El investigador y escritor neozelandés Kerry Bolton publicó en 2000 el siguiente artículo (revisado en 2010) que se refiere a las leyes promulgadas en favor de los animales en la Alemania del Tercer Reich, materializadas por Hermann Goering a instancias del Führer. Presentamos en castellano este escrito para dar a conocer algunos aspectos quizá desconocidos con respecto a tal política, añadiéndolo al texto de la ley alemana de protección animal de Noviembre de 1933 que ya publicamos aquí en Mayo de 2014. Todas esas leyes y disposiciones fueron pioneras a nivel mundial, tal como lo fue el enfoque ecologista de la Alemania Nacionalsocialista, al estar centrada esta última, como se sabe, en las leyes y el orden de la Naturaleza.
«Una "civilización" que hace un alboroto tan ridículo por presuntos "crímenes de guerra"—actos de violencia contra los enemigos actuales o potenciales de la causa de alguien— y tolera mataderos y laboratorios de vivisección y circos y la industria de las pieles (la imposición de dolor sobre criaturas que nunca pueden estar a favor o en contra de ninguna causa), no merece vivir. ¡Fuera con ella! Bendito el día en que se destruya a sí misma, de modo que una élite de superhombres sana, dura, franca y valiente, amante de la Naturaleza y de la verdad, con una FE CENTRADA EN LA VIDA —una aristocracia humana natural, tan hermosa, en su propio nivel superior, como los cuadrúpedos reyes de la selva— pueda surgir otra vez, y gobernar sobre sus ruinas, ¡para siempre!» (Savitri Devi,"Impeachment of Man", 1959) [1].
[1] Savitri Devi, una greco-inglesa convertida al hinduísmo y filósofa nacionalsocialista de posguerra, consideraba al Nacionalsocialismo como la manifestación contemporánea de la ley cósmica, y al Hinduísmo como la única tradición viva de los antiguos arios. Su libro "Impeachment of Man"fue una defensa de los derechos de los animales que se adelantó a los activistas radicales de hoy de dichos derechos. Ella consideraba a la gente "aria" o europea como singularmente cercana a los animales, y distinta, en su carácter, en cuanto al tratamiento dado a los animales en tierras de gente no-europea.
INTRODUCCIÓN
Setenta años de propaganda de pre y post-guerra dirigida contra el Nacionalsocialismo han suprimido los muchos logros notables del Tercer Reichen campos tales como la justicia social, la reforma bancaria, la investigación médica, la ecología y, como veremos, el bienestar de los animales.
Si no hubiera sido por la demonización de todas las cosas "nazis"y la reducción del Nacionalsocialismo y la totalidad de la Segunda Guerra Mundial a nada más que el "Holocausto", nos preguntamos, por ejemplo, ¿cuántas vidas podrían haber sido salvadas si se hubiera permitido que la investigación del Tercer Reich en cuanto al cáncer viera la luz entre los pueblos de una arruinada Europa?; ¿o cuánto de la flora y la fauna de la Tierra habría sido mantenido y extendido más bien que devastado y contaminado a cambio de ganancias a corto plazo si hubieran sido aprendidas las lecciones de las medidas ecológicas pioneras de la Alemania Nacionalsocialista?
Como ha documentado el doctor Robert N. Proctor, la Alemania Nacionalsocialista fue la primera en iniciar campañas de educación pública acerca de los efectos dañinos del fumar. En 1939 el doctor Franz Muller había establecido la conexión entre el tabaco y cáncer pulmonar. El gobierno NS fue el primero en estimular el auto-examen de mamas y chequeos regulares. Se habían destinado meses para crear conciencia del cáncer y masivos exámenes de mujeres para la detección de cáncer cervical y de mamas. Los niños eran dentalmente examinados, los estudiantes eran examinados en busca de tuberculosis, y los obreros industriales para detectar silicosis y cáncer pulmonar. Estrictas regulaciones ocupacionales y de salud protegían a los trabajadores. La publicidad del alcohol fue prohibida y los niños eran advertidos de quela Coca-Colano era sana [2].
[2] Robert N. Proctor, profesor de historia de la ciencia en la Pennsylvania State University, The Nazi War on Cancer, Princeton University, 2001.
Como ha mostrado la doctora Anna Bramwell, la Alemania Nacionalsocialista también fue pionera en la ecología, y el Líder de los Campesinos del Reich y ministro de Agricultura doctor Walther Darre, ampliamente reconocido en Europa como un especialista en agricultura, se ha mostrado que fue el padre del moderno movimiento Verde. Nacionalsocialistas de rango superior como Rudolf Hess y el SS Reichsführer Himmler eran entusiastas de la salud alternativa y los cultivos agrícolas orgánicos [3].
[3] Dra. Anna Bramwell, Universidad de Oxford, Blood & Soil. Walther Darre and Hitler's Green Party, Gran Bretaña, 1985.
El agricultor estaba protegido contra ejecuciones hipotecarias, y los préstamos debían ser reembolsados de acuerdo a la producción, sin poner en peligro el sustento de alguien. Los niños de las ciudades eran enviados al campo durante las vacaciones. La pequeña granja familiar fue estimulada y no podía ser confiscada o subdividida.
Ese foco sobre la salud y la ecología tenía su base en la ideología nacionalsocialista de Sangre y Suelo, de la eterna conexión entre la gente y la tierra, con la clase campesina como la fuente de la que dimana un pueblo sano. El propio Nacionalsocialismo era una manifestación de la asociación teutónica con las selvas vírgenes donde las legiones romanas habían sido frenadas. El Nacionalsocialismo era un credo centrado en la Naturaleza más bien que en el hombre, y que veía al ser humano como íntimamente relacionado con la Naturaleza, como su custodio más bien que como su explotador.
Considerando la manera en la cual el Nacionalsocialismo y el Tercer Reich han sido presentados como el epitome de la inhumanidad y la crueldad, las leyes anti-vivisección decretadas son un rompecabezas que los liberales y los izquierdistas anti-viviseccionista intentan racionalizar. En Reinventing Biology, una colección de artículos que piden un nuevo respeto científico por los derechos de los animales, un capítulo da algunos antecedentes en cuanto al bienestar animal en el Tercer Reich, tomados del libro"The Nazi Treatment of Animals and People".
«A finales del siglo XIX, la matanza koshery la vivisección eran las principales preocupaciones del movimiento de protección de los animales en Alemania. Esos intereses siguieron durante el Tercer Reich y llegaron a ser formalizados como leyes. Antes de asumir el poder, los nacionalsocialistas habían comenzado a preparar leyes para abordar esas cuestiones. En 1927 un representante NS en el Reichstag pidió medidas contra la crueldad hacia los animales y contra la matanza kosher. En 1932 una prohibición de la vivisección fue propuesta por el Partido NS, y a comienzos de 1933, los representantes NS en el Parlamento prusiano se reunieron para decretar esa prohibición. El 23 de Abril de 1933, casi inmediatamente después de que los nacionalsocialistas subieron al poder, aprobaron un conjunto de leyes que regulaban la matanza de animales. En Agosto de 1933 Hermann Goering anunció un final a la "insoportable tortura y sufrimiento en experimentos con animales" y amenazó con "relegar a campos de concentración a aquellos que todavía piensan que pueden seguir tratando a los animales como propiedad inanimada"... Las leyes NS de protección a los animales de Noviembre de 1933 permitieron experimentos en animales en algunas circunstancias, pero sujetos a una serie de ocho condiciones y sólo con el permiso explícito del ministro del Interior, apoyado por la recomendación de autoridades locales. Las condiciones fueron diseñadas para eliminar el dolor e impedir experimentos innecesarios. Los caballos, los perros, los gatos y los monos fueron seleccionados para una protección especial.
«Además de las leyes contra la vivisección y la matanza kosher, otros documentos legales que regulaban el tratamiento de animales fueron decretados a partir de 1933, probablemente varias veces el número de los promulgados en los cincuenta años previos. Esos documentos cubrían con minucioso detalle una enorme serie de preocupaciones, desde el herrado de caballos hasta el uso de anestesia. Una ley aprobada en 1936 mostró una "particular preocupación" en cuanto al sufrimiento de langostas y cangrejos, estipulando que los restaurantes no debían matar cangrejos, langostas y otros crustáceos lanzándolos uno por uno en el agua hirviente. Diversos "altos funcionarios" habían debatido la cuestión de la muerte más humana para las langostas antes de que esa regulación fuera aprobada, y dos funcionarios en el Ministerio del Interior habían preparado un tratado académico sobre el tema.
«Los nacionalsocialistas también procuraron proteger la fauna. En 1934 y 1935 el foco de la legislación nacionalsocialista sobre animales cambió desde animales de granja y animales domésticos a criaturas de la Naturaleza. El prefacio a las leyes de caza del 27 de Marzo de 1935 anunciaba un objetivo eugénico detrás de la legislación, declarando que "el deber de un verdadero cazador no es sólo cazar sino también cuidar y proteger a los animales salvajes, a fin de que surjan y sean preservadas especies más variadas, más fuertes y más sanas". Los diarios nacionalsocialistas de veterinaria a menudo presentaban informes sobre especies en peligro. Goering en particular estaba preocupado por la casi extinción en Alemania del oso, el bisonte y el caballo salvaje, y procuró establecer programas de conservación y crianza para especies en disminución y aprobar nuevas y más uniformes leyes de caza e impuestos. Sus leyes de caza están todavía vigentes hoy» [4].
[4] Reinventing Biology, Lynda Birke y Ruth Hubbartd (editoras), Indiana, 1995, citando a Arthur Arluke y Boria Sax, El Tratamiento Nacionalsocialista de Animales y Personas.
El doctor Rolf Krieger, hablando en un simposio internacional declaró que las actuales leyes alemanas de protección animal se remontan a la ley de 1933 de Bienestar Animal del Reich:
«La ley alemana de bienestar animal está establecida en la Ley Básica, la Ley de Bienestar Animal, que ratifica leyes de diversas Convenciones y ordenanzas europeas conforme a la Ley de Bienestar Animal, el Código Civil y el Código de Procedimiento Civil. Esas provisiones se enfocan en la Ley de Bienestar Animal de 1972, enmendada en 1986 y 1998. La sección I de esa ley adopta el principio ético del bienestar animal ya encarnado en la Ley de Bienestar Animal del Reich de 1933: "El objetivo de esta ley es proteger las vidas y el bienestar de los animales, en base a la responsabilidad de los seres humanos sobre sus criaturas congéneres. Nadie puede causar un dolor, sufrimiento o daño a un animal sin una buena razón"» [5].
[5] El doctor Krieger ha sido empleado por el Animal Welfare Group y por el ministerio alemán federal de Alimentos y Agricultura, y es aquí citado del International Symposium on the Symbiotic Relationship between Humans and Animals, Japón 2002.
La Lucha contra la Vivisección
En un discurso transmitido por la radio en Agosto de 1933 el Reichsmarschall Herman Goering, ministro Presidente de Prusia, declaró que la actitud nacionalsocialista hacia el bienestar de los animales está simplemente de acuerdo con el carácter alemán, y mucho más con los ideales nacionalsocialistas acerca de la espiritualidad humana. Equiparar a los animales con objetos sin vida y permitir la jurisdicción absoluta sobre ellos, no es aceptable.
«Compatriotas alemanes: Desde el día en que anuncié mi edicto contra la tortura de animales en cuanto a la vivisección, un diluvio de cartas y telegramas ha llegado a mi oficina, concordando entusiastamente, expresando su gratitud por mi decisión de que, finalmente, fueron tomadas medidas rigurosas para acabar con la tortura de animales. Mi edicto puede haber venido como una sorpresa, como un relámpago en un cielo azul, pero durante años se ha estado llevando a cabo la lucha contra la vivisección. Mucho se habló sobre ella en discusiones científicas y no científicas, pero nada fue hecho al respecto. El gobierno nacionalsocialista estaba consciente desde el primer día de que severas medidas tenían que ser inauguradas, y sin embargo se requirió un mes hasta que tal ley, con todas sus ramificaciones, pudiera ser aprobada.
«A fin de impedir la difusión de la tortura de animales antes de que tal ley pudiera ser promulgada, publiqué este decreto, haciendo uso de un derecho que me ha sido concedido para poner a los infractores, que todavía piensan que pueden tratar a los animales como una materia sin vida, en custodia preventiva o en un campo de concentración.
«El pueblo alemán siempre ha mostrado una gran compasión por los animales y por cuestiones relativas a los derechos de los animales. Ellos siempre han visto en los animales a criaturas de Dios, sobre todo a aquellos que se hicieron sus compatriotas en casa, en sus hogares y en batallas durante miles de años, de los que, sí, podemos decir que, desde muchos puntos de vista, se convirtieron en sus compañeros de trabajo —uno sólo tendría que pensar en los caballos— e incluso en compañeros de armas".
«Para la gente alemana los animales no son sólo cosas vivas en un sentido orgánico, sino criaturas que tienen sus propios sentimientos únicos, que sienten dolor, alegría y que muestran lealtad y afecto. Nunca el amor de la gente alemana por los animales les permitiría tratar a los animales como objetos sin sentimientos o almas, para ser usados sólo como instrumentos, o ser explotados, ser desechados, por motivos de utilidad o no, o ser torturados o destruídos por los mismos motivos.
«Los cuentos de hadas y las sagas de los pueblos arios, sobre todo del pueblo alemán, hablan de la armonía espiritual que existe entre la gente aria y el animal» [6].
[6] Herman Goering, discurso por radio del 28 de Agosto de 1933.
La Legislación Prusiana de Goering
Después de la promulgación de las primeras leyes anti-vivisección en el mundo, en Prusia, bajo el ministro-Presidente Goering, fue dado a conocer un comunicado de prensa que explicaba el trasfondo:
«El ministro-Presidente prusiano Goering ha publicado un anuncio declarando que desde el 16 de Agosto de 1933 la vivisección de animales de toda clase está prohibido en Prusia. Él ha solicitado que los ministerios involucrados redacten una ley según la cual la vivisección será castigada con una alta pena. Hasta que la ley entre en vigor, las personas que, a pesar de esta prohibición, ordenen, participen en o realicen vivisecciones en animales de cualquier clase serán deportadas a campos de concentración».
K. O. Schmidt, escribiendo desde un punto de vista budista en la revistaDie Weisse Fahne, elogió a la Nueva Alemania por el espíritu humanitario hacia los animales:
«Entre todas las naciones civilizadas, Alemania es así la primera en acabar con la vergüenza cultural de la vivisección. La Nueva Alemania no sólo libera al hombre de la maldición del materialismo, el sadismo y el bolchevismo cultural, sino que da sus derechos a los cruelmente perseguidos, torturados y, hasta ahora, totalmente indefensos animales. Los amigos de los animales y los anti-viviseccionistas de todos los Estados ¡darán la bienvenida con júbilo a esta acción del gobierno nacionalsocialista de la Nueva Alemania!
«Lo que el Reichskanzler Adolf Hitler y el ministro-Presidente Goering han hecho y harán en favor de la protección de los animales ¡debería establecer el curso para los líderes de todas las naciones civilizadas! Éste es un hecho que traerá a la Nueva Alemania innumerables nuevos y regocijados amigos en todas las naciones. Millones de amigos de los animales y anti-viviseccionistas de todas las naciones civilizadas ¡agradecen a estos dos líderes desde sus corazones por este hecho civil ejemplar!
«Buda, el gran espíritu afectuoso del Este, dice: "Al que es de buen corazón con los animales, ¡el cielo lo protegerá!". Pueda esta bendición cumplirse con los líderes de la Nueva Alemania, que han hecho grandes cosas por los animales, hasta el último. Pueda la bendecidora mano del destino proteger a estos portadores de un Nuevo Espíritu, hasta que su misión terrenal dada por Dios sea realizada.
«Como hemos aprendido mientras tanto, una prohibición similar ha sido proclamada en Baviera. Las leyes formales son inminentes, gracias a la enérgica iniciativa del canciller de nuestro pueblo Adolf Hitler, para quien todos los amigos de los animales del mundo mantendrán para siempre su gratitud, su amor y su lealtad» [7].
[7]De Die Weisse Fahne (La Bandera Blanca) Nº 14 de 1933.
Comentario Nacionalsocialista sobre la Ley de Goering
El conde Ernst zu Reventlow, escribiendo en Reichswart, la publicación oficial de la"Unión de Europeos Patrióticos", declaró en el artículo principal "Protección y Derechos para los Animales", que
«el Nacionalsocialismo ha comenzado por primera vez a mostrar a los alemanes la importancia del deber del individuo hacia los animales».
«La mayor parte de los alemanes han sido criados con la actitud de que los animales son creados por Dios para el uso y beneficio del hombre. La Iglesia recibe esa idea de la tradición judía. Nos hemos encontrado con muchos clérigos que defienden esta posición con firmeza y vigor extremos, y uno podría decir casi de manera brutal. Por lo general ellos defienden su posición con la intención no declarada de profundizar y ensanchar la sima entre el hombre que tiene alma y los animales que carecen de ella (¿cómo ellos saben eso?).
«El amigo de los animales sabe hasta qué grado inexpresable el entendimiento mutuo entre hombre y animal y sentimientos de compañerismo pueden ser desarrollados, y hay muchos amigos de los animales en Alemania, y también muchos que no pueden aceptar la tortura de animales simplemente por motivos humanitarios. En general, sin embargo, todavía nos encontramos en un desierto de insensibilidad y brutalidad así como sadismo. Queda mucho por hacer y nos gustaría primero abordar la vivisección, para la cual las palabras "vergüenza cultural" ni siquiera se acercan; aquélla de hecho debe ser vista como una actividad criminal».
Las publicaciones nacionalsocialistas de la época comentaron sobre el artículo de Reventlow:
«Nosotros los amigos alemanes de los animales y los anti-viviseccionistas hemos colocado nuestras esperanzas sobre el Canciller del Reich y sus camaradas de armas que son, como sabemos, amigos de los animales. ¡Nuestra confianza no ha sido traicionada! La Nueva Alemania trae la prueba de que no es sólo el heraldo sino la portadora de una cultura nueva, superior y más refinada».
«La vivisección, una vergüenza cultural en el mundo civilizado entero, contra la cual los mejores hombres en todos los Estados han luchado en vano durante décadas, ¡será prohibida en la Nueva Alemania!».
«Una ley de Protección Animal del Reich que incluye una prohibición de la vivisección es inminente, y ahora mismo vienen las noticias, regocijando a todos los amigos de los animales, de que el mayor Estado alemán, Prusia, ¡ha proscrito la vivisección sin excepciones!» [8].
[8] Ernst zu Reventlow había sido el líder del Partido Popular Alemán de la Libertad (Deutschvölkische Freiheitspartei), un partido de Alemania del Norte que entró en alianza con los nacionalsocialistas en 1924.
Restricciones sobre la Caza
El 3 de Julio de 1934 Hitler anunció a su gabinete leyes destinadas a la eliminación de la caza de zorras con sabuesos como"anti-deportiva".Las leyes fueron introducidas por Hermann Goering, Jefe de Caza del Reich (Reichsjägermeister).
El Daily Telegraph de Londres, un periódico pro-conservador, al atacar en 2002 las tentativas políticas laboristas de prohibir la caza de la zorra, burlescamente llama la atención hacia las limitaciones impuestas sobre la caza en el Tercer Reich, que incluyen la prohibición de la caza con perros. Ian Kershaw, profesor de Historia moderna en la Universidad de Sheffield, que ha escrito una biografía de Hitler, es citado como declarando que había"un lado curiosamente ético" en las reformas de los nacionalsocialistas.
«Los nacionalsocialistas querían una matanza limpia y les pareció que sería equivocado causar un sufrimiento innecesario al animal cazado». Las leyes nacionalsocialistas dieron a los animales más protección que cualquier otro país en el mundo. Kershaw declara:
«De esa manera, las nuevas leyes prohibieron toda la cacería de campo que implicaba entrenar y usar a animales para matar a piezas de caza y animales dañinos. Había una creencia de que si usted hacía pasar a un animal por una tortura innecesaria usted de algún modo estaba hiriendo los sentimientos de la nación alemana».
La biografía nacionalsocialista oficial de Goering, que fue escrita por Erich Gritzbach, dice:
«Goering es un amigo fanático de los animales. Él dice: "Quienquiera que tortura animales actúa en contra de los instintos del pueblo alemán".
«El mismo amor a los animales que él demuestra en todo lo que tiene que ver con el mundo animal también imbuye a la ley de caza del Reich de 1934. Aquel amor en efecto da a esa ley su profundo sentido ético. En Alemania la caza a caballo y la persecución de animales con un grupo de sabuesos están prohibidas».
En 1939 las restricciones a la caza fueron ampliadas a Austria cuando aquel país votó a favor de su incorporación en el Reich.
El Daily Telegraph de Londres continúa:
«Antes de que los nacionalsocialistas subieran al poder, las leyes de caza en Alemania variaban de Estado a Estado. Goering decidió que se necesitaba más orden e introdujo cambios legislativos absolutos que fueron impuestos a través de todo el Reich. Hasta la Ley de Caza del Reich (Reichsjagdgesetz) de Goering de 1934, los cazadores alemanes perseguían a caballo a ciervos, jabalíes, liebres y zorras.
«Las zorras y las liebres eran atacadas hasta la muerte por los sabuesos, mientras que jabalíes y ciervos eran perseguidos por perros especialmente entrenados hasta que ellos quedaban exhaustos y rodeados. Ellos luego eran acabados con cuchillos de largas hojas introducidos en el corazón del animal.
«Goering adoptó un código moral que regulaba la caza llamado Justicia Deportiva (Waidgerechtigkeit) que había sido hacía mucho tiempo establecido en Alemania. El código estipula que es anti-deportivo usar animales como perros para matar piezas de caza y animales dañinos».
Como ya se dijo que señaló el doctor Rolf Krieger, las leyes de bienestar animal de Alemania que incluían restricciones de caza, hechas cumplir hoy, están basadas en las leyes decretadas bajo el Tercer Reich. Karl-Heinz Lehmann, el ex-vicepresidente de la asociación alemana de 220.000 miembros para la protección de la caza, afirma:«Goering dio a la Justicia Deportiva una importancia casi religiosa, y dichas leyes todavía forman la base de las reglas de caza de hoy en la Alemania reunificada».
Desde 1934, la caza de zorras en Alemania ha sido realizada con escopetas, aunque se usan terriers y perros salchicha para hacer salir a las zorras cuando ellas se meten en la tierra. Pero se prohíbe cazar a las zorras hembras cuando ellas están en la época de parir. El envenenamiento de zorras también está prohibido.
«La caza de ciervos y jabalíes es hecha usando batidores y perros, o bien a los animales se les dispara desde "puestos de caza" establecidos por toda la tierra de labranza donde los animales se juntan. Los sabuesos son usados para localizar a los animales heridos, pero no para matarlos.
«La ley de Goering todavía ejerce una profunda influencia en otros aspectos de la caza en la Alemania de hoy. A nadie se le permite cazar sin una licencia, por ejemplo, y la obtención de una no es fácil: aquello implica asistir a más de 100 horas de conferencias y pruebas prácticas y sentarse a rendir un difícil examen escrito de tres horas» [9].
[9] Daily Telegraph de Londres, 22 de Septiembre de 2002.
https://www.telegraph.co.uk/news/uknews/1407954/Thanks-to-Hitler-hunting-with-hounds-is-still-verboten.html
Cazador Maestro del Reich
Herman Goering fue designado Cazador Maestro del Reich (Reichsjaegermeister) en 1934. Tal como el vegetariano Hitler, cuyo compañero más cercano fue su perra pastor alemán "Blondi", Goering tenía un amor genuino por los animales. Ulrich Scherping, el Guardabosques Jefe de Goering, notó en 1937 que los leones mascotas de Goering ("no sólo los cachorros con que a las damas de sociedad les gusta ser fotografiadas en el Zoológico de Berlín") compartían una empatía mutua con Goering.
El principal historiador británico sobre el Tercer Reich, David Irving, comenta en su biografía de Goering que"no había ninguna falsedad" sobre la empatía entre Goering y el reino animal. "Un animal puede oler el miedo, pero también parece percibir al verdadero amante de los animales".
Como Ministro Presidente de Prusia, en 1933 Goering encontró la escena de caza como un reflejo de la propia Alemania, plagada de pequeñas rivalidades e intereses propios. Él aplicó el principio de la ética social a la caza y al bienestar de los animales con el mismo espíritu con que el Nacionalsocialismo promovió la justicia social para el pueblo alemán.
A través de toda Alemania había un enorme número de leyes e impuestos de caza locales. Irving escribe:
«La fauna salvaje podía ser perseguida a voluntad. La conservación y la cría de las especies declinantes eran imposibles. En Alemania, el águila, el oso, el bisonte y el caballo salvaje estaban casi extinguidos».
Goering instruyó a Scherping para establecer una única asociación de caza nacional para regular la caza, reabastecer los lagos, administrar los bosques y proteger las especies en peligro. La asociación impondría impuestos a los cazadores para pagar el mantenimiento de bosques y parques de caza. El 9 de Mayo de 1933 él informó a Scherping que su ley de caza prusiana debería servir como la base para una eventual ley del Reich.
Irving señala: «Con un sólo plumazo él convirtió en un delito matar a un águila, o cazar con venenos, con luz artificial o con trampas de acero ("el odiado instrumento medieval de tortura")... Su Ley de Caza prusiana del 18 de Enero de 1914 fue envidiada mucho más allá de las fronteras de Alemania...
«Ansiando promover nuevas técnicas, él estableció reservas naturales en Darss, una península de Pomerania, y en Rominten en Prusia del Este. Su logro que más lo enorgulleció fue el área silvestre de Schorf (Schorfheide), en las cercanías (al Norte) de Berlín [también conocida como Carinhall]. Fue allí... que él inauguró su nuevo santuario de bisontes... Él introdujo al alce también. Sucesivos reyes prusianos habían intentado pero no habían logrado restaurar a esa noble y torpe bestia en el área de Schorf; él consultó a zoólogos, ingenieros, biólogos...
«El experimento entero de Schorfheide funcionó. Desde su laboratorio de Investigación de Caza en el lago Werbellin él introdujo de nuevo raras especies en dicha área, como la lechuza nocturna, el pavo silvestre, el gallo silvestre, el ganso gris, el cuervo, el castor y la nutria. Durante 1936, 140.000 ciudadanos pagaron 20 pfennigs cada uno para recorrer el santuario de vida salvaje. Aquél se convirtió en un precursor de los grandes parques nacionales en otros países».
«Para nosotros», él diría a cazadores reunidos para su festival del día de San Huberto aquel Noviembre, «el bosque es la catedral de Dios» [10].
[10] David Irving,Goering. A Biography, Nueva York, 1989, pp. 180-182.
Los esfuerzos pioneros del Tercer Reichen el ámbito del bienestar animal, así como en el ámbito de la asistencia social humana, son un bochorno para los activistas izquierdistas de derechos de los animales, mientras que al mismo tiempo los libertarios y la gente a favor de la vivisección describen (correctamente) tales prohibiciones como "totalitarias" y "nazis". Esos tipos también describen (correctamente) otras intrusiones sobre la libertad humana desenfrenada (léase: avaricia y hedonismo) como "nazis".
Si la democracia y los derechos humanos significan la libertad de desolar la Tierra, contaminar, devastar los bosques y provocar sufrimiento a los animales para objetivos egotistas, entonces quizá es tiempo de reconsiderarel statu quo político, ético y religioso.
También preguntamos: a aquellos auto-declarados campeones "anarquistas" de los derechos de los animales, que se toman mucho trabajo para distanciar su causa del trabajo pionero del Tercer Reich, ¿les importaría señalar algún otro sistema que haya llegado a sostener los derechos de los animales tan cerca como la Alemania Nacionalsocialista? Realmente tenemos que maravillarnos por la ingenuidad de aquellos activistas izquierdistas o anarquistas del bienestar animal que, mientras afirman oponerse al explotador sistema capitalista global, repiten sin embargo maquinalmente las décadas de propaganda anti-NS vomitada por el aparato propagandístico capitalista.–