los judíos insinceros y oportunistas convertirse en cristianos oportunistas e insinceros"(Cecil Roth, "Historia de los Marranos", Filadelfia, 1932) [7].

[7] http://newensign.christsassembly.com/A%20History%20of%20The%20Marranos.pdf

     Muchos historiadores judíos, como Cecil Roth ("Personalidades y Acontecimientos en la Historia Judía", Filadelfia, 1953) y Tina Levitan ("Jews in American Life", Nueva York, 1969), afirmaron que hay una fuerte evidencia de que Colón era un judío. Levitan encontró una referencia a la judeidad de Colón en un documento diplomático escrito por el embajador francés en España, que se refería a Colón como "el judío". Cristóbal Colón era hijo de Domingo Colón y Susana Fontanarrosa, a su vez hija del judío Jacob Abraham. Según Levitan, "Ningún judío español podría haber esperado alguna vez la ayuda del rey y la reina de España, de modo que el explorador (Colón) afirmó ser un católico italiano".

     Dos historiadores judíos, George Cohen en su libro "Jews in the Making of America"(Boston, 1924), y el doctor M. Kayserling en su libro "Christopher Columbus and the Participation of the Jews in the Spanish and Portuguese Discoveries"(Nueva York, 1894), proclamaron que judíos marranos ricos como Luis de Santángel, Gabriel Sánchez, Juan Cabrero y otros, y no la reina Isabel, habían financiado las expediciones de Colón. Santángel y Cabrero invirtieron 17.000 ducados (más de 100.000 dólares), mientras otros judíos como Abraham ben-Samuel Zacuto proporcionaron el equipamiento de astronomía y de navegación.

     En su primera expedición Colón descubrió la isla de La Española (actuales Haití y República Dominicana), donde él estableció una pequeña colonia de treinta y nueve personas de su tripulación. A su regreso a España él afirmó que había descubierto una nueva tierra. Él la llamó la Nueva Tierra Prometida a fin de animar a los judíos a financiar y unirse a él en más expediciones. Su segunda expedición consistió en una fuerza invasora de 17 grandes barcos y muchos nuevos colonos para La Española. Tras su llegada él descubrió que los nativos, conocidos como Taínos, habían matado a los 39 tiránicos hombres que él había dejado allí. Así, a fin de restablecer su autoridad y colonizar la isla para sus nuevos colonos mayormente judíos, Colón instituyó duras políticas de esclavitud y exterminio contra la población taína nativa.

     En su libro "Indians Are Us? Culture and Genocide in Native North America" (1994) [8], Ward Churchill, ex-profesor de estudios étnicos en la Universidad de Colorado, describió a Colón como un criminal de masas peor que el líder SS Heinrich Himmler, declarando que la campaña genocida de Colón redujo la población nativa de no menos de 8 millones en 1500 a simplemente 22.000 en 1514, según el censo español, un genocidio de 7.978.000, el exterminio de una población entera. Sin embargo, el bien documentado "holocausto" de ocho millones llevado a cabo por Colón, a diferencia del impugnado supuesto "holocausto" de 6 millones llevado a cabo por Hitler, ha sido olvidado y Colón es aclamado como un héroe por los medios de comunicación controlados por los sionistas y por la distorsionada Historia occidental.

[8] http://web.mit.edu/thistle/www/v9/9.11/1columbus.html

     La esclavitud está prohibida en las religiones, en el cristianismo, en el Islam, en el budismo, pero no en el judaísmo. En el judaísmo la propiedad de esclavos no sólo era legal sino una obligación religiosa, y es fomentada por los mandamientos de Moisés (Levítico25:44-46). Los esclavos, de naciones no-judías, son una propiedad para ser comprada, vendida y heredada según Moisés. A los judíos se les dio un permiso divino para comerciar con la esclavitud. El 4 de Enero de 1861 el rabino Morris Jacob Raphall de la congregación B’nai Jeshurun en Nueva York dio un sermón defendiendo la esclavitud, declarando que los bíblicos Abraham, Isaac, Jacob y Job, a quienes Yahvé "se dignó dar el carácter de perfectos, justos y temerosos de él, eran propietarios de esclavos". Los comerciantes judíos de esclavos, especialmente judíos estadounidenses, habían prosperado enormemente del costo de vidas de cientos de millones de esclavos.

     Los colonos europeos, los llamados Pioneros estadounidenses de la recientemente descubierta Tierra Prometida, necesitaban mucha mano de obra para limpiar los campos para construír sus nuevas casas, plantar y cosechar, sobre todo en el área del enorme Sur que era apta para el cultivo de arroz, algodón, tabaco y caña de azúcar. Los judíos de Holanda, que proporcionaron esclavos al Viejo Mundo, consideraron esa necesidad como su oportunidad dorada para expandir su comercio de esclavos en el Nuevo Mundo. Ellos establecieron la Dutch West Indies Company y enviaron a Jacob Barsimson a Nueva Amsterdam (Nueva York) para comenzar dicho comercio. Muchos otros judíos siguieron estableciéndose a lo largo de la costa del Este en Nueva Amsterdam y Newport, Rhode Island, que más tarde sería comúnmente referido como "El Centro Mundial Judío de Newport del Comercio de Esclavos".

     Al principio los judíos construyeron destilerías de licor para producir ron y whisky a fin de venderlos como aguardiente a los indios nativos para conseguir enviciarlos y explotarlos como esclavos. Los indios resultaron ser demasiado orgullosos para ser esclavos obedientes y eran agricultores pobres. Entonces los tratantes judíos de esclavos pusieron sus ojos en África. Ellos construyeron lo que fue llamado una Agencia Africana, cuya función era "recolectar" esclavos africanos, llevarlos a las costas africanas del Oeste, y prepararlos para ser embarcados hacia el Nuevo Mundo. Adictos al licor hecho por los judíos, los jefes de los pueblos solía asaltar otros pueblos, secuestrar a sus niños e intercambiarlos como esclavos con la Agencia por más licor y cuentas de cristal.

     Los esclavos capturados eran encadenados juntos, dos a la vez, acorralados como ganado a través del páramo africano hasta las costas del Oeste, cargados en barcos poseídos por judíos en un ambiente asqueroso y atestado, sufriendo durante el mes y medio de viaje hacia EE.UU., y vendidos en subastas humillantes. Muchos no sobrevivieron al viaje y murieron en el camino. Se ha calculado que por cada esclavo africano que resistió el rigor de ese viaje y alcanzó suelo norteamericano, otros nueve murieron por el camino. Con la captura y transporte anual de un millón de esclavos africanos se ha estimado que desde 1661 hasta 1776 (115 años) aproximadamente 110 millones de esclavos habían sido sacados de sus propios pueblos. Sólo aproximadamente el 10% de los esclavos, once millones, alcanzaron las Américas. El costo de ese comercio judío de esclavos fue de aproximadamente 100 millones de almas africanas. ¿Cómo se compara esto con el presunto "holocausto" judío?.

     Algunos de los judíos que fueron responsables de este gran holocausto fueron Aarón López, que poseía el 50% de barcos de esclavos, Issac Levy, Moses Levy, Mordecai Gómez, Nathan Marston, Jacob Barrett, Abraham Baruch, Judah Benjamin, Abraham Cohen, Isaac Elizer, Samuel Moses, y muchos otros.

     El Instituto Carnegie de Tecnologíaen Pittsburgh, Pennsylvania, alberga y hace públicos documentos auténticos titulados "Documentos Ilustrativos de la Historia de la Trata de Esclavos en Estados Unidos". Esos documentos enumeran con detalle los nombres y los dueños de los barcos de esclavos (exclusivamente judíos), la correspondencia de esos dueños judíos con los capitanes de sus barcos, y el número de esclavos, incluyendo sus pérdidas, en cada viaje. También revise el estudio de 1968 de Walter White "¿Quién Trajo los Esclavos a América?"[9], y los libros "The Secret Relationship Between Blacks and Jews",volúmenes uno y dos [10], del Departamento de Investigación Histórica de las Naciones del Islam.

[10] Volumen 1 en https://www.radioislam.org/islam/english/books/secrrel1/The%20Secret%20Relationship%20between%20Blacks%20and%20Jews.pdf   y volumen 2 en
http://www.pdfarchive.info/pdf/T/Th/The_Nation_of_Islam_-_The_Secret_Relationship_between_Blacks_and_Jews_Volume_2.pdf


* * * *


     Basada en el distorsionado supremacista y racista mito religioso judaico del "Pueblo Elegido de Yahvé en la Tierra Prometida de Yahvé", la élite del poder judío se reunió, hace más de dos mil años, y trazó un plan para establecer un Orden Mundial judío, cuyo objetivo último es establecer un Gran Israel exclusivamente judío en el corazón del Viejo Mundo que se extienda desde el Éufrates al Nilo con Jerusalén como su capital.

     Durante los pasados dos mil años este proyecto de un Gran Israel no ha logrado materializarse. El sionismo ha permanecido como un movimiento minoritario de judíos principalmente de Europa del Este. Los judíos en general, especialmente los judíos europeos y estadounidenses, son más materialistas que religiosos y han prosperado bien en Occidente debido a sus desviadas prácticas: usura, prostitución, juegos de azar y adicción a sustancias. Los judíos orientales Mizrahi se habían establecido cómodamente en los Estados musulmanes árabes y no quisieron desarraigarse ni siquiera por objetivos religiosos.

    Para forzar a los judíos a emigrar a Palestina, los líderes sionistas siguieron la recomendación de Theodor Herzl donde él declaró: "Es esencial que los sufrimientos de los judíos empeoren. Eso ayudará a la realización de nuestros proyectos. Tengo una excelente idea... induciré a los anti-judíos a liquidar la riqueza judía... los anti-judíos nos asistirán, reforzando así la persecución y la opresión de los judíos. Los anti-judíos serán nuestros mejores amigos".

     Los líderes sionistas lanzaron encubiertas campañas anti-judías y de propaganda afirmando que los judíos eran perseguidos y masacrados en Europa del Este. Incluso antes de la 1ªGM, las publicaciones de los medios estadounidenses poseídas por los sionistas afirmaron que 6 millones de judíos europeos habían sido exterminados en un holocausto. Las historias de ese "Primer Holocausto" [11] llenaron las primeras páginas de los periódicos estadounidenses, especialmente del New York Times, poseído por los judíos, el cual comenzó la campaña en su edición del 11 de Junio de 1900, la cual duró hasta la edición del 17 de Febrero de 1945, contando historias de masacres judías y los 6 millones de víctimas, la mitad de la población judía. Hay una profecía talmúdica de que los judíos "retornarán" a Palestina después de la muerte de 6 millones de ellos.

[11] http://www.zioncrimefactory.com/wp-content/uploads/2011/09/The-First-Holocaust.pdf

     La mayoría de los judíos europeos, sobre todo alemanes, se consideraban europeos, y rechazaron el Sionismo. Cuando las campañas sionistas fallaron en forzarlos a emigrar a Palestina, la organización sionista decidió emprender acciones reales. Europa, especialmente Alemania, presenció ataques terroristas contra propiedades judías. El ataque que fue más publicitado fue la Kristallnacht del 9 y 10 de Noviembre de 1938. Lo que se omite de ese incidente es el hecho de que dos días antes de la Kristallnacht, el 7 de Noviembre, un joven judío polaco de nombre Herschel Grynszpan [12], fue enviado para matar al embajador alemán ante Francia, el conde Welczek. En vez de eso, él equivocadamente disparó a la oficina del Primer Secretario, Ernst vom Rath. Los alemanes se enfurecieron y fueron incitados a atacar propiedades judías.

[12] http://www.thepeoplesvoice.org/TPV3/Voices.php/2013/11/11/kristallnacht-75th-anniversary-what-real

     Vale la pena mencionar aquí, aunque son ignorados deliberadamente, los esfuerzos de la policía alemana para proteger las propiedades judías de la muchedumbre. Para empeorar las cosas, las organizaciones sionistas declararon un boicot económico contra Alemania y aprovecharon esa oportunidad para animar a los judíos alemanes a evitar la persecución alemana emigrando a Palestina.

     Ese "escape" judío desde Alemania es una historia fraudulenta. El hecho era que los viajes y la emigración a Palestina por parte de judíos, como lo explica el ensayo "Jewish Emigration from the Third Reich"de Ingrid Weckert [13], eran libres y realmente muy bien organizados y animados por los nacionalsocialistas. Los sionistas tenían muchos acuerdos con los nacionalsocialistas para facilitar la emigración judía, sólo a Palestina. La cooperación entre nacionalsocialistas y sionistas se remonta a 1933 cuando el Congreso de la Organización Sionista Mundial apoyó al Partido Nacionalsocialista y derrotó una resolución que pedía acciones contra Hitler. La Federación Sionista de Alemania apoyó al Partido Nacionalsocialista desde 1933.

[13] http://www.vho.org/aaargh/fran/livres8/WECKERTjewemig.pdf

     El Banco Anglo-Palestina de la Organización Sionista Mundial rompió el boicot judío de Alemania e hizo un tratado comercial con Hitler y se convirtió en el principal distribuidor de bienes nacionalsocialistas a través de todo Oriente Medio y Europa del Norte. La organización sionista estableció campos de trabajo en Alemania para entrenar a jóvenes judíos alemanes nacionalsocialistas en agricultura y guerra antes de transportarlos a Palestina. El lema de esos campos de trabajo era "ARBEIT MACHT FREI", "El Trabajo Te Libera". Aquellos eran campos de entrenamiento militar y no campamentos para prisioneros como se ha afirmado.

     Los judíos alemanes que rechazaron el Sionismo fueron perseguidos, sus propiedades confiscadas, y fueron enviados a esclavizadores campamentos para prisioneros, para trabajo de guerra, no sorprendentemente por la policía judía llamada la "Policía Judía del Orden"[14] también conocida como "Judenratte". Fue esa policía judía la que fue responsable de los encarcelamientos y las muertes de muchos judíos alemanes no-sionistas. Por otra parte, los judíos sionistas, sobre todo los jóvenes y capaces, fueron transferidos en barcos alemanes a Palestina. La Organización Sionista Mundial, que supervisó esa transferencia, rechazó todas las solicitudes judías de inmigración a cualquier otro país aparte de Palestina.

[14] http://davidduke.com/polish-historian-who-dared-to-tell-truth-sacked-faces-criminal-charges/

     Además de ese acuerdo de transferencia, conocido como "Ha’avara" en hebreo, las organizaciones sionistas habían cooperado con los nacionalsocialistas en sus esfuerzos de guerra contra los Aliados. En 1941 Avraham (Ya’ir) Stern hizo un pacto militar entre la sionista Organización Militar Nacional (conocida como el grupo terrorista Stern) conducida por Yizhak Shamir, una vez un Primer Ministro israelí, y la Alemania Nacionalsocialista, conocido como el "Documento de Ankara". Esas organizaciones terroristas sionistas [15] habían bombardeado objetivos británicos en el Mandato británico de Palestina, como el hotel Rey David en Julio de 1946, ataques contra los ferrocarriles, refinerías de petróleo y botes de la policía. Gran parte de ese terrorismo sionista está documentado en el libro de David A. Charters "The British Army and Jewish Insurgency in Palestine, 1945-1947". Los ataques terroristas sionistas contra Gran Bretaña no estuvieron restringidos sólo a Palestina. El 31 de Octubre de 1946 el grupo terrorista sionista Irgun bombardeó la embajada británica en Roma. El grupo terrorista sionista Stern envió asesinos a Gran Bretaña para asesinar a funcionarios británicos.

[15] https://journals.lib.unb.ca/index.php/jcs/article/view/10538/11136

     Inicialmente las organizaciones sionistas habían sacrificado intencional y voluntariamente las vidas de millones de judíos europeos no-sionistas, y más tarde de judíos árabes sefardíes, a fin de presionar a otros judíos para que emigraran a Palestina para establecer un Estado judío.

     Muchos historiadores y escritores judíos han documentado este sacrificio sionista, el "Holocausto" o Shoa. Entre éstos están los libros de Lenni Brenner "El Sionismo en la Época de los Dictadores"y "51 Documentos. Colaboración Sionista con los Nacionalsocialistas"; el libro del ferviente sionista Ben Hecht "Perfidia", acerca del sacrificio de judíos húngaros; el libro de 1960 de Hannah Arendt "Eichmann en Jerusalén. Un Informe sobre la Banalidad del Mal"; el libro del escritor pro-Israel Edwin Black "El Acuerdo de Transferencia: La Dramática Historia del Pacto entre el Tercer Reich y la Palestina Judía", acerca del pacto de 1933 para transferir a 60.000 judíos alemanes y 100.000 dólares a Palestina; el libro de Alfred Lilienthal "¿Qué Precio Israel?", y el libro de Ingrid Weckert "Emigración Judía desde el Tercer Reich", sólo para mencionar unos pocos de entre muchos otros libros.

     El núcleo de la ideología sionista es diferente al de cualquier otro movimiento colonialista orientado a explotar a la población autóctona. El objetivo sionista es la evacuación total de la tierra de parte de sus habitantes palestinos mediante el proceso de exterminio y transferencia masiva, arrasamiento de sus ciudades y pueblos, borradura de su historia y cultura, y suplantación con una población extranjera únicamente de judíos occidentales, para inventar una nueva historia y cultura, y construír una nueva sociedad supremacista. El idioma del "Estado judío [que] es impensable sin la transferencia obligatoria de los árabes a los Estados árabes"había sido adoptado desde el primer Congreso Sionista en Basilea en 1897, y había sido repetido por célebres líderes sionistas como Israel Zangwill (escritor judío sionista), Haim Weisman (presidente de la Organización Sionista), Theodor Herzl (fundador de la Organización Sionista Mundial, WZO), Nahman Syrkin (fundador del Sionismo Social), Selig Soskin (director del Fondo Nacional Judío), y muchos otros líderes sionistas hasta hoy.

     Esta mentalidad genocida fue expresada en la declaración de Arthur Ruppin, jefe de la Agencia Judía en Palestina desde 1933 a 1935: "No creo en la transferencia de individuos, creo en la transferencia de pueblos enteros". En una carta de 1937 a su hijo, el sionista David ben-Gurión, que se convertiría en el primer Primer Ministro de Israel, escribió: "Expulsaremos a los árabes y tomaremos su lugar. En cada ataque debería darse un golpe decisivo que provoque la destrucción de casas y la expulsión de la población". Ante los ejecutivos de la Agencia Judía, Ben-Gurión declaró en 1938: "Estoy a favor de la transferencia obligatoria, y no veo nada inmoral en ello".

     Los ataques y expulsiones en las que Ben-Gurión estaba pensando comenzaron realmente a principios de los años '30 cuando el dinero sionista fue usado para comprar la tierra de señores feudales otomanos ausentes y expulsar a todos los agricultores palestinos de la tierra. Hacia 1931, 20.000 familias palestinas fueron desalojadas de su tierra de este modo. Para acelerar el proceso, Ben-Gurión y Moshe Sharett, quien más tarde se convirtió en el segundo Primer Ministro israelí, lanzaron el "Plan C", cuyos objetivos eran el asesinato de líderes políticos palestinos, apoyadores financieros, oficiales de alta graduación y funcionarios, daño a los transportes, daño a los medio de subsistencia de los palestinos, a los pozos de agua, granjas y pequeños negocios, y el ataque a pueblos, clubes, cafés y lugares de encuentro de los palestinos. Esos ataques fueron cometidos por los grupos terroristas "Itzel", conducido por Menájem Begin, y "Lehi", conducido por Yitzhak Shamir. Los terroristas Begin y Shamir se convirtieron en posteriores Primeros Ministros del Estado terrorista de Israel.

     A principios de 1948 las milicias sionistas estaban muy bien entrenadas y armadas, y listas para tomar la tierra. El 10 de Marzo de 1948 Ben-Gurión lanzó el "Plan D", también conocido como "Plan Dalet", cuyos objetivos eran la destrucción de pueblos palestinos y la transferencia forzosa de los aldeanos para que se convirtieran en una responsabilidad económica de las fuerzas árabes generales.

     El Plan Dalet tenía muchas sub-operaciones militares originadas en la Palestina central hacia tres direcciones: Operación Dani, hacia el Este para capturar Jerusalén, Operación Dekel, hacia el Norte para alcanzar el río Litani en el Líbano, y Operación Anti-Farouq, hacia el Sur para capturar Gaza y Sinaí. El Plan Dalet fue comunicado a los comandantes militares con órdenes operacionales de Ben-Gurión claramente definidas para la acción sin distinguir entre inocentes y culpables. Él declaró que "ha llegado el tiempo de infligir daño colateral... cada ataque tenía que terminar con la ocupación, destrucción total de pueblos y expulsión de todos los habitantes".

     Ben-Gurión estableció un escuadrón de la muerte terrorista conocido como la Unidad 101 que fue encabezado por Ariel Sharon, quien más tarde llegó a ser Primer Ministro, el peor criminal genocida en la historia de Israel, también conocido como "el carnicero" y "la retroexcavadora". Durante comienzos de los años '50 la Unidad 101 de Sharon fue responsable de muchas demoliciones de pueblos y masacres en Idna, Surif, Wadi Fukin, Jalameh, Rantis, Budrus, Dawayima, Jan Yunis y Gaza, entre muchos otros lugares. Sharon posteriormente fue responsable de muchas otras masacres y demoliciones de casas en la Cisjordania, Gaza, Egipto y Líbano. Esas masacres seguían un patrón, repetido en un pueblo tras otro.

     Durante la guerra de 1948 los israelíes despoblaron 675 pueblos y villas de los palestinos y cometieron 70 masacres. Al menos 33 masacres de civiles palestinos [16] fueron cometidas y 450 pueblos palestinos fueron completamente arrasados hasta el suelo [17] incluso antes de que cualquier ejército árabe hubiera entrado en el conflicto. Los soldados israelíes también habían ejecutado a sangre fría a prisioneros árabes. Se reportó que entre 5.000 y 15.000 prisioneros egipcios fueron asesinados a sangre fría durante la guerra de 1956. Según el secretario general de la Organización de Derechos Humanos egipcia, Muhamad Munib, 11 fosas comunes fueron descubiertas en Sinaí. La BBCreportó el 7 de Septiembre de 1997 que los soldados israelíes, no dispuestos a cuidar de los prisioneros de guerra y queriendo ahorrar sus municiones, condujeron sus tanques sobre los presos egipcios que estaban amarrados.

[16] https://occupiedpalestine.wordpress.com/2010/10/03/the-deathmasters-israeli-massacres-on-palestinians/
[17] http://www.israelnationalnews.com/News/News.aspx/168912#.Uwma8oZBlnA

     Ben-Gurión lanzó también una campaña para borrar de la Historia la historia palestina y su cultura. Él estableció un "comité de nombramiento" formado por presuntos arqueólogos y expertos bíblicos para rebautizar todas las ciudades palestinas y los sitios de los pueblos arrasados que habían sido militarmente usurpados. El objetivo de ese comité era des-arabizar y hebraizar la tierra, un proceso de memoricidio de la historia palestina y su cultura afirmando que Palestina era una tierra desierta sin gente, y que los judíos habían convertido ese desierto en jardines florecientes. Golda Meir más tarde negó la existencia de los palestinos declarando que nunca hubo un pueblo palestino.

     Los sucesivos líderes israelíes prosiguieron el genocida plan sionista ocupando la Cisjordania, la Franja de Gaza y los Altos del Golán en 1967. En la Cisjordania ellos asesinaron a 13.000 palestinos y desalojaron de sus hogares a casi 400.000. La expulsión de familias palestinas y la demolición de sus casas se ha convertido en una rutina israelí en curso. Sólo en Jerusalén ellos demolieron 9.000 casas y perturbaron la residencia de 15.000 palestinos allí. La usurpación de la tierra palestina y la construcción de colonias israelíes (llamadas "asentamientos") prosiguen con toda fuerza hasta el presente.

     Las guerras israelíes contra los Estados árabes buscadores de la paz nunca se ha detenido. En 1982 Israel ocupó el Líbano y durante 18 años devastó dicho país. Israel atacó el Líbano otra vez en 2006, pero fue repelido. Israel rechazó el gobierno palestino democráticamente elegido de Hamás y le puso sitio en la Franja de Gaza durante los pasados siete años haciendo de Gaza el campo de concentración al aire libre más grande de la Historia, privando de comida a su población, y haciendo de Gaza su campo de matanza y práctica de tiro para armas internacionalmente prohibidas, como sucedió en Diciembre de 2008.

     Cuando Israel afrontó una resistencia árabe eficaz y dejó de conseguir cualquiera de sus objetivos militares contra el libanés Hezboláy Hamás de Gaza, los líderes sionistas perpetraron los ataques del 11-Scontra Estados Unidos. Ellos usaron los ataques del 11-S, la guerra global contra el terrorismo, el "Holocausto", el "anti-semitismo" y la protección del "pueblo elegido de Yahvé" para azuzar al Occidente cristiano contra el mundo musulmán, manipulando las intervenciones militares estadounidenses en el mundo, sobre todo en el Oriente Medio, para perpetrar muchos "holocaustos" contra naciones no-judías: Afganistán, Iraq, Siria, Libia, Líbano y Palestina.

     El sionismo con su herramienta israelí constituye la amenaza más grande para el mundo entero. Con un dios celoso, enojado, vengativo y genocida, como es descrito en su Torá, como el ídolo y ejemplo ideal a imitar, uno puede muy bien entender que los judíos, a lo largo de sus generaciones, han desarrollado en su conciencia colectiva una característica genocida supremacista similar. Después de todo, Jesús se dirigió a ellos, hace dos mil años, diciéndoles: "Ustedes pertenecen a vuestro padre, el diablo"(Juan 8:44).–





La Falsedad del Mito del Matriarcado

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     De la doctora en Antropología y profesora universitaria la estadounidense Joan Bamberger, que ha investigado y escrito acerca de diversas culturas, hemos traducido su ensayo de 1974 "The Myth of Matriarchy: Why Men Rule in Primitive Society", que forma parte del libro recopilatorio "Women, Culture and Society"(1974) enfocado en una visión feministade la Antropología, artículo donde la autora afirma que los mitos y leyendas acerca de un gobierno de las mujeres no se referían a una historia previa de matriarcado (para el cual no hay pruebas arqueológicas) sino que eran declaraciones estatutarias para asegurar el dominio masculino. El blanco de los cuestionamientos de la autora es, sin duda, el trabajo del suizo Johann J. Bachofen "El Matriarcado"(1861), que popularizó dicha noción más con conjeturas que con evidencia arqueológica, y que no ha dejado de tener continuadores y repetidores. Para apuntalar su tesis, la autora echa mano a la misógina mitología de los aborígenes de Tierra del Fuego y de algunas tribus amazónicas, que hablan de un antiguo gobierno de las mujeres.


EL MITO DEL MATRIARCADO:
Por Qué los Varones Gobiernan en la Sociedad Primitiva
por Joan Bamberger, 1974



     No cabe ninguna duda de que el interés del público por los matriarcados primitivos ha sido revivido. Repentinamente artículos de revistas y libros parecen dar testimonio de un antiguo Gobierno de las Mujeres, así como de un estilo de vida arcaico que se supone que se diferenciaba radicalmente del nuestro. Puesto que ningún matriarcado persiste en ninguna parte en este momento, y dado que las fuentes primarias que los describen están faltando totalmente, tanto la existencia como la constitución de sociedades dominadas por las mujeres sólo pueden ser objeto de conjetura. La ausencia de esa documentación, sin embargo, no ha sido un impedimento para aquellos eruditos y divulgadores que ven en el concepto del matriarcado primitivo una razón fundamental para un nuevo orden social, uno en el cual las mujeres pueden y debieran conseguir el control de roles políticos y económicos importantes.



BACHOFEN Y EL DERECHO MATERNO: MITO E HISTORIA

     El más temprano y más erudito estudio del matriarcado fue publicado en Stuttgart en 1861 por el jurista y estudioso de la cultura clásica el suizo Johann Jakob Bachofen. Su libro Das Mutterrecht(Derecho Materno: Una Investigación del Carácter Religioso y Jurídico del Matriarcado en el Mundo Antiguo) [1] tuvo un impacto en las opiniones del siglo XIX acerca de la evolución de las instituciones sociales tempranas. Argumentando a partir de fuentes históricas principalmente poéticas y frecuentemente dudosas (Hesíodo, Píndaro, Ovidio, Virgilio, Horacio,la Ilíada y la Odisea, Heródoto y Estrabón) [2], Bachofen trató de establecer como un hecho moral e histórico la primacía del "derecho materno", que él pensó que había surgido de la asociación natural y biológica de la madre y el niño. El matriarcado, o el dominio de la madre "sobre la familia y el Estado", según Bachofen, fue un desarrollo posterior generado por la profunda insatisfacción de la mujer con la "sexualidad descontrolada"que el hombre había forzado sobre ella.

[1] Los extractosde Das Mutterrecht (1861) están disponibles en traducción en Ralph Mannheim, editor, Myth, Religion and Mother Right(Bachofen, 1967).
[2] La exactitud de esas fuentes clásicas acerca del matriarcado es cuestionada por Simon Pembroke (1967). Él concluye una investigación académica de diversas citas griegas que usó Bachofen, con la opinión de que "Lo que los griegos sabían sobre su pasado, y sobre sus vecinos, resulta ser muy poco".


     Una serie gradual de modificaciones en la familia matriarcal condujo a la institución del matrimonio individual y a "la transmisión matrilineal de la propiedad y los nombres". Esa etapa avanzada del Derecho Materno fue seguida de un gobierno civil a cargo de las mujeres, al cual Bachofen llamó una "Ginocracia" [o "Ginecocracia"]. El gobierno a cargo de las mujeres fue derrocado finalmente por el "principio del Padre Divino", pero no antes de que el Derecho Materno hubiera puesto claramente su sello sobre una religión estatal. En efecto, fue ese carácter sagrado del matriarcado, fundado en el misterio generativo maternal, el que representó para Bachofen el grueso de sus evidencias a favor de antiguos matriarcados.

     En el mismo año en que apareció Das Mutterrecht, fue publicado otro trabajo académico que apoyaba una opinión contraria, a saber, que el patriarcado era "la condición primitiva de la raza humana". La obra Ancient Law de Henry Sumner Maine procuraba establecer, mediante el método de la jurisprudencia comparada, que todos los grupos humanos estuvieron "originalmente organizados de acuerdo al modelo patriarcal"(p. 119). El argumento de Maine descansaba en la información contenida en las Escrituras bíblicas, en particular los primeros capítulos del libro del Génesis, y en la ley romana. Con la publicación simultáneade Das Mutterrecht y de Ancient Law se puede decir que el debate entre los matriarquistas y patriarquistas fue inaugurado en los círculos intelectuales de Europa occidental. Que ninguno de ambos lados haya ganado una victoria se debe a una falta de pruebas en ambos.

     La teoría del matriarcado atrajo a partidarios leales tales como John F. McLennan (otro abogado, que introdujo una hipótesis matriarcal en 1865 independientemente de Bachofen; vea la introducción de Rivièrea Primitive Marriage de McLennan,1970), Lewis Henry Morgan (1877, cuya influencia en El Origende la Familia, la Propiedad Privada y el Estado, de Friedrich Engels, es bien conocida), y Edward Burnett Tylor (1899). La teoría patriarcal fue defendida con considerable habilidad en The History of Human Marriage, de Edward Westermarck (1891), quien demostró exitosamente que los varones podían ser dominantes tanto en los asuntos familiares como políticos en sociedades con sistemas de descendencia matrilineal. Lo que se sabe acerca de las condiciones pasadas y presentes de pueblos primitivos y tempranos no es un buen augurio para ningún futuro descubrimiento de un caso claro e indiscutible de matriarcado.

     Las sociedades patriarcales, sin embargo, parecen abundar de hecho así como en la teoría, aunque es verdad que no hay un modo certificable de documentar las relaciones políticas y jurídicas de las sociedades humanas más tempranas. Es cierto que si los matriarcados alguna vez existieron, ellos no existen ahora. ¿Evolucionaron los matriarcados quizás hace mucho tiempo hasta convertirse en patriarcados, como supuso Bachofen que ellos lo hicieron? Esta pregunta, aún sin contestar en la Historia, una vez más plantea interesantes problemas que hoy sirven como focos para el movimiento feminista contemporáneo. Si los antropólogos y los eruditos de la jurisprudencia clásica ya no leen a Bachofen, los defensores del movimiento feminista actual sí lo hacen. Ellos han descubierto de nuevo en su teoría del Derecho Materno un precedente académico para la privilegiada posición de las mujeres en la sociedad primitiva.

     Aparte de la cuestión de la exactitud de Bachofen como un historiador cultural, está la pregunta del valor y la deseabilidad de su defensa moral del gobierno femenino. Si lo he leído correctamente, la matriarca de Bachofen es un grito lejano de la mujer liberada de hoy. No sorprendentemente, ella tiene un parecido más cercano con las concepciones victorianas de la mujer perfecta, "cuya belleza intachable, cuya castidad y elevados ideales" inspiraron a los hombres a hazañas de caballería y valentía para el propio bien de ella (Bachofen, 1967, p. 88).

     En su romantización particular de las mujeres, Bachofen estaba actuando como un eco de su contemporáneo John Ruskin, quien escribió que las mujeres, en virtud de su perfección moral innata, ejercerían el poder "no dentro de sus casas simplemente, sino sobre todos dentro de su esfera"(citado en Scanlon, 1978, p. 12), aunque esa esfera fuese invariablemente exclusiva del campo político masculino. La visión que la época victoriana tenía de la mujer la elevaba al status de diosa, pero hizo poco o nada para promover su independencia o para ofrecerle oportunidades de realizarse fuera del hogar. Bachofen era, parece, no más ilustrado que otros victorianos al alabar las virtudes del amor casto y el matrimonio monógamo y fructífero.

     Así, a pesar de todas sus supuestas avanzadas nociones acerca de los matriarcados arcaicos, Bachofensiguió promoviendo por medio de la ficción y la fantasía un statu quo que hasta ahora se ha hecho demasiado familiar. La maternidad, sobreviviendo al derecho materno en sus muchos aspectos, fue puesta firmemente bajo la tutela protectora del derecho paterno, donde ha prosperado. Sólo se puede decir que Bachofen añadió poco que fuera nuevo a la opinión moderna acerca del desarrollo social prehistórico. Ni siquiera las amazonas de la referencia clásica, aquellas decididas doncellas guerreras con un solo seno, podrían explicar un sistema político duradero en el cual las mujeres eran de facto las gobernantes. Las amazonas, por todas sus valientes innovaciones sociales y sexuales, fueron consideradas por Bachofen como representantes de un grupo extremista que, puesto que tenían una preferencia por trabajar y vivir fuera del sistema social reconocido, se vieron condenadas al fracaso en su empresa.

     Para dar crédito a Bachofen, se debe comprender que cuando Das Mutterrecht fue publicado primeramente, la ciudad de Troya no había sido todavía excavada, y poco, si es que algo, se sabía del mundo mediterráneo antiguo aparte de lo que estaba registrado en las fuentes clásicas estándares. Totalmente consciente de que textos tales como las epopeyas homéricas no fueron escritos como historias en el sentido más estricto, él sin embargo aceptó esos relatos mitológicos como un depósito confiable de historias reales.

     Al confundir así Mito con Historia, Bachofen cometió lo que es hasta hoy un error bastante común del juicio. Pero cualesquiera fuesen las confusiones de Bachofen, él admitió realmente que el tema de sus investigaciones le presentaba ciertas "dificultades". Él vio que la ausencia de pruebas arqueológicas significaba que él no podía apoyar su hipótesis del Derecho Materno con datos sólidos, y le recordó al lector que "el trabajo preliminar más elemental permanece todavía sin ser hecho, ya que el período cultural al cual pertenece el Derecho Materno nunca ha sido seriamente estudiado. De este modo, estamos entrando en territorio virgen" (1967, p. 69).

     Desde la publicación de Das Mutterrechtese "territorio virgen" ha sido explorado por una multitud de arqueólogos y antropólogos sociales. Sus diligentes búsquedas en la prehistoria de las culturas mediterráneas así como en las actuales condiciones de las sociedades primitivas alrededor del mundo, no han descubierto un solo caso indiscutible de matriarcado. Incluso los iroqueses, alguna vez un baluarte para los "matriarquistas", resultan ser sólo matrilineales, aunque la sociedad de los iroqueses todavía sea lo más cercano a la representación del ideal de Bachofen del "Estado ginocrático", puesto que las mujeres iroqueses desempeñaron un papel decisivo en las políticas de linaje y de sus pueblos [3]. Sin embargo, a pesar del poder sustancial manejado por las mujeres, los hombres eran elegidos sistemáticamente como líderes políticos. A lo sumo, los iroqueses hoy son considerados un "cuasi-matriarcado" (Wallace, 1971). Haber puesto en duda, como lo acabo de hacer, las pruebas históricas para el Gobierno de las Mujeres no es lo mismo que cuestionar el significado de las mitologías del matriarcado.

[3] Han sido registrados numerosos casos de sociedades en las cuales la herencia de la pertenencia al linaje y de la propiedad es transmitida legítimamente sólo por las mujeres (matrilinealidad). Se entiende que este sistema es completamente diferente de aquel en el cual las mujeres se ha aceptado que gobernaban (matriarcado). Ni Cleopatra ni las reinas de Inglaterra han sido matriarcas en este sentido más restringido, porque sus regímenes fueron iniciados por casualidades de nacimiento. En general, una monarca ha accedido a la corona sólo cuando el heredero masculino necesario era menor de edad o cuando no había ninguno.

     La cuestión principal parecería no ser si las mujeres tuvieron o no posiciones de importancia política en algún punto en la Prehistoria, o incluso si ellas tomaron las armas y lucharon en batalla como las amazonas supuestamente hicieron, sino que hay mitos que afirman que las mujeres hicieron esas cosas, lo cual ellas ahora ya no lo hacen. Este status mitológico de matriarcados primitivos representa un problema tan interesante como cualquiera generado en el siglo XIX acerca de la credibilidad o viabilidad del matriarcado como un sistema social. Indudablemente el falso evolucionismo y la Prehistoria incorrectamente identificada condujeron a la incomprensión de cualquier verdadera contribución que Bachofen pudiera haber hecho al estudio del mito, ya que él no consideró que los "acontecimientos" relatados por los mitos no tienen que tener necesariamente una base en hechos históricos.

     Bachofen apoya una visión errónea del Mito como Historia en todas partesde Das Mutterrecht por medio de convincentes afirmaciones, pero sin pruebas. "Todos los mitos acerca de nuestro tema encarnan un recuerdo de acontecimientos reales experimentados por la raza humana. Ellos representan no ficciones sino realidades históricas. Las historias de las amazonas y Belerofonte son verdaderas y no poéticas" (1967, pp. 150-151). La relación entre Mito e Historia es posteriormente distorsionada por el uso de Bachofen de fragmentos míticos más bien que de mitos enteros, y sus frecuentes alusiones a textos de la narrativa clásica suponen una historicidad nunca pretendida por sus autores. Las referencias fragmentarias y los materiales-fuentes dispares se combinan para presentar como débil el argumento de que Mito es equivalente de Historia.

     Más que replicar una realidad histórica, el mito más precisamente cuenta un fragmento de la experiencia colectiva que necesariamente existe fuera del tiempo y el espacio. Compuesto por una enorme y compleja serie de acciones, el mito puede llegar a convertirse, mediante la recitación repetida, en una historia de acción moral, aunque no de por sí una cronología detallada de acontecimientos registrados. El mito puede ser parte de la historia de la cultura al proporcionar una justificación para una realidad presente y quizás permanente, dando una inventada explicación "histórica" de cómo fue creada esta realidad.

     No existe ninguna regla claramente definida para determinar una historia "verdadera" como opuesta a una ficticia cuando uno trata con la literatura oral de sociedades pre-alfabetizadas. Por lo tanto, distinguir entre acontecimientos históricos y míticos puede a menudo conducir a confusiones. El problema se simplifica mucho cuando los mitos relatan historias acerca de animales hablantes y seres sobrenaturales, ya que ellos pueden ser más fácilmente clasificados como mitos, leyendas o cuentos populares que como historias. Al aceptar a las amazonas y a Belerofonte como personajes históricos, Bachofen no observó esta diferencia. En vez de ello, él decidió construír una historia de prácticas matrimoniales y legales humanas sobre las experiencias narrativas de criaturas míticas, una táctica que los antropólogos del siglo XX rechazarían como carente de validez.

     Los seguidores actuales de la teoría de Malinowski del "mito como constitución o programa [charter] social" (1926) prefieren en cambio ver el mito como una explicitación, en términos simbólicos, de las asociaciones entre los roles sociales y las instituciones, por una parte, y los aspectos psico-biológicos de los contadores de mitos, por otra. Este punto de vista considera al mito como historia cultural sólo en tanto una sociedad particular haga uso de sus mitos para reproducir o reordenar su experiencia social. Los mitos son raramente, si es que alguna vez, historias literales, aunque probablemente se pueda demostrar que ellos reinterpretan ciertos acontecimientos cruciales en el crecimiento y el desarrollo de ciclos de vida individuales.

     Propongo mirar los mitos del matriarcado como cartas estatutarias sociales [social charters] en este ensayo. Mi estrategia es primero presentar dos constelaciones de mitos acerca del Gobierno de las Mujeres que se derivan no del depósito clásico de los numerosos ejemplos de Bachofen, sino de narraciones registradas de varias sociedades indias sudamericanas [4]. Luego proporciono interpretaciones para esos mitos en base a fuentes etnográficas publicadas.

[4] Aunque la discusión pudiera ser reforzada por muchos ejemplos de otras partes del mundo, la tendencia sudamericana refleja mi propio particular interés y formación en Brasil central. Llevé a cabo trabajo de campo etnográfico en tres pueblos de los indios kayapó del Norte (Gê) en 1962 y 1963, y otra vez brevemente en 1966.


* * * *

     En Sudamérica, las series más completas de mitos del Gobierno de las Mujeres provienen deáreas geográfica y culturalmente distintas: desde Tierra del Fuego en el extremo Sur del continente, y de los bosques tropicales del Noroeste del Amazonas y Brasil central.Ha habido varias versiones reportadas de otras regiones también (véase Métraux, 1943; Schaden, 1959). El Mito mismo tiene una venerable historia en los anales de la exploración sudamericana. Las variantes de dicho mito fueron recolectadas en los siglos XIX y XX por exploradores, misioneros y antropólogos que viajaron a lo largo de las costas rocosas y en los interiores agrestes de Tierra del Fuego, y por otros que cruzaron los canales desconocidos del territorio Noroeste del Amazonas.

     Trabajando en Tierra del Fuego entre 1918 y 1924, el antropólogo austriaco sacerdote Martin Gusinde y su contemporáneo E. Lucas Bridges (nacido en 1874 en Tierra del Fuego), hijo de un misionero inglés, recolectó varios relatos narrativos de los orígenes de las ceremonias secretas masculinas de los yámanas (yaganes) y los selk'nam (onas). Tanto a Gusinde como a Bridges se les concedió el inusual honor de ser admitidos a esos rituales como iniciados, un hecho que presta una autenticidad especial a los informes de ambos sobre esas extintas ceremonias aborígenes fueguinas.



ORÍGENES MÍTICOS DE LAS CEREMONIAS MASCULINAS FUEGUINAS

     Entre la gente yámana-yagán la Kina es tanto una ceremonia como una estructura arquitectónica. Llamada la Gran Choza, o logia masculina, su ingreso está restringido a los varones iniciados adultos. De vez en cuando una mujer ha sido admitida a la Kina, pero sólo después de que ella ha garantizado a los miembros masculinos que pueden confiar en ella los secretos de la Kina. En 1922 Gusinde asistió a una ceremonia en la cual una mujer fue seleccionada para recibir ese honor. La siguiente versión del mito yámanadel origen de la Kina está extraída de Gusinde (1961, pp. 1238-1249):

     «El principal objetivo del grupo de hombres en su Kina es recordar de nuevo a la población femenina su superioridad y hacer que todas las mujeres definitivamente sientan el mayor poder de ellos... Las mujeres fueron las primeras en realizar la Kina. En ese tiempo las mujeres tenían todo el poder; ellas daban órdenes a los hombres, quienes eran obedientes, tal como hoy las mujeres obedecen a los hombres. Los hombres en las canoas también se sentaban atrás en la popa, y las mujeres al frente en la proa de la canoa. Todo el trabajo en la choza era realizado por los hombres, con las mujeres dando órdenes. Ellos cuidaban de los niños, cuidaban el fuego y limpiaban las pieles. Ése era el modo en que siempre debía ser».

     El mito continúa relatando cómo las mujeres inventaron la Gran Choza Kina"y todo lo que sucede en ella", y luego engañaron a los hombres para que pensaran que ellas eran espíritus. "Ellas salían de la Gran Choza... pintadas por todas partes, con máscaras en sus cabezas". Los hombres no reconocieron a sus mujeres, las cuales, simulando ser espíritus, golpearon la tierra con pieles secas "de modo que se sacudió". Sus gritos, aullidos y rugidos asustaron tanto a los hombres que ellos "se precipitaron a sus chozas, y se escondieron, llenos de miedo". Las mujeres continuaron con sus espeluznantes interpretaciones, manteniendo a los hombres en "miedo y sumisión", de modo que ellos debían hacer todo el trabajo como las mujeres les habían ordenado.


     Un día el Hombre-Sol, que suministraba a las mujeres-espíritus en la choza Kina abundante caza, mientras pasaba por una laguna oyó por casualidad las voces de dos muchachas. Siendo curioso, él se escondió en los arbustos y vio a las muchachas «lavándose la pintura que era la característica de los "espíritus" cuando ellos aparecían». Ellas también estaban practicando imitaciones de la voz y modales de las hijas del Sol, ambas "espíritus" prominentes en la choza Kina. De repente el Hombre-Sol las encaró, insistiendo en que las muchachas le revelaran "lo que ocurre en la choza Kina".

     Finalmente ellas le confesaron: "Son las mujeres mismas las que se pintan y se ponen máscaras; luego ellas salen de la choza y se muestran a los hombres. No hay ningún otro espíritu allí. Son las mujeres mismas las que gritan y aúllan; de esta manera ellas asustan a los hombres". El Hombre-Sol entonces volvió al campo y expuso a las fraudulentas mujeres. En venganza, los hombres asaltaron la choza Kina, y siguió una gran batalla en la que las mujeres fueron o muertas o transformadas en animales, y "a partir de aquel tiempo los hombres actúan en la choza Kina; ellos hacen eso en la misma manera que las mujeres antes de ellos".

     Un nuevo orden social vino de esta manera a prevalecer entre los yámanas. Las mujeres, alguna vez las orgullosas dueñas de la Kina y sus secretos, cejaron en su empeño y se hicieron subordinadas de los hombres. Bridges (1948, pp. 412-413) cuenta el mito de origen de la selk'nam-ona Hain, o logia ceremonial masculina, que es sorprendentemente similar a la historia de la Kina. Las logias rituales Kina y Hain parecen haber tenido funciones idénticas en las dos culturas. Ellas se diferenciabana principalmente en que la Hainera una institución exclusivamente masculina de la cual las mujeres estaban definitivamente excluídas.

     «En los días en que todo el bosque estaba siempre verde, antes de que el periquito pintara las hojas de otoño rojas con el color de su pecho, antes de que los Gigantes vagaran por los bosques con sus cabezas por arriba de los árboles; en los días en que el Sol y la Luna caminaban por la tierra como esposo y esposa, y muchas de las grandes montañas durmientes eran seres humanos: en aquellos días muy remotos la brujería era conocida sólo por las mujeres de la tierra ona. Ellas tenían su propia logia particular, a la cual ningún hombre se atrevía a acercarse. Las muchachas, cuando se acercaban a la edad de mujer adulta, eran instruídas en las artes mágicas, aprendiendo cómo llevar la enfermedad e incluso la muerte a todos aquellos que las disgustaban.

     «Los hombres vivían en un vil miedo y sometimiento. Ciertamente ellos tenían arcos y flechas para abastecer el campamento con carne, y ellos se preguntaban qué uso se podría hacer de tales armas contra la brujería y la enfermedad».

     Cuando esa "tiranía de las mujeres" empeoró, los hombres decidieron matar a todas las mujeres: "Y de allí siguió una gran masacre, de la cual ninguna mujer escapó en forma humana". Después de ese colapso los hombres se vieron obligados a tener que esperar para sustituír a sus mujeres hasta que las pequeñas muchachas jóvenes maduraran.

     «Mientras tanto surgió la pregunta: ¿Cómo podrían los hombres conservar la ventaja ahora que ellos la tenían? Un día, cuando esas muchachas alcancen la madurez, ellas podrían agruparse y recobrar su antiguo predominio. Para impedir eso, los hombres inauguraron una sociedad secreta propia y prohibieron para siempre la casa de las mujeres en la cual tantos malvados complots habían sido incubados contra ellos. A ninguna mujer se le permitió acercarse a la Hain so pena de muerte. Para asegurarse totalmente de que ese decreto fuera respetado por su pueblo de mujeres, los hombres inventaron una nueva rama de la demonología ona: una colección de extraños seres —sacados en parte de sus propias imaginaciones y en parte de leyendas populares y antiguas— que tomarían forma visible al ser personificados por miembros de la logia y así espantando a las mujeres de los consejos secretos de la Hain».

     Considerando la proximidad geográfica y la similitud cultural de los pueblos selk'namy yámana, el parecido de sus mitos no es sorprendente. Ambos textos cuentan la misma historia: en el momento de la Creación las mujeres gobernaban, manteniendo a los hombres en sometimiento y temor hasta que ellos descubrieron la fuente del poder femenino y decidieron sacárselo de encima. Los mitos son claramente misóginos, aunque, en este aspecto, el mito selk’nam le lleva ventaja al yámana, aunque sólo fuera porque en él las mujeres son descritas como repugnantes brujas, las precursoras de la enfermedad y la muerte.


     Es de algún interés que las mujeres selk’nam y yámanas sean diferenciadas en los mitos según el grado de daño que ellas son capaces de provocar sobre los varones sojuzgados. En la versión yámana las mujeres se benefician simplemente mediante una inteligente personificación de los espíritus, mientras que en la versión selk’nam las mujeres son instruídas en las artes mágicas para ser usadas contra los hombres.

     La distinción entre la autoridad espiritual yámana y el poder selk’nam para causar un mal real es tanto ritual como mitológica. Entre los yámanas, por ejemplo, ambos sexos son preparados por medio de un larguísimo ritual de iniciación llamadoCiexaus, en el cual a los adolescentes se les enseñan los preceptos de la tribu, mientras que entre los selk'namsólo los varones pasan por la doble ceremonia de iniciación Klóketen, de la cual las mujeres están excluídas. De vez en cuando, excepcionales mujeres yámanasson miembros privilegiados de la logia masculina Kina, pero ese honor nunca es dado a las mujeres selk’nam. Los mitos de origen de las asociaciones Hain y Kina enfatizan una discrepante conceptualización de las mujeres por parte de las dos tribus, y los rituales que vuelven a representar los mitos sirven para mantener esas distinciones.

     En el mito yámana las mujeres inventaron la choza Kina y el ceremonial que ocurría en ella. Por medio de sus vívidas interpretaciones y complicados disfraces las mujeres lograron engañar a los hombres para que pensaran que ellas eran en realidad espíritus temibles. En el mito selk’nam las mujeres fueron descritas como brujas que tenían esclavizados a los hombres por medio del uso de la magia negra. Las mujeres yámanas eran ingeniosas imitadoras de espíritus. Ellas reinaron por una astucia más bien que por malas prácticas mágicas, como lo hicieron sus vecinas selk'nam. La astucia y la fiabilidad entre las mujeres yámanaseran recompensadas por una invitación ocasional a unirse a la asociación masculina, pero las mujeres selk’nam no tenían derecho a un privilegio similar.

     El mito del pasado mal comportamiento de ellas es usado repetidas veces para excluírlas del ritual de iniciación exclusivamente masculino. La utilidad de un mito que explica el origen de la asociación masculina, separando a los hombres de las mujeres en la acción y en el espacio, es fácilmente demostrada. Como parte de un código cultural que distingue a hombres de mujeres en términos morales, el mito incorpora valores que permiten a los varones una autoridad superior en la vida social y política. El mito, aunque representa un tiempo antes de que fuera establecido el orden social, establece la invariabilidad de aquel orden.



EL MITO TUKANO DE YURUPARÍ

     Los danzantes enmascarados y las asociaciones masculinas no están confinados a Tierra del Fuego, sino que parecen estar extendidos en todas partes de Sudamérica. Dondequiera que ellos son descubiertos, sin embargo, esas manifestaciones culturales de la autoridad masculina representan medidas restrictivas inventadas para asustar y forzar a las mujeres a un comportamiento socialmente aceptable. A las mujeres (y a los niños) les está prohibido el acceso a los lugares de reunión masculinos. Ellas son mantenidas ignorantes de la fabricación y el uso de las máscaras de espíritus "bajo pena de muerte". Entre ciertas tribus del Noroeste del Amazonas, y en el Brasil central, las trompetas y las flautas sagradas cumplen las mismas funciones que las máscaras fueguinas.

     El conocimiento de dichas trompetas y flautas está prohibido a las mujeres, y, como en Tierra del Fuego, los orígenes de la parafernalia sagrada masculina son materia de mitos locales. En particular, un complejo ciclo de ritual y mito, conocido popularmente como Juruparí (Yuruparí), es común a varios pueblos tribales en la región colombiana de Vaupés y en el Amazonas basileño del Noroeste. El mito y el rito de Yuruparí, en las muchas variantes registradas, constituyen una parte de un gran inventario de rasgos culturales compartidos a través de toda el área del Amazonas del Norte por los indios de habla tukano: los tukano propiamente dichos, los desana, los uanano y los cubeo, así como los grupos witoto y tukuna. Los elementos compartidos comunes incluyen la agricultura de subsistencia, con la mandioca amarga como la cosecha básica, la cerbatana, la ropa de cortezas, la canoa hecha de un tronco ahuecado, la cerámica, las grandes casas comunales, los parientes exógamos patrilineales, el culto a antepasados míticos, ritos de iniciación, e instrumentos musicales sagrados.

     El mito de Yuruparí relata la invención de esos instrumentos, su posesión, y las tradiciones antiguas asociadas con la interpretación de ellos. Uno de los relatos más tempranos y completos de la leyenda de Yuruparí es el que fue registrado por el viajero italiano Ermanno Stradelli en 1890. Según su narrativa (Stradelli, 1964), Yuruparí era considerado como el héroe cultural y el legislador de las tribus del Río Negro superior.

     Nacido de una muchacha-niña virgen que había quedado embarazada por la savia de una fruta prohibida, Yuruparí casi desde su nacimiento se convirtió en el jefe en una tribu de mujeres cuyos hombres habían muerto en una epidemia. Fue Yuruparí quien posteriormente enseñó a su pueblo que a las mujeres no se les debería permitir meterse en los asuntos de los hombres, o participar en los ritos masculinos secretos cuando los instrumentos musicales sagrados eran ejecutados. La mujer que viole la prohibición está condenada a la muerte, y "cualquier hombre que muestre los instrumentos o revele las leyes secretas a una mujer" está obligado a matarse, o a ser muerto por los otros miembros.

     El ciclo mítico está dedicado al recuento de numerosos episodios en los cuales las mujeres descubren el escondrijo de los hombres para las trompetas sagradas, y observan la ceremonia masculina secreta, la cual ellas entonces dan a conocer a otras mujeres. El episodio final del mito finaliza con una singular nota de desesperanza. Yuruparí, enviado a buscar de parte del Sol (su padre) a la mujer perfecta, parece no tener éxito, y se pregunta:"¿Y cuál es la perfección que el Sol desea?".

     "Ella debe ser paciente, saber guardar un secreto y no ser curiosa", se contesta Yuruparí (Stradelli, 1964: 66), quien concluye: "No existe ninguna mujer hoy en la tierra que combine esas cualidades. Si una mujer es paciente, ella no guarda secretos; si ella guarda secretos, ella no es paciente; y todas ellas son curiosas, y desean saberlo todo y experimentarlo todo".

     Versiones incompletas y menos poéticas del mito de Yuruparí incluyen el relato de Goldman (1963, p. 193) del origen de las trompetas sagradas de los cubeos (tukanos, en Colombia), que eran parte de un culto ancestral; y el relato de Murphy (1958, pp. 89-91) del mito mundurucú (tupí, en Brasil central), "La Invención de las Trompetas Sagradas". Tanto la variante cubeocomo la mundurucú comienzan con la posesión de los instrumentos musicales en las manos de las mujeres, quienes los mantenían escondidos en los bosques donde ellas se reunían en secreto para interpretarlos.

     En el mito mundurucú, las mujeres dedicaban tanto tiempo a tocar las flautas que ellas finalmente abandonaron a sus maridos y sus deberes de casa. "Las mujeres, como poseedoras de las trompetas, habían ganado así el predominio sobre los hombres. Los hombres tenían que llevar la leña y traer el agua, y ellos también tenían que hacer [pan de mandioca]... Pero los hombres todavía cazaban y esto los enfadó porque era necesario proveer alimentos para las trompetas... Entonces uno de los hombres sugirió que ellos les quitaran las trompetas a las mujeres"(Murphy, 1958, p. 90).

     Eso ellos finalmente lo hicieron, obligando a las mujeres a volver a las viviendas y a permanecer subordinadas a los hombres. Entre los cubeo, el héroe cultural Kuwai "tomó las trompetas de las mujeres y las dio a los hombres, advirtiéndoles que nunca permitieran que las mujeres las recuperaran"(Goldman, 1963, p. 193). Nimuendajú (1952, pp. 77-78), informando sobre los tukuna, quienes ocupan las orillas del río Solimões en el lado brasileño de la cuenca del Amazonas, menciona trompetas de corteza y madera que son llevadas al amparo de la oscuridad a las celebraciones de las ceremonias de pubertad de las muchachas. Los instrumentos musicales eran usados para asustar a mujeres y niños, a quienes les estaba prohibido verlos.


     Un texto tukuna (Nimuendajú, 1952, p. 78) cuenta cómo una muchacha rompió las reglas y espió las flautas. En venganza, ella fue muerta y descuartizada. Su carne fue posteriormente ahumada y convertida en papilla para una fiesta del pueblo, a la cual tanto su madre como su hermana fueron convocadas. Otra variante del mito es la dada por Reichel-Dolmatoff (1971, pp. 169-170). La primera trompeta de Yuruparí fue fabricada por la mantis religiosa, la cual usó el instrumento para denunciar el incestuoso delito del Padre Sol, que había violado a su hija pre-púber. El mito sigue:

     «Algún tiempo después de la introducción de las flautas y la interpretación ceremonial de ellas... algunas mujeres siguieron a los hombres cuando ellos fueron al refugio a esconder los instrumentos. Cuando los hombres se habían ido, las mujeres sacaron las flautas para mirarlas; ellas las tomaron en sus manos y las tocaron con sus dedos. Pero cuando ellas tocaron sus propios cuerpos con las manos que habían estado tocando las flautas, de repente crecieron pelos en sus pubis y bajo sus axilas, zonas que antes no tenían ningún pelo. Cuando los hombres volvieron al refugio, las mujeres los sedujeron, y aunque ellas pertenecían a misma fratría, ellos cohabitaron con ellas. Sólo después de castigos sobrenaturales, que el mito no describe, los hombres fueron capaces de establecer el orden otra vez. Desde entonces las reglas que son observadas actualmente han sido hechas cumplir».

     Parece claro, incluso a partir de las formas fragmentarias dadas aquí, que los mitos de Yuruparí y aquellos de las asociaciones fueguinas Hain y Kina comparten un grupo común de temas que son su sello. Primero, los objetos secretos que pertenecen a los hombres (máscaras, trompetas, asociaciones rituales, canciones, y otros por el estilo) al principio fueron inventados por mujeres y poseídos por ellas; o, si aquellos objetos provinieron de los hombres, sus secretos fueron descubiertos por mujeres, que contaminaron su sacralidad al verlos o tocarlos. Entre los desana, la contaminación causó el crecimiento del pelo del cuerpo y una unión incestuosa iniciada por las mujeres que sedujeron a los hombres de su propia fratría.

     Al acto sexual prohibido le siguió un castigo. Entre los tukuna, y en la versión de Stradelli de Yuruparí, las mujeres fueron muertas por un delito menor que el del incesto: el espionaje de los instrumentos sagrados era una sentencia de muerte para todos los infractores de la prohibición. Una relación obvia se establece en estos mitos entre visión, contacto y sexo prohibido, aunque la asociación sea simbólica y debería quizá ser vista como parte de un complejo conjunto de leyes culturales que establecen las conductas apropiadas esperadas entre los sexos.

     Un segundo tema que traspasa estos mitos es que una posición de autoridad se adhiere a los poseedores de secretos tribales, y que aquellos que están como autoridades, sean mujeres o varones, pueden también disfrutar de una vida de relativo ocio. Las trompetas y las asociaciones son las insignias de esa autoridad, que permite a un sexo dominar al otro. No bien comenzados, los mitos invariablemente concluyen con los hombres en el poder. O bien los hombres han tomado de las mujeres los símbolos de autoridad y se han instalado como los dueños legítimos de la ceremonia y su parafernalia, o ellos invocan sanciones violentas contra las mujeres que se han atrevido a desafiar la autoridad masculina.

     En ninguna versión las mujeres ganan la batalla por el poder. En cambio, ellas permanecen para siempre sujetas al terrorismo masculino, escondidas en sus chozas, temiendo mirar a los espíritus enmascarados y ancestros bramantes. No está claro de los informes publicados si las mujeres realmente creen los cuentos contados a ellas por hombres, aunque las penas para mujeres y niños por infracciones a las prescripciones ceremoniosas parezcan ser bastante reales [5].

[5] Las mujeres son castigadas a través de toda el área del Amazonas mediante una violación grupal por delitos menores tales como ver la parafernalia masculina sagrada. Durante mi permanencia entre los kayapó de Gorotire en 1962, una pequeña muchacha intentó echar una ojeada bajo el traje de hoja de palma de uno de los bailarines enmascarados del ceremonial. El incidente ocurrió de noche, de modo que la identidad de la muchacha nunca fue descubierta, pero un arma fue disparada para advertir al pueblo de las consecuencias de una infracción de las reglas que tienen que ver con las máscaras sagradas. La mañana siguiente los informantes masculinos dijeron que si ellos hubieran sido capaces de determinar qué niña había quebrantado la prohibición ellos seguramente la habrían matado.

     Las versiones recolectadas, no todas las cuales ha sido citadas aquí (véase Lévi-Strauss, 1973, pp. 271 y ss.), de los mitos sudamericanos del Gobierno de las Mujeres, establecen pautas para el comportamiento sexual, al menos en la mente de los oyentes. En el relato de Stradelli las características deseables de la mujer ideal son enumeradas, mientras que en el fragmento tukuna el castigo contra la infeliz muchacha que espió las trompetas es un cruel recordatorio de las reglas de buena conducta para las mujeres.

     En otra versión del mito, un informador tukano (Fulop, 1956, pp. 341-366) insiste en que su título verdadero es "Relaciones Sexuales", una crucial pieza de evidencia que el antropólogo ha relegado a una nota a pie de página. El informante desanade Reichel-Dolmatoff (1971, p. 171) trató de comunicar el mismo trozo de información cuando él relató que "Yuruparí no es una persona, es un estado; es una advertencia para no cometer incesto y casarse sólo con mujeres de otro grupo". Claramente, él intentaba distinguir a Yuruparí, el héroe cultural, de los preceptos de Yuruparí, dados como los principios fundantes del orden social y sexual y transmitidos de generación en generación por medio de contar el mito y realizando de nuevo la ceremonia.

     Los dos aspectos de Yuruparí parecen ser inseparables. Yuruparí, descrito como la progenie de un nacimiento virginal o como el hijo del Sol, es hecho el vehículo por medio del cual el orden cósmico llega a ser establecido. Las leyes de Yuruparí son las leyes de un sistema tribal que mantiene una convención sagrada en donde un separado conjunto de valores es mantenido para los hombres y para las mujeres. Las leyes estipulan que las mujeres están excluídas de la participación en acontecimientos sociales y religiosos importantes, porque ninguna mujer alcanza la perfección como es definida por el Padre Sol y su protagonista terrenal, Yuruparí.

     Las diferencias sexuales, definidas por y legisladas en el mito, son demostradas en la ceremonia. Para conservar esas diferencias entre los sexos en la vida social, son invocadas sanciones sobrenaturales. Parece hacer poca diferencia si esas penas toman la forma de espíritus masculinos que se presentan a mujeres y niños mediante misteriosas reverberaciones en los instrumentos sagrados, o por medio de las espantosas máscaras llevadas puestas por los hombres, ya que el principio es el mismo, tanto en el Amazonas del Noroeste como en los límites más meridionales de Tierra del Fuego: los hombres gobiernan por medio del terror de un secreto muy guardado.



EL MITO Y LOS ROLES SOCIALES

     Cada mito comienza con una época previa y caótica antes de que el actual orden social fuera establecido, cuando se suponía que las mujeres habían gobernado sobre la tierra. Se decía que las mujeres al principio crearon y poseyeron las logias sagradas, las trompetas y las máscaras. Ellas se sentaban en la sede del poder, gobernando sin justicia ni piedad. Entonces la situación repentinamente se invirtió.

     En Tierra del Fuego los hombres descubren por casualidad la verdadera fuente del poder secreto femenino.Ellos conspiran para recuperar lo que ellos consideran que es correctamente de ellos, y por medio de una lucha ellos tienen éxito en desterrar a las mujeres de las asociaciones masculinas para siempre. En el Amazonas del Noroeste, Yuruparí, el legendario héroe cultural de los tukano, establece una legislación sagrada en una tierra de mujeres y sin leyes. Las leyes de Yuruparí proclaman que a las mujeres les está prohibido, mediante amenaza de muerte, tener conocimiento de las actividades masculinas secretas. En todas partes las mujeres se encuentran restringidas en sus acciones y subordinadas a reglas puestas por los hombres. Este patrón de dominio masculino y subordinación femenina es un tema sistemático que emerge repetidas veces en mitos y ceremonias sudamericanos.

     La repetición del tema y las circunstancias no puede ser completamente fortuita, ni tampoco se puede afirmar que ellos resultan de los caprichos de la historia, la geografía o el clima, ya que en estos relatos las dos áreas culturales en Sudamérica no pueden estar más alejadas. Principios, más bien que conexiones históricas o contigüidad geográfica, por lo tanto, deben explicar la abrumadora semejanza de mitos y ritos. Pero ¿qué principios son ésos?; ¿puede uno saber con seguridad que los mismos principios funcionan tanto en los extremos meridionales de Tierra del Fuego como en el territorio del Noroeste del Amazonas?.

     Dondequiera que se descubre el mito del Gobierno de las Mujeres, allí también existe un conjunto de reglas y procedimientos culturales para determinar el dimorfismo sexual en las tareas sociales y culturales. Esta oposición, separación y distintividad general de los ámbitos masculino y femenino es apenas exclusiva del orden mítico, ya que se ve que penetra todos los aspectos de la vida humana. Cada sociedad hasta cierto punto divide sus tareas según el sexo. Las diferencias biológicas obvias proporcionan diferencias establecidas de antemano, y cada sociedad puede interpretarlas diferentemente de acuerdo a principios que no pueden ser dados por supuestos sino que más bien deben ser satisfactoriamente demostrados en cada caso particular. En algunas sociedades los hombres hacen las cerámicas y tejen las cestas; en otras, las mujeres hacen aquello. Quién las hace, no es por lo general dejado al azar.

     La división del trabajo según sexos es establecida por reglas estipuladas dentro de cada grupo social. Tales reglas están relacionadas con el sexo (y con la edad), aunque no necesariamente determinadas por el sexo o por la edad. En cambio, los roles y las tareas sociales llegan a ser asociados con el sexo y la edad por medio de un proceso educativo de alguna clase, formal o informal. En las sociedades pre-alfabetizadas la recitación del mito y la interpretación del ritual sirven como procesos educativos.

     En particular, las iniciaciones son instituciones educativas reconocibles para aquellos que pasan a través de ellas. La transmisión de valores culturales, a los muchachos en la forma de un saber esotérico, a las muchachas en términos de prohibiciones de por vida y restricciones de su comportamiento, constituye el foco principal de las iniciaciones de adolescentes en la Sudamérica tropical. A los muchachos se les enseña un adecuado comportamiento adulto, y a veces ciertas habilidades masculinas y conocimiento esotérico. Los jóvenes varones adolescentes aprenden como parte del proceso de iniciación que son los hombres, no las mujeres, quienes gobiernan en su sociedad, aunque este hecho bien pueda contradecir otras expectativas prevalecientes en la experiencia doméstica de la infancia.

     Como la descendencia masculina de hogares supervisados por mujeres, los muchachos jóvenes tienen que ser reeducados en cuanto a sus futuros roles sociales y políticos, y la iniciación sirve para esa función. La separación más aguda del lazo madre-hijo para ambos miembros de dicha diada es experimentada al principio de la iniciación, cuando los jóvenes iniciados son físicamente sacados de sus casas natales. Al finalizar el período de iniciación los muchachos son presentados ceremonialmente en la sociedad de los hombres adultos, lo cual es una demostración pública de su acceso al status de adulto.

     Esta reagrupación de muchachos adolescentes con varones adultos es prefigurada en algunas sociedades en mitos que pronostican la finalización del poder femenino y el surgimiento concomitante del privilegio masculino. El mito del Gobierno de las Mujeres en sus muchas variantes puede ser considerado como una repetición de esas cruciales etapas de transición en el ciclo de vida de un varón individual. En ambos grupos de mitos sudamericanos, por ejemplo, el acceso final al rol masculino adulto es ganado mediante la captura a las mujeres de los símbolos del poder (máscaras y trompetas sagradas). En esa batalla de los sexos las mujeres son sistemáticamente retratadas como las perennes perdedoras de sus niños varones a manos de las asociaciones masculinas.

     Los derechos y los privilegios masculinos están documentados y justificados en el mito y en el ritual. Por contraste, la influencia y la autoridad femenina están totalmente ausentes en esas expresiones simbólicas. Las ceremonias masculinas de iniciación dramatizan la separación de los muchachos adolescentes desde casas dominadas por mujeres. Entre los uxorilocales [donde la pareja casada se establece en la casa de la esposa] kayapó de la familia idiomática del Brasil central, para citar el ejemplo que mejor conozco, los muchachos entre doce y dieciséis años son llevados en procesión ritual desde sus casas maternas e instalados en la casa de los hombres después de una ceremonia prolongada y complicada que toma varios meses completar.

     Durante el período de iniciación kayapólos muchachos son enviados al bosque cada día bajo la tutela de compañeros ceremoniales para que aprendan el saber forestal y las técnicas de la caza de acecho. Después de la finalización de su ceremonia de iniciación, los jóvenes residen en la casa de los hombres hasta que ellos se casan y establecen residencia para ellos en las casas de sus mujeres. En la casa de los hombres les enseñan ocupaciones masculinas: caza, cestería, y la fabricación de armas y ornamentos, así como también secretos masculinos como la identidad de los bailarines enmascarados de las ceremonias.

     Los kayapó comparten con sus vecinos los mundurucú una ideología masculina frecuentemente expresada en la humillación ritual de las mujeres. Por lo que puedo determinar, ningún mito del Gobierno de las Mujeres ha sido registrado por los kayapó, pero actividades masculinas agresivas tales como la violación grupal y la cópula sexual ritual obligada para muchachas jóvenes, que ocurre en la casa de los hombres, representan la clase de castigos con que las mujeres son continuamente amenazadas en las mitologías del Noroeste del Amazonas. Los kayapó, podría decirse, "actúan" sus fantasías, y por ese motivo hacen poco uso del mito, salvo por el hecho de que el elemento punitivo en la actividad sexual masculina kayapó parece estar ampliamente demostrado en otros mitos kayapó acerca de problemas en las relaciones entre macho y hembra. Es sólo para nuestros objetivos que el mito crucial está faltando, pero cualquier número de los otros mitos kayapó podría ser substituído para demostrar el mismo punto.

     Los ritos de iniciación de las muchachas kayapó no son tan complicados como los de los muchachos. De hecho, la ceremonia de las muchachas que presencié no tomó más que quince minutos, a diferencia de la ceremonia para los muchachos, que duró casi tres meses. La participación de la villa no es una exigencia para la iniciación de las muchachas como lo es para los muchachos, y en efecto, el ritual abreviado realizado para las muchachas no enfatiza la perturbación del antiguo orden doméstico o la aparición de un nuevo régimen adulto. En vez de eso, la breve ceremonia celebra la maduración física de una mujer, su fertilidad y el futuro papel de engendrar hijos.


     En la ceremonia de iniciación tukuna, como es descrita por Nimuendajú (1952), se usan los símbolos masculinos del poder para asustar a la joven muchacha. Las trompetas ancestrales son tocadas para su edificación, pero ella no es instruída en su ciencia secreta. La ceremonia tukuna, más complicada que la de los kayapó, está directamente relacionada con las funciones del cuerpo pubescente de la muchacha. Las ceremonias femeninas en todo el mundo tienen que ver estrechamente con rituales del cuerpo. Ellas enfatizan en forma dramática la especialización biológica de las mujeres.

     Similares preocupaciones por las diferencias reproductivas femeninas no están en ninguna parte en evidencia en los mitos elegidos para la consideración aquí. Quizás no es inmediatamente obvio para los pueblos tribales de Sudamérica que el lugar único o incluso legítimo de las mujeres está en el hogar debido a su capacidad de engendrar hijos. Ciertamente el mensaje mítico [amendrentador] usado para ligar a las mujeres a sus deberes de casa en la Sudamérica aborigen enfatiza la laxitud moral y un abuso de poder más bien que alguna debilidad o incapacidad física de parte de las mujeres. Si los dictados de la biología hubiesen sido cuidadosamente seguidos, las mujeres bien podrían encontrarse todavía en la sede del poder, ya que es obvio que las funciones biológicas de las mujeres son necesarias para la continuidad de cualquier grupo humano.

     Ninguna ocupación masculina, por mucho que sea exaltada, puede compensar la capacidad única de la mujer de concebir, llevar y cuidar a los jóvenes de la especie. Esta importante contribución de las mujeres a la supervivencia del grupo es celebrada en el ritual femenino de la pubertad, pero pasada por alto en el mito. ¿Por qué debería esto ser así? Aparece de este estudio superficial de un puñado de mitos sudamericanos que las mujeres con frecuencia son sometidas a severos controles externos debido a su supuesta inmoralidad, o al menos ésa es mi lectura de estas mitologías comunicadas por varones. Y entonces parece a partir del mito que fuerzas menos tangibles que la biología fueron usadas para impulsar la subversión del rol sexual femenino.

     Cuando, por ejemplo, se le decía a la mujer que ella se comportaba como un niño y, como otros niños, era mantenida no iniciada (en el pleno sentido masculino), o cuando ella era comparada a un animal, y por esa razón era convertida en la víctima involuntaria de una ideología masculina, ella había perdido su derecho a gobernar. El caso contra ella fue interpretado como uno moral, divorciado de la biología que podría haberle dado prioridad sexual bajo otras circunstancias.

     Si las mujeres realmente se comportaron o no a la manera de las acusaciones registradas en el mito no es un asunto en la comprensión del insistente mensaje del mito. Lo que está en cuestión es el empuje ideológico del argumento planteado en el mito del Gobierno de las Mujeres, y la justificación que ello ofrece para el dominio masculino mediante la evocación de una visión de una alternativa catastrófica: una sociedad dominada por las mujeres. El mito, en su reiteración de que las mujeres no supieron manejar el poder cuando estuvieron en posesión de él, reafirma dogmáticamente la inferioridad de su actual posición.

     Cualquiera sea la justificación para ello, el sagrado orden masculino planteado en el mito y decretado de nuevo en el ritual sigue indiscutido en muchas sociedades en todo el mundo. Uno puede conjeturar de esta situación que el Gobierno de los Hombres sigue inalterado porque las mujeres, sus potenciales desafiadores, han estado atrapadas durante tanto tiempo en un sistema cerrado, que ellas son incapaces de percibir cómo, de alguna manera, ellas podrían hacer colapsar los exitosos métodos usados para inculcar en ellas una ideología de fracaso moral. Tales sentimientos, he sugerido, al menos para las sociedades sudamericanas, son reforzados por el fuerte brazo de una religión masculina.

     El mito y los rituales han sido malinterpretados como recordatorios persistentes de que las mujeres alguna vez tuvieron, y luego perdieron, la sede del poder. Esa pérdida aumentó para ellas por medio de conductas inadecuadas. En Tierra del Fuego las mujeres engañaron a los hombres para que realizaran tareas tanto masculinas como femeninas; y en el Amazonas del Noroeste ellas cometieron el delito de incesto. Los mitos reiteran constantemente que las mujeres no supieron manejar el poder cuando lo tuvieron. De esta manera, la pérdida está justificada en tanto las mujeres decidan aceptar el mito. El Gobierno de las Mujeres, en vez de anunciar un futuro prometedor, se remonta a un pasado oscurecido por fracasos repetidos. Si, en efecto, las mujeres van alguna vez a gobernar, ellas deben sacudirse el mito que declara que ellas se demostraron indignas de roles de liderazgo.

     La versión final que surge de estos mitos en cuanto a la mujer es que ella representa el caos y el mal gobierno por medio del engaño y la sexualidad desenfrenada. Éste es el punto de vista inverso de la visión de Bachofen de las mujeres pre-helénicas, que él simbolizó como una mística, pura y no corrompida Diosa Madre. El contraste entre las nociones victorianas de la mujer ideal (que no son las de la Grecia antigua, como supuso Bachofen) y la visión primitiva, que coloca a la mujer en el nivel social y cultural de los niños, no es tan grande como parece.

     La elevación de mujer a la categoría de deidad, por una parte, y la degradación de ella al nivel del niño o de un bien mueble, por otra, producen el mismo resultado. Tales visiones no la llevarán algo más cerca de lograr el status socioeconómico y político masculino, ya que mientras ella esté contenta de permanecer o como diosa o como niño, no puede esperarse que lleve su parte de las cargas de la comunidad como la co-igual del hombre. El mito del matriarcado es sólo el instrumento usado para mantener a la mujer ligada a su lugar. Para liberarla, es necesario destruír dicho mito.–




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